10 errores al cepillar los dientes
1. Cepillar muy fuerte
Al contrario de los que se piensa, no se limpia mejor por apretar más, todo lo contrario puede dañar el diente y la encía.
2. Cepillar muy rápido
Lo recomendable es cepillarse los dientes durante 2 minutos repartiendo dicho tiempo entre todas las áreas de la boca, lo normal que se emplea son 30 o 40 segundos.
3. Usar un cepillo en mal estado
Si el cepillo está muy desgastado, se pierde el redondeado final de las cerdas y, además, éstas se abren. Esto hace que el cepillado sea menos eficaz e incluso que pueda dañar dientes y/o encías. Lo recomendable es cambiar el cepillo dental cada 3 a 4 meses.
4. Usar cepillos con cerdas duras
Los cepillos con cerdas duras desgastan dientes y encías, y peor aún si se ejerce una fuerza excesiva durante el cepillado. Por lo general, se recomienda cepillos de dureza media, y suaves en caso especiales (encías finas, casos de hipersensibilidad dental o gingival, presencia de recesiones o raíces expuestas …)
5. Usar cepillos con cabezales grandes
Los cepillos con cabezal pequeño facilita el acceso a las zonas posteriores y son muy útiles para cepillar la cara interna de molares inferiores en casos de náuseas durante el cepillado.
6. Poner demasiada pasta en el cepillo
La cantidad empleada ideal podría ser el equivalente a un grano de arroz en los más pequeños al de un garbanzo en adultos.
7. Realizar una técnica de cepillado incorrecta
Aunque no hay una técnica ideal para todos porque depende de edad, tipo de encías, …, las técnicas de barrido vertical (del rojo al blanco, es decir, de la encía al diente) son muy efectivas, fáciles de realizar y no son lesivas.
8. Cepillarse inmediatamente tras la comida
Y más cuando se han consumido alimentos o bebidas ácidas, pues incrementaría la sensación de sensibilidad dental. En estos casos,es recomendable esperar unos 20 o 30 minutos para el cepillado, con el fin de dejar a la saliva que realice su efecto tampón.
9. Olvidarse de cepillar la lengua
En la superficie de la lengua y entre las papilas también quedan restos de alimentos, bacterias y productos de su metabolismo. Además, en un porcentaje muy alto de los casos,no limpiarse la lengua es la primera causa dehalitosis o mal aliento.
10. Pensar que solo con el cepillado “basta”
Es imprescindible acompañar el cepillado dental con el uso de algún método de limpieza entre dientes, ya sea con los cepillos interdentales (si hay espacios abiertos) o el hilo dental (si los espacios están cerrados).