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LAS CARTAS DE LA GUERRA DE MALVINAS
LAS HISTORIAS DENTRO DE LA HISTORIA
Hay muchas historias adentro de la historia de Malvinas y aparecenguardadasen las cartas: las cartas de los soldados a sus padres, a sus hijos, a sus novias, a sus amigos, contando cómo están, y dónde; en algunos casos, anunciándoles por esa vía que fueron enviados muy al sur, que parece que habrá una guerra. Las cartas de esos afectos, que recuerdan ahora los excombatientes, llegaban en cuentagotas y eran esperadas como paréntesis luminosos para esos días que no olvidarán. Las cartas que recibían de personas que no conocían, a veces niños y niñas que las escribían desde sus escuelas. Las que se volvieron tan simbólicas comola de un maestro a sus alumnos, Julio Cao, que fue como voluntario y murió en las islas. Aun con la censura militar y las demoras y postas hasta llegar al continente de por medio, las cartas fueron laforma de comunicación más fluidacon la que contaban los soldados que estaban librando una guerra en esa época, en ese lugar.Hoy las conservan como tesoros personales. Son documentos en los que es posible rastrear las vivencias más dolorosas y los momentos en que se permitían el buen ánimo, y hasta el humor, en primera persona.
Dos espacios rescatan por estos días esas cartas y las ponen en primer plano. Uno es elMuseo Malvinas, en la ex ESMA --donde por estos días se concentrará una parte principal de la celebración por el 40 aniversario de la guerra--, que junto a Epistolar Podcast, puso en línea el proyecto sonoro"Memoria epistolar de Malvinas". Allí los excombatientes leen sus cartas, reconstruyen sus historias a partir de aquellas líneas en las que se mezclan expresiones de coraje, patriotismo, miedo, incertidumbre, la muerte del par expuesta, el hartazgo de la guerra.
Entrevistados por el historiadorJuan Terranova, coordinador del área de investigación del Museo Malvinas, y autor de varios libros sobre el tema, los excombatientes --y también, en algunos capítulos, sus hijos-- retoman aquellas cartas para repasar todo lo vivido y sentido, por ellos y por quienes recibían o enviaban las cartas.
En la Biblioteca del Congreso de la Nación (Alsina 1835), mientras tanto, la muestraCartas de Malvinasabre ese intercambio por correo desde las islas, como una forma de mostrar la faceta más íntima de la guerra. En esas líneas, reunidas por elCentro de Documentación Epistolar que conduce el investigador Mateo Niro, surgen jóvenes de 18 años que les dicen a sus madres cuánto las extrañan, también que las consuelan, que les piden una y otra vez, desde el frente de combate, que no teman por ellos.
“Perdón por la letra papá, pero tengo las manos congeladas”, se lee en una. "Disculpen la letra pero estoy de guardia, y casi no tengo luz, ni dónde apoyar para escribir". “Mandame chocolates por favor, hace frío”. "La carta de Julio no me llegó, y me imagino que va a tardar mucho, ya que las retienen porque las leen y las censuran"."Aquí el problema no son los ingleses sino la monotonía de todos los días, comer una sola vez por día, dormir en un pozo húmedo". "Hoy a los ingleses los echamos por tercera vez".
Están también las que ellos recibían en Malvinas. Algunas escritas por niños que desde las escuelas fueron enviadas a los combatientes identificados como“soldado que no recibe correspondencia”. "Yo te siento y te quiero como a un hermano sabés, porque yo también tengo 18 años". "No tengas miedo ni estés triste, pronto va a terminar todo". "Tío te quiero mucho sabés me acuerdo cuando jugábamos a la guerra con las bolillitas del árbol y que arranqué una rama". "Qué decís, cabezón, cómo anda todo, me imagino que te debés estar cagando de frío, jodete, te pasa por ser hincha de River".
La historia de Pedro "Pino" Gardella
A Pedro "Pino" Gardellale tocó hacer el servicio militar en el buque hospital Ara Bahía Paraíso en 1982, que pasó a ser de la Cruz Roja durante la guerra, recibiendo soldados heridos tanto argentinos como ingleses. Desde allí participó de todo el conflico bélico, desde el comienzo en Georgias hasta la búsqueda y rescate de sobrevivientes del Crucero General Belgrano, pasando por el transporte de medicamentos y personal sanitario.
Estaban por darle la bajacuando algo raro comenzó a pasar, luego supo que las Malvinas habían sido tomadas y que por eso volvían hacia allí, donde ya habían estado como parta de la campaña antártica. Solo hay algo que le despierta una sonrisa al repasar sus cartas enMemoria epistolar de Malvinas: la preocupación de aquel joven porqueel 2 de abril, día de su cumpleaños, no había tenido festejo, como era usual en el buque hasta entonces.
"Los excombatientes hablan de la trinchera, el miedo, el hambre, el agua. Y lo nuestro era completamente distinto, nuestro comandante decía: 'todos quieren dar bajas, nosotros queremos dar altas'. El buque fue muy noble, ahí se hicieron 207 cirujías, se salvaron muchas vidas, fue un paraíso para algunos. Para mí lo fue, más allá de haber visto ahí lo peor que pasa en una guerra: fue el que me llevó y me trajo de vuelta a Buenos Aires, ese 27 de junio tan lindo. Porque lo que todos queríamos era volver y dejar de meter gente adentro de bolsas", evoca en el podcast.
En el buque su tarea principal era poner las amarras para los helicópteros, en la cubierta del barco. "Se han apoyado naves chilenas e inglesas trayendo heridos. También venían a revisarnos porque al ser de la Cruz Roja, no teníamos que tener armamento, era trabajo humanitario", recuerda. Vio y vivió "cosas duras para un pibe que lo que quería era volverse a su casa", pero lo que más lo marcó, sin dudas, fue el rescate del Belgrano.
"Casi todos los que encontrábamos en las balsas estaban muertos de frío, enganchados unos con otros para darse calor. Los identificábamos, los poníamos en una bolsa, y de ahí iban a la camara frigorifica. Después, cuando todo terminó y volvimos a Ushuaia, hubo que descongelarlos, ponerles ropa mortuoria, yo nunca había pasado por una situción así. Los médicos también se quebraban porque había gente que a lo mejor conocían", repasa.
"Cuando encontrábamos a alguien con vida en una balsa era una alegría de gol. Cuando de recuperaban contaban sus experiencias, con tanto tiempo en el agua, la cantidad de kilómetros, porque encontramos balsas que navegaron casi 100 kilómetros, con todo el frío polar, cerca de donde se juntan las corrientes de los océanos".
"A Malvinas fuimos unos 14.700 y solo 3.000 entraron en combate. De esos trajimos en el buque 2.000", saca cuentas. "Estaban mojados, muy bajos de peso. Empezaban a subir y solo comían, después de un rato recién podían hablar".
"No me voy a olvidar jamás de la balsa donde pensamos que había gente viva, porque arriba había un oficial que tenía una linterna. Como la luz se movía, pensamos que nos hacía señas. Pero ese guardiamarina había ya fallecido, se ve que hizo el último esfuerzo con su linterna prendida para que lo viéramos", recuerda. Y concluye: "Lo del Belgrano fue tremendo, un ataque pensado con malicia".
Cumpleaños en Georgias
En navegación, 13 de abril de 1982
Querida mamá: al recibir esta carta, quiero que sepas que estoy bien, y espero que así estén ustedes por allá. Hoy es martes, y es un día de decisión en este buque, que no lo aguanto más. Si nos vamos para Buenos Aires o tenemos que seguir navegando, espero que dios quiera no sea así. Son las 4 y 10 de la mañana, estamos navegando para Puerto Belgrano. Tengo mil cosas para contarles a todos, cosas que nunca pensé que las podía ver, o tener que pasar.
Les voy a contar de los lugares que pudimos ver. Después de haber recorrido toda la Antártida, Georgias del Sur, Islas Malvinas, muy cerca de Puerto Rivero, Puerto Deseado cerca de la isla Picton, el canal de Beagle, Ushuaia, ya saben, ahora en Puerto Belgrano, de ese lugar les voy a contar personalmente.
Lo que sí les voy a contar es algo de las Georgias, fue ahí donde pasé mi cumpleaños.La pasé bien porque no se trabajó, estábamos esperando el momento de tomar isla Greenpicken, que era donde estaban losingleses que ahora están a bordo.No me pudieron festejar mi cumpleaños por ese problema, porque todos los que cumplen años se lo festejan. Me dijeron que más adelante me lo iban a hacer. Otro día, pero parece se olvidaron.No importa, el saludo del 2 de abril me lo dio Segovia.
Lo que quiero es volver, ya hace 110 días que no los veo.Siguiendo con el día de mi cumple, los únicos regalos que tuve fue un vaso de Coca Cola y que hayamos tomado las islas Malvinas. Después siguió el día transcurriendo normal, estuve en la cocina, que fue donde hice helado para la tropa con una máquina, lo pasé ahí a la tarde y tomé mate.
Los quiero,
Pino
Alejandro Quirós: "Al volver de la guerra le pedí a mi mamá que rompiera todo"
Alejandro Quiróstambién estuvo como conscripto en el buque polar Bahía Paraíso, que luego se transformó en buque hospital. Trabajaba en el comedor de suboficiales y durante la guerra fue camillero. "Hace 40 años había pocas cosas que me podían unir a mi familia, y las cartas eran una de ellas", explica."El teléfono era muy complicado, con la radio tenías alguien al lado viendo qué decías y qué no, era intimidante. La carta te daba la tranquilidad de la escritura".
En la carta que está fechada y situada "5 de mayo de 1982, rumbo a Ushuaia", relata lo que vivió en el rescate de los sobrevivientes del Belgrano:
"Ahora llevamos a un montón de gente que rescatamos del crucero, no sé si sabrán que allí estaban mis compañeros de instrucción de Campo Sarmiento, por eso estábamos con el ánimo por el piso. Pero llegó una lista con los nombres de los sobrevivientes y están casi todos. Según nos dijeron ya estamos reconocidos internacionalmente como buque hospital, y no puede pasarnos nada. Así que sigan tranquilos que la vida a bordo continúa normalmente. Estamos escuchando radio todos los días y estamos enterados de los que va pasando", lee en la carta. Allí vuelve a pedirles que se queden tranquilos una y otra vez.
"Era un nene que salía del secundario, peroyo tenía esa necesidad de transmitir seguridad, tal vez lo que necesitaba decirme a mí mismo: tranquilo, esto va a pasar", analiza. "Me acuerdo de la sensación de pensar: ¿cuánto va a durar esto, cuándo podré retomar mi vida? Salimos el 26 de diciembre del 81 a la campaña antártica, y volvimos a Buenos Aires el 27 de junio del 82. Todo ese tiempo lo pasamos navegando".
"Al volver de la guerra le pedí a mi mamá que rompiera todo, hasta las grabaciones que me habían hecho, porque en el medio de la guerra el buque fue a Puerto Belgrano para ser reacondicionado como buque hospital, y nos dejaron pasar un fin de semana en nuestra casa, ahí me grabaron. Por suerte no me hizo caso", rememora Quirós. "Tenía necesidad de cortar con todo eso. De hecho durante 25 años no me encontré con ningún excombatiente, quise hacer una desconexión total. Un poco lógico era: No encontraba trabajo, tenía que ocultar que estuve en Malvinas", explica.
Roque Arrieta: "Volver fue tremendo"
Roque Arrietafue soldado conscripto y estuvo en Malvinas durante la guerra. Entró al servicio militar el 7 de marzo, el 11 de abril ya estaba en las Malvinas. Finalizada la guerra, estuvo cinco días en condición de prisionero.
"Me tocó vivir unos 20 días en las islas sin conflicto, la lluvia, el pozo que se llenaba de agua, la comida que empezaba a escasear. A los 18 años, siendo soldado clase 63, yo era nuevo en el servicio militar. Llegar allá fue empezar a relacionarme con los clase 62, algunos eran muy amables, otros no", recuerda enMemoria epistolar de Malvinas.
"En ese momento nos flasheábamos toda clase de cosas con las cartas, que no llegaban, que las tachaban. Yo a ciencia cierta no sé, pero en ese momento creíamos que la correspondencia era condicionada. Nos decíamos:ojo con lo que escribís...".
Es una carta de su madre la que lee Arrieta en el podcast:
"Hijo, el sábado recibí un telegrama de las islas, pero no tiene tu nombre ni de nadie, vino para la familia Arrieta y dice lo siguiente: 'estoy en las Islas Malvinas, hace un poco de frío pero estoy bien, saludos para todos, chau'. En el cuartel nos dieron esta dirección, pido a dios que llegue esta carta, y aunque sea me cuentes. Contestame si te puedo mandar algo, acá todos estamos bien, todos esperándote. Si yo pudiera ir, iría, como una loca, volando".
"Volver fue tremendo. Es difícil de explicar. Malvinas se nos había metido en la piel, y las habíamos perdido, nos las habían arrebatado. Fue fuerte ver cuatro helicópteros colgando una bandera inglesa, sirenas sonando fuerte, algunos superiores nuestros puteándonos:¡por culpa de ustedes perdimos la guerra, milicos de mierda!La sociedad también nos recibió en silencio. Y los militares diciéndonos: ojo con las pelotudeces que les van a decir a las familias. Y no lo decía cualquiera, tenían mucho peso. Algunos dicen haber firmado una especie de declaración jurada, yo tuve una arenga en Campo de Mayo de parte de un superior: ojo lo que van a hablar".
"Cuando llegué tuve una semana y seguí haciendo el servicio militar en el Parque Automotor seis meses más, con un superior que estuvo conmigo en Malvinas. Ahí él me contuvo. Cuando tuve que hacer las denuncias igual lo involucré, no me cambió nada que me haya cuidado. Fue por lo que le hizo a un compañero nuestro, Silvio, clase 62, situaciones de estar en el agua congelada, en calzoncillos cortos, en un tiempo prolongado. Situaciones que merecen que se denuncien porque tienen que ver con una saña. 25 estaqueamientos hubo en Malvinas, dijo la ministra Garré".
"Fue saña, fue agresión, lastimar a alguien que iba a pelear codo a codo con vos. El subteniente que te estaqueaba tenía 23 años, nosotros, 18 ó 19, no había una mirada muy diferente, éramos contemporáneos. El loco sabía lo que estaba haciendo, por eso tomamos la decisión de la denuncia. Parece difícil que prospere, pero uno se siente un poco bien no habiéndolo dejado así. Silvio cuenta que el día que lo vio a este tipo de arriba de un colectivo, se pilló encima. Yo si lo tengo enfrente, no siento nada. Fue mucho el proceso interno para que esto no me afecte. No, ni ahí. Yo digo que no nos vamos de este mundo sin que el de arriba nos pase cuánto gastamos".
Juan José Fernández: "Era gratificante saber que alguien se acordaba de nosotros"
Juan José Fernándezestaba terminando el servicio militar cuando fue enviado a la guerra de Malvinas. La familia de José C Paz de este fue soldado conscripto clase 62 se enteró por una carta suya --la única que pudo mandar-- que estaba en Malvinas. Cuenta que escribía sus cartas "donde podía", antes del 1 de mayo, cuando bombardearon mucho los ingleses las posiciones. Recuerda los aviones pasando por sobre sus cabezas, tirando bombas y ráfagas de ametralladoras, bombardeando cada dos o tres horas, durante toda la noche.
Las únicas cartas que recibió en Malvinas fueron de chicos y chicas de colegios. "Para los que estábamos ahí adentro de un pozo era gratificante saber que alguien se acordaba de nosotros, sin conocernos. Nos decían que nos deseaban suerte, que estaban orgullosos de nosotros. Con los compañeros nos pasábamos las cartas, las compartíamos en esos días que se hacían tan largos", recuerda.
La familia le escribió muchas cartas, pero sólo le llegó unade apenas unas líneas, casi telegráfica. Lo vivió como una decepción. Luego supo que esa carta que sí llegó había sido escrita por su madre una tarde en que pasó por el centro y vio una campaña para enviar cartas a soldados, ella se había sumado en el apuro como una más, pidiendo lápiz y papel en el momento. Finalizada la guerra y ya en calidad de prisionero recibió una carta que daba entender que iba con una encomienda, que tampoco llegó nunca.
Fernández suma su testimonio para el podcast pero prefiere no leer las cartas. Tampoco la del soldadoJulio Cao, esa que se hizo conocida porque allí le habla a sus alumnos de tercer grado. Cao integró su misma compañía, él estaba con él cuando murió junto a otros dos compañeros, a poco de llegar a las islas, en una de esas noches de bombardeos que no olvidará jamás. Con el tiempo quedó muy ligado a la madre de Cao, que llamaba hijos a los compañeros del suyo.
"Volver fue muy duro, en el servicio militar se nos preparó para una guerra, pero nunca para una posguerra, que es peor", asegura Fernández. "Tuvimos que hacernos lugar en esta vida, tratar de ubicar en qué lugar del mundo nos tocaba vivir.Éramos bichos de otro lado, la gente te lo hacía notar. Decías que estuviste en Malvinas y ya te miraban diferente, había que olvidar esa parte o no mencionarla para no sentirse mal", lamenta.
"Por eso juntarnos en los centros de veteranos nos ayudó mucho. Pudimos largar cosas que al día de hoy algunos compañeros no pueden hablar", está seguro. (Karina Micheletto, Página 12, 1/4/2022)
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EL DOCUMENTO DE INTELECTUALES ENCOLUMNADOS CON CRISTINA KIRCHNER
"UNIDAD DEL CAMPO POPULAR: MODERACIÓN O PUEBLO"
Bienvenido el debate en el campo nacional y popular. Bienvenida la discusión entre compañeros y compañeras.
Bienvenido el intercambio de ideas y la explicitación de los posicionamientos y matices sobre cómo avanzar en la construcción del programa político, económico, cultural y social latinoamericano.
El debate público es una fortaleza de todo proyecto político nacional y popular. Nunca es una debilidad.
El concepto de unidad es estratégico y, como tal, está sometido a una serie de tensiones y discusiones.
¿Queremos la unidad? Por supuesto que sí. Unidad como concepto estratégico.
Para que sea posible, es necesario dotarla de sentido; dejar que aparezca lo que ha estado y sigue estando por fuera de ella: las políticas que le dieron origen; la memoria histórica que la habilita. Es necesario polemizar con una operación que despolitiza: aquella que sustituye la discusión de las políticas que estructuraron la unidad por la apelación aislada a la palabra unidad.
La unidad no se mantiene porque se la nombre. Se mantiene si continúan activas las políticas que le dieron origen. Es desde el exterior de sí misma que la palabra unidad toma sentido. Hay unidad porque hay otra cosa que justifica que la unidad exista. Esa otra cosa son las políticas que la estructuraron. La negación de ese exterior constitutivo de la unidad despolitiza la discusión de las tensiones de la unidad.
Las crisis suelen resolverse con la apelación a lo obvio: la unidad política requiere de permanente debate político. Ello es lo que falta y a eso convocamos. En este sentido, un grupo de compañeros y compañeras proponen, en un reciente documento, una discusión en la que el gobierno del Frente de Todos parece no tener ni origen ni sujeto. Por un lado, la palabra unidad flota en un vacío autosuficiente, como si no hubiera sido consecuencia de acuerdos entre diversos sectores políticos. Por el otro, el sujeto al que debieran dirigirse las políticas públicas -la base electoral del Frente de Todos- es apenas nombrado en un par de párrafos rápidos. Ni la memoria colectiva, ni el pueblo trabajador, ni la base social del Frente de Todos son protagonistas. Apenas hace alguna referencia lejana a mantener la “unidad para construir la transformación material progresiva sobre la cual se despliegue el día a día de las trabajadoras y los trabajadores y sus familias”.
Los términos “Macri”, “macrismo”, “Juntos por el Cambio”, “sistema financiero”, “precarización”, “concentración”, “desigualdad” no son utilizados en el documento citado. No hay oponente concreto. En el mundo del consenso, y en las formas suaves del lenguaje, no hay lugar para oposiciones fuertes ni para el desarrollo de conflictos. Hay un lenguaje de la política encapsulado.
Mientras tanto, la política gubernamental ha llegado a su punto más trágico: la preparación de escenarios de anuncios donde no se realizan anuncios. Es la práctica fallida de anticipar políticas que no se concretan: el mismo gobierno genera las expectativas y la defraudación de las expectativas. Allí irrumpen los instantes crueles en donde la moderación se transforma en impotencia. Deciden bajarle la intensidad a la política y, como efecto no deseado, suprimen a la política. Proponen ir despacio pero terminan inmóviles. Pretenden hablar suave pero se vuelven inaudibles. Todo lo que se presenta moderado termina siendo débil y sin capacidad transformadora. Es necesario recordarlo: los gobiernos no se evalúan por sus intenciones, sino por sus realizaciones.
Juntos por el Cambio ha construido su identidad, supuestamente racional e institucional, en contraste con otra “irracional y extrema”, la de los partidarios y partidarias de la actual vicepresidenta. Trasladar ese criterio de legitimación política desde afuera hacia adentro del Frente de Todos estaría más en línea con la eliminación del adversario que con el compromiso de ampliar el debate político.
Las crisis se superan muchas veces con redundancia: las diferencias políticas se resuelven con más política. A eso convocamos a los compañeros y compañeras que, lo sabemos, están plenamente comprometidos con la ampliación de la discusión pública.
A riesgo de ser repetitivos: el problema del documento con el cual estamos dialogando, a nuestro juicio, es que, en sus páginas, no resulta nítido ni el origen de la unidad ni el sujeto destinatario de sus políticas. En ese sentido, la ausencia absoluta del nombre “Macri” es muy elocuente.
El expresidente neoliberal le entregó el gobierno al presidente Alberto Fernández con una economía 4% más chica de cómo la recibió, con una caída de 20 puntos de los salarios reales y con sendas crisis externas y de endeudamiento (público y privado) mutuamente reforzadas. Tampoco es cierto que entregó un país sin déficit fiscal: sólo cambió la composición de ese déficit a través del incremento del pago de intereses de su creciente endeudamiento. En paralelo, el gobierno macrista avanzó con la colonización y la cooptación de las herramientas de poder del Estado, sobre todo en materia de política económica.
Ni en aquel momento, apenas asumió el nuevo gobierno del Frente de Todos, ni ahora, en el documento con el que dialogamos, ha aparecido la decisión de describir con nitidez las ruinas que dejó este nuevo experimento neoliberal. Hay, por lo tanto, una doble renuncia al origen: a la constitución de la frontera con el macrismo, por un lado, y a la defensa del lazo representativo con los sectores afectados por ese proyecto neoliberal, por el otro. Esa doble renuncia es una sola: la nitidez del proyecto propio requiere de una clara diferenciación con el programa neoliberal.
El dilema que se presenta entonces es que cuando se pretende hablarles a todos se termina hablándole a nadie. Cuando se pretende no pelearse con nadie, se termina peleado con todos. El conflicto existe. No asumirlo, lejos de ampliar la base de sustentación, diluye, a los que no lo protagonizan, en la nada política.
Por eso, el problema de la unidad se resuelve reponiendo el origen y el sujeto destinatario de la unidad. No se soluciona con una apelación a la reducción de la intensidad (es decir, a la moderación). El problema más importante no es de velocidad ni de magnitud: es de orientación de las políticas.
Paradójicamente, la unidad a la que se convoca, en el marco de políticas regresivas, puede profundizar la crisis de la otra unidad: la de la base electoral del Frente de Todos. La unidad por arriba puede continuar desorganizando la unidad por abajo. Por eso, no se puede pensar la unidad desvinculada de las políticas que esa unidad expresa en términos de políticas públicas. En este sentido, insistimos, en las dimensiones de representación electoral y social: la “Unidad” del Frente de Todos se rompió en noviembre de 2021 cuando más de cuatro millones de electores que lo acompañaron en el 2019, ya no lo hicieron en las elecciones de medio mandato. Reconstruirla es el objetivo.
La debilidad de la diferenciación discursiva de ambos proyectos – el macrista y el de nuestro gobierno- se extendió al diseño de algunas políticas: en el último trimestre de 2020, con la centralización de la estrategia económica en torno a los lineamientos del FMI, comenzó un camino de ajuste relativo. Esta política económica se extendió hasta las elecciones PASO de 2021 (sólo comenzó a corregirse en el último trimestre de ese año). Si bien la crisis global producida por la pandemia sanitaria explica parte de la debacle electoral en las elecciones legislativas de 2021, no es el único factor. A ello hay que sumarle las políticas de ajuste implementadas por nuestro propio gobierno.
La clase trabajadora, por ejemplo, perdió en la puja distributiva y se produjo una nítida transferencia de recursos del trabajo hacia el capital, con especial énfasis desde finales de 2020. Si comparamos el salario real promedio de los trabajadores registrados del bienio 2018-2019 con el mismo valor promedio del período 2020-2021, la caída fue del 8%. Este atraso del salario explica que el excedente empresario haya captado más de 3 puntos del PBI adicionales respecto del gobierno de Macri. Desde finales de 2020 el excedente empresario se recuperó en términos reales, mientras la masa de salarios perdió valor real.
Volvemos al inicio, entonces: ¿Unidad para qué política? ¿Unidad que garantice la transferencia de recursos desde los trabajadores hacia el capital? ¿Unidad que rompa el contrato electoral y en la que los trabajadores resultan perjudicados?
Queda claro: no estamos ante un problema de moderación o intensidad. El problema es de orientación de las políticas.
La unidad del gobierno del presidente Alberto Fernández y de la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner nació alrededor de un decidido proyecto de crecimiento con distribución e inclusión social. Ese es el proyecto que nos convoca y que nos moviliza. Es unidad, sí: pero para llevar adelante un programa de transformaciones.
En el contexto del acuerdo con el FMI, y de sus previsibles presiones trimestrales, resulta imprescindible dinamizar las instancias institucionales de debate, movilización y búsqueda de acuerdos en el Frente de Todos. Como se dijo en estos días: “Las diferencias que tenemos entre quienes debatimos cuál es la mejor manera de resolver este problema son infinitamente menores de las diferencias con quienes generaron este problema”.
Tenemos una nueva oportunidad. Esta vez hay que ir a fondo: con institucionalidad y con decisiones consensuadas entre los integrantes de la coalición. Todos y todas juntos para sostener la utopía de una patria justa, libre y soberana.
Lo afirmó de modo muy contundente Néstor Kirchner: “Todos hablan del consenso, de todos juntos. Sí, todos juntos, pero ¿para qué? ¿Todos juntos para hacer un acuerdo de espaldas a la gente para mantener la burocracia política? No.
Todos juntos para transformar la Argentina, para renunciar a privilegios, para construir lo que nuestro país necesita. ¿Todos juntos para decir que hay que renunciar a principios que son fundamentales para construir este país, todos juntos para bajar banderas? No. Todos juntos para sostener banderas, para sostener principios, para sostener las utopías que creyeron toda la vida y que sostuvieron nuestro inmortal conductor Perón y la inmortal Evita que era la llama viva del cambio permanente. Para eso todos juntos”.
La correlación de fuerzas no es una foto. Es una construcción social, un devenir dinámico y endógeno. No es un dato exógeno de una ecuación a “resolver”. Un elemento central en la constitución de la correlación de fuerzas son las propias acciones y posicionamientos. Analizar esa correlación de fuerzas sin incorporar cómo modificarlas es un mecanismo conservador que inmoviliza. Las políticas públicas rupturistas de un orden injusto e insustentable no son irracionales e infecundas; son las que mejoran la vida de nuestro pueblo, fortalecen la base material de nuestra economía y expanden los grados de libertad de la Patria.
La obligación de la política nacional y popular es expandir el campo de lo posible y no al revés: a partir de la definición de lo posible, sostener el statu quo.
Hay muchos ejemplos latinoamericanos que demuestran que las correlaciones de fuerzas económicas, sociales y políticas no son un “hecho natural”, fijo y establecido para siempre. Mencionemos sólo el del compañero Néstor Kirchner: asumió el gobierno con el menor porcentual de votos de la historia argentina y una “correlación de fuerzas” mínima a su favor. La respuesta popular a cada una de las medidas de gobierno fue construyendo una nueva correlación de fuerzas que habilitó un período de 12 años de continuidad del gobierno nacional-popular y la concreción de decenas de políticas que mejoraron ostensiblemente los niveles de vida de nuestro pueblo y ampliaron derechos como nunca antes, desde el gobierno del primer peronismo con Perón y Evita.
Esta perspectiva de una “correlación de fuerzas negativas”, que condicionan las posibilidades de llevar a cabo medidas de profundización de un modelo nacional- popular, se transforma así en una puerta de justificación que –con sus más y sus menos- favorece el statu quo, lo que en nuestras sociedades significa el mantenimiento de la inequidad, la desigualdad y el incremento de la pobreza. Y de allí surge la idea de que, lo que debe primar en el Frente de Todos a cargo del gobierno, es la moderación en la toma de definiciones políticas.
El concepto “moderación” es por demás riesgoso para cualquier gobierno popular latinoamericano. En primera instancia, porque todos los gobiernos de carácter nacional-popular deben enfrentarse cotidianamente con elites que aplican todo el tiempo la lógica de la desmesura política. La experiencia histórica de este Siglo XXI en América Latina nos indica claramente que, de manera precisa, aquellos gobiernos nacional-populares que aplicaron medidas que iban en contra de la lógica “moderada”, fueron no sólo los que más cambios positivos lograron, sino los que mayor apoyo popular tuvieron: Néstor y Cristina Kirchner, Hugo Chávez, los dos mandatos de Lula Da Silva, Rafael Correa, los gobiernos de Evo Morales.
No parece que sea útil apelar a unidades de medida. Es decir, definir al otro según las cantidades de moderación con la que cuenta y, a partir de allí, delimitar el espacio político “extremo e irracional” que es necesario separar o marginar. Ello supondría trasladar al interior del Frente de Todos, las prácticas estigmatizantes utilizadas por el macrismo contra Cristina Fernández de Kirchner y el Kirchnerismo.
¿Es posible negociar con el poder real y las derechas desde la búsqueda de consensos basados en la idea de una moderación “compartida”? No pareciera ser el caso en estos dos años de experiencia de gobierno de nuestro Frente de Todos: la respuesta a propuestas políticas moderadas (acuerdos de precios, control cambiario, congelamiento de las retenciones, por ejemplo) y, aún, a políticas imprescindibles –por ejemplo, las políticas de cuidado y vacunación durante la pandemia global – contaron con la oposición brutal y desmedida de las derechas.
¿Cuáles fueron los consensos logrados de este modo? ¿Cuál es, entonces, la mejor estrategia para enfrentar en el contexto latinoamericano a las fuerzas de las derechas?
La lógica de la moderación y la correlación de fuerzas negativa nos lleva a una paradoja circular: si los gobiernos toman medidas “moderadas”, entonces ganarían en gobernabilidad frente al poder real. El problema es que la moderación deja a los dos sectores en pugna –el poder real y los sectores populares- en situación de descontento: las elites de derecha y el establishment leen la moderación como debilidad de los gobiernos populares y, en vez reducir la presión política, la incrementan. A la vez, los movimientos sociales, los partidos políticos y los sectores populares sienten y viven –en el caso de los más vulnerables- la situación de que la vida cotidiana no les ha mejorado sustancialmente desde la llegada de un gobierno popular al poder.
Cuando en el año 2019 la compañera Cristina ideó y convocó a la construcción de un Frente de Todos como herramienta electoral para derrotar al más crudo neoliberalismo, se dirigió a todas las fuerzas del campo nacional-popular. La razón de ser de ese Frente de Todos no era, claramente, sólo derrotar al macrismo sino reponer e incrementar las políticas de derechos e inclusión de los 12 años de gobiernos nacional-populares movilizando al pueblo y nunca moderando sus demandas o “mandando a desensillar hasta que aclare”. La discusión, desde nuestro punto de vista, es sobre la orientación de las políticas públicas que deben expresar la unidad de las fuerzas que integran el Frente de Todos.
Se sale con más política y no con más encierro.
Se sale compartiendo con el pueblo el conocimiento de las dificultades: enfrentándolas y no eludiéndolas.
Se sale convocándonos todos y todas a un proceso de discusión pública fecundo y fraterno.
Firman la declaración: Teresa Parodi, Eduardo Basualdo, Liliana Herrero, Roberto Salvarezza, Adrián Paenza, Cynthia García, Alberto Kornblihtt, Rita Cortese, Noe Jitrik, Andrea Varela, Victoria Onetto, Carlos Rozanski, Araceli Bellota, Rubén Dri, Artemio López, María Pía López, Daniel Tognetti, Roberto Caballero, Alejandro Kaufman, María Sondereguer, “Mempo” Giardinelli, Marcelo Figueras, Gustavo Cirelli, Telma Luzzani, Andrés Asiain, Cynthia Ottaviano, Eduardo Rinesi, Jorge Elbaum, María Seoane, Carlos Barragán, Luisa Kuliok, Carlos Ciappina, Pablo Manzanelli, Martín Piqué, Silvia Delfino, Juan Martín Gené, Sandra Russo, Glenn Postolski, Rosa Bru, Conrado Geiger, María Quintero, Diego Hurtado, Raquel Robles, Juan Diego Incardona, María Sucarrat, Flavio Rapisardi, Ayelén Sidún, Mariano Hamilton, Viviana Vila, Sebastián Fernández, Ernesto Bauer, Juan Pablo Olsson, Paula de Luque, Julio Ferrer, Lalo Painceira, Marina Glezer, Julián Saud, Juan Alonso, Francisco “Paco” Oliveira, Alejandro Montalbán, Marina Arias, Marcelo Camaño, Susana Martins, Juan Valerdi, Eduardo Dvorkin, Marcelo Ruiz, Daniel Bello, Félix Requejo, Rolando González José, Adriana Serquis, Eduardo de la Serna, Jimmy Herrera, Tony Fenoy, Graciela Vazan, Ricardo Carrizo (Curas en Opción por los Pobres), Carlos Gómez (Curas en Opción por los Pobres), Rafael Villegas, María José Castells, Colectivo de Teología de la Liberación Pichi Meisegeier, Carta Abierta La Plata, Pablo Llonto, Stella Escoba, Sebastián Palma, Mónika Arredondo, Mauricio Erben, Cristian Weber, María Bernarda Tinetti, Pedro Dehleye, Ximena Talento, Luis Zarranz, Siro Colli, Liliana Viola, Emanuel “Peroncho” Rodríguez, Sergio Ranieri, Gustavo Bulla, Ricardo “Kiko” Cerone, Celeste Abrevaya, Julio Reta, Juan Montes Cato Verónica Baston, Pablo Bilyk, Raquel Márquez, Pablo Antonini, María Cabrejas, Alejandra Cebrelli, Juan Guzmán, Julia Narcy, Diego Conno, Julia Saud, Facundo Ábalo, Diana Rogovsky, Mauro Beltrami, Marcela Di Croce, Guillermo Clarke, María Cristina Demo, Ricardo Plazaola, Luis Schinca, Claudio Panella, Patricia Berrotarán, Fabio Prado González, Fabián Bertero, Cintia Rogovsky, Martín Daniel Castilla, Alicia Sarno, Omar Musa, Mag De Santo, Lucas Ayala, Guillermo Pilía, Flora Ferrari, Duilio Lanzoni, Carlos Schmerkin, Guillermo Wierzba, Ignacio Velez, Silvio Schneck, Aurelio Narvaja, Ilda Lucchini, Jorge Barbeito, Ursula Asta, Ana Berezin, Carlos Vargas, Mirta del Campo, Maximiliano Coria, Mirna González, Luis Freire, Eleonora Artigas, Juan Artigas, José Slimobch, Victor Portnoy, Monika Aredondo, Cristina Pilar Bejar, Mirta Botzman, Claudia Albertal, Fabian Gatica, y siguen las firmas . . . (Página 12 / 21 de marzo de 2022)
Publicado por: https://pensamientodiscepoleano.com.ar/index.html
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GRACIELA DALEO
Militante, coordinadora de la Cátedra Libre de Derechos Humanos de la UBA y ex detenida-desaparecida
Entrevista a Graciela Daleo por lavaca.org en Buenos Aires, marzo de 2007.
De cara a los 31 años de la instalación del terrorismo de Estado, esta charla traza el recorrido de una mujer que sobrevivió para contarlo, pero también para pensarlo. En el 77 la secuestraron en la ESMA durante un año y medio. Ya en democracia, estuvo presa. Rechazó un indulto de Menem y fue prófuga de la justicia. Hasta que la historia puso las cosas en su lugar y se convirtió en una de las testigos clave para que se juzgue a los represores aquí y en Italia. “Creo que esto fue resultado de la lucha de nuestro pueblo. Para mí no es una dádiva de este gobierno” asegura. Lo que representa la desaparición de López, los límites de los organismos y cómo mira a sus “compañeros” convertidos en funcionarios. Sobre lo que aprendió en este camino sintetiza: “perder, resistir y algunas veces, ganar”.
Graciela Daleo no tiene televisión por cable en su casa, nunca enciende el televisor ("salvo algunos sábados para ver las películas argentinas que pasan en Canal 7, o las películas tontas que dan a la tarde"). Por ende, no ve Gran Hermano, ni tampoco pertenece a la previsible raza de los que lo critican: simplemente lo ignora. Graciela no tiene celular, y jamás navega por Internet: no es seguro que esta charla con lavaca constituya una excepción. "Y tardé bastante en aceptar lo del correo electrónico" admite.
Sin embargo ha visto más imágenes que las que la televisión puede imaginar, fue víctima real del gran hermano original y sin maquillaje, constituido en lugares como la ESMA, se comunica y está comunicada como pocas personas sin usar telefonitos de ciencia ficción, y su navegación principal parece ser su propia vida, sin monitores.
En su departamento de Almagro hay un tapiz zapatista, de Chiapas, una imagen de Corto Maltes, una reproducción de Pedro Figari, el marco de una ventana que acaba de pintar de azul, e infinidad de libros. "Me gustan las novelas, salvo las de terror o ciencia ficción". De eso ha tenido bastante, puede pensarse. "Leo cosas serias y tonterías también. Ahora estoy con un libro maravilloso y terrible: En la casa del pez que escupe agua, del venezolano Francisco Herrera Luque. Me encanta la novela histórica".
Hay lechuzas de adorno impecablemente ordenadas, mirándonos y espantando acaso la mala suerte y las historias de terror, hay discos de vinilo, y en una pared se ve una oración del sacerdote Carlos Mugica llamada Meditación en la villa. Graciela lo conoció. Mugica le pide perdón a Dios, entre otras cosas, por haberse acostumbrado “a ver que los chicos que parecen tener ocho años tengan trece". Hay luz de sol que seca la pintura azul, y hay café negro que Graciela ha preparado como para calentar el alma y empezar a hablar sobre Roma, donde fue a declarar, otra vez, ante la justicia.
"En un momento nos miramos. Estábamos en Roma, con un grupo de compañeros. En ninguna noche de capucha, en la Esma, ni aun en nuestras imaginaciones más esperanzadas, pensamos que íbamos a estar algún día caminando por Roma para mandarlos presos a ellos". "Ellos" son los represores de la Escuela de Mecánica de la Armada (ESMA) que unos días después resultaron condenados a cadena perpetua por esa justicia italiana. Alfredo Astiz, Jorge Acosta, Antonio Vañek, Jorge Vildoza, Héctor Febres. Vildoza está prófugo desde hace 20 años. El resto está preso en la Argentina.
Graciela fue una de las testigos. En realidad viene siendo testigo desde hace tiempo, desde que vivió para retratar a una organización criminal compuesta por el Estado e institucionalizada clandestinamente (no se trata de una paradoja idiomática), dedicada a imponer en el país la tortura, el silencio y la muerte.
Pero Graciela sabe ser implacable hasta con sus propias palabras, y con la belleza romana. "Estábamos allí, con todo lo que significa por esos miles de años e historia, es una ciudad hermosa... y también de barbarie y de impunidades". Y agrega: "Nos acompañaba lo otro, el dolor permanente. Estaba la mamá de Susana Pegoraro y esposa de Juan Pegoraro, ella asistió a las audiencias. Nosotros somos el testimonio vivo de lo que sufrió su hija".
Juan (o Giovanni) Pegoraro y su hija Susana, sumados a Ángela María Aieta, la madre del dirigente de la Juventud Peronista Juan Carlos Dante Gullo, fueron los tres casos juzgados en Italia.
Graciela Daleo comenzó su militancia política en los 60 y hace casi 30 años, el 18 de octubre de 1977 se convirtió en una de las miles de personas desaparecidas en Argentina, en manos de los militares. Soportó las torturas; lo que tiene para decir sobre el tema ya lo declaró, por ejemplo en el juicio a los ex comandantes de las Juntas militares, cuando diferenció entre quienes colaboraron con los escuadrones de la muerte, y quienes fueron sometidos a trabajo esclavo: "Las personas como yo, que realizamos tareas, que hicimos tareas pero con características de lo que se podía llamar mano de obra esclava... o sea, escribía a máquina ahí, porque eso a mi me permitió en parte ir durando dentro del campo de concentración, sin que eso significara quebrar ninguno de mis valores, o sea no dar nombres, no entregar inteligencia.
No pensar para ellos y no permitir que por mí nadie sufriera lo que yo estaba sufriendo, por eso quería hacer esa diferenciación".
Los marinos decidieron "recuperarla" (o convertirla en eso que ella llamó mejor “mano de obra esclava”) y tras un año y medio de detención clandestina decidieron también "liberarla", momento a partir del cual Graciela dedicó cada segundo de su vida a denunciar las aberraciones y los crímenes de la dictadura.
La persecución siguió en plena democracia, ya entonces por la vía judicial: en el año 88 estuvo detenida, y en 1989 Carlos Menem la indultó en dos causas, junto a militantes populares y jefes militares. Graciela fue la única que rechazó judicialmente tal indulto. A veces el coraje es una elección solitaria.
Se fugó al Uruguay y finalmente pudo volver cuando ya la acción judicial dejó de tener viabilidad. Graciela hoy coordina la Cátedra Libre de Derechos Humanos, participa del programa radial Cuentas Pendientes en la FM Bajo Flores, trabaja como correctora, y ejerce un oficio tal vez desusado: la coherencia. Por eso Graciela refleja todo un estilo de pensamiento y forma de plantarse frente a la realidad ante al cual se puede debatir, pero no ser indiferente.
-¿Cuál es la importancia de juicios como el de Italia?
Son causas que se iniciaron en el exterior porque en este país reinaba la impunidad de los genocidas de la dictadura. Fueron los infinitos intentos que hizo nuestro pueblo -las organizaciones populares, los organismos de derechos humanos- para fisurar el muro de impunidad impuesto durante años en Argentina. En casos como el que se hizo en España contra Adolfo Scilingo (marino que confesó haber participado en los vuelos que partían desde la ESMA, donde se drogaba a los prisioneros para lanzarlos vivos desde los aviones al mar), se apeló a la persecución universal de los crímenes de lesa humanidad.
Graciela declaró tanto en España como en Italia "y en ambos casos se buscó encuadrar la represión en lo que fue la instalación del Estado terrorista, el ‘proceso de reorganización nacional’, y no solo la ESMA que a veces aparece como el único lugar donde se cometieron crímenes”. Declararon también Magdalena Ruiz Guiñazú por haber pertenecido a la CONADEP (Comisión Nacional sobre la Desaparición de Personas), Horacio Verbitsky por su trabajo de investigación, y sobrevivientes de otros campos de concentración.
En Roma se reunió con compañeros y amigos como Lila Pastoriza, Norma Burgos, Alicia Milia, Elisa Tokar y Raúl Cubas. Un reconocimiento: “Hemos testimoniado infinidad de veces, hemos dado charlas, de todo. Pero a pesar de los cuestionamientos que uno tiene para la justicia burguesa, es por ahora la única existente y siempre tiene un plus prestar allí el testimonio. Un tribunal, como todo lugar simbólico, tiene otro rango. Y además del juez, hay un tribunal popular con seis miembros de la comunidad que también intervienen en el dictado de la sentencia”. El hecho de que la condena no se cumpla no le parece a Graciela lo principal: "Están detenidos acá, salvo Vildoza que sigue prófugo desde el 87. Haremos que cumplan las condenas acá. Pero lo de Italia tiene que ver con la sanción social, la condena moral. Es para pensarlo. El escrache tiene un rango. La sanción de un tribunal tiene también otro lugar simbólico que he aprendido a reconocer. Te pega distinto".
-Otro hecho práctico, es que deja la sensación de que tantos esfuerzos y denuncias, finalmente sirvieron. Aunque mucha gente menoscabe la cuestión.
Una de las cosas que aprendí en estos años es a no caer en la tentación de contabilizar solamente las derrotas, y tampoco endulzarme demasiado con las victorias. Yo creo que es necesario que seamos capaces de reflexionar sobre nuestras experiencias, y compartir estas reflexiones con las generaciones más jóvenes.
-¿Por ejemplo?
Yo evalué desde hace mucho que el campo popular sufrió una derrota profundísima con la dictadura. No soy de las que piensan que plantear que hubo derrota es hacerle el juego al enemigo. Yo creo que sí, que el campo popular, el país en general, América Latina, sufrieron una derrota muy grande con los estados terroristas, con el genocidio. Pero reconocer que tuvimos una derrota no quiere decir que nos hayan vencido definitivamente. Luego de las derrotas los pueblos se recomponen. En Italia me puse a pensar en la rebelión de Espartaco. ¿Cómo terminó? Crucificado. Pero puso en cuestión la esclavitud e implicó un impresionante avance de la humanidad. Me gusta una novela de Andrés Rivera, La revolución es un sueño eterno. Allí habla del “perpetuo aprendizaje de los revolucionarios: perder y resistir y no confundir lo real con la verdad”. Yo lo que agrego es: perder, resistir, y algunas veces ganar. Lo que pasa es que ninguna victoria es definitiva, mirá lo que pasó con la Unión Soviética, pero creo que ésta es la historia de la humanidad. Un día Marcelo Parrilli (abogado) me contestó irónicamente: "Bueno, acabo de escuchar una versión peronista de la teoría de la revolución permanente de Trostki...”, y creo que en ese sentido no te tenés que quedar nunca tranquilo con las victorias, si no la lucha no vale para nada.
- No entiendo.
Creo que siempre nos tenemos que sentir insatisfechos con lo que se logra, pero esa insatisfacción no tiene que implicar la frustración absoluta, que concluya en que ninguna lucha vale, que solo sirve la victoria total de hoy para mañana. Yo aprendí que en el camino al socialismo, va a haber un largo tramo donde hay victorias parciales, victorias que incluso son dentro de este sistema. Para mí lograr la condena de los represores que actuaron durante la dictadura militar no resuelve el problema de la impunidad. Pero con esta lucha demostramos que ellos no son omnipotentes, que es lo instalaron durante la dictadura, y se reforzó con las leyes de Punto Final y Obediencia Debida y los indultos. Parecía que ya no se podía hacer más nada, que a los poderosos no tenés cómo tocarlos. Hubo quienes en 2003 plantearon: "Claro, ahora se los puede juzgar porque son unos viejitos que no joden a nadie". Yo creo que ni desde la perspectiva material concreta ni desde la perspectiva simbólica hay que devaluar esta victoria. Una, que no son “viejitos”. Y en todo caso no me importa la edad de Etchecolatz, por poner un referente simbólico que muestra que sí les importa a los poderosos que llegue la sanción jurídica, porque vemos la respuesta...
-¿Por lo de Julio López?
Por lo de Julio López y por la infinidad de cosas que han venido pasando a lo largo de los años. Porque la desaparición de Julio es hoy lo más extremo. Pero no lo primero: en este país hubo sublevaciones militares para que no los castigarán ni los juzgaran, en los años 87, 88 y 90.
-En la revista Mu se ha publicado la cantidad de policías bonaerenses en actividad desde plena época de la dictadura: 9.026.
Y te agrego que no es solamente eso lo grave, los actores concretos. Es también lo que construye como cultura de impunidad. Ni me animaría a decir que a Julio lo secuestraron los viejos del servicio penitenciario bonaerense o tipos de la misma generación de Etchecolatz. Con la escuela de impunidad de todo este tiempo, un grupo de cinco tipos de 25 años se siente habilitado para secuestrar a Julio López.
-Para hablar de fascismo no necesito a un señor de la edad de Mussolini...
Exactamente y por eso creo que lo valioso es que rompimos colectivamente la idea de que la impunidad es intocable. ¿Nos falta? Sí, muchísimo. Pero es importante afirmarnos en esta victoria, porque lo que se demuestra es que hay que pelear para conseguir las cosas.
En esta lógica de victoria/derrota, Graciela vuelve a moderar el entusiasmo:
También hay que decir que no todas las luchas justas culminan en victorias. No hay garantías. Pero también digo que para alcanzar victorias hay que pelear. Si se hubiera bajado los brazos en los 90, con la última camada de indultos, no estaríamos donde estamos hoy. Y hay situaciones más nuevas. Si los familiares de los pibes de Budge se hubieran quedado en su casa en vez de organizarse, hoy no se habría llevado a juicio u condenado a tantos policías que mataron chicos con el gatillo fácil. Ahora, eso tampoco significa que haya terminado el accionar criminal de la policía que mata a los pibes ni su impunidad.
Tampoco quiero decir que yo misma haya tenido siempre una línea continua de participación, de compromiso, siempre adelante. Entre el 70 y el 73 por ejemplo dejé de militar por cuestiones personales. Entonces tampoco todo es lineal y estático.
-Así parece ser la vida real.
Yo volví en 1984 al país y no sabía dónde meterme. Me había autoformado en una concepción de lucha, y de hecho no he vuelto a tener una pertenencia político partidaria después de Montoneros. Reconozco mi identidad histórica como militante del peronismo revolucionario, pero en los 80 decía: "soy una peronista desencantada" y ya con el menemismo dije: "identidad política en transición". ¿Hacia dónde? Seguro que hacia lo que genéricamente puedo nombrar como socialismo, pero sin ubicación partidaria.
-¿Cómo se puede analizar el futuro de los juicios relacionados con derechos humanos?
Yo propongo no hablar de "juicios relacionados a derechos humanos" porque en ese caso contribuimos a encajonar los derechos humanos sólo en lo que pasó durante la dictadura militar. Digamos que son juicios contra los represores de la dictadura cívico-militar, a los que ahora se agregan los vinculados a los crímenes de la Triple A. Hay cientos de causas, y muchas se abrieron al anularse la Obediencia Debida y el Punto Final. Lo que se viene, o se va a mantener, es el desarrollo de estos procesamientos con distinta suerte. Digo con distinta suerte porque el derecho es un terreno de lucha política, no es algo que está establecido como las leyes matemáticas eternas. Por ejemplo hace pocos días Jorge Olivera Rovere, jefe de la Subzona Capital, responsable de cientos de desapariciones porque bajo su mando estaban las decenas de campos de concentración que funcionaron en la ciudad de Buenos Aires, consiguió la excarcelación con una fianza, con el argumento de la edad y que está hace muchos años detenido sin condena. Y también conviene recordar que no estamos todavía en la instancia oral en varios juicios, porque hay infinidad de manganetas jurídicas que hacen los defensores de los militares y terminan llegando al tribunal de Casación, que cajonea los expedientes.
-¿Qué es lo que puede ocurrir, por ejemplo, este año?
Lo que más conozco es la causa ESMA. Suponemos que dentro de poco será el juicio oral contra uno de los represores, Héctor Febres, por dos casos. Uno dice: ¡con todo lo que este tipo tiene encima, y sólo por dos casos! Pero los estadíos procesales están en distinto punto y esos dos casos serán juzgados. Es como pasó con Etchecolatz, se lo condenó por seis casos, de los cientos y cientos de denuncias que hay contra él. El lado bueno es que el represor va a ir a juicio y va a ser condenado. Lo problemático es que es sólo por dos casos, auque después vaya a juicio por más, y eso exige un esfuerzo jurídico y político muy grande, que los testigos tengan que ir a declarar tantas veces, y poner todo esto sobre la mesa. Con lo implica, además, porque tanta exposición provoca miedo después del secuestro de Julio López.
-¿Y cómo se vence el miedo?
Pensando que esto no es algo que se dirime entre familiares, organismos de derechos humanos, abogados, fiscales sobrevivientes y represores. Esto se dirime en el terreno de la lucha popular que tiene una expresión en el campo jurídico. Por eso creo que es alentador que haya tantos a los que les interese saber qué está pasando con los juicios. Siento que son muchos más que en etapas pasadas.
-¿En qué se nota?
En que se entiende cada vez mejor que la historia no empezó el 24 de marzo de 1976, sino que hubo un proceso político del pueblo en el cual la dictadura no fue lo único. Hubo muchas etapas diferentes. Cuando volví del exilio en 1984 yo decía que esta era una sociedad que se había quedado sin preguntas. Pienso que recién en los 90 se empezó a recuperar la capacidad de preguntarse, de cuestionar, y coincide con la etapa en que aparece H.I.J.O.S (la organización que reúne a hijos de desaparecidos). Ahí estaban los hijos de la generación de los 70, empezando a preguntarse cosas.
-Preguntarse cosas. ¿Cómo se vive una etapa en la cual el gobierno va a la ESMA y recibe a los sobrevivientes? ¿Se puede entender este momento desde la lógica de victoria o derrota? En ese caso: ¿qué sería?
Esta es una situación realmente complicada de vivir. Hay posiciones polarizadas, y no me siento parte de ellas. No soy parte de los que piensan “éste es el gobierno de los hijos de las Madres”, porque su política concreta no es la que nosotros queríamos hacer. Hablamos de la generación de los militantes revolucionarios en su sentido más amplio. Esto no es la patria socialista; el “capitalismo en serio” nunca fue una consigna de los militantes de los 70, que es un poco la caracterización que hace de sí mismo este gobierno. Pero tampoco formo parte de la otra polarización que plantea que este gobierno es lo mismo que la dictadura, es lo mismo que Menem o es lo mismo que De la Rua. Ni tampoco coincido con los que sostienen que este gobierno nos robó las banderas. Yo creo que este gobierno se vio obligado a hacer determinadas cosas. Sus motivaciones no me importan porque para hacer psicología voy a las sesiones de terapia, o lo charlo en una mesa de café. Sí sé que este gobierno, concretamente Kirchner, apoyó en el año 2003 que se planteara y se resolviera a favor la nulidad de las leyes de Punto Final y de Obediencia Debida. Que lo hicieran legisladores que durante años se negaron a reconsiderarlo por conveniencia del momento, seguramente. Pero creo que esto fue resultado de la lucha de nuestro pueblo. Para mí no es una dádiva de este gobierno, no me robó ninguna bandera.
-Liberándose de las polarizaciones, todo se hace más real, pero también más complejo.
Claro, y se relaciona con lo que hablábamos antes: cómo reaccionar cuando nuestras luchas obtienen una victoria, y esa victoria es la respuesta desde el Estado favorable a las exigencias que se plantean. Creo que es un núcleo problemático porque a veces hay quienes dicen "entonces está todo resuelto, dejemos las cosas en manos del gobierno", o por el contrario: "nos robaron las banderas". En ambos casos transformamos lo que en realidad fue una victoria de la lucha en una derrota. Yo no sé cómo se resuelve en términos abstractos y generales. Pienso en cada situación concreta, por ejemplo en lo que tiene que ver con el juicio y castigo a los represores: el tema es seguir avanzando. La nulidad fue un paso, fue importante y sirvió. Nosotros tenemos que seguir avanzando y exigir más. Creo que esa insatisfacción de la que hablábamos no es una cuestión psicológica, es parte de la lucha.
-¿Qué signifca eso en términos prácticos?
Se reabrieron las causas, muy bien. Pero para que las causas avancen, se necesitan actores jurídicos, políticos y hasta el respaldo del Estado en términos presupuestarios. Cuando decís lo de ir a la ESMA, creo que Kirchner y su mujer nos acompañaron, pero los protagonistas fuimos nosotros, los sobrevivientes, y creo que fue importante, que fue un hecho político importante. Si esto le sirve para el poroteo político a un grupo de militantes del Presidente, es porque minimizan el hecho.
Creo que fue un hecho político importante para la lucha por la justicia, la memoria, la construcción de una mirada de la lucha de un pueblo. Tanto como eso, pero también sólo eso. Ahí es que hay que evitar las polarizaciones. En una se confunden logros parciales con “la victoria total”, atribuyéndole a este Estado, a este gobierno, una política global que no tiene. Porque este gobierno no actúa igual en relación a las violaciones de derechos humanos que se siguen produciendo hoy y de las cuales el Estado sigue siendo responsable. No es la misma política que da respuesta a la lucha por la vivienda digna de toda la población porque de hecho la mayoría de la población sigue sin tener vivienda digna, o sea no hay políticas globales en ese sentido que reparen y lleven adelante la justicia social, para apelar a la vieja bandera del peronismo.
Y por otra parte tampoco comparto decir que esto es todo lo mismo y que son actos irrelevantes, porque yo creo que hay diferencias. La importancia de reconocer las diferencias la pienso en cuanto a que cada momento político exige estrategias políticas diferentes. Sé de organizaciones que se plantean como eje único si hay que ser oficialistas u opositores al gobierno. Pero eso no puede ser una definición de tu organización: lo que te defina tiene que ser un proyecto propio, desde lo que como colectivo definís como objetivos, después construirás tus alianzas en función de eso. A veces digo: coño (eco del exilio español de Graciela), una victoria de nuestra lucha, una victoria que no fue total pero significó fisurar el muro de la impunidad, la terminamos transformando en una derrota, o porque le regalamos el paquete al gobierno o porque decimos “el gobierno nos afanó las banderas”.
- ¿Cuál es la sensación de encontrar a compañeros y militantes que ahora son funcionarios estatales?
Hay muchos que siguen siendo compañeros míos, con los cuales tengo profundas diferencias políticas pero no son antagónicas. Situación muy diferente a la de los que se subieron al carro menemista en su momento, que los hubo y con los que rompí. Hay algunos que están por cuestiones personales que no comparto, pero otros están porque realmente piensan que pueden hacer algo. Hay ámbitos en los cuales he charlado con algunos y les he dicho: "mirá hermano lo concreto es que no estas pudiendo hacer nada". Y otros sí están pudiendo hacer cosas, y no están por el cargo, ni el sueldo, sino por un compromiso. Y hay fuerzas políticas que apoyan a este gobierno porque caracterizan que ésta es una etapa de acumulación y construcción de poder popular para después avanzar y dar el salto hacia otras instancias. Qué sé yo: por ahí es una visión que puede estar emparentada a lo que era una visión nuestra en los 70. En la ancha vereda de la patria peronista no todo el peronismo era revolucionario. Ahora para algunos existiría la misma lógica. Lo que me preocupa es pensar que esas fuerzas políticas en lugar de construir desde esa lógica: "estamos acá pero para ir más allá" y para forzar los límites, lo que hacen es acompañar al oficialismo. Eso es dejar que el ritmo te lo marque el Ejecutivo, la superestructura, y no que tu función sea la de actuar como agentes críticos. No digo que tenés que estar con el dedito señalando qué está bien y qué está mal, sino la crítica en tanto concepción más marxista, de comprender la realidad, entenderla en todos sus matices y forzar su modificación, no mantenerla como está.
-Hay más de uno que apuesta a eso, como en las fotos: que nadie se mueva y todos sonrían.
Hay fuerzas políticas en el ámbito del oficialismo que todo lo ven según lo que dice Kirchner, amén y se acabó. Otras plantean ir más allá, pero no sé si lo están haciendo. Reconozco que no es fácil. El aparato, la burocracia, el Estado como institución es un elefante tremendo. El Estado tiene una lógica hasta en los formularios más elementales, una lógica que apunta a paralizar. Es muy difícil estar ahí adentro y más cuando hay contradicciones antagónicas. Aun pensando en la gente más potable de este gobierno, los que quieren hacer algo más... se quedan solos.
-La paradoja es que ese Estado mezcla lógicas y funcionarios de la época de la represión, y de la actual. ¿Cómo se resuelve eso?
Los de la época de la represión es inaceptable que los mantenga. Y eso es una de las señales más graves de los límites de este gobierno, que el propio gobierno decide. Por otro lado, hay ámbitos pequeños, acotados, donde algunas cosas pueden hacerse. También creo que este gobierno no tiene todo el poder para hacer lo que debería hacer si quisiera hacerlo.
Sería infantil pensar que acá hubo una revolución. Una revolución implica que se revoluciona todo, y acá hay un gobierno que asumió con el 22 o el 23% de los votos... sin proponer ninguna revolución.
- Hablamos de logros en ámbitos acotados. ¿No pueden ser vistos como parches, mientras en lo estructural no se toca nada?
Pero esto no es novedoso, porque el reformismo ha sido eso. El problema es qué hacemos nosotros con esa situación, porque si no nos encontramos con que la única posibilidad de cambio es que yo hoy me duermo en el capitalismo y mañana me despierto en el socialismo. Creo que la paradoja existió siempre en la lucha por la justicia, por vivir con dignidad. Hay avances parciales. ¿Qué hacés vos con esos avances? Porque el poder seguro que se los va a querer morfar, pero todo depende de desde dónde leés vos las victorias. Por ejemplo, la lucha por las ocho horas es una conquista por la cual la clase obrera derramó mucha sangre, pero hay otra mirada: la de quienes dicen que eso no sirvió de nada porque seguís teniendo patrón por lo tanto no rompiste la relación, seguís siendo un proletario y además te siguen explotando porque trabajás ocho horas pero te pagan por cuatro. En la segunda, tu única posibilidad es despertarte mañana en el socialismo. En la otra, el peligro es conformarse con ser un proletario que trabaja ocho horas pero toda la vida seguirá siendo un proletario. ¿Cómo lo pienso? Me afirmo en esa lucha por las ocho horas, pero también sé que le convenía a la patronal. Así que hay que seguir más allá.
Bueno creo que mientras siga existiendo el mundo la historia va a ser así: avanzar, conquistar, arrancar en la lucha, consolidar lo logrado y seguir yendo más allá.
-La novedad es que entonces más que lo "objetivo", lo que vale es lo subjetivo, qué hace cada uno con las situaciones que le tocan vivir.
Por eso te digo... algunos de nosotros en broma decimos: “ganamos, perdemos, siempre perdemos”, uno se burla un poco de sí mismo. Cualquier cosa que vos hagas, otro se la puede apoderar, dar vuelta y ponerla contra vos. El tema es dónde te parás, y dónde vos decís: llegamos, y ya no tengo nada que hacer. Pero no es sólo “subjetivo”, y mucho menos individual. Es colectivo, uno no piensa ni actúa solo, ni por sí solo.
-¿Eso ocurre con funcionarios ex militantes?
Ocurre con varios. Hay algunos a los que respeto y seguimos siendo amigos. Reconozco que no es fácil discutir con algunos de ellos. Por lo menos a mi resulta difícil.
-¿Por qué?
Porque se agitan las polarizaciones... y se ponen tan a la defensiva. Yo reconozco que su lugar es difícil. Porque me imagino que los cuestionamientos que uno les hace también se los hacen ellos mismos frente al espejo, espero que así sea.
-¿Cuál es tu percepción sobre ese estar a la defensiva?
Deben jugar varios factores, uno puede ser que ellos mismos no están haciendo lo que quisieran hacer. En los 70, el debate que teníamos las organizaciones revolucionarias peronistas también era en una situación difícil, y las organizaciones de izquierda nos tachaban de estar a favor de mantener el orden burgués, de no cuestionar al sistema. Entonces muchas veces nuestra discusión se polarizaba y nos abroquelábamos cada espacio en sus posiciones que parecían casi antagónicas.
-Pero hoy estar a la defensiva por parte de los funcionarios es exhibir laureles pasados para evitar la discusión. ¿Cómo tomar eso desde el punto de vista de los derechos humanos?
Creo que la política económica de este gobierno no tiene como eje atender lo central, que es la vida concreta de nuestro pueblo. No estoy planteando que espero que este gobierno haga la reforma agraria -ojalá lo hiciera-, pero los pobres, los más castigados por el neoliberalismo, no están ni siquiera en el discurso oficial, no están en lo simbólico y tampoco en la política concreta. Creo que ésa es una diferencia con el proceso de Evo Morales en Bolivia, y del propio Chávez. Lo que me pasa actualmente, es que yo también me hago preguntas, escucho atentamente, y trato de no hacer sentencias apuradas, como tal vez las hice en otros momentos. Y desde preguntas observo organizaciones populares, que se dicen kirchneristas, que consideran que algo ha cambiado. Eso para mí no alcanza, pero no descalifico de plano.
-¿Y los organismos de derechos humanos?
Es otra cosa que me pongo entre signos de interrogación. Hay varias cuestiones, hablando de los organismos de derechos humanos que surgieron a partir de la represión de la dictadura. Y es un tema que se ha debatido mucho. Los organismos surgieron desde una especificidad. Entonces, ¿puede cada organización asumir toda la problemática de todos los derechos humanos? ¿O debe limitarse a esa especificidad? Me parece que hay organismos que han hecho el esfuerzo por tener presencia, participar, acompañar a veces con las fuerzas limitadas que tienen, otras cuestiones.
Graciela cree, frente a los problemas presentes, que "era mucho más traquilizador moverte en un ámbito de verdades y certezas cerradas. Pensar en términos dilemáticos, no problemáticos".
De mi militancia anterior plantearía como autocrítica que moverte en ese ámbito de tantas certezas hacía que uno se hiciera menos preguntas. Por lo tanto al formular las estrategias colectivas, éstas eran limitadas o tenían dificultades para dar cuenta de una realidad total más compleja. Pero también creo que esas certezas permitieron ir para adelante. Yo tuve la certeza necesaria –y que mantengo hoy–: que el capitalismo es esencialmente injusto, que debíamos organizarnos para destruirlo y que ésa era entonces una posibilidad cercana. Fue el capital con el que arranqué. No me hice muchas más preguntas. Pero cuando muchos años después me preguntaron cómo pensaba en aquellos años que iba a ser el socialismo, contesté "Y…, la reforma agraria, el fin de la propiedad privada, la socialización de los medios de producción...”, pero tampoco me imaginaba muchas más cosas. Me hubiera perdido en la imaginación, hubiera teorizado todo el tiempo sobre detalles, sin comprometerme en la construcción concreta. Pero tampoco puedo usar eso como fórmula perpetua, porque uno debe hacerse preguntas para buscar respuestas y actuar, y volver a preguntarse. Por un lado eso era más tranquilizador. Para el hoy me lo cuestiono, no me alcanza. Pero claro, en ese entonces teníamos otra cosa, un capital importante: un proyecto, una estrategia, un camino en función de ese proyecto. Pero existía un proyecto. Y el socialismo iba a tener determinadas características. Entonces tenías formulaciones, construimos la organización, estrategias y objetivos, teníamos también un capital de valores que se daban por sentados. Siento que ese proyecto sufrió una derrota. Lo que no desaparece es el objetivo de justicia y el capital de valores. Y el de seguir pensando. Lo escucho a Chávez hablar del socialismo del siglo XXI, que tampoco sé bien qué quiere decir, pero es como para seguir teniéndolo como norte. Como forma de nombrar algo que no es el capitalismo, que proponga y busque otras relaciones sociales, que los hombres y las mujeres nos relacionemos y vivamos de otra manera.
-Otra manera de pensarlo es que el patrimonio, en lugar de estar en ese supuesto futuro, se observe más en lo que uno va haciendo en el día a día...
No parto de eso de que el cambio del día a día es el que por sumatoria va a dar como resultado el gran cambio, aunque creo que es necesaria la “revolución interior”, que era uno de los presupuestos del grupo en el que empecé a militar, en 1967. Pero si hay algo que de alguna manera puede anticipar la sociedad con la que sueño es, para mí, el encuentro con "los compañeros", por ejemplo en Bajo Flores. Y eso me recuerda algo: una de mis luchas “interiores” es por liberarme del sectarismo. Vencer la dificultad para relacionarme en términos organizativos y políticos con aquellos que no somos exactamente idénticos. Ese aprendizaje lo empecé en Uruguay, en el segundo exilio…
-Después de haber estado detenida desaparecida, presa, exiliada, ¿Qué es la libertad?
Creo que es un estado interior. Si me preguntás si yo siempre me siento libre te diría que no. Después de haber salido de la ESMA creo que empecé a sentirme libre cuando públicamente pude testimoniar ante alguien y pude dar algún paso para cuestionar lo que estaba pasando en Argentina. ¿Cuándo pierdo esa libertad? Siento que me vuelven al estado de prisión cada vez que me interpelan con “¿Y vos por qué estas viva? Si estás viva por algo será”. Esa pregunta, cuando está hecha como acusación, no como verdadera pregunta, me devuelve al cautiverio. Creo que la libertad es una construcción, no es sólo no estar preso. Creo que la libertad es poder saltar sobre los propios límites y avanzar un poco más.
-¿Y cuando no es una acusación sino una verdadera pregunta?
Si hay alguien que se hizo esa pregunta primero fuimos nosotros mismos. La pregunta era: ¿por qué no me matan?, ¿por qué yo vivo y a otro compañero se lo llevaron? Es la pregunta que se hace el que va sobreviviendo, ni siquiera digo "sobreviviente", el que va sobreviviendo dentro del campo. Y se la hace desde un lugar de cuestionamiento y culpa. Me tranquilizó mucho leer a Bruno Bettelheim, a Primo Levi, a Jorge Semprún. Me acercó a la elaboración del "por qué estamos vivos" en la Asociación de Ex Detenidos-Desaparecidos. Comprender, entonces, que el diseño represivo incluía que quedara gente viva. Entender que mucha gente se lo pregunte, como yo también le habría preguntado a un sobreviviente de Auschwitz: ¿cómo duraste, cómo no te moriste, cómo no te mataron?
-Y en esos casos, ¿cómo es la respuesta?
Fue una pregunta muy angustiosa, me la hacía ahí adentro, porque además yo estaba convencida de que nos iban a matar a todos. Hubo distintos momentos para esa respuesta. Cuando salí en libertad, junto a otros compañeros, atribuíamos nuestra sobrevida y puesta en libertad a las particularidades de la ESMA. Después, al encontrarme con sobrevivientes de otros campos, en conjunto fuimos entendiendo y dándonos cuenta de las razones. Había sobrevivientes de distintos campos; de toda gran masacre hubo sobrevivientes. Viendo eso, llegamos a entender que quedamos vivos como parte de la voluntad de los represores que pretendieron hacer de nosotros predicadores del arrepentimiento y multiplicadores del horror.
-Hablábamos de libertad como saltar sobre los propios límites. ¿Cómo se produce eso en lo cotidiano?
Siempre siento que hago mucho menos de lo que debiera y de lo que tengo posibilidades de hacer.
-Dura con vos misma.
Pero también te reconozco que hay momentos en que, hablando desde lo individual, siento una profunda alegría con algunas de las cosas que logré hacer. Para decirlo con un ejemplo: uno de los momentos de mayor libertad real lo viví cuando le puse la firma al rechazo del indulto. Fue uno de los ejercicios más libres que pude realizar.
Tal vez esa sea la clave, y Graciela siempre está firmando, de distintos modos, su rechazo a los indultos que buscan la impunidad, el silencio, la parálisis y el olvido.
Publicado en: Pensamiento Discepoleano
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ERNESTO “CHE” GUEVARA - EL SOCIALISMO Y EL HOMBRE EN CUBA
Texto de la carta dirigida a Carlos Quijano editor del semanario Marcha, Montevideo, publicada el 12 de marzo de 1965.
Estimado compañero. Acabo estas notas en viaje por África, animado del deseo de cumplir, aunque tardíamente, mi promesa. Quisiera hacerlo tratando el tema del título. Creo que pudiera ser interesante para los lectores uruguayos.
Es común escuchar de boca de los voceros capitalistas, como un argumento en la lucha ideológica contra el socialismo, la afirmación de que este sistema social o el período de construcción del socialismo al que estamos nosotros abocados, se caracteriza por la abolición del individuo en aras del Estado. No pretenderé refutar esta afirmación sobre una base meramente teórica, sino establecer los hechos tal cual se viven en Cuba y agregar comentarios de índole general. Primero esbozaré a grandes rasgos la historia de nuestra lucha revolucionaria antes y después de la toma del poder.
Como es sabido, la fecha precisa en que se iniciaron las acciones revolucionarias que culminaron el primero de enero de 1959, fue el 26 de julio de 1953. Un grupo de hombres dirigidos por Fidel Castro atacó la madrugada de ese día el cuartel Moncada, en la provincia de Oriente. El ataque fue un fracaso, el fracaso se transformó en desastre y los sobrevivientes fueron a parar a la cárcel, para reiniciar, luego de ser amnistiados, la lucha revolucionaria.
Durante este proceso, en el cual solamente existían gérmenes de socialismo, el hombre era un factor fundamental. En él se confiaba, individualizado, específico, con nombre y apellido, y de su capacidad de acción dependía el triunfo o el fracaso del hecho encomendado.
Llegó la etapa de la lucha guerrillera. Esta se desarrolló en dos ambientes distintos: el pueblo, masa todavía dormida a quien había que movilizar y su vanguardia, la guerrilla, motor impulsor de la movilización, generador de conciencia revolucionaria y de entusiasmo combativo. Fue esta vanguardia el agente catalizador, el que creó las condiciones subjetivas necesarias para la victoria. También en ella, en el marco del proceso de proletarización de nuestro pensamiento, de la revolución que se operaba en nuestros hábitos, en nuestras mentes, el individuo fue el factor fundamental. Cada uno de los combatientes de la Sierra Maestra que alcanzara algún grado superior en las fuerzas revolucionarias, tiene una historia de hechos notables en su haber. En base a estos lograba sus grados.
Fue la primera época heroica, en la cual se disputaban por lograr un cargo de mayor responsabilidad, de mayor peligro, sin otra satisfacción que el cumplimiento del deber.
En nuestro trabajo de educación revolucionaria, volvemos a menudo sobre este tema aleccionador. En la actitud de nuestros combatientes se vislumbra al hombre del futuro.
En otras oportunidades de nuestra historia se repitió el hecho de la entrega total a la causa revolucionaria. Durante la Crisis de Octubre o en los días del ciclón Flora, vimos actos de valor y sacrificio excepcionales realizados por todo un pueblo. Encontrar la fórmula para perpetuar en la vida cotidiana esa actitud heroica, es una de nuestras tareas fundamentales desde el punto de vista ideológico.
En enero de 1959 se estableció el gobierno revolucionario con la participación en él de varios miembros de la burguesía entreguista. La presencia del Ejército Rebelde constituía la garantía de poder, como factor fundamental de fuerza.
Se produjeron enseguida contradicciones seria, resueltas, en primera instancia, en febrero del 59, cuando Fidel Castro asumió la jefatura de gobierno con el cargo de primer ministro. Culminaba el proceso en julio del mismo año, al renunciar el presidente Urrutia ante la presión de las masas.
Aparecía en la historia de la Revolución Cubana, ahora con caracteres nítidos, un personaje que se repetirá sistemáticamente: la masa.
Este ente multifacético no es, como se pretende, la suma de elementos de la misma categoría (reducidos a la misma categoría, además, por el sistema impuesto), que actúa como un manso rebaño. Es verdad que sigue sin vacilar a sus dirigentes, fundamentalmente a Fidel Castro, pero el grado en que él ha ganado esa confianza responde precisamente a la interpretación cabal de los deseos del pueblo, de sus aspiraciones, y a la lucha sincera por el cumplimiento de las promesas hechas.
La masa participó en la reforma agraria y en el difícil empeño de la administración de las empresas estatales; pasó por la experiencia heroica de Playa Girón; se forjó en las luchas contra las distintas bandas de bandidos armadas por la CIA; vivió una de las definiciones más importantes de los tiempos modernos en la Crisis de Octubre y sigue hoy trabajando en la construcción del socialismo.
Vistas las cosas desde un punto de vista superficial, pudiera parecer que tienen razón aquellos que hablan de supeditación del individuo al Estado, la masa realiza con entusiasmo y disciplina sin iguales las tareas que el gobierno fija, ya sean de índole económica, cultural, de defensa, deportiva, etcétera. La iniciativa parte en general de Fidel o del alto mando de la revolución y es explicada al pueblo que la toma como suya. Otras veces, experiencias locales se toman por el partido y el gobierno para hacerlas generales, siguiendo el mismo procedimiento.
Sin embargo, el Estado se equivoca a veces. Cuando una de esas equivocaciones se produce, se nota una disminución del entusiasmo colectivo por efectos de una disminución cuantitativa de cada uno de los elementos que la forman, y el trabajo se paraliza hasta quedar reducido a magnitudes insignificantes; es el instante de rectificar. Así sucedió en marzo de 1962 ante una política sectaria impuesta al partido por Aníbal Escalante.
Es evidente que el mecanismo no basta para asegurar una sucesión de medidas sensatas y que falta una conexión más estructurada con las masas. Debemos mejorarla durante el curso de los próximos años pero, en el caso de las iniciativas surgidas de estratos superiores del gobierno utilizamos por ahora el método casi intuitivo de auscultar las reacciones generales frente a los problemas planteados.
Maestro en ello es Fidel, cuyo particular modo de integración con el pueblo solo puede apreciarse viéndolo actuar. En las grandes concentraciones públicas se observa algo así como el diálogo de dos diapasones cuyas vibraciones provocan otras nuevas en el interlocutor. Fidel y la masa comienzan a vibrar en un diálogo de intensidad creciente hasta alcanzar el clímax en un final abrupto, coronado por nuestro grito de lucha y victoria.
Lo difícil de entender, para quien no viva la experiencia de la revolución, es esa estrecha unidad dialéctica existente entre el individuo y la masa, donde ambos se interrelacionan y, a su vez, la masa, como conjunto de individuos, se interrelaciona con los dirigentes.
En el capitalismo se pueden ver algunos fenómenos de este tipo cuando aparecen políticos capaces de lograr la movilización popular, pero si no se trata de un auténtico movimiento social, en cuyo caso no es plenamente lícito hablar de capitalismo, el movimiento vivirá lo que la vida de quien lo impulse o hasta el fin de las ilusiones populares, impuesto por el rigor de la sociedad capitalista. En esta, el hombre está dirigido por un frío ordenamiento que, habitualmente, escapa al dominio de la comprensión. El ejemplar humano, enajenado, tiene un invisible cordón umbilical que le liga a la sociedad en su conjunto: la ley del valor. Ella actúa en todos los aspectos de la vida, va modelando su camino y su destino.
Las leyes del capitalismo, invisibles para el común de las gentes y ciegas, actúan sobre el individuo sin que este se percate. Solo ve la amplitud de un horizonte que aparece infinito. Así lo presenta la propaganda capitalista que pretende extraer del caso Rockefeller —verídico o no—, una lección sobre las posibilidades de éxito. La miseria que es necesario acumular para que surja un ejemplo así y la suma de ruindades que conlleva una fortuna de esa magnitud, no aparecen en el cuadro y no siempre es posible a las fuerzas populares aclarar estos conceptos. (Cabría aquí la disquisición sobre cómo en los países imperialistas los obreros van perdiendo su espíritu internacional de clase al influjo de una cierta complicidad en la explotación de los países dependientes y cómo este hecho, al mismo tiempo, lima el espíritu de lucha de las masas en el propio país, pero ese es un tema que sale de la intención de estas notas.)
De todos modos, se muestra el camino con escollos que aparentemente, un individuo con las cualidades necesarias puede superar para llegar a la meta. El premio se avizora en la lejanía; el camino es solitario. Además, es una carrera de lobos: solamente se puede llegar sobre el fracaso de otros.
Intentaré, ahora, definir al individuo, actor de ese extraño y apasionante drama que es la construcción del socialismo, en su doble existencia de ser único y miembro de la comunidad.
Creo que lo más sencillo es reconocer su cualidad de no hecho, de producto no acabado. Las taras del pasado se trasladan al presente en la conciencia individual y hay que hacer un trabajo continuo para erradicarlas.
El proceso es doble, por un lado actúa la sociedad con su educación directa e indirecta, por otro, el individuo se somete a un proceso consciente de autoeducación.
La nueva sociedad en formación tiene que competir muy duramente con el pasado. Esto se hace sentir no solo en la conciencia individual en la que pesan los residuos de una educación sistemáticamente orientada al aislamiento del individuo, sino también por el carácter mismo de este período de transición con persistencia de las relaciones mercantiles. La mercancía es la célula económica de la sociedad capitalista; mientras exista, sus efectos se harán sentir en la organización de la producción y, por ende, en la conciencia.
En el esquema de Marx se concebía el período de transición como resultado de la transformación explosiva del sistema capitalista destrozado por sus contradicciones; en la realidad posterior se ha visto cómo se desgajan del árbol imperialista algunos países que constituyen ramas débiles, fenómeno previsto por Lenin. En estos, el capitalismo se ha desarrollado lo suficiente como para hacer sentir sus efectos, de un modo u otro, sobre el pueblo, pero no son sus propias contradicciones las que, agotadas todas las posibilidades, hacen saltar el sistema. La lucha de liberación contra un opresor externo, la miseria provocada por accidentes extraños, como la guerra, cuyas consecuencias hacen recaer las clases privilegiadas sobre los explotados, los movimientos de liberación destinados a derrocar regímenes neocoloniales, son los factores habituales de desencadenamiento. La acción consciente hace el resto.
En estos países no se ha producido todavía una educación completa para el trabajo social y la riqueza dista de estar al alcance de las masas mediante el simple proceso de apropiación. El subdesarrollo por un lado y la habitual fuga de capitales hacia países «civilizados» por otro, hacen imposible un cambio rápido y sin sacrificios. Resta un gran tramo a recorrer en la construcción de la base económica y la tentación de seguir los caminos trillados del interés material, como palanca impulsora de un desarrollo acelerado, es muy grande.
Se corre el peligro de que los árboles impidan ver el bosque. Persiguiendo la quimera de realizar el socialismo con la ayuda de las armas melladas que nos legara el capitalismo (la mercancía como célula económica, la rentabilidad, el interés material individual como palanca, etcétera), se puede llegar a un callejón sin salida. Y se arriba allí tras de recorrer una larga distancia en la que los caminos se entrecruzan muchas veces y donde es difícil percibir el momento en que se equivocó la ruta. Entre tanto, la base económica adaptada ha hecho su trabajo de zapa sobre el desarrollo de la conciencia. Para construir el comunismo, simultáneamente con la base material hay que hacer al hombre nuevo.
De allí que sea tan importante elegir correctamente el instrumento de movilización de las masas. Este instrumento debe ser de índole moral, fundamentalmente, sin olvidar una correcta utilización del estímulo material, sobre todo de naturaleza social.
Como ya dije, en momentos de peligro extremo es fácil potenciar los estímulos morales; para mantener su vigencia, es necesario el desarrollo de una conciencia en la que los valores adquieran categorías nuevas. La sociedad en su conjunto debe convertirse en una gigantesca escuela.
Las grandes líneas del fenómeno son similares al proceso de formación de la conciencia capitalista en su primera época. El capitalismo recurre a la fuerza, pero, además, educa a la gente en el sistema. La propaganda directa se realiza por los encargados de explicar la ineluctabilidad de un régimen de clase, ya sea de origen divino o por imposición de la naturaleza como ente mecánico. Esto aplaca a las masas que se ven oprimidas por un mal contra el cual no es posible la lucha.
A continuación viene la esperanza, y en esto se diferencia de los anteriores regímenes de casta que no daban salida posible.
Para algunos continuará vigente todavía la fórmula de casta: el premio a los obedientes consiste en el arribo, después de la muerte, a otros mundos maravillosos donde los buenos son los premiados, con lo que se sigue la vieja tradición. Para otros, la innovación; la separación en clases es fatal, pero los individuos pueden salir de aquella a que pertenecen mediante el trabajo, la iniciativa, etcétera. Este proceso, y el de autoeducación para el triunfo, deben ser profundamente hipócritas: es la demostración interesada de que una mentira es verdad.
En nuestro caso, la educación directa adquiere una importancia mucho mayor. La explicación es convincente porque es verdadera; no precisa de subterfugios. Se ejerce a través del aparato educativo del Estado en función de la cultura general, técnica e ideológica, por medio de organismos tales como el Ministerio de Educación y el aparto de divulgación del partido. La educación prende en las masas y la nueva actitud preconizada tiende a convertirse en hábito; la masa la va haciendo suya y presiona a quienes no se han educado todavía. Esta es la forma indirecta de educar a las masas, tan poderosa como aquella otra.
Pero el proceso es consciente; el individuo recibe continuamente el impacto del nuevo poder social y percibe que no está completamente adecuado a él. Bajo el influjo de la presión que supone la educación indirecta, trata de acomodarse a una situación que siente justa y cuya propia falta de desarrollo le ha impedido hacerlo hasta ahora. Se autoeduca.
En este período de construcción del socialismo podemos ver el hombre nuevo que va naciendo. Su imagen no está todavía acabada; no podría estarlo nunca ya que el proceso marcha paralelo al desarrollo de formas económicas nuevas. Descontando aquellos cuya falta de educación los hace tender al camino solitario, a la autosatisfacción de sus ambiciones, los hay que aun dentro de este nuevo panorama de marcha conjunta, tienen tendencia a caminar aislados de la masa que acompañan. Lo importante es que los hombres van adquiriendo cada día más conciencia de la necesidad de su incorporación a la sociedad y, al mismo tiempo, de su importancia como motores de la misma.
Ya no marchan completamente solos, por veredas extraviadas, hacia lejanos anhelos. Siguen a su vanguardia, constituida por el partido, por los obreros de avanzada, por los hombres de avanzada que caminan ligados a las masas y en estrecha comunión con ellas. Las vanguardias tienen su vista puesta en el futuro y en su recompensa, pero esta no se vislumbra como algo individual; el premio es la nueva sociedad donde los hombres tendrán características distintas: la sociedad del hombre comunista.
El camino es largo y lleno de dificultades. A veces, por extraviar la ruta, hay que retroceder; otras, por caminar demasiado aprisa, nos separamos de las masas; en ocasiones por hacerlo lentamente, sentimos el aliento cercano de los que nos pisan los talones. En nuestra ambición de revolucionarios, tratamos de caminar tan aprisa como sea posible, abriendo caminos, pero sabemos que tenemos que nutrirnos de la masa y que ésta solo podrá avanzar más rápido si la alentamos con nuestro ejemplo.
A pesar de la importancia dada a los estímulos morales, el hecho de que exista la división en dos grupos principales (excluyendo, claro está, a la fracción minoritaria de los que no participan, por una razón u otra en la construcción del socialismo), indica la relativa falta de desarrollo de la conciencia social. El grupo de vanguardia es ideológicamente más avanzado que la masa; esta conoce los valores nuevos, pero insuficientemente. Mientras en los primeros se produce un cambio cualitativo que le permite ir al sacrificio en su función de avanzada, los segundos sólo ven a medias y deben ser sometidos a estímulos y presiones de cierta intensidad; es la dictadura del proletariado ejerciéndose no sólo sobre la clase derrotada, sino también individualmente, sobre la clase vencedora.
Todo esto entraña, para su éxito total, la necesidad de una serie de mecanismos, las instituciones revolucionarias. En la imagen de las multitudes marchando hacia el futuro, encaja el concepto de institucionalización como el de un conjunto armónico de canales, escalones, represas, aparatos bien aceitados que permitan esa marcha, que permitan la selección natural de los destinados a caminar en la vanguardia y que adjudiquen el premio y el castigo a los que cumplen o atenten contra la sociedad en construcción.
Esta institucionalidad de la Revolución todavía no se ha logrado. Buscamos algo nuevo que permita la perfecta identificación entre el Gobierno y la comunidad en su conjunto, ajustada a las condiciones peculiares de la construcción del socialismo y huyendo al máximo de los lugares comunes de la democracia burguesa, trasplantados a la sociedad en formación (como las cámaras legislativas, por ejemplo). Se han hecho algunas experiencias dedicadas a crear paulatinamente la institucionalización de la Revolución, pero sin demasiada prisa. El freno mayor que hemos tenido ha sido el miedo a que cualquier aspecto formal nos separe de las masas y del individuo, nos haga perder de vista la última y más importante ambición revolucionaria que es ver al hombre liberado de su enajenación.
No obstante la carencia de instituciones, lo que debe superarse gradualmente, ahora las masas hacen la historia como el conjunto consciente de individuos que luchan por una misma causa. El hombre, en el socialismo, a pesar de su aparente estandarización, es más completo; a pesar de la falta del mecanismo perfecto para ello, su posibilidad de expresarse y hacerse sentir en el aparato social es infinitamente mayor.
Todavía es preciso acentuar su participación consciente, individual y colectiva, en todos los mecanismos de dirección y de producción y ligarla a la idea de la necesidad de la educación técnica e ideológica, de manera que sienta cómo estos procesos son estrechamente interdependientes y sus avances son paralelos. Así logrará la total consciencia de su ser social, lo que equivale a su realización plena como criatura humana, rotas todas las cadenas de la enajenación.
Esto se traducirá concretamente en la reapropiación de su naturaleza a través del trabajo liberado y la expresión de su propia condición humana a través de la cultura y el arte.
Para que se desarrolle en la primera, el trabajo debe adquirir una condición nueva; la mercancía-hombre cesa de existir y se instala un sistema que otorga una cuota por el cumplimiento del deber social. Los medios de producción pertenecen a la sociedad y la máquina es sólo la trinchera donde se cumple el deber. El hombre comienza a liberar su pensamiento del hecho enojoso que suponía la necesidad de satisfacer sus necesidades animales mediante el trabajo. Empieza a verse retratado en su obra y a comprender su magnitud humana a través del objeto creado, del trabajo realizado. Esto ya no entraña dejar una parte de su ser en forma de fuerza de trabajo vendida, que no le pertenece más, sino que significa una emanación de sí mismo, un aporte a la vida común en que se refleja; el cumplimiento de su deber social.
Hacemos todo lo posible por darle al trabajo esta nueva categoría de deber social y unirlo al desarrollo de la técnica, por un lado, lo que dará condiciones para una mayor libertad, y al trabajo voluntario por otro, basados en la apreciación marxista de que el hombre realmente alcanza su plena condición humana cuando produce sin la compulsión de la necesidad física de venderse como mercancía.
Claro que todavía hay aspectos coactivos en el trabajo, aún cuando sea necesario; el hombre no ha transformado toda la coerción que lo rodea en reflejo condicionado de naturaleza social y todavía produce, en muchos casos, bajo la presión del medio (compulsión moral, la llama Fidel). Todavía le falta el lograr la completa recreación espiritual ante su propia obra, sin la presión directa del medio social, pero ligado a él por los nuevos hábitos. Esto será el comunismo.
El cambio no se produce automáticamente en la conciencia, como no se produce tampoco en la economía. Las variaciones son lentas y no son rítmicas; hay períodos de aceleración, otros pausados e incluso, de retroceso.
Debemos considerar, además como apuntáramos antes, que no estamos frente al período de transición puro, tal como lo viera Marx en la Crítica del Programa de Gotha, sino de una nueva fase no prevista por él; primer período de transición del comunismo o de la construcción del socialismo. Este transcurre en medio de violentas luchas de clase y con elementos de capitalismo en su seno que oscurecen la comprensión cabal de su esencia.
Si a esto de agrega el escolasticismo que ha frenado el desarrollo de la filosofía marxista e impedido el tratamiento sistemático del período, cuya economía política no se ha desarrollado, debemos convenir en que todavía estamos en pañales y es preciso dedicarse a investigar todas las características primordiales del mismo antes de elaborar una teoría económica y política de mayor alcance.
La teoría que resulte dará indefectiblemente preeminencia a los dos pilares de la construcción: la formación del hombre nuevo y el desarrollo de la técnica. En ambos aspectos nos falta mucho por hacer, pero es menos excusable el atraso en cuanto a la concepción de la técnica como base fundamental, ya que aquí no se trata de avanzar a ciegas sino de seguir durante un buen tramo el camino abierto por los países más adelantados del mundo. Por ello Fidel machaca con tanta insistencia sobre la necesidad de la formación tecnológica y científica de todo nuestro pueblo y más aún, de su vanguardia.
En el campo de las ideas que conducen a actividades no productivas, es más fácil ver la división entre la necesidad material y espiritual. Desde hace mucho tiempo el hombre trata de liberarse de la enajenación mediante la cultura y el arte. Muere diariamente las ocho y más horas en que actúa como mercancía para resucitar en su creación espiritual. Pero este remedio porta los gérmenes de la misma enfermedad.: es un ser solitario el que busca comunión con la naturaleza. Defiende su individualidad oprimida por el medio y reacciona ante las ideas estéticas como un ser único cuya aspiración es permanecer inmaculado.
Se trata sólo de un intento de fuga. La ley del valor no es ya un mero reflejo de las relaciones de producción; los capitalistas monopolistas la rodean de un complicado andamiaje que la convierte en una sierva dócil, aún cuando los métodos que emplean sean puramente empíricos. La superestructura impone un tipo de arte en el cual hay que educar a los artistas. Los rebeldes son dominados por la maquinaria y sólo los talentos excepcionales podrán crear su propia obra. Los restantes devienen asalariados vergonzantes o son triturados.
Se inventa la investigación artística a la que se da como definitoria de la libertad, pero esta «investigación» tiene sus límites imperceptibles hasta el momento de chocar con ellos, vale decir, de plantearse los reales problemas del hombre y su enajenación. La angustia sin sentido o el pasatiempo vulgar constituyen válvulas cómodas a la inquietud humana; se combate la idea de hacer del arte un arma de denuncia.
Si se respetan las leyes del juego se consiguen todos los honores; los que podría tener un mono al inventar piruetas. La condición es no tratar de escapar de la jaula invisible.
Cuando la Revolución tomó el poder se produjo el éxodo de los domesticados totales; los demás, revolucionarios o no, vieron un camino nuevo. La investigación artística cobró nuevo impulso. Sin embargo, las rutas estaban más o menos trazadas y el sentido del concepto fuga se escondió tras la palabra libertad. En los propios revolucionarios se mantuvo muchas veces esta actitud, reflejo del idealismo burgués en la conciencia.
En países que pasaron por un proceso similar se pretendió combatir estas tendencias con un dogmatismo exagerado. La cultura general se convirtió casi en un tabú y se proclamó el summum de la aspiración cultural, una representación formalmente exacta de la naturaleza, convirtiéndose ésta, luego, en una representación mecánica de la realidad social que se quería hacer ver; la sociedad ideal, casi sin conflictos ni contradicciones, que se buscaba crear.
El socialismo es joven y tiene errores.
Los revolucionarios carecemos, muchas veces, de los conocimientos y la audacia intelectual necesarias para encarar la tarea del desarrollo de un hombre nuevo por métodos distintos a los convencionales y los métodos convencionales sufren de la influencia de la sociedad que los creó. (Otra vez se plantea el tema de la relación entre forma y contenido.) La desorientación es grande y los problemas de la construcción material nos absorben. No hay artistas de gran autoridad que, a su vez, tengan gran autoridad revolucionaria. Los hombres del Partido deben tomar esa tarea entre las manos y buscar el logro del objetivo principal: educar al pueblo.
Se busca entonces la simplificación, lo que entiende todo el mundo, que es lo que entienden los funcionarios. Se anula la auténtica investigación artística y se reduce al problema de la cultura general a una apropiación del presente socialista y del pasado muerto (por tanto, no peligroso). Así nace el realismo socialista sobre las bases del arte del siglo pasado.
Pero el arte realista del siglo XIX, también es de clase, más puramente capitalista, quizás, que este arte decadente del siglo XX, donde se transparenta la angustia del hombre enajenado. El capitalismo en cultura ha dado todo de sí y no queda de él sino el anuncio de un cadáver maloliente en arte, su decadencia de hoy. Pero, ¿por qué pretender buscar en las formas congeladas del realismo socialista la única receta válida? No se puede oponer al realismo socialista «la libertad», porque ésta no existe todavía, no existirá hasta el completo desarrollo de la sociedad nueva; pero no se pretenda condenar a todas la formas de arte posteriores a la primer mitad del siglo XIX desde el trono pontificio del realismo a ultranza, pues se caería en un error proudhoniano de retorno al pasado, poniéndole camisa de fuerza a la expresión artística del hombre que nace y se construye hoy.
Falta el desarrollo de un mecanismo ideológico cultural que permita la investigación y desbroce la mala hierba, tan fácilmente multiplicable en el terreno abonado de la subvención estatal.
En nuestro país, el error del mecanicismo realista no se ha dado, pero sí otro signo de contrario. Y ha sido por no comprender la necesidad de la creación del hombre nuevo, que no sea el que represente las ideas del siglo XIX, pero tampoco las de nuestro siglo decadente y morboso. El hombre del siglo XXI es el que debemos crear, aunque todavía es una aspiración subjetiva y no sistematizada. Precisamente éste es uno de los puntos fundamentales de nuestro estudio y de nuestro trabajo y en la medida en que logremos éxitos concretos sobre una base teórica o, viceversa, extraigamos conclusiones teóricas de carácter amplio sobre la base de nuestra investigación concreta, habremos hecho un aporte valioso al marxismo-leninismo, a la causa de la humanidad. La reacción contra el hombre del siglo XIX nos ha traído la reincidencia en el decadentismo del siglo XX; no es un error demasiado grave, pero debemos superarlo, so pena de abrir un ancho cauce al revisionismo.
Las grandes multitudes se van desarrollando, las nuevas ideas van alcanzando adecuado ímpetu en el seno de la sociedad, las posibilidades materiales de desarrollo integral de absolutamente todos sus miembros, hacen mucho más fructífera la labor. El presente es de lucha, el futuro es nuestro.
Resumiendo, la culpabilidad de muchos de nuestros intelectuales y artistas reside en su pecado original; no son auténticamente revolucionarios. Podemos intentar injertar el olmo para que dé peras, pero simultáneamente hay que sembrar perales. Las nuevas generaciones vendrán libres del pecado original. Las posibilidades de que surjan artistas excepcionales serán tanto mayores cuanto más se haya ensanchado el campo de la cultura y la posibilidad de expresión. Nuestra tarea consiste en impedir que la generación actual, dislocada por sus conflictos, se pervierta y pervierta a las nuevas. No debemos crear asalariados dóciles al pensamiento oficial ni «becarios» que vivan al amparo del presupuesto, ejerciendo una libertad entre comillas. Ya vendrán los revolucionarios que entonen el canto del hombre nuevo con la auténtica voz del pueblo. Es un proceso que requiere tiempo.
En nuestra sociedad, juegan un papel la juventud y el Partido.
Particularmente importante es la primera, por ser la arcilla maleable con que se puede construir al hombre nuevo sin ninguna de las taras anteriores.
Ella recibe un trato acorde con nuestras ambiciones. Su educación es cada vez más completa y no olvidamos su integración al trabajo desde los primeros instantes. Nuestros becarios hacen trabajo físico en sus vacaciones o simultáneamente con el estudio. El trabajo es un premio en ciertos casos, un instrumento de educación, en otros, jamás un castigo. Una nueva generación nace.
El Partido es una organización de vanguardia. Los mejores trabajadores son propuestos por sus compañeros para integrarlo. Este es minoritario pero de gran autoridad por la calidad de sus cuadros. Nuestra aspiración es que el Partido sea de masas, pero cuando las masas hayan alcanzado el nivel de desarrollo de la vanguardia, es decir, cuando estén educados para el comunismo. Y a esa educación va encaminado el trabajo. El Partido es el ejemplo vivo; sus cuadros deben dictar cátedras de laboriosidad y sacrificio, deben llevar, con su acción, a las masas, al fin de la tarea revolucionaria, lo que entraña años de duro bregar contra las dificultades de la construcción, los enemigos de clase, las lacras del pasado, el imperialismo…
Quisiera explicar ahora el papel que juega la personalidad, el hombre como individuo de las masas que hacen la historia. Es nuestra experiencia no una receta.
Fidel dio a la Revolución el impulso en los primeros años, la dirección, la tónica siempre, peros hay un buen grupo de revolucionarios que se desarrollan en el mismo sentido que el dirigente máximo y una gran masa que sigue a sus dirigente porque les tiene fe; y les tiene fe, porque ellos han sabido interpretar sus anhelos.
No se trata de cuántos kilogramos de carne se come o de cuántas veces por año se pueda ir alguien a pasearse en la playa, ni de cuántas bellezas que vienen del exterior puedan comprarse con los salarios actuales. Se trata, precisamente, de que el individuo se sienta más pleno, con mucha más riqueza interior y con mucha más responsabilidad. El individuo de nuestro país sabe que la época gloriosa que le toca vivir es de sacrificio; conoce el sacrificio. Los primeros lo conocieron en la Sierra Maestra y dondequiera que se luchó; después lo hemos conocido en toda Cuba. Cuba es la vanguardia de América y debe hacer sacrificios porque ocupa el lugar de avanzada, porque indica a las masas de América Latina el camino de la libertad plena.
Dentro del país, los dirigentes tienen que cumplir su papel de vanguardia; y, hay que decirlo con toda sinceridad, en una revolución verdadera a la que se le da todo, de la cual no se espera ninguna retribución material, la tarea del revolucionario de vanguardia es a la vez magnífica y angustiosa.
Déjeme decirle, a riesgo de parecer ridículo, que el revolucionario verdadero está guiado por grandes sentimientos de amor. Es imposible pensar en un revolucionario auténtico sin esta cualidad. Quizás sea uno de los grandes dramas del dirigente; éste debe unir a un espíritu apasionado una mente fría y tomar decisiones dolorosas son que se contraiga un músculo. Nuestros revolucionarios de vanguardia tienen que idealizar ese amor a los pueblos, a las causas más sagradas y hacerlo único, indivisible. No pueden descender con su pequeña dosis de cariño cotidiano hacia los lugares donde el hombre común lo ejercita.
Los dirigentes de la Revolución tienen hijos que en sus primeros balbuceos, no aprenden a nombrar al padre; mujeres que deben ser parte del sacrificio general de su vida para llevar la Revolución a su destino; el marco de los amigos responde estrictamente al marco de los compañeros de Revolución. No hay vida fuera de ella.
En esas condiciones, hay que tener una gran dosis de humanidad, una gran dosis de sentido de la justicia y de la verdad para no caer en extremos dogmáticos, en escolasticismos fríos, en aislamiento de las masas. Todos los días hay que luchar porque ese amor a la humanidad viviente se transforme en hechos concretos, en actos que sirvan de ejemplo, de movilización.
El revolucionario, motor ideológico de la revolución dentro de su partido, se consume en esa actividad ininterrumpida que no tiene más fin que la muerte, a menos que la construcción se logre en escala mundial. Si su afán de revolucionario se embota cuando las tareas más apremiantes se ven realizadas a escala loca y se olvida el internacionalismo proletario, la revolución que dirige deja de ser una fuerza impulsora y se sume en una cómoda modorra, aprovechada por nuestros enemigos irreconciliables, el imperialismo, que gana terreno. El internacionalismo proletario es un deber pero también es una necesidad revolucionaria. Así educamos a nuestro pueblo.
Claro que hay peligros presentes en las actuales circunstancias. No sólo el del dogmatismo, no sólo el de congelar las relaciones con las masas en medio de la gran tarea; también existe el peligro de las debilidades en que se puede caer. Si un hombre piensa que, para dedicar su vida entera a la revolución, no puede distraer su mente por la preocupación de que a un hijo le falte determinado producto, que los zapatos de los niños estén rotos, que su familia carezca de determinado bien necesario, bajo este razonamiento deja infiltrarse los gérmenes de la futura corrupción.
En nuestro caso, hemos mantenido que nuestros hijos deben tener y carecer de lo que tienen y de lo que carecen los hijos del hombre común; y nuestra familia debe comprenderlo y luchar por ello. La revolución se hace a través del hombre, pero el hombre tiene que forjar día a día su espíritu revolucionario.
Así vamos marchando. A la cabeza de la inmensa columna —no nos avergüenza ni nos intimida decirlo— va Fidel, después, los mejores cuadros del Partido, e inmediatamente, tan cerca que se siente su enorme fuerza, va el pueblo en su conjunto sólida armazón de individualidades que caminan hacia un fin común; individuos que han alcanzado la conciencia de lo que es necesario hacer; hombres que luchan por salir del reino de la necesidad y entrar al de la libertad.
Esa inmensa muchedumbre se ordena; su orden responde a la conciencia de la necesidad del mismo ya no es fuerza dispersa, divisible en miles de fracciones disparadas al espacio como fragmentos de granada, tratando de alcanzar por cualquier medio, en lucha reñida con sus iguales, una posición, algo que permita apoyo frente al futuro incierto.
Sabemos que hay sacrificios delante nuestro y que debemos pagar un precio por el hecho heroico de constituir una vanguardia como nación. Nosotros, dirigentes, sabemos que tenemos que pagar un precio por tener derecho a decir que estamos a la cabeza del pueblo que está a la cabeza de América.
Todos y cada uno de nosotros paga puntualmente su cuota de sacrificio, conscientes de recibir el premio en la satisfacción del deber cumplido, conscientes de avanzar con todos hacia el hombre nuevo que se vislumbra en el horizonte.
Permítame intentar unas conclusiones:
Nosotros, socialistas, somos más libres porque somos más plenos; somos más plenos por ser más libres.
El esqueleto de nuestra libertad completa está formado, falta la sustancia proteica y el ropaje; los crearemos.
Nuestra libertad y su sostén cotidiano tienen color de sangre y están henchidos de sacrificio.
Nuestro sacrificio es consciente; cuota para pagar la libertad que construimos.
El camino es largo y desconocido en parte; conocemos nuestras limitaciones. Haremos el hombre del siglo XXI: nosotros mismos.
Nos forjaremos en la acción cotidiana, creando un hombre nuevo con una nueva técnica.
La personalidad juega el papel de movilización y dirección en cuanto que encarna las más altas virtudes y aspiraciones del pueblo y no se separa de la ruta.
Quien abre el camino es el grupo de vanguardia, los mejores entre los buenos, el Partido.
La arcilla fundamental de nuestra obra es la juventud, en ella depositamos nuestra esperanza y la preparamos para tomar de nuestras manos la bandera.
Si esta carta balbuceante aclara algo, ha cumplido el objetivo con que la mando.
Reciba nuestro saludo ritual, como un apretón de manos o un «Ave María Purísima.»
Patria o muerte.
Para reproducir citar la fuente Pensamiento Discepoleano
Arriba
INOLVIDABLE ENTREVISTA DE RODOLFO BRACELI A LEONARDO FAVIO
En el 2007 en el suplemento ADN de cultura del diario La Nación, Rodolfo Braceli entrevistó a Leonardo Favio, como nadie lo hizo. Un profundo diálogo entre dos mendocinos, nacidos en Lujan, que vale la pena recordar para volver a leer ahora que nuestro admirado y querido Leonardo no está entre nosotros.
El director de Nazareno Cruz y el lobo se encuentra en pleno proceso de escritura de un guón y trabaja en la nueva versión de El romance de Aniceto y la Francisca. En este diálogo revela aspectos íntimos de su vida y, con cruda sinceridad , habla de los años difíciles de la infania y la adolecencia, la relación con sus padres, los personajes y las anécdotas de la cárcel, la afanosa búsqueda de una espiritualidad satisfactoria, el sexo, las mujeres, el peronismo y la muerte
Aquel río nunca trae agua. Salvo cuando trae agua. Entonces es como un latigazo de mar que viene a morderle la espalda al verano. No es literatura, el verano lo sabe. Haber nacido, él y yo, tan cerca de ese río, en el Luján de Cuyo, hace que esto no sea ni entrevista, ni reportaje, ni nada semejante. Adiós al venerado distanciamiento. Con Leonardo somos amigos porque aprendimos a respirar en el mismo sitio, nos crió el mismo aire, vadeamos la misma tos convulsa que se curaba, justamente, con bocanadas de ese río que nunca trae agua.
Vamos, alumbraremos los misterios más menudos del vivir. Sr. Favio, ¿en qué consiste?
Ahí está, siempre con su silueta de peso wélter. El bastón compensa su cadera afligida. Su matrimonio con Carola anda por las cuatro décadas, pero él vive solo, en un pequeño departamento de la calle Pasteur. Solo y acompañadísimo: el living contiene su mesa de trabajo y en las paredes abundan fotos de seres muy queridos, lejanos. Fotos con pulso, ellas regirán el azar de esta conversación.
- Mirame en esa, yo con tiradores. Tendría 16. ¿Te acordás del dique Cipolleti de Luján? Ahí estoy, con el Negro Cacerola, el Cacho Tamis y Bordón, el que me prestaba la bicicleta. Son lo más dulce que tuve en mi vida. Cómo los amo.
- Qué presente el Cacerola.
- Siempre me acompañan en los insomnios. Me voy a ellos porque me ponen contento. Nunca pude despegar. Ni quise Fijate en esa otra foto: cinco caritas mías, a los 4 años, con jopito Alcanzame la de al lado. No, esa no, la del marco plateado ¿Ves? Ese soy yo. Acordate, cuando pibito yo estuve en el Hogar El Alba, porque mi vieja vino un par de años a Buenos Aires. Un día nos llevaron para la filmación de Cuando en el cielo pasen lista, con Narciso Ibáñez Menta. En el final, un montón de pibitos cantábamos. Pasaron los años y ubiqué la película y saqué esta fotito. Se ve que alguien me indicó que me pusiera triste, y yo puse esos ojos Es mundial. Adoro ese instante.
- Decime, ¿esa que está ahí es tu abuela vasca navarra?
- Mi sabia abuela navarra, Pilar Garcés, hablaba con dichos: "Mientras más te agachas, más se te ve el culo". Ahora me acuerdo: a mi abuelita la frecuentaba la comadre Felisa, altísima y con marido cortito. Mi abuelo, un hijo de puta, cuando Felisa se lo presentó, le preguntó: "¿Y su otra mitad?" El criollo no le habló nunca más. Venía con la Felisa y se sentaba a tomar mate. Enculado, por años, solo decía "Buenas". Mi abuelo, Ibrahim Olivera Riquelme. Dios mío con el viejo.
- Esa foto, ¿la del casorio de tus viejos?
- ¿Viste qué bonitos mi mamá y mi papá? Yo era muy pequeñito cuando se separaron y por eso fui al Patronato de Menores. Mi papá tenía 16 cuando llegó de Siria y fue a Tupungato. Intentaron que trabajara en una tiendita pero era muy atorrante. Murió a los 33. Una úlcera perforada, lo operaron, sintió sed y se tomó el agua de un florerito. Adiós. Una vez fui a su casa y estaba con cafishios . Era fiolo mi viejo, vivía con tres mujeres. Yo no me daba cuenta de nada. Y si huyó con tres minas, feliz de él. Qué querés que te diga, amo la poligamia
- Flor de facha tenía.
- Belleza de tipo, yo me quedaba mirándolo, hablaba con acento árabe, los fiolos le decían ¡El Maharajá!... Yo de chiquito me piantaba del Patronato y caía en cana por huevadas, raterío. Je, Rodolfo, vos tuviste la suerte de nunca caer en cana. O la desdicha.
- No pierdo la esperanza.
- Te dibujo la cárcel. Suponete, este es el patio. Acá hay un cuarto con rejas, para varones, y enfrente, otro para prostitutas y todo eso. En el medio, lindo patio... Cuando caí ahí yo tenía 14, y a los pendejitos nos ponían con las minas. Era lindo, hacíamos ranchadas, mate cocido Una vez ingresó un fiolo , era gitano y jugaba al truco con mi papá. Entra y le cuentan: "Che, ¿sabés quién está? ¡El hijo del Maharajá!" Me dicen: "Turquito, asomate a la reja". Y el fiolo grita: "Miralo, es el hijo del Maharajá de Capustala!" Cuando me largaron me dio algo de guita.
- ¿Alguna frase de tu viejo te sigue sonando?
- Ninguna. Nebulosa. Ya grande, fui a buscar su tumba en el cementerio de Las Heras. Pregunté por Jorge Jury Atrach. ...l era Atrach, cuando llegó a la Argentina se puso Jury... Bueno, un cuidador me dijo: "No, m hijo, después de cinco años van al foso común, olvidate". El único pariente en el entierro fue mi abuelo. Hasta dijo un discurso: "Fue un sinvergüenza, pero lindo y bueno". Qué otra cosa pudo haber dicho de mi papá. Siempre uno es lindo a los 33.
-A tus 32, asegurabas que te morías a los 33.
- La edad de Cristo, de mi viejo, de Evita. Yo estaba convencido. Y con lo del tórax casi me voy a la mierda. ¿Querés que te diga la verdad, loco? La muerte me tiene sin cuidado.
- No te creo.
- Te lo juro. La veo como una hermana que ya va a venir Solo le temo a la humillación de la decrepitud. No pido ni un minuto más ni un minuto menos, que venga. Me creerías si me hubieras visto asistir a mis cirugías, inclusive a mi enfermedad. Eso sí, con dignidad quiero irme.
- Omitiendo féretro y soldadura y zaranda.
- Sí, sí, nada de eso. Hablé con mi abogado para evitar el manoseo. Tengo algo de musulmán: todo rapidito y chau y que se dejen de joder con coronas y aplausos. Respeto para mi cuerpo. Ternura quiero. Bah, no sé por qué hablamos de esto.
- Somos argentinos, Chiquito. Nos deleita el tema... Hubo otro tiempo en que me jurabas: "De los 40 no paso". Me hacés acordar a Indra Devi. Me recalcó que estaba escrito que iba a morir a los 98. Cumplió 100, la volví a entrevistar y ahí me dijo muerta, pero de risa: "No soy mujer de palabra".
- Yo también soy falluto Me han puesto anestesia total, y no hay nada más parecido a la muerte. Imaginate, te serruchan los huesos, te abren las tripas y cuando te despertás decís ¿a qué hora me operan? No te enterás de nada. Eso es la muerte.
- También tuviste una época fascinado con una religión hindú en la que a los 71 dejás de comer. Solo agua, agua, adiós y al paraíso sin aplausos y sin peaje. A casi dos años de tus 71, ¿qué me contursi?
- Nooo, ya nada que ver. Uno se tiene que ir cuando Dios lo ordena, si no, es un insulto. Loco, meta preguntarme, ¿y vos qué?
- Leonardo, yo vivo puteando. Por la muerte, por el tiempo. Y porque nos afanan, ¿te fijaste?, los años últimamente duran cinco meses. Desesperante.
- Así vas a perder, eh. En esto no hay trinchera. Tenés que hacer todo lo que puedas mientras tengas aliento. Yo en este cuartucho ¡tengo un mundo fabuloso! Música, libros, fotitos. Encerradito miro y leo y vuelo. Para mí viajar es una pérdida. Yo no quiero salir, la paso bárbaro conmigo. Siempre estás solo, me dicen. No, boludo, estoy conmigo.
- Te fuiste con la mirada a esa foto de adolescente. Y apretás el ceño.
- Será que me devuelve ciertos miedos.
- Siguen tus pesadillas de hace años.
- Recurrentes. Tengo metido en los huesos el miedo a que me humille la pobreza. Sueño con eso. Que me quedo sin plata y estoy lejos.. Que vuelvo a mi casa y no puedo entrar porque la vendieron... Sueño con mi mamá, vamos a comprar ropa y no tenemos ni para volver. ¡Angustiante, loco!... Subo a un tren, soy un pibe de 20, no tengo para el boleto y me hago el simpático para que no me agredan... Esto soñé anoche. Será porque estuve haciendo perfiles de un guión...
- ¿De qué guión?
- No, nada Yo siempre tuve un gran pudor para tener miedo. Obviamente que lo he tenido; sería un pelotudo si no. Pero en ciertos casos el miedo se vuelve humillante, entonces te hacés el simpático. En la realidad y en las pesadillas me pasa eso, hermanito. Trato de escapar, las piernas no me responden, cámara lenta, ah ah ah, querés ir más rápido y no podés, huevón. Lo peor, no sabés de qué mierda te escapás.
- Otro viejo miedo tuyo era ser abandonado.
- Un miedo real. Me dicen: "Che, qué minas has tenido " Ay, si supieran uno se dice: Esta hoy me quiere, pero se me va en cualquier momento Bueno, eso era hace años, ahora ya no. Sabés, se debería tener una llavecita cuando se es joven. Que te apague los deseos.
- Uno es deseo dependiente.
- Eso. Allá por mis 20, yo sufría mucho cogiendo. Al contrario de mucha gente, a mí me quedaba un vacío. Terminaba de haber volcado todo un mundo de pasión, de haberme metido en el cuerpo y en el cerebro de otro ser y me daba un baño y me iba a caminar. Ahhh, qué sensación de fracaso, de haber dado todo sin devolución.
- ¿Existirá la llavecita para cortar el deseo?
- Ya no la necesito. Aquello que me pasaba con el sexo era casi una enfermedad. Me gusta mirar como ahora, en la filmación ¡más bellas que esas pibas no puede haber!... Y las veo como cosas bellas de la naturaleza que hizo Dios. Ya no siento aquel fuego que me mataba acá y que por ahí me llevaba a ser una mierda de ser humano. Estoy liberado. Puta, si esto lo hubiera podido sentir de pendejo Claro, yo pretendía ser Buda.
- Buda y ladrón de gallinas. Buda con hormigas en el cuerpo. Difícil.
- Loco, te digo que no fui feliz en esa etapa. Quería otra cosa que nunca supe explicar. Quería coger, coger a toda hora y después ¡quedaba hecho pelota! Y a fumar en las plazas... Estaba tristísimo y no me daba cuenta.
- El sexo te vaciaba el alma. Pero fijate, Leonardo, en esa foto, niño, se te ve feliz.
- ¿Un pibe feliz yo? ¡La poronga!
- No jodás, lo afirmaste muchas veces. Y sacando pecho.
- Me la inventé. Cuando corrés todo el tiempo, escapando, no estás feliz. Yo llegaba a mi casa y veía las carencias de afecto, sentía envidia por los pibes que tenían hogar... Sabés bien lo que es una casa con una mesa tendida. Yo quería esa casa: el pan ahí, el viejo acá, la vieja allá, los tallarines. Vos me entendés, sos poeta. Decímelo.
- La casa, la comida haciéndose, la emoción de la albahaca, la ristra de ajo, la mesa arriba de la espalda del mundo.
- Lo que dicen los Evangelios: dulce es el sueño del obrero coma mucho o coma poco.
- Tu amistad con Dios, ¿cómo anda?
- Eso nunca varió. ¿Y vos?
- Viene complicado. A veces lo escribo con minúscula, a veces con mayúscula, a veces, desesperado, con acento: Diós.
- Quien lo quiera buscar por el lado de la razón la va a perder. Clavado. No hay trinchera para eso. Te tenés que entregar, si no, es una locura. Imaginate lo más chiquitito, un átomo del culo de una lombriz. ¿Puede ese átomo querer entender dónde está habitando?
- Hace diez años me decías que el hombre crea a Dios y Dios termina creando al hombre.
- Era un poemita, una cabriola a pedido del público. Y me arrepiento. Decía: "Loado sea Dios que venido del sueño de algún hombre vino de sus sueños a crearlo" Había que ser original. Verónica, mi asistente, me suele decir: "Ah, pero usted es un Borocotó de las religiones: un día, musulmán; otro, cristiano; otro, judío, ¿qué carajo es usted?" Digamos que vivo la confusión de en qué oficina me voy a inscribir. Pero Dios siempre es el mismo.
- Indudablemente, no dudás.
- Cuando tuve dudas fue para hacer pinta. Pero nunca dudé de Dios. Ahora lo localicé más. O sea: trato de no localizarlo, porque es al pedo. Dejá, loco, que El sabe lo que hace.
- ¿Te parece?
- Todo. Todo bien hecho está.
- ¿Y cómo explicamos vidas enteras que no conocen otra cosa que hambre y sufrimiento?
- Vos me estás hablando de teología. Eso es un invento del hombre, una pelotudez. Yo estoy hablando de Dios. ¿Me vas a salir con el Papa? Ya te digo que no necesito interlocutor. Dios no puede habitar en la catedral En todo caso, dejémoslo a quienes quieren dar normas de conducta. No es malo que te digan amaos los unos a los otros... Pero eso es pura teología, aunque, bueno, hay gente ejemplar dentro de la teología, los profetas, que intentaron sacudir al ser humano Moisés sube a un cerro porque sabe que venía una tormenta de la concha de su madre, y eso asustaba a la gente. Después baja con las tablas de la ley. Y a nadie hacía daño, por supuesto.
- ¿Cuál es el mandamiento más difícil de cumplir?
- No desearás la mujer de tu prójimo.
- ¿Ahora que el tema deseo lo tenés resuelto?
- Mirá, si hay algo difícil, casi una quimera, es imitar a Cristo. Amaos los unos a los otros, poner la otra mejilla... Cristo es un tipo admirado en todas las religiones ¿El mandamiento más difícil? A ver, estoy boludo, recordame los mandamientos.
- Si seguís por ahí te voy a preguntar cuántos son los diez mandamientos.
(Se queda en silencio. Hay dos botellas de agua sobre el escritorio y tres limones. Bebe como un recién nacido. Muy a mano, una foto de él con Perón, en Puerta de Hierro )
- Estamos en la Argentina, Leonardo. Aquí todo es posible.
- Sí.
- Se abre esa puerta y entra Evita. Ahí la tenés. ¿Qué le decís?
- Paralizado me quedo. Gracias le digo. No tengo estatura para decirle nada más. Vos porque sos un irreverente.
- Hace diez años, mientras me mostrabas fragmentos de Sinfonía de un sentimiento, hablabas de Evita enamoradísimo.
- Y sigo. Evita es la mina. Un genio. Y qué potra. Te lo repito: de Evita me gusta todo.
- Ella se fue. Entra Perón.
- Le acaricio las manos, nada más
Las manos....
- Sí, sí, las que le arrancaron para que no se siguiera hablando de la crisis.
- Justamente las manos, uno de sus fuertes.
- Los elementos de Perón son sus ejemplos y su corazón. Le quitaron lo menos importante. Podría haber manejado el mundo entero sin manos.
- Sigue aquí. ¿No le vas a preguntar nada a este hombre?
- Qué gorila que sos, ¡la concha de tu madre! Decís "a este hombre". ¡Ni por puta decís General!
- Decirle general no me parece importante.
- ¿Sabés? En esto Perón se equivocó. Y te digo porqué: lindo hubiera sido que se mantuviera como Coronel; es más heroico, más digno.
- Coronel suena a víspera. Decime: en tu vida, ¿tuviste un minuto en que tu fe en Perón sufriera aunque sea un leve apagón?
- Lo mío es certeza. Antes era fe. Me llevó muchos años profundizar eso. Leí todo. Dudé para indagar. Pero nunca dudé de Perón.
- Es curioso que pensando tan diferente nunca nos hayamos peleado cuando sale el tema.
- La ternura nos protege de nosotros.
- Veo esa foto con tus hijos ya grandes y me acuerdo de cuando nació tu Nicolás. Dijiste que entraría al tercer milenio con menos de 30 años. Que iba a vivir en un mundo ideal, porque la humanidad habría arreglado muchas cosas. Hoy, ¿qué me contás?
- Me equivoqué en que todo iba a estar solucionado, pero no en lo de un mundo mejor. Este es mundo mejor. Hay que aprender a usarlo. Antes te morías por una boludez; hoy te sentás a la computadora y tenés todo al toque.
- Pero ahora hay cuatro clases sociales, Leonardo: los clase alta, los clase media, los pobres y los desgajados.
- Eso siempre estuvo. No teníamos información. Antes había gente que se moría de hambre, y ahora también, pero al instante lo vemos.
- Y eso que llamamos "condición humana", ¿avanza aunque sea un centímetro por siglo?
- Creo que no hay más perro que la gata. Vamos a mejorar pero no porque la gente se vuelva más buena sino por sus propios intereses. Llegará el momento en que los capos del mundo dirán, ponele: "Si vos me invadís con 500 mil soldados, yo te hago volar con un bombazo". Así que dialoguemos, loco La perfidia, la soreteada siempre van a existir... Aunque por ahí el hombre evoluciona y se transforma en espíritu. Yo qué sé, si yo cuánto podré vivir, ¿diez años más? Diez, y como un regalo de la naturaleza.
- En definitiva, nos va a salvar el egoísmo.
- Por imperio de la propia mezquindad vendrá la equidad.
- La mezquindad elevada a instinto de conservación.
- Pensaremos así: Me van a chorear todo; antes de quedar en pelotas o que me maten, reparto.
- Chiquito, Perón se fue y mirá quien entró un poeta criatura, Locche.
- ¡Nicolino! Lo quiero tanto
- Nicolino. Lo largaron a los leones y no los mató y no se dejó comer, se puso a conversar con ellos. No ganaba por nocaut ni por puntos, ganaba por persuasión Aquí lo tenés.
- Le digo que nuestra Mendoza lo trató muy mal, le debe un monumento Me pongo a charlar y a comer tallarines Sos único, Nicolino, sos un hermoso.
- Por el hecho de haber nacido quien más quien menos puede resucitar
- Algunos seres debieran resucitar.
- Pero para resucitar, cada uno necesita de palabras clave. Para Lázaro, levántate y anda.
- ¿Y para Nicolino?
- ¡Tallarines y anda!
(Mate cocido para mí, té de tilo para él. Me detengo en cartelitos enmarcados en su mesa de trabajo: "No seas vulgar"... "No obedezcas al impulso"... "Pasa por alto las ofensas"...)
- Cartelitos que me apunto. En otro tiempo tenía obsesiones. Cerca de mí ni tijeras, ni nada filoso. ¡Qué tara! Eso se esfumó a partir de una desilusión: a uno no lo quiere matar nadie.
- ¿Cómo es tu rutina?
- Me acuesto a las doce de la noche, duermo hasta las dos, me tomo un tecito, leo hasta las siete, me pongo a trabajar, llega Ramona que atiende las cosas de la casa, otro desayunito, sigo trabajando, almuerzo, y ahí me apolillo una siesta de cuatro horas. En la noche no me jode nadie, estoy solito. Ah, y hago gimnasia, muchísima. Loco, yo te conté mis sueños ¿y vos con qué soñás?
- Sueño que me llevan unos tipos, policías o peor, sin uniforme, y nadie ve lo que me pasa... O que me pierdo en un país desconocido y no tengo documentos, nada... Muy seguido sueño que no me puedo dormir... Pero dejémonos de pesadillas. Antes mencionaste algo, un guión. Estás craneando otra película. Desembuchá.
- El lugar de esa película ahí lo tenés. Lo que se ve en esa foto.
- Luján de Cuyo, la calle de La Costa donde naciste, el río, el viejo puente de hierro.
- Ahí pasa todo. El mantel de hule, se va a llamar. Inclusive compré un mantel de hule. Primera vez que trabajo así: delineo un personaje y escribo aconteceres. Lindo el resultado. Toco el mantelito, imagino, el guión crece. La historia transcurre en un pueblo que puede ser nuestro Luján de los años 50... Los personajes el pibe que podría ser yo, la piba que estudiaba piano, el Negro Cacerola, una pensión en la que viven. Lejos, se supone, una plaza, farolitos, gente que pasa La cámara panea, ves el río, todo el pueblo en esa calle, el mundo entero.
- Por allí andaba nuestro viejo de la bolsa, el Canario.
- ¡De él te quería hablar! Vos decís que el viejo era español y yo charlé con él ya de grande y tenía acento alemán, loco.
- No. Era español. Mi viejo se ofreció para escribirle a su familia, pero él no quiso. Chiquito, o vos estás en pedo o yo estoy mamao.
- Te digo: tenía acento alemán.
- Catalán o algo así. Alemán no. Lo que me acuerdo clarito del Canario es que un día de pleno invierno se desnudó por completo en la vereda. Se desnudó llorando en voz alta.
- Me dejás con la espina. Otro callejero era el Pancho Brondo. Ahí lo tenés, en esa fotito.
- El Pancho era cuñado de la Pierina, la partera de Luján, la que nos tiraba de las patas.
- ¡Panchito! Todo el tiempo juntaba cartones, leña. Mis tías me habían enseñado a decirle: ¿Me vendés la leña, Pancho?
- Y él te contestaba: "La leña no. Se enoja el hombre".
- Qué felicidad. Yo con mis tías, peinadito, en una silla de totora, me vendés la leña El otro callejero era el Uva. Era muy rápido en las cosechas y yo quería sacarlo del chupi y asociarme: yo cortaba la uva, él cargaba con el tacho. ¡Fenómeno decía yo! Siempre soñando con poner un quiosquito. Pero con el Uva era inútil, no quería reformarse.
- A ver, contame tus siestas de pendejito.
- Les tenía miedo. Un día mi bisabuela me contó, para asustarme, que ella estaba lavando en la batea, y escuchó una risa de pájaro que venía de un olivo centenario. Una vecina, doña Margarita, le dijo: "Cuando sienta la risa grite ¡volvé por sal! Así sabrá quién es la maligna que la quiere embrujar!". La risa se repitió, y mi bisabuela ¡volvé por sal! Al otro día una que le tenía rabia vino a pedir sal. Eso pasaba ¡y yo no salía ni por puta!
- todo esto, ¿cuál era tu vocación?
- Ninguna vocación. Ni expectativas. ¿A qué podía aspirar yo? A tener un quiosco o entrar en la marina. Pero para eso exigían el tercer grado. Y yo fui hasta segundo. Quiero acordarme del nombre de la escuela y del de la señorita del tercero que nunca terminé. Fue divina conmigo, era un cielo.
- La Comandante Saturnino Torres. Ahí fui un par de años. Una de las maestras era la señorita Courbelo. No era linda pero estaba fuerte; fue una de las primeras que se divorció en voz alta en Luján. La vieja escuela está. Al lado construyeron la nueva.
- Ah, un día tengo que ir... Voy a ponerme a llorar como un hijo de puta ahí...
- Sin vocación ni expectativas, ¿cómo entraste en órbita?
- Acordate, mi mamá, Laura Favio, escribía radioteatro, era brillante. Y ella empezó: "Leeme esto que escribí". "No, me da vergüenza." Insistía. Al final: "Te lo leo pero atrás de la puerta". Así hasta que me llevó a su compañía. Yo tendría 17. Después me lleva a San Juan y se arma la compañía Liliana Dávila-Leonardo Jury. Largamos con La fiera acorralada, de mi mamá. Liliana era grande, tenía como 25 años; yo era muy lindo, le empecé a gustar a la gente.
- ¿Y después?
- Gira de tres meses y mi mamá me dice: "Nos vamos a Buenos Aires". Mi tía Elcira Olivera Garcés ya estaba aquí. Me dejé arrastrar. Haciendo bolos en El Mundo, me ve Raúl Rossi y entro en Todo el año es Navidad. Ahí Salvador Salías me lleva para actuar en El secuestrador, con Torre Nilsson. Antes yo había hecho un papelito en El ángel de España, de Enrique Carreras, con Pedrito Rico. Veinte veces la vi para verme. Después hice películas, canciones, y ahora estoy aquí, con vos. Todo muy rápido, un vértigo.
- Hace diez años me confesaste que hubieras preferido otra vida. No te creí.
- Hiciste bien. Me gustó lo que fui encontrando, porque era una forma de vivir livianito. Pero nunca me sentí actor. ¿Actor? Bebán, Alcón. Lo mío era de pedo y para subsistir. Siempre me dio vergüenza actuar.
- ¿Y tu sueño de terminar tus días en Tupungato? Querías vivir en una finca custodiada por un tipo con un rifle.
- Eso quería. El tipo para que bajara a cualquiera que viniera de Buenos Aires a hablar de cine. Ahora no cambio esa vida por esta, aquí, encerradito. Tengo todo. Fotitos, cositas, música de Mozart, de la Mona Giménez...
(Pausa de tres días. En el medio, una llamada telefónica de Leonardo, domingo a la noche. Hablamos de nuestros hijos, que andan por los treinta y pico. Recuerdo a Favio peleándose con Carola por adueñarse de su Nicolás. Le mordía el poto, los taloncitos, lo olía. Nos acordamos de los celos por el recién nacido. Uno de nosotros llegó al colmo de mearse en la cama. ¿Quién? Uno de nosotros. Y la charla vuelve a los mandamientos )
- Lo pensé: no hay ningún mandamiento que me inquiete. Desear la mujer de tu prójimo es algo que en el Islam está resuelto: somos humanos, no te tenés que sentir culpable.
- Ofensivo sería no desearla.
- Según cómo sobrelleves en tu conciencia un hecho, eso te pone en el regazo de Dios o lejos de Dios. Todos tenemos tentaciones. Si después sentís un dolor en el corazón muy hondo y te quedás mirando el techo, eso te hace ser un hombre bueno El hombre no es bueno ni malo, es hombre. No somos ángeles.
- Menos mal. Se me hace que los ángeles son medio huevones.
- Pertenecen al misterio. Yo no veo lo invisible pero existe. Sé que voy empujando materia a cada paso. Hay algo en que reflexiono mucho, y es que verdaderamente Dios amó, porque sin eso no habría sido posible semejante obra. Sí, Dios es un misterio, pero más misterioso es el amor. A veces pienso: ¿primero el amor y después Dios?
- ¿Por teléfono queremos dilucidarlo? Cuánta alevosía y candor.
(La conversación se reanuda otro día en el departamento de Favio. Arranco con una pregunta peliaguda.)
-Si Evita vivía, ¿qué hubiera pasado en el 55?
- Qué incómodo opinar sobre un ser que no te puede responder. Su obra está, concreta. A veces los historiadores que hacen teatro narran intimidades supuestas, por ejemplo, de Rosas ponen que tuvo un amor morboso por su hija. No podemos meternos con la intimidad de nadie.
- Le ponés límites a la ficción.
- Admito la ficción si es para beneficio de ese que ya no te puede responder. Pero si es para denostarlo, eso es carroña.
- Vos te asomaste a la intimidad de Gatica.
- La mostré, pero hasta ahí. Yo trato con ternura a mis seres. ¡No soy un carroñero! El límite lo da la ternura. Hasta cuando un tipo es culpable hay que narrarlo desde la ternura. Guevara lo decía: ternura hasta con el enemigo.
- El canon argentino, solemne, acomplejado y estreñido de corazón, margina todo lo que se roce con la emoción y la ternura. Vos, Favio, como nadie, has sido consagrado pese a ir siempre por el lado más explícito de la ternura.
-E s lo que soy, lo que somos Me estoy acordando cuando venían los camiones del peronismo a Luján y repartían juguetes. Esto para mucha gente era denigrante.
- Juguetes, pan dulce, sidra peronista, ¿hoy qué te parece?
- Maravilloso me parece. Aquello ¡era muy lindo! ¿Sabés con qué alegría venía mi abuelo con la sidra y el pan que le daban en la municipalidad?
- Cambiando de asunto: ¿seguís con tu teoría de la mermelada?
- Sigo. En Mendoza, ¿qué se hace con la fruta que sobra? Mermelada. Yo creo que con el excedente de boludos que tenemos en la Argentina tendríamos que hacer mermelada. Vendiéndola podríamos pagar la deuda. Se lo propuse a Cavallo; no me hizo caso.
(Teléfono. Favio tiene que resolver detalles de la banda sonora de su Aniceto. Pide un grillo, pero "que sea uno solo y de verdad". Y después le pide al músico una baladita que desemboque en algo enorme, sinfónico. Lo alienta: "Mientras comés solito andá imaginándotela. Vas a hacer un quilombo muy bello. Dale, que no se te caiga el alma, te quiero, loco, te quiero ")
- Al final, este Aniceto resuelto como ballet, se va a titular
- Se va a titular Aniceto.
- No te veo muy convencido.
-También estoy pensando ponerle Aniceto, una película romántica a morir Sabés, la película está dedicada a mi vieja: "A Laura Favio, amiga, madre divina". Cuando vi la dedicatoria en la pantalla, ahhh me sentí tan mal... Dije, ¡mi mamá ya no está!
- Laura. La recuerdo altiva. No solo era bella, era hermosa ¿Qué estás pensando, Chiquito?
- Nada. Quise cambiar de tema y me acordé de Tomás de Aquino. El tipo analiza muy bien el asunto de la culpa y del castigo pero pensó como casi imprescindible la pena de muerte. Cuando uno quiere sacar del cuerpo social un tumor, ahí viene la cuestión. Y uno se pregunta, ¿a tipos como Videla, Massera, los dejo vivos? Pero si tenés la posibilidad de encajarlos en una prisión de por vida, es más piadoso. ¿Qué pensás vos de la pena de muerte?
- Pienso que aunque en su aplicación fuera infalible, aunque se hubiera demostrado que sirve para bajar los índices de criminalidad, es siempre una asesinación Qué paradójico, los más furiosos sostenedores de la pena de muerte proclaman la penalización del aborto y declaran agudamente su creencia en Dios. Afirmando la pena capital se toman atribuciones divinas, le arrebatan el trabajo al Dios que dicen venerar.
- Eso. La pena de muerte es un asesinato Lo otro bravo es el perdón... Hay que perdonar, pero ojo, no digo olvidar. Perdonar es recordar de otra manera.
- En tal caso la memoria no es, como se dice, retroceso: es semilla. Por otro lado, ¿cómo perdonar al que no se arrepiente, al que se empeña en confundir impunidad con heroísmo?
- Sí. Tengamos cuidado con el perdón atolondrado.
- ¿Cómo convivís con el asunto de las culpas y el perdón?
- ¿Sabés las horas que yo me quedo mirando al techo por culpas? Muchas veces he llamado a mi hermano más chico, Horacito. Me lo como a besos y le digo: "Vos me tenés que asegurar que me has perdonado." Le jodí tanto la vida a Horacito.
- Joder con las culpas.
- Todos las tenemos. Pero hasta es lindo hacer cagadas para pedir después perdón. Muy lindo ¡y sano! Por ejemplo, llamar a tu hijo y decirle: "Mirá, te cagué en esto y en esto, mi amor perdoname..." Después te sentís un príncipe. El pedir perdón es uno de los inventos más grandes de la humanidad. No es cuestión de teología sino de psiquiatría.
- ¿Sabés llorar todavía?
- Es lo más lindo del mundo. Yo me encierro, ahí, debajo de la ducha, y me pongo a llorar. Pero me gustaría poder llorar como los bebés, con la boca así, grandooota Me quedé enganchado con el asunto de la memoria. Siento que el infierno y el paraíso están en la memoria de cada uno.
- Al infierno y al paraíso solo los separa una medianera. ¿Tu memoria qué te trae de infierno o de paraíso?
- A ver te conté de doña Margarita Su hijo, el Lechuzo, era un poquito tonto y cuando muere ella dije: "Al Lechuzo me lo acampujo": iba a cobrar una pensión por su mamá. Ah, el Lechuzo para mí, dije. Lo volvía loco con el quiosco. Pero había una vieja hija de puta, mendocina mandona, de Unidad Básica. Ella le decía al Lechuzo: "¡Qué se anda juntando con ese atorrante!" Que era yo. Competía conmigo por la pensión. Dije: "Esta vieja me va a cagar; me voy a apolillar en la pieza del Lechuzo y no me lo va a afanar". Tendría yo unos 13 años, un pibe. ¿Viste esas noches de luna en Mendoza que son como pleno día? La luna hace pong y ves las sombras estiradas
- La luna, el sol de la noche.
- Un sol sí. No me podía dormir por el cagazo de que la difunta se me apareciera a decirme "¿Qué estás haciendo con mi hijo?..." Yo dormía en el suelo, sobre una mantita en eso escucho chist chist. Y para colmo el Lechuzo roncaba con un silbido. ¡Me van a agarrar del culo los demonios! Arrastrándome llegué a la puerta y me quedé sentadito ahí a esperar el alba. No me animaba a rajarme, había como quince metros hasta la calle. ¿Quién me iba a proteger? Ahí tenés la memoria, con el paraíso y el infierno. El caso es que yo me jugaba la vida para quedarme con la pensión del pobre Lechuzo. Me pienso en esas y me quiero tanto
- Pero si conseguías el quiosquito nos quedábamos sin Favio director de cine.
- Quién sabe Esperá, me tomo otro mate cocido: cuando cuento cosas de miedo se me seca la boca ¿Sabías que los árabes se bañan con arena?
- Ni la menor idea.
- El árabe en el desierto se limpia la cola con arena. Y no solo eso, cuando llega el momento de orar se lava las manos y la cara con arena. O sea: la arena suplanta al agua, saca la transpiración, queda la piel muy suave. Cuando leí eso recordé que de pibitos jugábamos en el río. Yo, el Negro Cacerola, hacíamos todo ahí y nos limpiábamos con arena. Era normal eso, mientras charlábamos golpeábamos fuerte la arena chiqui chiqui y al final nos pasábamos los dedos, la arena era finita. Impecables quedábamos. Después seguíamos caminando
- Lo más campantes.
- Campantes y felices Me pediste que le diera rienda a la memoria y ahora es buena, me lleva a una noche de sábado Me vienen a buscar los vagos "Mirá, en una finca de Perdriel se casa el gringo Felipelli. ¿Venís con nosotros?" Y salíamos y atravesábamos viñedos hasta que empezábamos a escuchar muuuy apenitas una música lejana La música era como una estrella, nos guiaba hasta el casorio. Cuando la música estaba grande, plena, ya nos encontrábamos en la puerta de la fiesta y nos colábamos, claro, ¡y a comer de todo!... ¡Qué pendejo divino, en todas las que anduve! Ah, cuando me veo en las que hice, me quiero como loco, te juro. ¡Qué lindo quererme así! ¡Me quiero como la puta que lo parió!
Para reproducir citar la fuente Pensamiento Discepoleano
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ALBERTO LAPOLLA* - (1952 / 2011)
(militante popular,ingeniero, médico genetista, historiador)
BURGUESÍA NACIONAL O BURGUESÍA COLONIAL(Publicado el 13-9-06 para que lo pensemos seriamente en este presente)Una Burguesía que teme crecer.Corría el año 1971. Dos años antes había ocurrido el Cordobazo. Acababa de librarse la segunda rebelión del proletariado cordobés conocida como Viborazo, éste ya mucho más político como su mismo nombre lo designara. No había llegado solo, sino acompañado por más de un reguero de rebeliones populares extendidas por todo el país, como el Rosariazo, el Mendozazo, el Choconazo, y así de seguido. El proletariado industrial argentino construido desde 1935-1945, hasta esa fecha, mostraba una potencia asentada en sus poderosas Comisiones Internas, Cuerpos de Delegadas por empresa, vastas conducciones combativas, poderosos sindicatos y centrales regionales, pleno empleo y alto nivel de participación en el Ingreso Nacional. Esa situación asustaba a la burguesía. El presidente de la UIA, Elvio Coelho expresó este temor sin ambages a James Petras por entonces en la Argentina. 'Ya en 1971 me había impresionado un diálogo que mantuve, si mal no recuerdo, con Elvio Coelho, entonces Presidente de la Unión Industrial Argentina (UIA).
Yo le preguntaba porque no se lanzaban a la industrialización como en Brasil.
'-Porque los sindicatos son demasiado fuertes y eso nos llevaría a una guerra civil- contestó.
- Pero, ¿por qué no lo intentan?
- Porque podemos perder – dijo'.(1)
Coelho y su clase habían comenzado a hacer suyo con una década y media de retraso, el plan esbozado por el almirante Isaac F. Rojas en 1955.
'Para que desaparezca el peronismo deberán desaparecer las chimeneas'(2) dejando en claro el proyecto desindustrializador del alto mando de la burguesía colonial anudada a los intereses extranjeros. De allí en más y en particular luego del intento de construir una burguesía nacional conducida por un general nacionalista y un empresario comunista, la burguesía industrial nacional se escaldaría para el resto de su tiempo histórico, respecto del aspecto que nunca pudo resolver desde su propio origen. Si ella crece –en un país semicolonial, donde el desarrollo industrial fundamental corrió primero por cuenta del imperialismo y luego a riesgo del Estado, originando un proletariado estructurado desde su origen, y luego también libre de patronos como lo fue el núcleo de empresas del Estado que construyeron la nueva nación a partir de 1945- la clase obrera crece más rápido. Con el agregado que esa clase obrera poseía la mayor organización sindical del mundo de posguerra. Con un historial de lucha previo, en lo proletario y en lo popular, que no se caracterizaba casualmente por tolerar dócilmente la dominación. Por el contrario, dicha clase obrera era la continuadora –en los tiempos del capitalismo industrial- del pueblo que había mantenido encendida la llama de la Libertad por más tiempo en América. Desde las fundantes jornadas de 1806 y el grito inicial de Túpac Amaru, allá por 1780, continuado luego en el largo ciclo de resistencia extendido hasta 1890. Continuado luego en el período que se cierra el 17 de octubre de 1945. El pecado original de nuestra burguesía es el temor al crecimiento. Como lo señalara Arturo Jaureteche, ésa fue la primera de las zonceras argentinas, expresada sin vergüenza por Sarmiento: 'el problema de la Argentina es su extensión'. (3) Casi ninguna otra clase dominante del planeta se expresaría de esa forma. Es difícil imaginar a Pedro el Grande, a Luis XIV, a Cronwell, a Washington o a Churchill, quejándose porque su territorio fuera demasiado extenso. Ni que hablar de nuestra vecina burguesía esclavista brasileña que se apropió del doble de su territorio a expensas de todos los países sudamericanos. Por el contrario todas las burguesías trataron siempre de ser más grandes, no importando los sacrificios a los que sometieran a sus pueblos.
Pues bien, con excepción de Moreno-Castelli primero, San Martín y Dorrego luego, Rosas más tarde –ya en otro proyecto-, Irigoyen tibiamente después y Perón como el intento más serio, siempre la burguesía comercial porteña –madre de todos los borregos- enlazada y fundida luego como burguesía terrateniente atada fuertemente a los intereses británicos, prefirió achicarse antes que agrandarse. Ya fuera entregando la Banda Oriental, primero para garantizar el levantamiento del bloqueo al puerto de Buenos Aires en 1811. Luego para liberarse del 'anarquista y rebelde' José Artigas. Al mismo tiempo de abandonar el territorio Oriental, Rivadavia desconocía el Pacto de Unión y Amistad Eterna, firmado con el Paraguay por Manuel Belgrano, obligando al país hermano a su enclaustramiento que finalmente terminaría en exterminio. Rivadavia sería el fundador de la línea de achicarse para preservar los intereses portuarios. Más tarde se negaría a aceptar la incorporación de las provincias altoperuanas, para apropiarse ilegítimamente de la Presidencia de la nación, pese a la oposición de las provincias. Rivadavia necesitaba ser Presidente –y no gobernador de Buenos Aires- para poder legalizar los 'negocios' que había arreglado en Londres –Empréstito Baring, Compañías de Colonización de Tierras y entrega de las Minas de Famatina-, por los que había cobrado suculentas comisiones. La llegada de los diputados altoperuanos lo habrían dejado en minoría, destruyendo su aventura presidencial. Más tarde, sería Urquiza quien entregaría a Brasil las Misiones Orientales –actual estado de Santa Catarina y parte del de Río Grande-, reconocería la independencia Oriental y aceptaría que Brasil robase un tercio del territorio uruguayo –el resto del Estado de Río Grande-, a cambio de la ayuda del Emperador para derrocar a Don Juan Manuel. Concesiones a las que Rosas siempre se había negado. Entregar territorio para salvar los negocios del puerto, del 'partido de los tenderos'. Esos que según Don Manuel Belgrano, 'sólo saben comprar por cuatro para vender por ocho'(4), esa fue la divisa triunfal de nuestra burguesía portuaria, luego terrateniente
Por esencia dependiente, es decir colonial.
Don Arturo Jauretche fue muy claro al reseñar los proyectos posibles a construir en el siglo XIX. En la presentación en Buenos Aires del libro 'Gran Bretaña y Argentina en el siglo XIX', del historiador británico Harry Ferns, Jauretche suscribió las palabras de Ferns, quien expresó: 'Tienen que preguntarse sí, después de la caída de Rosas, no había llegado la hora de la clase mercantil urbana, y sin presión extranjera, esa clase no hubiera podido construir en las orillas del Río de la Plata una comunidad como la que construyeron los norteamericanos en los Estados Unidos después de la Guerra Civil: una potencia industrial y financiera en expansión no trabada por poderosos intereses rurales'. Jauretche reafirmó: '¿Qué sería de ese progreso que tanto los envanece si en lugar de habernos adscriptos como los norteamericanos del Sur a la política de Gran Bretaña cumpliendo el sólo objetivo de construir la granja dependiente, se hubiese realizado la hipótesis que plantea Ferns paralela a la de los norteamericanos del Norte: "Argentina potencia industrial y financiera en expansión no trabada por poderosos intereses rurales", por naturaleza, dependientes. ¿Qué sería por comparación ese progreso de que se jactan frente al del país potente que pudimos ser? (...) El así llamado progreso liberal tiene dos caras: es progresista en cuanto necesita la inmigración, el puerto, el ferrocarril, la vivienda, el Código Civil, el alambrado, el refinamiento de las haciendas, la paz interior, en fin todos los elementos que contribuyen al desarrollo de una producción agropecuaria barata como suministro colonial. Pero es antiprogresista en cuanto impide el desarrollo de la producción industrial propia, el manejo nacional, aun de esa misma producción agropecuaria, de los medios de transporte y comercialización, de la dirección financiera por medio de la banca, de la diversificación productiva y del estímulo de las zonas cuya producción no interesa, y de todo nivel de vida y cultura técnica, cuyo desarrollo importa el surgimiento de un país con propios intereses, más fuertes que los vinculados a la estructura colonial dependiente y un mercado de consumo interno en constante crecimiento que fija por el costo y el consumo un valor de adquisición que la metrópoli no desea pagar"(5) Sin embargo la burguesía terrateniente-comercial posterior a Caseros y en particular luego de Pavón –el primero de los genocidios fundantes de la nación liberal- eligió el camino de seguir siendo la granja británica y no crecer por su camino propio. Por el contrario los EE.UU., sólo pudieron llevar adelante su plan de gran nación -su Destino Americano- cuando derrotaron al Sur esclavista, rural y... dependiente de Gran Bretaña, deseoso de continuar siendo factoría inglesa.
El Norte necesitaba las materias primas que el Sur exportaba a Gran Bretaña, el mercado, las tierras.
También necesitaba que los esclavos fueran consumidores para expandir su industria y consolidar su capital financiero. El Norte derrotó al Sur, liberó a los esclavos -sin darles derechos políticos- los transformó en granjeros o asalariados, es decir en consumidores, cerró sus fronteras económicas hasta 1945, lanzándose a una expansión en todas direcciones, centrando todos sus esfuerzos en una industrialización a rajatabla, generando y utilizando su propio capital financiero, sin permitir que los productos o especulación del capital británico penetrara en sus fronteras sin su control, construyendo su gran nación. En nuestro país por el contrario, ganó el 'Sur'. Ganaron los intereses de la dependencia y la factoría británica por sobre los de la nación y la Patria Grande. 'Cuando uno conoce a la Argentina, se imagina como hubieran sido los EE..UU., si la guerra de secesión la hubiera ganado el Sur'.(6) Escribió un periodista norteamericano que trabajó muchos años en la Argentina.
Sin Estado no hay desarrollo nacional, porque no hay burguesía nacional Fue Scalabrini quien señaló la tragedia de Mayo y la muerte del proyecto de gran nación Americana pergeñado por Moreno, Belgrano y Castelli. 'Con la caída de Moreno, una ruta histórica se clausura... La Nación debe constituirse entera en la concepción de Moreno...
La ruta de perspectivas que abrió la clarividencia de Moreno estaba definitivamente ocluida... El presintió una grandeza y una manera de lograrla precaviéndose de la artera logrería de Inglaterra. La otra ruta está encarnada en Rivadavia.'(7) Así fue, Moreno previó genialmente el rol del Estado en un país con una burguesía suntuaria, parasitaria y que sólo conocía la máxima expresada por Don Manuel, más arriba citada.
Moreno se anticipa en más de un siglo a ideas que luego esbozaría Lenin, pero que en particular formularía Trotzky, sobre el rol del Estado nacional en los países semicoloniales y coloniales para reemplazar a la burguesía nacional inexistente. Ese será el camino de los países del Tercer Mundo, esbozado genialmente por Moreno. En su Plan de Operaciones Moreno es categórico respecto del modelo de nación a construir y el rol que el Estado nacional debe cumplir para industrializar la nueva nación. 'Las medidas a adoptar consistían en expropiar quinientos o seiscientos millones de pesos en poder de cinco o seis mil individuos, expropiación que beneficiaría a ochenta o cien mil habitantes. Esa enorme suma de dinero en manos de una minoría, "no puede dar el fruto ni fomento de un estado, que darían puestos en diferentes giros en el medio de un centro facilitando fábricas, ingenios, aumento de la agricultura, etc.(...) En esta virtud, luego de hacerse entender más claramente mi proyecto, se verá que una cantidad de doscientos o trescientos millones de pesos, puestos en el centro del estado para la fomentación de las artes, agricultura, navegación, etc., producirá en pocos años un continente laborioso, instruido y virtuoso, sin necesidad de buscar exteriormente nada de lo que necesite para la conservación de sus habitantes, no hablando de aquellas manufacturas que siendo como un vicio corrompido, son de un lujo excesivo e inútil, que deben evitarse principalmente porque son extranjeras y se venden a más oro de lo que pesan; pero como esta materia no sea de este tratado, paso a exponer los medios que deben adoptarse para el aumento de los fondos públicos'.(8)
Pues bien como señala Scalabrini, derrotado Moreno –y Castelli, Artigas, Belgrano, San Martín, Monteagudo, Bolívar, Güemes, Dorrego y Felipe Varela- sólo quedaba el camino de Rivadavia: la sumisión a los intereses británicos. Y ése fue el que se siguió, y se continúa transitando en un retorno permanentemente como una maldición. La Argentina es el único país en el mundo que destruyó su sistema industrial de manera categórica; destrozó el mayor sistema ferroviario de América latina; entregó su petróleo y sus recursos energéticos a potencias extranjeras, -o a países vecinos para que se industrialicen a su costa. Que regala sus recursos mineros –la quinta reserva a nivel mundial- pagando por su extracción y saqueo; que depreda el mayor y más fértil ecosistema productor de alimentos del mundo. Que dejó de producir carne y alimentos para producir pasto-soja transgénico, para que los países industrializados produzcan carne y la exporten. Que entregó sus empresas del Estado al 2.5% de su valor. Es el único país del mundo donde la población debe pagar peaje a grupos económicos parasitarios por usar rutas construidas por la nación y las provincias. El nuestro es uno de los pocos países en el mundo, que regaló las jubilaciones de los trabajadores a la banca extranjera y nacional, como forma de control de la patronal sobre los trabajadores, para erradicar la idea de colectivo de la clase obrera. Privando al mismo tiempo al Estado de fuentes genuinas de financiación. Todas estas calamidades se realizaron, sin haber sufrido una invasión militar extranjera, sino sólo por la vocación colonial de su clase dominante. Era necesario desindustrializar a la nación para destruir a la clase obrera, que desde 1945, pero en particular entre 1969 y 1975 (del Cordobazo al Rodrigazo) espantó a esa burguesía por naturaleza dependiente. El llamado grupo Perriaux –que designaría ministro de Videla a Martínez de Hoz- le daría teoría económica al pensamiento del almirante Rojas. Desde 1976 a la fecha la nación abandonó la línea fundada por la Revolución Nacionalista de 1943 y retornó al modelo de la Granja Británica, instaurado por Mitre después de Pavón. Hoy la Argentina ya no es la nación industrial, tecnológica, científica y militar que preocupaba a los EE.UU. 'En 1984 en el pico de la crisis mundial de la deuda provocada por la cesación de pagos mexicana, la revista de negocios estadounidense Business Week dedicó su portada a Raúl Alfonsín, preguntándose si ese presidente democrático pagaría la deuda externa. Con cierta angustia, la revista aseguraba que ese país enorme, excedentario en alimentos y energía, con una población culta integrada y sin problemas religiosos raciales o lingüísticos, un inmenso territorio aun por ocupar y explotar, una industria ligera desarrollada y otra pesada de apreciable desarrollo - incluyendo el nuclear- provisto de un sistema de educación público y científicos y técnicos de alto nivel, "podría poner una alambrada alrededor de sí mismo y mandarnos al infierno'. (9) No fue así. Por el contrario se llevó adelante el programa esbozado por el genocida Albano Harguindeguy: 'el proceso de Reorganización Nacional vino para devolver a la Argentina al 3 de junio de 1943.'(10) Primero la dictadura, luego Alfonsín -que no se atrevió a modificar la línea de marcha-, pero esencialmente el gobierno menemista destruyeron la nación industrial tecnológica y científica.
La dictadura cerró 18.000 fabricas, Alfonsin otras 50.000 y Carlos Saúl I 108.000 más. En total 176.000 fabricas cerradas. A esto deben sumarse en el mismo período 7.000.000 de ejecuciones hipotecarias, comerciales, urbanas y rurales.(18) Es decir la devastación planificada de la nación. El pueblo con otra de sus rebeliones históricas –diciembre de 2001- impidió que el proceso llegara a los planes finales: dolarización, represión militar de los pobres, inclusión en el ALCA, secesión de la Patagonia y disolución nacional. Ahora transitamos un camino aun sin destino. Una vez más estamos frente a la contradicción scalabriana: o volvemos al camino de Moreno o seguiremos en el de Rivadavia.
Burguesía colonial, parásita y suntuaria Juan José Hernández Arregui alguna vez definió la esencia de nuestra clase dominante: 'esa clase parásita e infecunda, siempre que el pueblo comió, vio demagogia.'(11) A esta burguesía no sólo le sobraba nación, también le sobraba gente. Jauretche denunció este pensamiento pequeño y genocida expresado por los sucesivos presidentes de la Sociedad Rural Argentina:
'En 1956 el Dr. Ernesto Hueyo, ex ministro de la Década Infame y personaje representante de su clase, sostiene en un artículo de la Prensa, que el país tiene exceso de población y sólo se le ocurre una solución: que emigre el excedente de argentinos innecesario para la economía pastoril. En 1966 el presidente de la SRA, Sr., Faustino Fano -un nuevo incorporado a la alta clase- expresa el sentimiento de la misma diciendo en el habitual banquete de la prensa extranjera (...) que la población conveniente de la república está en relación 4 vacunos por cada hombre. Ajustándonos al cálculo(...) hoy no deberíamos tener más de 12 millones de habitantes. Si tenemos 25 millones nos hemos excedido en el 100%. !A esto ha llegado la elite que se dice continuadora de la que jugaba a los 100 millones de habitantes.'(15) Cuando Cavallo expuso su modelo de la Convertibilidad, -segunda etapa del plan del grupo Perriaux-, programa que debía liquidar el país al que hacía referencia la revista de los hombres de negocios norteamericanos, don Buno Orsi, director de Techint y luego coordinador de Cavallo, expresó: 'El plan de la convertibilidad es correcto, pero en él caben sólo 6 millones de los 36 millones de argentinos. ¿Estará la clase política dispuesta a hacer lo qué hay qué hacer para sostener este plan.'(12)
La 'clase política' acompañó este plan de una manera vergonzosa. Ya en 1985, se percibía que en los dos partidos mayoritarios -radicalismo y peronismo, pero también en el conjunto de los partidos menores del llamado 'centro izquierda'- se había instalado una idea neoliberal sobre la necesidad de llevar la nación a un modelo llamado 'agro-petro power'(16). Es decir un retorno al país factoría exportador de commodities –materias primas sin elaboración industrial-, que destruyera mano de obra, volteara el salario, disminuyera el 'poder sindical' y aumentaran la renta oligárquico-imperialista. Cavallo difundía estas ideas a través de su recién creada Fundación Mediterránea, (mientras aportaba un millón de dólares al renovador De la Sota para ingresar al Justicialismo). Gran parte de la Renovación peronista y de los jóvenes nosiglistas del radicalismo compartirían estas ideas neocoloniales. Así la mayoría de los cuadros políticos de la vieja burguesía nacional, hacía suyo el modelo pergeñado por el continuador de Martínez de Hoz. Sería el primer secretario de medios de Comunicación del menemismo, quien expresaría de manera increíble, ya en 1999, esta claudicación e incitación a la destrucción de la nación.
'-Ahí me acostumbré a convivir con el peronismo horrible que había en la Mesa Federal de Menem Presidente. Pero yo sentí que ahí se estaba gestando algo. Lo demás era todo discurso. Les voy a dar un dato(...) En la campaña del '87 para gobernador de Neuquen, de la cual participé, hubo tres congresos: La Falda, Bariloche y Tucumán. En esos tres congresos, definimos la reestructuración del Estado. La reestructuración del Estado no la inventa Menem en el '89, la hicimos en el '87 los 23 candidatos a gobernador, que nos comprometimos a reestructurar el Estado en función de los nuevos parámetros que estaban en discusión en Europa. O sea que el peronismo actúa orgánicamente, no espasmódicamente sobre una idea de un tipo que traiciona el discurso electoral... no, esto lo veníamos planteando.(...)
– Pero ¿cuál era tu posición con respecto a la política del menemismo, que no tenía nada que ver con tu militancia de los setenta?(...)
– Mirá, cuando el peronismo entra al gobierno, asume la responsabilidad de rendirse. Nosotros habíamos perdido dos guerras. El tema era si nos rendíamos o no. No era si triunfábamos o no triunfábamos. Habíamos perdido la guerra con 30.000 muertos nuestros y la guerra de Malvinas. Alfonsín optó por decir "Nosotros no nos rendimos, somos Gardel." Pero a Menem no le quedaba espacio. El país estaba rendido. (El ex ministro Dromi ejecutor de las privatizaciones y la destrucción del Estado, -actual asesor del ministro De Vido- dijo por entonces "Argentina está de rodillas". AJL) Era como estaba Hirohito después de la bomba atómica de Nagasaki. La discusión mía con Carlos Menem era si había que anunciar que nos rendíamos o no. Porque yo decía que había que anunciar eso porque de otro modo todo iba a ser interpretado como traición a la Patria. Fue una rendición. Pero Hirohito, en kimono y en samurai, se rindió a las 4 de la tarde arriba del portaaviones delante de Mc Arthur. Nosotros, encima de rendirnos, lo hacemos en la mesa de reuniones equivocada.
- ¿Por qué se rindieron en la mesa de reuniones equivocada?(...) – Claro, las primeras privatizaciones fueron con Telefónica, Telecom, la Comunidad Económica Europea. Después viene Todman, el embajador norteamericano, y nos explica con quien debíamos rendirnos en serio. Ahí empieza a tallar Cavallo como ministro de Economía.' (13)
¿Reconstruir la burguesía nacional?
Esta confesión deja en claro que fue la propia burguesía dominante nacida en la Argentina, la que decidió 'rendirse' y abandonar el desarrollo nacional para volver a su estado colonial. Ya lo había hecho la UIA cuando la crisis del '30 y la firma del pacto Roca-Runcimann, aceptando reducirse a un no crecimiento para mantener la estructura agroexportadora del país-estancia. Ahora la tarea era más sangrienta, había que liquidar el mercado interno, destruyendo a la clase obrera industrial y con ella a las clases que de ella dependen: la pequeña y mediana burguesía urbana y rural y la burguesía media comercial e industrial vinculada o alimentada por el mercado interno.
En esa operación quirúrgica 'sin anestesia' se combinaron: secuestros, grupos de tareas, picana, campos de exterminio, vuelos de la muerte, jefes de personal –el 55% de los desaparecidos eran dirigentes sindicales de base-, dirigentes sindicales traidores -como José Rodríguez-, privatizaciones, gatillo fácil, baja de salarios, ajuste permanente, endeudamiento externo permanente, hambre y desempleo permanente -para poder bajar el salario del 48% del PBI en 1974 al 18% en 2001-, privatizaciones escandalosas, reformulaciones políticas y vaciamiento de contenido de la política. Un brutal disciplinamiento y revanchismo social, combinado con una descomunal transfugación de la política transformada en instrumento de dominación colonial. Tal como ya lo había sido entre 1861 a 1916; entre 1930 a 1943 o entre 1955 a 1973. Es la misma burguesía la que decidió dejar de ser nacional. De allí que resulta difícil entender que el gobierno quiera devolverle el pasaporte argentino vía subsidios y regalos. El plan del grupo Perriaux y luego el de Cavallo, fue armado y apoyado por Techint, Roggio, Macri, Bulgheroni, Fortabat, Pérez Companc, Soldati, Clarín, la Sociedad Rural, la UIA, la banca privada nacional y extranjera y el conjunto de la dirigencia política emergente de su triunfo en 1976, y en particular a de las 'Felices Pascuas' y de la crisis de 1988-1989. Es bueno recordar que Goyo Pérez Companc, compró una casa a la esposa de Videla, frente al penal de Magdalena mientras éste estuvo detenido allí. Esa homogeneización política-empresaria incluyó también a nuestro actual Presidente de la nación y a su esposa, que invitaron a Cavallo durante varios años a pasar los fines de semana en el Calafate. Al mismo tiempo que la 'liga de gobernadores productores de hidrocarburos' hacía lobby para privatizar YPF y transferir los recursos energéticos a las provincias –viejo reclamo de las multinacionales petroleras y mineras. Así los gobernadores pasaron a ser empleados menores de las migajas arrojadas por las compañías del Imperio. Es así que sorprende escuchar que desde el gobierno se intente recrear una nueva burguesía nacional. Y no hablamos de cifras menores: sólo en el ejercicio presente más de 30 mil millones de pesos, irán como aportes gratuitos del Estado nacional a empresas privadas como Techint, Repsol, Roggio, Macri, Metrovías, Metropolitano, y otras.
Aquellos que depredaron la nación son premiados, para que continúen depredándola y capitalizándose a costa del pueblo y las riquezas de la Patria. Se les regala dinero a las empresas que destruyeron el sistema ferroviario. Aquéllas que vendieron como 'hierro viejo' casi 6000 vagones de carga y más de 10.000 kilómetros de vías férreas. A las mismas que dejaron sin trabajo a 90 mil ferroviarios y destruyeron 40.000 kilómetros de servicio. Lo mismo ocurre con las empresas de transporte. Metrovías -que brinda el más breve servicio subterráneo del mundo, ya que cesa su actividad a las 22.30 hs., para no afectar su tasa de ganancia- recibe subsidios millonarios. El gobierno pretende subsidiar a estos delincuentes –verdadera gángster-burguesía- para que ellos reconstruyan la burguesía nacional. Un miembro de esta nueva burguesía -premiado por el Senado-, Gustavo Grobokopatel –el Rey de la soja- fue muy claro respecto de la mirada estructural de este nuevo empresariado: 'Hay que acabar con la idea de volver al modelo de sustitución de importaciones, debemos comprarle a quien nos compra'.(17) O sea el viejo apotegma del partido conservador del país-estancia. Sólo que ahora en lugar de vacas vendemos pasto-soja. Parafraseando a Eladia Blázquez podría decirse que 'parece la utopía de un mamao.' Sin embargo resulta cierto y trágico: sólo por causas vinculadas al hambre entre 1989 y 2005 han muerto ya más de 470.000 argentinos.
Estado nacional para tener burguesía nacional
No queremos señalar con esto que no sea posible la existencia de burguesía nacional en nuestro país.
Decimos que no es éste el camino para reconstruirla.
El camino pasa por el que diseñó Moreno, y utilizó Perón –también Lenin en la naciente URSS con la NEP.
Es decir el Estado nacional debe constituirse en el centro de la economía e impulsar una fuerte política de reactivación, de redistribución del ingreso, de aumento de la base monetaria y de circulación. De cese de todo endeudamiento externo. De cese de drenaje de divisas. Pero principalmente, de recuperación de empresas regaladas al capital privado para recuperar el mercado interno. La recuperación del mercado interno y de la clase obrera industrial, harán reaparecer a la burguesía nacional pequeña, mediana y grande. Sumado a ello, medidas tan simples como sacar de los centros urbanos a las grandes cadenas de hípermercados, no sólo crearán enormes fuentes de trabajo y acumulación familiar sino que sanearán el ambiente, el consumo y la salud de la población.
Favorecer el reparto de tierras para producciones familiares también fortalecerá el mercado interno y proveerá alimentos sanos para una población hambreada.
Pero esencialmente medidas activas de reindustrialización efectiva en manos del Estado, reactivarán rápidamente nuestra economía y distribuirán la riqueza de manera veloz. La Argentina –desgraciadamente- sólo posee 38 millones de habitantes; es una cifra muy pequeña para no poder ocuparla, alimentarla y vestirla de manera casi inmediata. Es sólo una decisión política, no económica. Reabrir las empresas cerradas, aplicar a rajatabla la ley de ocho horas -creando miles de puestos de trabajos-, proteger la industria nacional, renacionalizar las empresas privatizadas y particularmente cesar los subsidios al robo de la nación. Tal vez próximos a cumplirse 200 años del 25 de mayo de 1810, haya llegado el tiempo de llevar a la práctica el Plan de Moreno. Tal vez así volvamos a ser una Patria justa, libre y soberana. Y así, sólo tal vez, podamos derrotar el espíritu pequeño de Don Bernardino.
1.- Seoane María, Todo o Nada. Planeta. julio 1997
2.- Clarín, octubre 1955
3.- Sarmiento Domingo Faustino, El Facundo. Losada.
1958
4.- Belgrano Manuel, Memorias, Del Colegio 1925.
5.- Jauretche Arturo, Escritos Inéditos. Corregidor.
OC vol6. pag 169
6.- Andersen Martin, Dossier Secreto. Planeta. 2000
7.- Scalabrini Ortiz Raúl, Las dos rutas de Mayo, conferencia en FORJA, agosto 1937
8.-Moreno Mariano, Plan Revolucionario de Operaciones, Plus Ultra, Buenos Aires 1993. Chumbita Hugo, Curso de admisión de Historia Argentina. UNLMatanza. 2004.
9.- Gabetta Carlos, Le Monde Diplomatique octubre
1999, sobre Business Week- 14-2-84
10.- Clarín abril de 1976
11.- Hernández Arregui Juan José, Imperialismo y Cultura.
12.- Clarín 09-1991.
13.- Palabras de Jorge Rachid a Gorbato Viviana en Montoneros Soldados de Menem... pag110-111.
Sudamericana 1999
14.- De Santis Daniel El hecho maldito del país burgués. www.rebelion.org
15.- Jauretche Arturo. Ediciones Centro E.S.
Discépolo. 2004
16.- Ver El Periodista Num 12. La capucha liberal.
Set-1984
17.- Gustavo Grobocopatel -Clarín Rural 23-03-02
18.- Palabras del Dr. Julio Carlos González en Santa Fe, 30-04-06
Reproducido por: https://pensamientodiscepoleano.com.ar/index.html
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1973 - DEBATE DE AGUSTÍN TOSCO Y JOSÉ RUCCI
Fue, sin ninguna duda, un debate histórico que nunca antes, ni después, se hizo de igual modo por televisión en la República Argentina.
Durante dos horas, José Rucci y Agustín Tosco se enfrentaron por primera vez, cara a cara, para debatir sus posiciones en el movimiento obrero argentino, cosa que habían hecho por medio de solicitadas y declaraciones.
Ambos expresaron los puntos de vista de dos tendencias, cuyas bases de sustentación son las 62 Organizaciones y el Movimiento Nacional Intersindical.
A continuación, el texto íntegro del programa que el martes 13 de febrero de 1973, (hace unos días se cumplieron exactamente 47 años) en “Las dos campanas”, televisó el Canal 11. Conti, Rodolfo Pandolfi, Silvia Odoriz, Horacio Salas y Pablo Giusiani, son los periodistas que acompañan a los conductores en el programa.
* * * * *
Sofovich: Antes de entrar de lleno en el debate quiero rendir un homenaje a la coherencia de los dos entrevistados. Tanto el señor José Rucci como el señor Agustín Tosco, no perdieron la oportunidad de aceptar públicamente este desafío de enfrentarse, dialogando uno con el otro, y eso no se da en la vida pública Argentina muy comúnmente.
Conti: Rucci, las diferencias que tiene con Tosco ¿son un problema de tipo ideológico, de tipo personal, o ambas cosas a la vez?
Rucci: Quiero aclarar que cuando se trata de debatir los grandes problemas del movimiento obrero, de ninguna manera deben privar los problemas de tipo personal. Quiero decir que este aspecto queda perfectamente aclarado. La diferencia está en la forma de encarar el movimiento obrero en su conducción orgánica. Yo sostengo que el movimiento obrero sindicalmente organizado se encuentra en la Central Obrera y que las delegaciones regionales de todo el país deben a la Central Obrera todas aquellas exigencias que le imponen los estatutos. En consecuencia, creo que el compañero Tosco no está dentro de estos requisitos que, por supuesto, no son míos sino de los congresos nacionales de la entidad madre, es decir, la CGT.
P.: Señor Tosco, ¿qué puede decir al respecto?
Tosco: Nosotros conceptuamos al movimiento obrero como una práctica eminentemente democrática, como una democracia que surge de las bases. Sostenemos que todo compañero que es representante de una organización obrera debe mirar más hacia las bases que hacia la cúspide. Más hacia el contenido de lo que reclaman los trabajadores, los sectores populares, que a las formalidades. Por otra parte, hemos dejado bien en claro, siempre, que la CGT de Córdoba, está dentro de la CGT nacional. No pretendemos ni como CGT de Córdoba, ni como Movimiento Nacional Intersindical, ni como Sindicato de Luz y Fuerza, constituir un ente paralelo a la CGT. Lo que sí reivindicamos es nuestro derecho a la crítica, nuestro derecho a ir contra el burocratismo, nuestro derecho a que surja desde las bases, ya sea desde la Capital Federal o desde el interior el mandato a que nosotros nos debemos. Si los trabajadores de Córdoba luchan, si los compañeros por los problemas que padecen exigen plenarios de gremios confederados, nosotros, ¿qué decidimos? pues ir a la lucha y realizar los plenarios confederados, todo por la defensa de la clase trabajadora. Y eso es lo principal, y no estar al margen de la Central Obrera, sino tener una Central Obrera similar a la CGT de Córdoba. Y eso es lo que nos guía a nosotros...
P.: ¿Acaso José Rucci no fue elegido casi por unanimidad en el seno de un Congreso de la CGT?
Tosco: Nosotros hemos cuestionado permanentemente una práctica en las organizaciones sindicales que no permite la expresión auténtica de los trabajadores; hay sobrados ejemplos: uno clásico como es el de la Unión Ferroviaria. De ahí que seguimos insistiendo en que el mandato de las bases no se da en los Congresos de la CGT, sino en las bases mismas que es donde actuamos y donde no hemos observado que la mayoría de los dirigentes que están en la CGT realicen esa práctica.
P.: Rucci, creo que la posición de Tosco es bastante clara.
Rucci: Sí, clara pero no compartida. Porque se supone que cualquier institución de bien público, en este caso la CGT, tiene que regir su cometido a través de cartas orgánicas que son legisladas precisamente por los representantes de los trabajadores. En consecuencia, esa expresión, que puede causar mucho efecto, de consulta a las bases, es una expresión que no cabe dentro de un movimiento sindicalmente organizado porque la CGT tiene Secretario, un Consejo Directivo y un Comité Central Confederal.
P.: Concretamente, ¿usted está contra las bases o no?
Rucci: El Comité Central Confederal es el conducto hacia las bases y, cuando la Central Obrera toma una resolución, no es que la toma Rucci ni el Consejo Directivo, sino que es la resultante de las resoluciones que toma el Comité Central Confederal, integrado por todas las organizaciones sindicales del país.
P.: Sin embargo, el señor Tosco acusa a la CGT de no escuchar las críticas.
Rucci: ¿Y a usted le parece que la CGT no es criticada? La CGT es un organismo que tiene setenta y cinco delegaciones regionales en el interior del país. Desde que yo he sido el Secretario General, he sido el que más ha convocado plenarios de las delegaciones regionales del interior. Jamás el compañero Tosco se hizo presente una sola vez en la CGT para debatir este tipo de problemas con sus pares.
P.: ¿Ustedes lo han invitado?
Rucci: Por supuesto. Todas las regionales deben concurrir a la CGT cuando son convocadas. Yo, honestamente, todavía no he visto al compañero Tosco participar de un debate de los delegados regionales del interior del país frente al Consejo Directivo.
P.: ¿Por qué se abstiene usted de participar en esos debates?
Tosco: Porque nosotros respondemos a las decisiones de las bases y de los cuerpos orgánicos. Los que deciden quiénes deben concurrir al plenario de delegaciones regionales son los compañeros cordobeses y a mí no me han designado hasta el presente, sino que han designado a otros compañeros. Si me designaran vendría.
P.: El señor Rucci señaló recién la verticalidad de la estructura de la CGT, pero la sospecha de que esa verticalidad es burocrática se aumentó en muchos sectores, ante la idea de que las grandes movilizaciones populares, incluyendo los episodios de Córdoba y Mendoza, no surgieron de una decisión orgánica de la CGT ni del movimiento sindical.
Rucci: ¿Me permite que lo corrija? Lo de Mendoza no es exacto porque contó con el aval, el apoyo de la Central Obrera.
P.: Según mi conocimiento es un aval a posteriori, cuando la gente ya estaba en la calle, el Sr. Fiorentini de la CGT de Mendoza, consultó por teléfono.
Rucci: Exacto.
P.: Y el episodio de Córdoba fue previo a una decisión de la CGT. La impresión de mucha gente es que en la CGT no se puede resolver una movilización ni pararla. Entonces surge la pregunta de ¿cuál es la estructura vertical?
Rucci: No es exacto. La CGT en estos momentos está en condiciones de paralizar el país si su estrategia, dentro del concierto político que está viviendo el país, así lo señalara.
P.: ¿En la época de Onganía también estaba en condiciones?
Rucci: En la época de Onganía yo no era el Secretario de la CGT. Era un humilde dirigente de quinta categoría.
P.: Si se obligara a que el FREJULI no se presentara a elecciones, si fuera proscripto, ¿la CGT podría paralizar el país en horas?
Rucci: Si el gobierno adoptara un hecho de esa naturaleza, indudablemente se plantearían en el país situaciones sumamente serias y graves. Y frente a esto yo no creo que ningún argentino puede marginarse de expresarse dentro de los medios que considerare más oportunos.
P.: Y usted, Tosco, ¿qué haría en ese caso?
Tosco: Sería consecuente como siempre, con la lucha de la clase obrera y el pueblo. Siempre, y particularmente desde el 28 de junio de 1966, del golpazo de la dictadura de Onganía, hemos luchado por la libre expresión política de la clase obrera y del pueblo. Nosotros hemos luchado y hemos señalado desde el primer momento que reivindicaremos el derecho político de los argentinos, general y no corporativo y fascista como pretendía Onganía, de expresarse. Nosotros reivindicamos los plenos derechos democráticos en los que están incluidos el general Perón y el FREJULI, y en los que deberían estar incluidos aquellos que también están proscriptos de esta elección tramposa, amañada, fabricada por la dictadura.
P.: ¿Al Partido Comunista se refiere usted?
Tosco: Al Partido Comunista y a todos aquellos argentinos que no estén proscriptos por las leyes y el Estatuto de los Partidos Políticos. Nosotros no hacemos diferencia de ningún tipo.
P.: Y ya que la elección es fraudulenta como ha declarado usted, ¿piensa que hay que ir a la abstención?
Tosco: Hay distintos caminos y nosotros no hacemos de esta elección una cuestión de vida o muerte. Creemos en la lucha del pueblo, que está más allá de un día en que se pone una boleta. Yo no planteo una abstención, incluso he dicho que respeto a todos aquellos que desde dentro del proceso plantean un cambio a fondo, una transformación revolucionaria de este sistema. De allí que de una u otra manera nosotros siempre —tanto como contra los cinco puntos de la cúspide militar como contra la proscripción del FREJULI o la de los compañeros peronistas— hemos de luchar y estamos dispuestos a luchar y vamos a promover la lucha. Esperamos que otros, que en general sostienen esos mismos criterios, también lo lleven a la práctica. Seríamos nada más que consecuentes con nuestra práctica.
P.: Tosco, usted ha formulado declaraciones en las que expresó su apoyo a la fórmula del FREJULI en el ámbito provincial. ¿Cuál es su posición frente a la fórmula del Frente en el ámbito nacional?
Tosco: Nosotros damos nuestra identificación —y la doy personalmente— con la fórmula Obregón Cano-López, porque queremos ser consecuentes con una línea de unidad combativa que ha sido práctica en la CGT, de la cual es secretario general e compañero Atilio López, del peronismo y del sector combativo, como también de otros sectores de izquierda. De ahí que no podríamos reflejar en este proceso electoral otra actitud que nuestra propia práctica, identidad y objetivos sancionados en el Plenario de Gremios Confederados de la CGT de Córdoba. En cuanto al orden nacional no tenemos el mismo concepto por la propia composición del FREJULI, por la presencia de Solano Lima, por lo que significa Frondizi, su Conintes, su entrega del petróleo. Y aún en este momento debatimos con nuestros compañeros cuál ha de ser esa actitud, pero tenga la seguridad de que ella ha de ser consecuente con nuestra trayectoria de unidad combativa, de unidad de todas las fuerzas democráticas, populares, revolucionarias y antiimperialistas de la Argentina.
P.: Yo creo que cabe preguntarle lo mismo a José Rucci, es decir, que haga una definición concreta acerca del Frente.
Rucci: Yo voy a recoger la misma pregunta y si me permite daré la respuesta de un militante peronista y de un trabajador. Nosotros los peronistas apoyamos un programa, al que lo sostiene, el Frente Justicialista de Liberación. Ese es el programa que nace de un movimiento, que es el Movimiento Peronista, y nosotros no podemos admitir como valedero que esa filosofía solamente sea sostenida por determinados candidatos, cualesquiera sean sus matices; tendrán que cumplirlo porque el pueblo así se lo va a exigir. Otro tipo de planteo con respecto al Frente constituiría un factor de perturbación al proceso que va a enfrentar ese sector político.
P.: Rucci, usted ha acusado a Tosco públicamente y en repetidas oportunidades de ser antiperonista. ¿Insiste en esa acusación?
Rucci: Insisto.
P.: ¿Usted Tosco se considera antiperonista?
Tosco: Nosotros creemos que hay sugestivos motivos por los cuales se quiere dividir al país en peronistas y antiperonistas. Con el mismo derecho nosotros señalamos que la división que debe hacerse no es así, sino entre quienes están consecuentemente con la lucha del pueblo y quienes están con la entrega.
P.: Pero eso ya lo dijo Perón...
Tosco:... Yo no soy antiperonista, siento un gran afecto por muchos compañeros peronistas, convivo con ellos y lucho con ellos. Y a su vez en perspectiva pretendo esa unidad combativa con los compañeros peronistas, con las fuerzas de izquierda y revolucionarias. Eso no está aquí, pero sí en la CGT de Córdoba y creemos que en el plano político en general, por eso no nos detenemos en el 11 de marzo, porque la historia está más allá de esa fecha y se construirá con todos los que hemos luchado juntos, peronistas y no peronistas, radicales, marxistas, cristianos, ateos, comunistas, se construirá de esta manera como se está construyendo en Latinoamérica, pero no con alianzas que evidentemente le dan un carácter espurio a ese programa.
P.: Correcto, Tosco, pero usted se escapa un poco. Hace muy poco tiempo dijo: “Si nos proclamamos socialistas no podemos tener un líder como Perón”. Quiere decir que usted está marginado totalmente y al decir que siendo socialista no puede tener un líder como Perón, está del otro lado.
Tosco: Si yo le hablo de que debemos constituir una unidad combativa, la unidad popular, los líderes serán todos aquellos que la...
P.: ¿A usted le gusta la palabra “unidad popular”?
Tosco: A mí me gusta la palabra “unidad popular”.
P.: ¿Al estilo de Chile?
Tosco: Sí, me gusta y apoyo al gobierno de la Unidad Popular que transita hacia el socialismo en la república hermana de Chile. Y a todos los movimientos de liberación latinoamericanos que levantan el socialismo, incluida Cuba.
P.: Y no tiene miedo a cierto tipo de ententes que han hecho durante mucho tiempo los frentes populares, como por ejemplo la Unión Democrática en 1945?
Tosco: Bueno, usted le da ese nombre de “frente popular” a la Unión Democrática no soy yo quien se lo está dando. Por otra parte, la historia está llena, en todos lados, de imperfecciones y el propio pueblo va superando esas imperfecciones y va a construir la unidad popular (se llame así o no se llame así) de nuestro pueblo para liberarnos de la explotación de la oligarquía y de las clases dominantes y del imperialismo. En eso tengo fe, para eso trabajo, con la perspectiva histórica en que está planteada en Argentina y en Latinoamérica.
P.: Señor, hace un momento Rucci dijo que si se llegara a declarar o sacar del ámbito político al FREJULI, se movilizaría la CGT.
Rucci: No dije tal cosa.
P.: Pero dio a entender que se llamaría a la lucha pero mi pregunta va a otra cosa: ¿Por qué si la CGT se declara peronista no se movilizó cuando se lo proscribió a Perón?
Rucci: Es muy difícil poder aceptar para quien no es peronista, la estrategia que tiene el peronismo dentro de los problemas políticos que se debaten en el país. Porque el peronismo no es un partido político, es un movimiento que, como lo dijo el compañero Tosco, tiene un líder, tiene mentalidad revolucionaria y si se encaja como partido político es para enfrentar la batalla dentro de un proceso y asumir el poder. Lo que implica que cuando se entre en este juego, se hace lo que conviene por la sencilla razón de que una actitud emotiva, o una actitud justificada, puede ser el factor o elemento que perturbe esa estrategia y no se logre el objetivo.
P.: ¿Qué es la revolución para usted, Rucci?
Rucci: La revolución es la que se plasmó en 1946 cuando el peronismo, práctica- mente por sus votos, barrió la alianza nefasta de la Unión Democrática.
P.: Pero con eso no la define...
Rucci: Bueno la revolución es. . . Es decir la revolución, mejor dicho una revolución creo que no es ninguna novedad saber lo que es una revolución... Una revolución puede ser cruenta o incruenta. La revolución es provocar el gran cambio que entierre esta estructura que somete a los pueblos; estructuras que someten a los trabajadores y que colocan al país en el terreno de la dependencia. Revolución es liberación, la forma de encarar la revolución, la forma de llevarla y concretarla, eso depende.
P.: Pero si usted dice que la propiedad de los medios de producción debe ser de los particulares, del Estado o del...
Rucci: No. La revolución que sostenemos los peronistas no es la revolución de decir aquello que tenés vos es mío y vos hoy no tenés nada. Es decir, acá, no se trata de apropiar nada. Acá la revolución tiene que tener como objetivo fundamental el respeto a la dignidad humana. Punto segundo: que el capital cumpla una función social y se integre a las necesidades del país.
P.: ¿Usted entiende que en los países socialistas no hay respeto por la dignidad humana?
Rucci: Si usted me dice que Rusia es un país socialista yo le digo que es uno de los pocos países, quizás el único en el mundo, donde el sindicalismo no existe. No hay libertad sindical sino que los dirigentes son funcionarios del gobierno, lo que implica...
P.: Le estoy hablando de Cuba, Rucci.
Rucci: Bueno yo diría que el fenómeno de Cuba es la lógica consecuencia que se plantea en el momento en que vivimos.
P.: ¿Cuál es su posición frente a Fidel Castro, pero concretamente sin tantas palabras?
Rucci: Soy un admirador de la revolución cubana.
P.: ¿Adoptaría ese medio para la Argentina, ese tipo de salida para el país?
Rucci: Yo apoyaría toda revolución destinada a la liberación del pueblo.
P.: Entonces, ¿cómo tendría que ser la liberación del pueblo en un futuro inmediato?
Rucci: La liberación del pueblo en un futuro inmediato se puede dar a través del proceso que el Movimiento Peronista ha optado: las elecciones. Lo que no implica de manera alguna. . . que ese sea el único hecho idóneo para una revolución. Optamos por el camino incruento. Hay un proceso que se gesta en el mundo que nada ni nadie podrá detener.
P.: ¿Todos los sindicalistas optan por ese camino o hay otros que están buscando la conspiración para entenderse con un sector militar?
Rucci: En este aspecto creo que lo fundamental para mí, por lo menos como Secretario General de la CGT, es mantener la vida orgánica, y si algún dirigente ilusoriamente cree que él o algunos más pueden torcer este proceso en el cual está empeñado el movimiento obrero, se equivoca.
P.: ¿Por la vía orgánica de la CGT se puede acceder al poder?
Rucci: Escúcheme. . . yo he sido elegido.
P.: Al poder real del Estado...
Rucci: Nosotros entendemos que el movimiento obrero debe participar en el gobierno.
P.: ¿Pero no se plantea nunca la toma del poder?
Rucci: Escúcheme, permítame: la toma del poder puede ser a través de las elecciones. En 1946 se concretó a través de las elecciones.
P.: Tosco, yo quiero preguntarle ¿por qué cuando estuvo detenido rechazó los pedidos de libertad que se hacían por parte de la CGT? ¿Era porque los hacía Rucci?
Tosco: No. Nosotros no aceptamos el pedido de libertad sino que reclamábamos la libertad (que después la exigió el pueblo por nuestro caso) de todos los compañeros presos, políticos, gremiales y estudiantiles, entre los cuales me encontraba yo. Y porque nosotros, en este momento, no le pedimos a la dictadura la libertad de los presos sino que luchamos. El paro que hemos hecho en la CGT de Córdoba; nuestros pronunciamientos categóricos donde exigimos la libertad de todos los compañeros presos, políticos, gremiales y estudiantiles, son elocuentes.
P.: Pero Rucci, como máximo dirigente de la CGT, tenía la obligación de pedir por su libertad.
Tosco: Yo creo que la obligación que tenía Rucci era la de luchar por nuestra libertad, no la de pedirla. .
P.: ¿Por qué Rucci no luchó por la libertad de Tosco?
Rucci: Yo quiero aclarar que también he sido tirado a las mazmorras de las cárceles, yo también he sido tirado a la bodega de un barco. En aquella oportunidad el compañero Tosco era dirigente y yo no creo que haya hecho nada, tampoco por la libertad de los presos que estábamos en aquella época, en 1955 y 1956.
P.: ¿Qué dice Tosco a eso?
Tosco: Yo tengo el honor de decir que jamás decliné la realización de un paro y siempre —y pongo como testimonio a la clase obrera de Córdoba— estuve adelante, impulsando, promoviendo la lucha por la libertad de los presos. Y en aquel momento evidentemente, estábamos en la lucha y no tal vez con el conocimiento que hoy tiene la gente de nuestra actitud, pero sí permanentemente estuvimos en la lucha.
P.: Es decir, que usted nunca ha claudicado...
Tosco: Yo creo que tengo como el común de la gente errores e imperfecciones. Conscientemente jamás lo haré.
P.: ¿Usted Rucci se siente claudicante?
Rucci: Exactamente lo mismo. Yo nunca he claudicado. No hay razones ni motivos para claudicar. Porque en este momento en que se plantean tantos problemas al país, sería muy cómodo irme de la CGT, pero asumo la responsabilidad y he tenido el gran honor de que los trabajadores me hayan colocado al frente de la CGT. Y ahí voy a estar.
P.: ¿Usted tiene algo que ver con esa famosa frase que se le adjudica de que Tosco es el dirigente de la triste figura? Ocurre que estamos portándonos como chicos buenos de colegio cuando en realidad ustedes se han enfrentado realmente, con unas solicitadas tremendas. Además, usted dijo, Rucci, que en el movimiento peronista había infiltrado asquerosos bolches, aludiendo directamente a Tosco, Guillán y otros dirigentes.
Rucci: No. ... No... Yo puedo haber dicho eso, pero de ninguna manera ese tipo de calificativos o agravios pueden haber sido dirigidos a determinadas personas, como el compañero Guillán, porque es peronista. Está dirigido este calificativo a quienes solapadamente se esconden detrás de un bombo o se infiltran en el movimiento peronista, gente que nada tiene que ver con el movimiento obrero. Me parece que he sido claro porque en ningún momento he mencionado nombres, por lo menos con ese tipo de agravios.
P.: ¿Qué es infiltrarse en el movimiento obrero? ¿Es gente que no piensa como usted?
Rucci: No... . De ninguna manera.
P.: ¿Cree que se da en el movimiento obrero la división peronista y antiperonista?
Rucci: No. El compañero Tosco ha dicho una cosa con la que yo estoy completamente de acuerdo: “El peronismo no es sectario”. Incluso el Partido Comunista en la época de Perón tenía personería jurídica y votaba.
P.: Si es así, ¿por qué usted los trata como asquerosos bolches?
Rucci: Porque todo aquel que atenta contra la unidad orgánica del movimiento obrero que no es un invento de Rucci, ni un invento de Tosco, sino un invento de los trabajadores, a través de sus cuerpos orgánicos que se han organizado y tienen una central obrera. De este modo quienes atenten contra esa unidad con slogan que nada tienen que ver con los trabajadores, son infiltrados.
P.: Usted, Tosco, ¿cree que atenta contra la unidad del movimiento obrero?
Tosco: ¿Cómo? ¿De qué forma atento?
P.: ¿Usted acata la autoridad de Rucci?
Tosco: Como directivos de la CGT nosotros acatamos resoluciones de los cuerpos orgánicos. Y cuando estamos en la lucha siempre hemos cumplido. La CGT de Córdoba jamás dejó de cumplir un paro.
P.: Usted no me contesta la pregunta.
Tosco: Es que Rucci no es el dueño de la CGT. No hay máxima autoridad para nosotros. Sólo hay cuerpos orgánicos democráticamente constituidos y todas las resoluciones se dan en ese carácter que es lo único que respetamos. Córdoba jamás ha dejado de cumplir un paro, ha hecho muchos más paros que la CGT. Porque la CGT nacional se ha limitado a una serie de paros, y nosotros creemos que se puede ir mucho más allá, como lo hemos probado.
P.: Tosco, ¿me permite? Nosotros creemos que Córdoba es un caso atípico dentro del movimiento obrero del país. Con todo es posible que para la unidad del movimiento obrero, con una sutura de las 62 Organizaciones, se consiga una unidad que englobe a no peronistas como usted y peronistas como Rucci. ¿Puede funcionar en la práctica?
Tosco: Córdoba no es una isla, ni está fuera del país ni del mundo. Nosotros creemos que con buena voluntad, con comprensión, con espíritu de lucha, se puede llegar a una unidad. Córdoba no es una isla y el Cordobazo al contrario, expresa la avanzada de las luchas obreras y populares argentinas que luego se dieron en Tucumán, Rosario, Malargüe, Trelew, etc., es porque tiene ese papel, y detrás de esto —no con un sentido de subordinación sino como expresión de un proceso histórico— se va dando la lucha de todo el movimiento obrero y se va a dar en el orden nacional.
P.: Para usted, Rucci ¿la CGT de Córdoba es una isla dentro del movimiento obrero?
Rucci: Yo no diría eso. Yo quiero hacer notar que la CGT de Córdoba tiene una característica muy particular. Yo soy un ferviente defensor del movimiento obrero sindicalmente organizado, del debido respeto a los cuerpos orgánicos que han elegido los congresos. He dicho hace un rato que hay setenta y pico de delegaciones regionales en todo el país. Todas, absolutamente todas, cumplen y consultan a la Central Obrera para tomar cualquier determinación. La única CGT y los únicos dirigentes que no han consultado jamás para tornar actitudes son los de la CGT de Córdoba. Si lo hubieran hecho como lo hizo el compañero Fiorentino de Mendoza, que consultó, y la CGT de inmediato se puso del lado de los trabajadores de Mendoza e intervino en el conflicto e hizo todo el aporte necesario para. . .
P.: ¿A usted le parece que era necesario que consultara cuando la gente ya estaba en la calle?
Rucci: ¿Cómo cuando la gente estaba en la calle? Sí, la gente de Mendoza estaba en la calle, pero el compañero Fiorentino, inmediatamente se comunicó con la Central Obrera, para decir la actitud de la gente, y. . .
P.: ¿Para pedir permiso?
P.: ¿No será que la CGT de Córdoba es rebelde? ¿No tendrá motivos?
Rucci: Yo no diría que es rebelde. Yo más bien diría, como lo señala el compañero Tosco, que su forma de conducir al movimiento no es la misma que nosotros queremos imponer a las otras delegaciones del interior del país.
P.: Entonces diremos que la CGT de Córdoba, no será una isla, pero es una CGT con personalidad propia.
Rucci: A pesar de que se dice lo contrario, cuando se habla de unidad, no se concibe dos centrales obreras, y nadie puede admitirlo aunque los hechos y la forma como se lleva a cabo ciertas actitudes están demostrando que realmente quieren dos centrales obreras.
P.: En cierto modo, ¿no es una acusación un poco corporativista?
Rucci: No es una acusación corporativista. Es el resultado de normas que fueron legisladas por los congresos nacionales de la Confederación General del Trabajo. En el supuesto caso de que no sean útiles, será un congreso el que reformará, pero hasta el momento, ese es el estatuto de la central obrera y como dirigentes disciplinados a ese estatuto nos debemos ajustar.
P.: Esa rebeldía que se advierte en la CGT de Córdoba, en relación a la Central Obrera, ¿a qué se debe fundamentalmente, a la directiva de Rucci o a un problema del Consejo Directivo?
Tosco: A que la CGT de Córdoba interpreta el mandato de las bases. A que la CGT de Córdoba está ligada a las aspiraciones de los trabajadores. Quieren luchar, y la CGT de Córdoba lleva a la práctica esa lucha, cosa que no hace la CGT nacional.
P.: Perdón, aquí Rucci quiere aclarar.
Rucci: La Central Obrera cumple estrictamente con el mandato de los trabajadores. Acá nadie puede sentirse, menos en el caso de dirigentes como el compañero Tosco, dirigente auténtico, que responde a las bases, porque el Comité Central Confederal es el genuino cuerpo que está ligado a las bases integrado por los secretarios generales de todo el país, incluso por el secretario general de Luz y Fuerza, que es el compañero Félix Pérez.
P.: Rucci: ¿Cuál es su posición respecto a la situación de una fábrica automotriz de Córdoba, en la que los trabajadores mayoritariamente se pronunciaron por su afiliación a SMATA y que por una resolución ministerial tuvieron que incorporarse a la Unión Obrera Metalúrgica? ¿Usted apoya a los trabajadores en su pronunciamiento mayoritario a SMATA o apoya su incorporación a la UOM por resolución oficial?
Rucci: Yo le voy a aclarar, porque no es fácil que diga que estoy con la UOM porque yo soy metalúrgico. No quiero entrar en esos términos a la cuestión. Nosotros sostenemos que el sindicalismo debe instrumentarse representando la actividad del trabajador. La actividad de los compañeros de Fiat, como de cualquier actividad parecida en el mundo es metalúrgica. Porque el tornero que trabaja en cualquier fábrica es siempre tornero, ya que la actividad es metalúrgica. El encuadramiento sindical no debe estar basado en la política ni en los dirigentes, sino en la actividad específica que desarrolla cada trabajador.
P.: ... ¿Pero, y la voluntad del trabajador?
Rucci: ¿La voluntad del trabajador? Bueno. Suponga que la UOM tiene 200.000 afiliados y 10.000 fábricas, y se llega a un plebiscito para saber a qué sindicato se afilia, lamentablemente el sindicalismo sufriría una. . .
P.: ¿Dónde está la democracia?
Rucci: La democracia está dada por la Ley de Asociaciones Profesionales que establece: Si usted es empleada de comercio no puede estar afiliada a la Unión Obrera Metalúrgica, porque es empleada de comercio. Luz y Fuerza no puede afiliarse a la Unión Obrera Metalúrgica porque es Luz y Fuerza. No hay litigio. Hay cumplimiento de la ley, porque la ley establece que el encuadramiento sindical está basado en la actividad que desempeña esa planta industrial o esa entidad comercial.
P.: ¿Usted entiende, Rucci, que habría que modificar esas leyes que están provocando problemas?
Rucci: No. No. Nosotros en la época de Perón teníamos la ley de asociaciones que lamentablemente ahora ha sido reformada a través de un decreto que establecía con absoluta claridad que el sindicalismo tenía que estar agrupado por actividad y no por posiciones de dirigentes.
P.: Vamos a escuchar la otra campana. ¿Qué opina Tosco al respecto?
Tosco: Si me permiten quiero hacer referencia a una pregunta que estaba perfectamente vinculada porque incluye mi nombre en un supuesto mensaje del general Perón, donde se hace referencia al dirigente de la “triste figura”. Esto a nuestro juicio está impuesto por la burocracia sindical. A su vez esta frase nos hace recordar al Quijote. El libro de Cervantes Saavedra. Y a su vez nos hace recordar otra cosa del libro. En una oportunidad dijo: “Ladran, Sancho, señal de que cabalgamos”. Esto es lo que nosotros respondemos a la burocracia que tergiversa las gestiones y nos hace aparecer a nosotros como.
P.: ¿Perón es la burocracia, entonces?
Tosco: Esto está dado por la burocracia hasta ahora. Ha sido convalidado hasta el presente por otra cosa. Puede existir una presión, una distorsión o directamente no ser así. Ahora, en el caso de SMATA, nosotros decíamos: en la Ley de Asociaciones Profesionales de Perón o en esta ley de asociaciones profesionales, los trabajadores de la industria automotriz, en Córdoba están afiliados al SMATA desde hace mucho tiempo. En el caso de Fiat Concord, es específicamente de la industria automotriz. Y con esto no quiero hacer una cuestión contra la Unión Obrera Metalúrgica, sino ubicar en su justo término el problema. Por otra parte si los trabajadores de Fiat resolvieron por abrumadora mayoría afiliarse al SMATA, el Ministerio de Trabajo, el señor San Sebastián, el ministro de la dictadura, es quien resuelve que los compañeros no estén dentro de lo que es la organización profesional de la industria automotriz de Córdoba porque lo que es IKA, todas las industrias automotrices están dentro de SMATA, en este caso se ha violado la voluntad democrática de los trabajadores y se ha tergiversado en el caso de Fiat Concord —no diría lo mismo en el caso de Materfer— lo que es una práctica y una propia legislación.
P.: ¿Cuál es a su criterio el objetivo político de esa determinación?
Tosco: Ir contra el SMATA, que está en la lucha, es ir contra la propia voluntad de los trabajadores que luchan contra la patronal y la dictadura, por lo cual han sufrido toda clase de persecuciones y represiones.
P.: ¿Es aumentar el poder económico del sindicato metalúrgico?
Tosco: De hecho se aumenta la representatividad. También se aumenta el poder económico en todos los aspectos.
P.: ¿Cuál es su opinión sobre los disueltos sindicatos de SITRAC y SITRAM?
Rucci: Antes voy a hacer una aclaración. No porque el general Perón necesite que yo lo defienda. Rechazo absolutamente el absurdo de que el general Perón se le va o se le exige. . . porque cuando el general Perón se forma el concepto de un hombre, lo hace y piensa, él está convencido de que está expresando para él la verdad. . .
P.: Claro que varias veces cambia de puntos de vista rápidamente, como sobre Coria, a quien hace un mes elogió. . . y luego lo critica. . .
Rucci: No me consta que el general Perón haya elogiado a Coria.
P.: Si salió en todos los diarios. . . y luego lo trató de traidor. .
Rucci: Le ruego a usted que me traiga algún diario donde el general Perón hace elogios a Coria.
P.: Yo recuerdo al general Perón con Coria en las 62 Organizaciones en el acto en que únicamente habló, en un acto peronista.
Rucci: Yo no tengo la culpa, y menos el general Perón, si el secretario de las 62 Organizaciones en ese momento era Coria.
P.: Usted admitirá, Rucci, que si el general Perón, siendo secretario de esa Organización Coria, dijo que es un ejemplo a nivel mundial las 62 Organizaciones, más bien no hay una ambigüedad.
Rucci: No es que el movimiento obrero, para el movimiento obrero es un orgullo, un halago que se tenga en el exterior un concepto así.
P.: ¿Qué opina de las 62 Organizaciones?
Rucci: Soy un hombre de las 62 Organizaciones, así que no puedo opinar mal.
P.: ¿Qué opina usted de Coria, Rucci?
Rucci: Yo a Coria posiblemente lo haya visto después de estar casi dos años de secretario general de la CGT. El hecho de que no hayamos mantenido conversación durante dos años es de suponer que mi opinión sobre él no se ligaba en absoluto a Rogelio Coria.
P.: ¿Pero, por qué no lo hizo público antes?
Rucci: Porque dentro del movimiento obrero cada gremio tiene el secretario general que ese gremio se impone. Coria nunca manejó las 62 Organizaciones. Había una mesa de cinco miembros, que no tienen ni presidente ni secretario. Los cinco con los mismos derechos. Y uno de los cinco era Coria.
P.: ¿No era un pilar importante del movimiento sindical como para que no tuviera con usted un solo contacto en dos años?
Rucci: El compañero Coria concurría al Comité Central Confederal, planteaba sus cosas como las planteaba, no tenía nada que ver con la conducción de la CGT. Y en las 62 Organizaciones era un hombre más que representaba a su gremio.
P.: ¿Pero no existía confusión en el movimiento obrero...?
Rucci: En absoluto. El movimiento obrero argentino está perfectamente unido y organizado de acuerdo a las normas que le han impuesto los propios estatutos.
P.: Aquí con Tosco tenemos todo lo contrario, porque critica a la CGT.
Rucci: Yo voy este. . . a recoger las mismas expresiones de él. . . como. . . Cabalga Sancho y si cabalgamos es porque estamos galopando. . . Si se acuerdan de la Central Obrera es porque es importante. . . Yo conozco perfectamente bien, porque yo hace dos años que estoy en la Central Obrera y era un dirigente de bastante abajo, que nunca se habló tanto de la central obrera como se está hablando ahora. ¿No será porque la Central Obrera se está reencontrando con los que no supieron hacerla reencontrar otros dirigentes y hoy se ha convertido en un factor de poder? ¿No será esa la gran causa que determina la gran crítica a la Central Obrera?
P.: ¿La CGT es factor de poder, Tosco?
Tosco: Yo creo que ese es un concepto que está encuadrado en el concepto de defensa del sistema. Para nosotros el movimiento obrero y la CGT deben ser una palanca para transformaciones revolucionarias en esta sociedad capitalista.
P.: ¿Rucci entonces está defendiendo el sistema?
Tosco: Si entiende que es un factor de poder la coloca dentro del sistema.
P.: Usted, Tosco, dijo que Rucci defendía el sistema.
Tosco: Y, evidentemente, si entra dentro del sistema...
Rucci: Cuando a un hombre le hacen un reportaje y dice lo que yo he dicho en un reportaje en “Nueva Plana” y en la revista “Mayoría”, indudablemente me parece que estamos muy lejos de estar defendiendo el sistema.
P.: Rucci, en ese reportaje de “Nueva Plana” usted dijo hablando de la juventud peronista que en ciertos aspectos tiene razón. ¿Qué quiere significar con eso? En qué falla la juventud peronista. Esa actitud tiene algo de paternalista de poner la mano en el hombro.
Rucci: No. Eso de poner la mano en el hombro no, es un juicio suyo. El sentido de lo que dije, me pretendo referir a otra cosa. La juventud peronista hace críticas a determinados dirigentes gremiales, yo me animo a admitir que ciertas críticas son valederas, cuando digo que en cierta forma tienen razones.
P.: ¿Se hace una autocrítica?
Rucci: No en este momento, dije que soy consciente de mis responsabilidades y las he asumido íntegramente. Y me consta que mis actitudes pueden ofrecer conceptos contrarios a la honestidad y lealtad de los trabajadores.
P.: ¿La juventud peronista lo apoya a usted, Rucci?
Rucci: Soy muy amigo de infinidad de compañeros de la juventud peronista.
P.: Cuando Tosco estuvo detenido en la cárcel dio a conocer a la opinión pública una serie de críticas a su persona. Usted trató de lograr un pedido de amnistía. ¿Debe interpretarse esa actitud suya como demagógica?
Rucci: Quiero aclarar que me siento un hombre con dignidad. Y que merecen mi mayor respeto aquellos hombres que caen presos aún por un ideal que yo no comparto. Esto significa que el compañero Tosco a pesar de estar en la cárcel, podría decir que casi diariamente la prensa le ofrecía sus páginas para criticar al secretario general de la CGT. Y el secretario general de la CGT permaneció mudo. Y recién cuando el compañero Tosco salió en libertad, en igualdad de condiciones, entonces, yo recién dije lo que era mi verdad.
P.: ¿Significa que el sistema lo defendía mandándolo preso?
Rucci: Yo no he dicho que el sistema lo defendía mandándolo preso. Pero usted fíjese que resulta sospechoso que cuando un hombre está detenido tenga la facilidad de dar comunicados a la prensa y la prensa de publicárselos. Yo no voy a decir que está en el sistema, pero sí que inconscientemente, con esos comunicados estaba sirviendo al sistema, porque esos comunicados atentaban contra la unidad de la Central Obrera.
P.: Pero usted, ¿está en contra o a favor del sistema?
Rucci: Usted no me haga esa pregunta porque le consta que soy un peronista con una postura bastante conocida y definida. No cabe ese tipo de preguntas, no tiene sentido. No estoy con el sistema, ni comparto el sistema.
P.: Aquí Tosco quiere aclarar.
Tosco: Quiero aclarar algunas cosas. No es tal el silencio en cuanto a que nosotros estábamos presos. Aquí tengo yo una carpeta firmada por el Sindicato de Luz y Fuerza de Córdoba y la Federación Gráfica Bonaerense, donde refuta los conceptos de Rucci y en la cual acusa al compañero Ongaro de ser “trotsko” y de que yo estaba en la cárcel como medio de promocionarme. Esto además de injusto, es arbitrario. Las cartas, pocas cartas, que sacamos de la prisión, eran transmitidas en los locutorios por nuestros abogados que las sacaban en sus portafolios que son inviolables. Y esas cartas me significaron nueve sanciones que me aplicaron tanto en Devoto como en Rawson, incluso una vez con la visita de los ómnibus de Córdoba, no pude ver a mis familiares, a los compañeros, porque estaba sancionado. Este documento pueden requerirlo al Servicio Penitenciario Federal. Las cartas me costaban a mí sanciones en el Penal y creo que me costaron también muchos meses más de prisión. Sin embargo, nuestra actitud fue aun desde dentro de la cárcel, seguir defendiendo nuestras posiciones, y si teníamos que hacer acusaciones o críticas sobre la Central Obrera también las hacíamos, pero jamás omitimos una crítica a la Central Obrera, al imperialismo, una crítica a la dictadura, a todos esos factores que hacen a la situación actual de dependencia, de opresión, de explotación de nuestro pueblo y a nuestra Patria. Si fuera preso otra vez, trataría de sacar un tomo de cartas, porque creemos que es la forma de responder a los compañeros que están afuera, luchando, que están en los paros que lo levantan a uno sin ningún tipo de vanidad, como bandera de una lucha. Por eso lo hice, lo haría nuevamente, y no soy el único que sacó cartas. Los compañeros del penal sacan cartas.
P.: Tosco, ¿cuál es su diferencia de estar varios meses en la misma celda con Raimundo Ongaro? ¿Cuáles son sus diferencias con él?
Tosco: El compañero Ongaro es peronista, no es trotskista, como una vez lo acusó Rucci en La Pampa. Las diferencias que tengo con Raimundo son de enfoque, pero no hay mayores diferencias con él. Nosotros respetamos su lucha, su posición, su ideología y no tenemos mayores diferencias. Creemos en la unidad de acción, en la unidad en la lucha con todos aquellos que estén con este factor fundamental que es el movimiento obrero que es el de la palanca para la liberación nacional y social de Argentina.
P.: Rucci, ¿usted qué piensa de Raimundo Ongaro?
Rucci: El compañero Raimundo Ongaro sostiene que es peronista. Se presume que es dirigente obrero o influyente dentro del gremio que él dirige. El general Perón estableció la normalización de las 62 Organizaciones y en la historia de las 62 Organizaciones a pesar de que Ongaro dice que es peronista, jamás adhirió la Federación Gráfica a las 62. Creo que es un peronista bastante particular.
P.: Yo no soy peronista, pero pertenezco al gremio de prensa y debo soportar que mi gremio se adhiera a un nucleamiento partidario.
Rucci: Es que no es un nucleamiento partidario. Quién le dijo que las 62 Organizaciones. . .
P.: Es el brazo gremial del movimiento peronista.
Rucci: Las 62 Organizaciones mantienen una filosofía que se plasma dentro del movimiento peronista. Quiero decir que es un movimiento que no se cierra dentro de un esquema partidario.
P.: ¿Qué opina usted de las 62 Organizaciones?
Tosco: Es un nucleamiento sindical que levanta las banderas del peronismo. No pertenezco a él. Levanto yo las del Movimiento Nacional Intersindical.
P.: ¿Qué ideología tiene el nucleamiento al que usted pertenece, Tosco?
Tosco: El Movimiento Nacional Intersindical es socialista, levanta la bandera de la liberación nacional y social.
P.: ¿Qué modelo de socialismo?
Tosco: Nosotros tenemos como todo socialismo, el modelo que la trayectoria, la circunstancia y posibilidad histórica le va a dar a nuestro país.
P.: ¿A través del marxismo?
Tosco: Yo tengo raíz marxista. Pero entiendo que el socialismo en la Argentina tiene una raíz heterogénea. Hay compañeros que levantan en el peronismo al socialismo.
P.: ¿A través del peronismo, se puede llegar al socialismo?
Tosco: Evidentemente ese compañero peronista va asumiendo el socialismo, está tomando los nuevos niveles de la nueva sociedad que hay que construir. En unidad con los demás sectores.
P.: ¿Sostiene la lucha de clases el Movimiento Intersindical?
Tosco: Más que sostener interpreta un hecho histórico que es la lucha de clases.
P.: La juventud radical también lucha por el socialismo.
Tosco: El radicalismo como partido no plantea el socialismo. El socialismo, volviendo un poco, es levantado por el plenario de gremios confederados de Córdoba que marca la línea de la lucha, por la vía antiimperialista, hacia el socialismo. La heterogeneidad de nuestro socialismo está en que tiene raíz peronista, marxista, cristiana, por el Movimiento de Sacerdotes del Tercer Mundo, que viene de distintos movimientos que lo levantan como bandera. En la juventud radical debemos reconocer especialmente en los sectores ligados al movimiento estudiantil que también levantan el socialismo, esa nueva sociedad sin explotados ni explotadores, nueva sociedad socialista argentina, hecha según nuestra propia trayectoria y compuesta de heterogeneidad. Y por eso levantamos la unidad para construir.
P.: ¿El peronismo plantea la lucha de clases?
Rucci: El peronismo plantea la unidad de todos los sectores. . . No plantea la lucha de clases. Bien lo ha dicho el general Perón cuando estuvo acá. Esta no es una cuestión de partidos políticos sino que esta es una cuestión programática nacional en la cual tienen participación todos los que estén dentro de esta filosofía en lo que respecta al socialismo. El socialismo que se plantea en este momento en la Argentina se nutre también en el propósito de evolución de los pueblos. El peronismo no es un movimiento estático. Evoluciona, y dentro de esta evolución da lugar aún proceso que va a terminar en el socialismo nacional.
P.: ¿Podría definirlo?
Rucci: El socialismo tiene, en distintos países del mundo, diversos matices. El socialismo que yo planteo es una integración de una sociedad donde fundamentalmente, por sobre los sectores o grupos, prive el respeto a la dignidad y priven también los fundamentos en que está basada nuestra sociedad.
Tosco: Nuestra visión del socialismo nace incluso del programa de Huerta Grande, del manifiesto del primero de Mayo de la CGT de los Argentinos y del documento de octubre del Movimiento Nacional Intersindical. Nosotros queremos rescatar los medios de producción y de cambio que están en las manos de los consorcios capitalistas, fundamentalmente de los monopolios, para el pueblo, socializarlos y ponerlos al servicio del pueblo. Nuestro punto de vista es que deben desaparecer las clases y que debe existir una clase, la de quienes trabajan. Y no como ahora que existe la de los explotados que trabajan y la de los explotadores que sólo viven del esfuerzo de los demás.
Rucci: Yo planteo que eso no es socialismo sino marxismo.
P.: Rucci, ¿le tiene mucho miedo al marxismo?
Rucci: No, no le tengo miedo. Pero considero que en este momento, el marxismo ya no tiene más vigencia en el mundo.
P.: ¿Usted no considera que el marxismo puede ser un aporte para el peronismo?
Rucci: El peronismo puede tener aporte de todas las ideologías, siempre y cuando encajen dentro de la filosofía que plantea el peronismo.
P.: José Rucci es el secretario general de la CGT y evidentemente todo trabajador se mueve en términos económicos sobre todo en este momento en el país. Yo quiero saber como trabajador también, ¿cuál es la tarea que desempeña el secretario general de todos los trabajadores plasmándolo en hechos concretos?
Rucci: Estos planteos que se hacen a nivel de la CGT tienen otro trasfondo. Yo he sostenido y sostengo que el dirigente gremial que se limita a plantear reivindicaciones sociales es un mentiroso. Y sostengo que las reivindicaciones sociales son la resultante de la justicia social. Y únicamente para lograr la justicia social hay que asumir el poder. El dirigente gremial tiene que estar perfectamente esclarecido. El planteo que se formula en este momento es asumir el poder. Integrados todos aquellos que se dispongan a defender los intereses de la Nación, sean peronistas o no.
P.: ¿Usted cree que existen explotados y explotadores?
Rucci: Existen explotados y explotadores. Entonces nosotros tenemos que plantear la cuestión para que desaparezcan los explotados y los explotadores dentro de una sociedad integrada, cada uno con sus obligaciones y sus derechos, pero jamás como está ocurriendo en este momento. Un millón y pico de trabajadores prácticamente sin la posibilidad de llevar sus salarios a sus casas y con salarios que no conforman. Todo eso es el resultante, no - como muchos suponen - de la actitud de la Confederación General del Trabajo; esto tiene origen en un sistema que, aunque muchos dicen que lo combaten se complican con el sistema, combatiendo a la Central Obrera. Nosotros estamos en la lucha por la asunción del poder. Hemos optado, como hombres que militamos en el Movimiento Peronista, por ese camino: el de las elecciones.
Pero ahí no termina. Porque nosotros sabemos que este proceso se ha aceptado y sigue su marcha. De ahí es que si el gobierno intenta proscribir o detener estas elecciones no significa que nos quedaremos cruzados de brazos y tolerando el sistema.
P.: ¿Usted identifica el concepto de explotado y explotadores con el sistema capitalista?
Rucci: Acá en este momento se plantea una cuestión de dependencia. Y no solamente la presencia de monopolios en nuestro país, sino de argentinos cipayos, que se ofrecen a esos monopolios. Lo que significa que lo primero que hay que plantear cuando el gobierno asuma el poder es la defenestración de todos aquellos capitales que no están al servicio de la Nación y que no se integran dentro de la comunidad. Como hay industriales mercenarios, industriales, que se ofrecen con generosidad a los capitales extranjeros, también hay industriales que son argentinos y tanto o más nacionalistas que nosotros.
P.: ¿El capital nacional explota igual que los monopolios?
Rucci: El capital nacional si se integra en la comunidad y ofrece al trabajador un salario digno que le posibilite vivir decorosamente, no explota. Si el capital nacional tiene al trabajador en su fábrica sometido, con salarios inmerecidos y dentro de un régimen que lo somete, es tanto o más explotador y comete mayor delito que el de afuera, por el hecho de ser argentino.
P.: ¿Cuál es su opinión, Tosco?
Tosco: El movimiento obrero no puede menos que plantearse, en esta etapa, los grandes problemas que surgen de la dependencia. Debe plantearse entonces, la liquidación del dominio imperialista en nuestro país —particularmente del imperialismo yanqui—, sobre la base de medidas con cretas y, al mismo tiempo, en estrecha solidaridad con los movimientos de liberación, como en el caso del gran triunfo del pueblo vietnamita, y la lucha de los pueblos de Africa y Asia, que también levantan estas banderas de independencia. Quien se queda en los estrechos márgenes del economicismo del movimiento obrero que demanda solamente aumentos de salarios va a ser permanentemente un apéndice del sistema, pero esas son banderas que se levantan desde hace mucho tiempo en el movimiento obrero. Son banderas que se continúan levantando; pero que hay que llevarlas a la práctica porque no es cuestión de inscribirlas en algún documento o de exponerlas en alguna oportunidad de debate, sino reivindicarlas en la práctica. Por otra parte le diré que, donde hay un asalariado y hay un capitalista, hay explotados y explotadores. Lo que no quiere decir que en el proceso de cambio, que nosotros llamamos de liberación nacional y social, no haya etapas que debemos cubrir en alianza con aquellos sectores de la pequeña burguesía y de la mediana burguesía, que estén dispuestos a enfrentar esa penetración imperialista que no tiene solamente una hegemonía continental sino que hay también una hegemonía extracontinental.
P.: ¿Aún dentro del radicalismo? Porque a usted siempre se lo vincula con el radicalismo. Inclusive hace muy poco tiempo le preguntaron qué opinaba del doctor Balbín y usted dijo que no lo conocía. Eso parece un chiste. Porque, aunque usted no lo conozca personalmente, no es necesario para opinar sobre él...
Tosco: Yo he dicho que Balbín representa el sector de derecha, el sector conservador del radicalismo. Y ese planteo lo ratifico aquí.
P.: ¿Y el doctor Illia también? Usted ha tenido contacto epistolar con él.
Tosco: El doctor Illia es un amigo personal al cual respeto. He tenido contacto epistolar con él. No lo niego. Lo asumo con toda honestidad. Sin que ello signifique que comparta la política y la ideología del doctor Illia. Porque es una ley que no sólo somos amigos de aquellos con los cuales nos sentimos identificados ideológicamente.
P.: ¿Con los dirigentes de la Alianza Popular Revolucionaria, Alende y Sueldo, se siente identificado?
Tosco: Personalmente los conozco también...
P.: Pero con el programa...
Tosco: No soy Demócrata Cristiano ni soy del Partido Intransigente. Creo que hay una serie de programas, que como en el caso del peronismo levantan reivindicaciones fundamentales antiimperialistas, también en el caso de la Alianza Popular Revolucionaria me siento identificado con puntos fundamentales de su plataforma.
P.: ¿Y con respecto al FIP?
Tosco: Si tenemos un criterio realmente no sectario, un criterio realmente de unidad, no podemos hacer una identificación global con determinadas siglas partidarias, pero sí con aspectos de su programa.
P.: Usted ha dicho que tanto la fórmula Cámpora-Lima como la radical de Balbín, representan los márgenes de derecha del peronismo y del radicalismo.
Tosco: Así es. Y en el caso del peronismo, particularmente con el doctor Solano Lima, que ha dicho en Resistencia que si acceden al poder van a erradicar al marxismo (que es una ideología respetable, como todas las ideologías) porque pregona la lucha entre los hombres. No. No pregona la lucha entre los hombres, va contra aquellos que por la vía militar o por la explotación capitalista, por la explotación imperialista, se sirven de esos otros hombres. Claro que eso que él ha caratulado guerra, nosotros la asumimos, la sostenemos, y también ha de ser contra él que no tiene una trayectoria muy popular que digamos.
P.: Es decir, que no obstante el nombre del doctor Solano Lima que integra la fórmula del Frente, ¿usted encuentra en el movimiento peronista coincidencia con la postura, con la ideología que usted sustenta?
Tosco: Pero evidentemente. El peronismo combativo, nuestros hermanos peronistas con los que estamos todos los días, lo que constituye lo fundamental del movimiento peronista, que es la clase obrera. No sólo nos sentimos identificados sino hermanados como clase obrera para la lucha común y esperamos esa gran unidad con ellos a la que ya me he referido.
Rucci: Acá estamos para esclarecer, ¿no es cierto? A mí no me gusta que me coloquen donde no estoy. Creo que en este caso particular se desprende colocarme donde yo no estoy. En primer lugar, soy un hombre muy respetuoso de cualquier ideología. No soy antimarxista, ni soy anticomunista, ni anti nada. Soy peronista y respeto la ideología de todos. Y creo que en un proceso como este todos tienen derecho a votar y a dar sus opiniones. Yo voy a votar la fórmula Cámpora-Solano Lima.
P.: ¿Y le parece bien lo dicho por Solano Lima?
Rucci: No las conozco. Pero si Solano Lima ha pretendido marginar a determinadas ideologías que se plantean en el terreno político, creo que está cometiendo un error.
P.: Pero lo va a votar igual.
Rucci: Solano Lima no es, en definitiva, el hombre del Frente sino que es parte del Frente y tendrá que someterse al programa que tiene el Frente.
P.: ¿Y cómo define usted ese programa? Porque el doctor Bidegain mencionó en San Andrés de Giles a Mussolini y citó su frase: “Si avanzo, seguidme. . .“, etcétera.
Rucci: En el año 1946 también decían que Perón era fascista.
P.: Pero Bidegain lo dijo.
Rucci: Pero a mí no me consta.
P.: ¡ Ah! no le consta. ¿Cómo debemos hacer para que le conste?
P.: Cuando usted estuvo en España se le atribuyó haber declarado que cuando regresara a la Argentina iniciaría una campaña por la erradicación de la infiltración marxista del movimiento obrero. ¿Son reales estas declaraciones?
Rucci: Es totalmente falso. Le quiero aclarar que no soy de aquellos que dicen, como mucho se ha dado en decir, de que pretendo hacer discriminaciones ideológicas en la Confederación General del Trabajo. En la CGT, e incluso en el Consejo Directivo, hay miembros que no son peronistas. Hay dirigentes comunistas que van al Comité Central Confederal y son respetados. No se trata acá de señalar una cuestión de carácter ideológico. Aquí se trata de que esa ideología no sea el caballo de Troya para tratar de perturbar y desunir al movimiento obrero, lo que es una cosa muy distinta.
P.: O de torcerlo.
Rucci: O de torcerlo dentro del camino que se ha dado como objetivo.
P.: Pero si la gente quiere torcerlo.
Rucci: Acá hay cosas que usted no tiene la obligación de conocerlas porque no milita en el movimiento obrero. Ahí cerca se reunieron 700 delegados que se desparraman a lo largo y a lo ancho del país. 500 delegados que vinieron en representación de los trabajadores del interior del país. Y fueron ellos los que eligieron en la asamblea de la CGT a Rucci, con sus votos. Yo no creo, sería desmerecer mucho a los trabajadores, para pensar que cometieron tal error de elegir como sus dirigentes a traidores.
P.: ¿Por qué a traidores?
Rucci: Porque hay algunas personas que hacen calificativos de esa naturaleza.
P.: ¿Qué opina usted de los procesos internos de la CGT?
Tosco: Yo no creo que se trate de un error de los trabajadores, sino de la imposibilidad de expresarse democráticamente.
P.: ¿Por qué ocurre esto?
Tosco: Por la intervención de las patronales, del Ministerio de Trabajo y de las burocracias.
P.: Rucci, ¿hay burocracia?
Rucci: Yo quisiera primero discriminar. Porque a veces las palabras, si están ligeramente expresadas, suenan a hueco. Burocracia sindical ¿y qué es la burocracia sindical? ¿Qué es lo que hay que hacer para no ser burócrata sindicalmente? Primero quiero saber qué es burocracia.
P.: Vamos a preguntárselo a Tosco enseguida.
Tosco: La burocracia sindical es el ejercicio de los cargos sindicales con el criterio que se señaló aquí. Es decir, reducir todo al sindicalismo, de administrar, desde posiciones de poder, los beneficios sociales, de discutir especialmente los convenios colectivos de trabajo, de quedarse gobernando al movimiento obrero desde posiciones administrativas. Es decir, desde el mismo término burocrático surge: el poder, gobierno de empleados. Significado gramatical que trasladado al campo sindical, significa esto: no asumir esa proyección general de la lucha del movimiento obrero como factor de liberación nacional y social. Por eso nosotros distinguimos entre aquellos que se quedan para repartir lo que hay en los sindicatos y los que luchan desde dentro del sindicato por las reivindicaciones inmediatas y a su vez levantan la lucha permanente por esas reivindicaciones nacionales, por esas otras reivindicaciones sociales, por esas otras reivindicaciones latinoamericanas que hacen al cambio fundamental de la sociedad. A la militancia concreta fuera de la oficina, en la calle, en la lucha con los compañeros. Eso es ser representante sindical y no simplemente burócrata.
P.: ¿Cuál es su opinión, Rucci?
Rucci: Tengo derecho a la réplica. Eso es burocracia, pero eso no alcanza al sindicalismo argentino. Porque el sindicalismo argentino, y gracias al sindicalismo argentino, podemos decirlo así, donde están los burócratas, según algunas calificaciones tenemos un movimiento obrero politizado que sabe lo que quiere y sabe adónde va. Esos calificativos son los elementos rebuscados para efectuar ataques que no tienen ningún sentido.
P.: ¿Usted se siente atacado?
Rucci: Si hay un hombre al cual no le cabe ese calificativo, es al secretario general de la CGT, que hace escasamente dos años ha asumido la conducción del movimiento obrero argentino. Y nace desde abajo ¡eh! porque nadie me colocó en un sillón y soy el que menos estoy en la CGT.
P.: Confieso que no conozco un pronunciamiento claro y terminante del secretario general de la CGT, que es el que debe asistir todos los intereses de los trabajadores.
Rucci: ¡No se equivoque! ¡No se equivoque!
P.: ...sobre la economía del país. Tosco ha sido muy claro: dominio del crédito, nacionalización bancaria. .
Rucci: Permítame. Parece que acá se lee lo que se quiere leer y lo que no se quiere leer no se lee. La CGT, a los tres meses de asumir el secretariado y el Consejo Directivo, produjo un documento que lo denominó “Proclama y Convocatoria”, donde se sintetizan las aspiraciones del movimiento obrero y de todo el país.
P.: Hay mucha gente que no lo conoce...
Rucci: Documento que mereció el elogio de muchos sectores, incluso que no comulgaban con el planteo que formulaba la CGT. Por lo que no se puede así, ligeramente...
P.: ¿Usted cree que es bueno el elogio de otra parte?
Rucci: Yo creo que sí. Porque eso implica que a pesar que no estamos de acuerdo...
P.: ¿Usted se queda contento porque lo elogie “La Prensa”?
Rucci: Bueno, es muy difícil que el diario “La Prensa”. . .
P.: Por eso le pregunto...
Rucci: Es muy difícil porque todos conocemos perfectamente que “La Prensa” responde a intereses totalmente contrarios a los que sostenemos los argentinos, cualquiera sea nuestra ideología.
P.: ¿Sabe por qué yo le hacía esta pregunta? Por ejemplo, a nadie le escapa, por lo menos a la gran mayoría, el suceso del frigorífico Swift, ocurrido recientemente en nuestro país. Evidentemente, una gran cantidad de trabajadores de la carne, en este caso, se vieron de pronto perjudicados por una serie de maniobras que nada tenían que ver con el trabajo que ellos venían desarrollando. Yo le pregunto a usted. ¿Cuál ha sido el pronunciamiento, si conoce de ello y qué respuesta nos puede dar en ese sentido?
Rucci: Yo le puedo señalar que existe un argentino digno, que es el juez Lozada, que a pesar de todos los riesgos que corrió, tuvo la suficiente valentía para señalar un hecho tan desagradable y tan monstruoso como el del caso del frigorífico Swift.
P.: Pero, qué dice la CGT... Ahí hay casos de trabajadores...
Rucci: Acá ocurre lo siguiente. Usted pregunte lo que hizo la Federación de la Carne. La CGT no tiene facultades para tratar problemas de organizaciones sindicales son las organizaciones sindicales que representan a los trabajadores quienes deben asumir la defensa de acuerdo a los dirigentes que tengan, pero no la CGT.
P.: Pero usted cambia las cosas cuando le conviene ¿eh?
Rucci: No las cambio cuando me conviene. Usted me dice qué hace la CGT por los convenios. La CGT no discute convenios. La CGT hace respetar la ley, que es la 14.250. Después las organizaciones son las que discuten, no la CGT. Si un gremio acepta un convenio del 35 %, esos afiliados, si están o no de acuerdo, tienen que planteárselo a los dirigentes de su organización. No a la CGT.
P.: Pero el problema que planteó Conti era muy concreto: el caso .Swift. . .
Rucci: Pero ocurre que la Federación de la Carne, que es la que representa a esos trabajadores, en ningún momento lo trajo al seno de la CGT.
P.: Tosco, ¿Usted está de acuerdo con el planteo de Rucci?
Tosco: No. Nosotros creemos que la CGT debe cumplir una función de coordinación orientadora, de promoción en la lucha del movimiento obrero. Y, volviendo al caso no lo repito porque sea la CGT de Córdoba, sino porque es el ámbito de mi militancia, la CGT de Córdoba levanta con sus pronunciamientos, con su coordinación, con la convocatoria a los cuerpos orgánicos para debatir los problemas de la clase obrera. Nosotros hemos reclamado insistentemente a la CGT nacional la convocatoria del Comité Central Confederal. No nos hemos largado solos, nos hemos largado las veces que fueron necesarias pero, previamente, públicamente hemos reclamado la convocatoria del Comité Central Confederal. Y en el caso del frigorífico Swift y otros casos que hacen a la problemática general del movimiento obrero, que hacen a la política económica del país, como es evidentemente el caso del digno pronunciamiento del juez Lozada, deben ser asumidos por la CGT, según nuestro concepto, como cosa de la práctica de la central obrera.
Rucci: Quiero aclarar. Quizá nunca el Comité Central Confederal se reunió más veces siendo yo secretario general. Lo que ocurre es que el Comité Central Confederal, integrado por cuatrocientos secretarios generales y dirigentes de las organizaciones confederales, donde también está el compañero Tosco, tomó resoluciones de acuerdo con la estrategia que se imponía ese Comité Central Confederal. Lo que implicaría que si el compañero Tosco hubiera ido tendría que aceptar lo que se resolviera.
—El señor Tosco se ha definido en una serie de medidas de tipo económico a establecer en forma inmediata en el país: control de cambios, dominio del comercio exterior...
R: De acuerdo.
—Manejo de las importaciones y exportaciones...
R: De acuerdo.
—Nacionalización de la banca...
R: Nacionalización de la banca.
—Nacionalización del crédito...
R: Es decir, recuperar la soberanía del país en todos los niveles fundamentales en lo económico. Totalmente de acuerdo.
—¿Y en qué no está de acuerdo con Tosco?
R: Si ése es el esquema que se plantea en un proceso que permita recuperar la entidad soberana al país, creo que en eso...
—¿Y en el traspaso de las fuentes de trabajo?
R: No. En eso no estoy de acuerdo. Estoy de acuerdo con un capital al cual el gobierno le haga ajustar las reglas del juego para que ese capital esté al servicio de la comunidad y cumpla una función social.
—José López Rega dijo alguna vez que el socialismo nacional podía parecerse, de alguna manera, al nacionalsocialismo. Parece peligrosa la afirmación de López Rega y quisiera que usted, Rucci, como cabeza del movimiento obrero, diga si cree que el socialismo nacional se parece en algo al nazismo.
R: Cada pueblo, en materia de socialismo, ajusta más que nada a su idiosincrasia los matices del socialismo. Probablemente este proceso nos lleva a características socialistas. Y va a ser el resultado del pensamiento, del sentido de los argentinos.
—Pero no me ha contestado la pregunta.
R: Le estoy contestando en el sentido de que el nazismo no tiene nada que ver con el socialismo que nosotros podemos plantear en la Argentina.
—Usted ha estado recientemente con Perón. ¿Perón va a regresar? Sí o no. En caso afirmativo: ¿cuándo?
R: ¿Usted ha escuchado en alguna oportunidad que el general Perón haya dicho que no va a regresar?
—¿Usted, Tosco, cree que el general Perón va a regresar?
T: Yo creo que Perón tiene derecho, como todo argentino, a regresar al país y hacer valer con plenitud sus atribuciones ciudadanas. Pero no puedo oficiar de adivino. No sé si va a volver.
—Según insistentes versiones de estos últimos días, se habría ofrecido a Rucci el Ministerio de Trabajo si ganara el Frejuli.
R: No es cierto.
—¿Y si se diera, aceptaría?
R: Yo me debo a mi movimiento y eso, en su oportunidad, determinará mi respuesta por sí o por no. Pero quiero que quede perfectamente en claro que es una versión totalmente infundada.
—¿Habló con Perón de eso?
R: No se habló con el General.
—Vamos entonces a las conclusiones, por favor.
R: En alguna medida este programa ha pretendido ser útil a la opinión pública, para que conozca lo que yo sostengo como la verdad de lo que represento y creo en este aspecto el resultado puede ser positivo.
T: Agradezco la oportunidad de haber podido exponer ante la opinión pública y el pueblo el punto de vista que no es mío sino de la clase obrera y el pueblo de Córdoba.
—¿Cree, Rucci, que queda algo por decir?
R: Coincidir también con lo que dice el compañero Tosco, que estoy convencido de que lo que yo he expuesto no es solamente el punto de vista del pueblo de Córdoba sino que incluyo al pueblo de Córdoba en el pueblo de todo el país.
—¿Puede ser que a partir de ahora no haya más solicitadas entre ustedes?
R: Cada uno sabe de su obligación y asume las responsabilidades. Yo sé de mi obligación como secretario general de la CGT y he asumido esa responsabilidad.
T: En tanto y en cuanto sea necesario fijar las posiciones de lucha de la unidad combativa, nosotros hemos de continuar con esta misma práctica del movimiento obrero.
Para reproducir citar la fuente Pensamiento Discepoleano
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26 DE MAYO DE 2003 -DISCURSO DE FIDEL EN LAS ESCALINATAS DE LA FACULTAD DE DERECHO DE BUENOS AIRES
Queridos hermanos estudiantes, trabajadores y, estoy por decir, compatriotas argentinos (Aplausos).
He vivido algunos años, pero nunca ni siquiera imaginé un acto tan azaroso y tan increíblemente emocionante como éste (Aplausos y exclamaciones).
Quiero comunicarles que a esta misma hora millones de cubanos estarán presenciando también este espectáculo (Aplausos y exclamaciones de: "¡Cuba, Cuba, Cuba, el pueblo te saluda!"). En nombre de nuestro pueblo se los agradezco infinitamente, porque de la fuerza que dan las ideas, que da la verdad y que da una causa justa es que los pueblos se vuelven invencibles (Aplausos).
Habíamos concebido un acto, o habían concebido, según me explicaban los estudiantes y las autoridades universitarias, una actividad en esta escuela de derecho, un programa modesto. Comenzaría a las 7:00 de la noche y participarían algunos estudiantes sentados en una sala y, por si acaso venían más, tenían una pantalla para que pudieran presenciar el acto.
Yo podría hacer una crítica –no a ustedes– a nuestros compañeros y decirles: "Ustedes subestimaron al pueblo argentino" (Aplausos). Comenzaron a llegar noticias de que había llenado el salón, que había el doble de los que podían allí sentarse, y que en los laterales tampoco ya cabían, y que el pasillo se había llenado y que la escalinata se venía llenando, y decían que eran 1 000, que 2 000, que 3 000. En un momento dado también las emisoras de televisión hablaban y explicaban ya lo que estaba ocurriendo aquí, y, de repente, veo algunas imágenes –tenemos cierto hábito de calcular el número de personas que hay en una concentración– y esto parecía la Plaza de la Revolución en Cuba. (Aplausos).
Todas las comunicaciones y vías de acceso cortadas; menos mal los aparaticos esos que tanto fastidian y tanto ruido hacen, pero en momentos como este –me refiero a los celulares– sirven para comunicarse y conocer la situación.
Nuestro embajador, que forma parte del grupo de culpables de la subestimación (Risas) –sé que ustedes lo van a defender, porque tiene un gran cariño por el pueblo argentino (Exclamaciones)– se comunicaba con su familia en la sala de la facultad donde debía realizarse el acto –había hasta unos niños allá, ellos creían que este iba a ser el más pacífico de los actos, y lo es, ¿no?–, no se imaginaba lo capaz que es la multitud de organizarse; pero no podía moverse, todo el mundo estaba aislado, comunicándose solo por los celulares. No había entrada por ninguna parte, ya se había declarado que era imposible entrar, y yo no me resignaba a la idea de incumplir mi compromiso, que por circunstancias físicas, obstrucción por multitudes, no pudiera tener el honor y el orgullo de saludarlos.
Se había declarado ya que era imposible, y realmente insistí en que nada era imposible (Aplausos), que era un problema que debía resolverse, que no podía resignarme a la idea de quedarme allá esperando noticias. Toda mi vida he tenido el hábito de moverme, ir hacia donde haya cualquier dificultad, y no me podía adaptarme a la idea de tomar ese avión, a la hora en que lo tome, sin venir a esta universidad.
Claro está que yo soy un visitante y, primero que todo, debo respeto a la ley, al orden; no tengo el derecho a hacer absolutamente nada que en lo más mínimo viole un reglamento o una orden de sus autoridades.
Hay que decir que, realmente, las autoridades cooperaron el máximo en su deseo de encontrar una solución. De la escuela de Derecho me continuaban comunicando y nos decían: "Nadie se mueve de la sala." Avanzaban un poquito en los laterales, llega un momento en que se rompe no sé qué cosa por algún lugar –creo que vamos a tener que asumir también, que compartir con alguien o pagar nosotros los daños que se puedan derivar de una ventana rota, alguna brecha abierta por esta tropa patriótica y revolucionaria de argentinos (Aplausos).
Entonces acudimos a un cuadrito joven de nuestra delegación, el Ministro de Relaciones Exteriores, que ustedes vieron y escucharon, y le dije: "Tienes que salir para allá, entra por donde puedas, habla con los que están dentro de aquella sala y explícales la situación real, objetiva y como fuera posible que no diéramos el acto allí", porque había un justificado temor de que si el acto se daba allí y las pantallas por allá, algunos que habían salido voluntariamente entraran otra vez, había que plantear la necesidad real de moverse hacia la escalinata y dar el acto en ese lugar.
Impacientes estuvimos esperando, escuchamos a nuestro enviado por doble vía, por la televisión, ya que algunas cadenas estaban trasmitiendo sus palabras y hasta por un teléfono celular, y vimos cuando él trataba de persuadir a los que estaban dentro de la sala para que se movieran hacia acá.
Una vez más se probó la capacidad de los pueblos de comprender, de cooperar, de reaccionar, porque a los pocos minutos me dice: "Ya están moviéndose hacia la escalinata."
Pero había otro obstáculo que vencer y eran las cámaras de la televisión y los micrófonos (Exclamaciones). Fíjense, no se peleen con las cámaras ahora, déjenlo para mañana, si quieren (Le dicen algo). Ya sé, ya sé, pero no, yo estuve escuchando, hubo realmente interés en informar lo que estaba ocurriendo, así que no tengo quejas; pero había que instalarla o si no solo ustedes se enteran de lo que se está diciendo aquí.
Por ejemplo, nuestro pueblo, sin las cámaras, sin los medios técnicos no estaría viendo lo que en este momento estaba ocurriendo, y entonces eso era lo que tardaba una hora. ¿Ustedes saben lo que es una hora de impaciencia? Ustedes y nosotros hemos conocido esa larga, interminable, e infinita hora de impaciencia, porque había que poner esto, los micrófonos y los altoparlantes, los equipos e instalaciones de la prensa, que todo estaba ajustado al acto anterior, y la verdad es que ha sido un récord el tiempo en que pudieron hacerlo.
Preguntábamos, eran las 8:40, y nos dicen: "Está todo listo, lo conveniente es que vengan rápido, porque está el frío, por otro lado, pero un frío que no pueda ser superado por el calor de ustedes (Aplausos).
Bueno, a mí me han puesto esto que no lo necesito realmente, voy a renunciar a él, porque es que me da vergüenza andar poniéndome aquí algo (Se quita el abrigo).
Rápido partimos hacia acá, a fin de llegar más o menos a la hora en que se había calculado; pero como milagro fue la proeza organizativa realizada por la masa (Aplausos). Jamás olvidaré lo que ustedes hicieron esta noche, permitiéndonos marcharnos felices y eternamente agradecidos.
La hostilidad norteamericanaAlguno podrá preguntarse, si acaso es vanidad nuestra por los inmensos honores que ustedes nos han concedido. No, no es eso en lo que pienso. Cuando hablo de gratitud eterna es porque este pueblo de Buenos Aires está enviando un mensaje a aquellos que sueñan con bombardear nuestra patria, nuestras ciudades (Aplausos y exclamaciones de: "¡Cuba, Cuba, Cuba, el pueblo te saluda!" "¡Bush, fascista, vos sos el terrorista!"); a aquellos que sueñan con destruir ya no solo la Revolución, destruir al pueblo que fue portador de esa Revolución y que fue capaz de resistir más de 40 años de bloqueos, de agresiones y de amenazas contra nuestro país (Aplausos).En circunstancias como esas no se pueden calcular solo los niños muertos, o las madres que han muerto, o los ancianos que han muerto, o los jóvenes y adultos que hayan muerto. Hay ocasiones en que quedan los sobrevivientes tan mutilados y tan destrozados, que uno se pregunta si estando en esas circunstancias no preferirían cien veces más morir que seguir viviendo de aquella forma, como consecuencia de algo que se realizaba sin razón de ninguna clase, ley ni justificación, que no fuese la violación de las normas internacionales, la violación de las leyes que creíamos que regían este mundo; aunque muchos de nosotros sospechábamos que este era un mundo donde lo que menos se respetaba era la ley y donde se estaba estableciendo el principio de la fuerza como única justificación para cometer cualquier tipo de crímenes, para someter a nuestros pueblos, para conquistar nuestros recursos naturales, para imponernos lo que ustedes decían, una tiranía nazifascista mundial (Abucheos).
No es exageración, ni uso excesivo de palabras, por nuestra parte, cuando escuchamos un día decir que 60 países o más podían ser blanco de ataques sorpresivos y preventivos; nadie jamás en la historia, ningún imperio, hizo semejante amenaza (Abucheos).
Cuando se hablaba de estar preparados para lanzar cualquier ataque a cualquier oscuro rincón del mundo, no recuerdo haber escuchado jamás esas palabras.
Cuando se dijo que cualquier arma podía ser utilizada, lo mismo armas nucleares, que armas químicas, que armas biológicas, aparte de las supersofisticadas armas que ya no tienen nada de convencional, porque son capaces de causar cualquier tipo de destrucción, recordábamos eso: ¿Qué derecho tiene alguien para amenazar de esa manera a los pueblos?
Me pregunto si también aquí, en este acto, porque no hay mucha luz, hay que encender muchos más bombillos para que no seamos un oscuro rincón del mundo que atacar sorpresiva y preventivamente (Aplausos).
Claro que esta plaza y esta escalinata que aquí vemos no es un oscuro rincón, es un rincón lleno de luz, lleno de millones de luces. Esta plaza y esta escalinata es como un sol, como el sol ese que vimos al llegar aquí o vimos esta mañana cuando visitábamos la estatua de Martí para colocar una ofrenda floral en aquel punto (Aplausos). (Del público le dicen algo.) Sí, pero en la de San Martín era todavía un poquito más temprano, pero ya el sol era muy fuerte, y razoné: ¡Caramba!, nuestro sol es fuerte, es sobre todo caluroso, y pensaba: Este sol no es tan caluroso, es decir, el clima es frío, pero el sol era superresplandenciente.
Se le veía una gran fuerza al sol; porque aquí hay dos soles en este momento: el sol que vimos esta mañana y el sol que hemos visto a nuestra llegada a este país, y el sol que estamos viendo aquí en esta escalinata y en esta plaza. Son las ideas, son las ideas las que iluminan al mundo (Aplausos), son las ideas, y cuando hablo de ideas solo concibo ideas justas, las que pueden traer la paz al mundo y las que pueden poner solución a los graves peligros de guerra, o las que pueden poner solución a la violencia. Por eso hablamos de la batalla de ideas.
Pienso –porque soy optimista– que este mundo puede salvarse, a pesar de los errores cometidos, a pesar de los poderíos inmensos y unilaterales que se han creado, porque creo en la preminencia de las ideas sobre la fuerza (Aplausos y exclamaciones), y eso es lo que estamos observando aquí.
Yo no tenía el propósito esta noche de pronunciar una arenga, más bien me sentía en el deber de ser cuidadoso en mis palabras. Claro, pensaba hablar principalmente de nuestro país y del mundo, y es lo que estoy haciendo, pero no puedo hacerlo sin verlos a ustedes aquí, sin estarlos presenciando en este acto.
Mi idea más bien, ya que me hicieron soñar también con un salón tranquilito y sentaditos allí, pues pensaba en una cuestión que es la siguiente, decía: "¿De qué debo hablarles a los argentinos?" Pronunciar undiscurso en cualquier lugar siempre es complejo, no es fácil, hay que evitar decir una palabra que pueda lastimar a alguien o que parezca alguna injerencia –y no creo que haya pronunciado una sola que parezca la más mínima injerencia en los problemas internos del país hospitalario en que me encuentro–; pero decía: "¿De qué debo hablar?" Y me planteaba una cuestión: Los oradores suelen imponerles a los que los escuchan el tema, piensan hablar de tal cosa y más cual cosa, y entonces yo tenía una idea: no plantear ningún tema, sino preguntarles a los estudiantes, que suponía sentaditos allí, que me dijeran qué temas les interesaban: Pregúntenme de cualquier tema que a ustedes les interese, sean ustedes los que me impongan el tema y no sea yo el que les diga el que mejor me parezca; me parecía más democrático y más justo.
Eso es lo que pensaba antes de que ocurriera el terremoto este, el maremagno, el huracán que se produjo alrededor de esta universidad en las horas del anochecer. Al llegar aquí miraba si aquella técnica sería posible, y ya no era posible. No obstante, creo que alguien dijo por ahí..., oí una voz que me dijo: Hábleme de algo (Le dicen que del Che); la vida del Che (Aplausos).
El CheExtenso no podría ser, no tendría sentido en estas circunstancias, pero algunas cosas puedo decir. Me han preguntado por el Che (Exclamaciones), hablé de él esta mañana ante la estatua de San Martín, porque lo recuerdo siempre como una de las personalidades más extraordinarias que he conocido.
El Che no se unió a nuestra tropa como soldado, era médico. Estaba en México casualmente, había estado antes en Guatemala, había recorrido muchos lugares de América; había estado por minas, donde el trabajo es más duro; había estado, incluso, en el Amazonas en un leprosorio trabajando allí como médico.
Pero les voy a decir una de las características del Che y una de las que yo más apreciaba, entre las muchas que apreciaba mucho: él todos los fines de semana trataba de subir el Popocatépetl, un volcán que está en las inmediaciones de la capital. Preparaba su equipo –es alta la montaña, es de nieves perpetuas–, iniciaba el ascenso, hacía un enorme esfuerzo y no llegaba a la cima. El asma obstaculizaba sus intentos. A la semana siguiente intentaba de nuevo subir el "Popo" –como le decía él– y no llegaba; pero volvía a intentar de nuevo subir, y se habría pasado toda la vida intentando subir el Popocatépetl, aunque nunca alcanzara aquella cumbre (Aplausos y exclamaciones). Da idea de la voluntad, de la fortaleza espiritual, de su constancia, una de esas características.
¿Cuál era la otra? La otra era que cada vez que hacía falta, cuando éramos un grupo todavía muy reducido, un voluntario para una tarea determinada, el primero que siempre se presentaba era el Che (Aplausos).
El se quedaba, como médico, con los enfermos, porque en determinadas circunstancias en la naturaleza, montañas boscosas y perseguidos desde muy diferentes direcciones, la fuerza que pudiéramos llamar principal, era la que tenía que moverse, dejar un rastro bien visible para que en alguna zona más cercana pudiera permanecer el médico con los que estaba asistiendo. Hubo un tiempo en que el único médico era él, hasta que otros médicos se acercaron, y allí estaba.
Puedo recordar, ya que ustedes me piden anécdotas, una acción que fue sumamente riesgosa para todos, sencillamente porque habían llegado las noticias a un lugar donde estábamos en las montañas de un desembarco que se había producido por el norte de la provincia. Nos acordamos de nuestras peripecias, de nuestros sufrimientos en los primeros días y, como acto de solidaridad a favor de aquellos que habían desembarcado, decidimos realizar una acción bien audaz que no era, desde el punto de vistamilitar, correcto hacerlo, y fue sencillamente atacar una unidad que estaba bien atrincherada en la orilla del mar.
No voy a dar más datos. Como resultado de aquel combate que duró tres horas, y tuvimos bastante suerte, porque habíamos logrado neutralizar las comunicaciones, y después de tres horas, cuando terminó aquel combate en que él tuvo, como siempre, una actitud destacada, estaban muertos o heridos una tercera parte de los combatientes que participaron en esa acción, cosa no muy usual; entonces él, como médico, atendió a los adversarios heridos –había adversarios que estaban vivos y no estaban heridos, pero había un número elevado de heridos y él los atendió– y atendió a los compañeros que estaban heridos (Aplausos).
¡No se imaginan ustedes la sensibilidad de aquel argentino! (Aplausos.) Y hay algo que me viene a la mente: un compañero, cuya herida era mortal, y él lo sabía; en aquel momento el lugar debía ser abandonado rápidamente, porque muy pronto, no se sabía cuándo aparecían los aviones, milagrosamente no aparecieron durante aquel combate, porque era lo primero que aparecía a los 20 minutos; pero creo que tuvimos la suerte de destruir las comunicaciones con algunos disparos certeros. Dispusimos de ese tiempo, pero había que atender a los heridos, retirarse rápidamente. Y no se me puede olvidar, y me lo contó él, cuando un compañero que iba a morir inexorablemente... No se podía movilizar; hay heridos más graves que usted no los puede movilizar, tiene que confiar ahí, puesto que usted ha atendido los adversarios, ha logrado un número de prisioneros, prisioneros que nosotros siempre respetábamos; no hubo un solo caso jamás que, prisionero en un combate, fuese alguna vez maltratado o ejecutado (Aplausos). Nosotros les entregábamos, incluso, a veces nuestros medicamentos, que eran muy escasos.
Esa política, sinceramente, nos ayudó mucho al éxito en la guerra, porque usted en cualquier lucha debe ganarse el respeto del adversario (Aplausos). En cualquier lucha –lo vuelvo a repetir–, de una forma o de otra, el comportamiento de los que defienden una buena causa, debe dirigirse a ganarse el respeto del adversario.
En aquella ocasión tuvimos que dejar un número de compañeros heridos que no podían evacuarse, entre ellos algunos muy graves. Pero lo que me impactó fue cuando me contó, con dolor, recordando aquel momento en que sabía que no tenía salvación posible y él se había inclinado y le había dado un beso en la frente a aquel compañero, que, herido allí, sabía que inexorablemente moriría (Aplausos).
Son algunas de las cosas que les menciono del Che como hombre, como ser humano extraordinario.
Era, además, un hombre de elevada cultura, era un hombre de gran inteligencia; ya mencioné su tesón, su voluntad. Cualquier tarea que se le asignara, después del triunfo de la Revolución, era capaz de aceptarla. Fue director del Banco Nacional de Cuba, donde hacía falta un revolucionario en aquel momento, y en cualquier otro, desde luego; pero acababa la Revolución de triunfar y los recursos con que contaba eran muy pocos, porque las reservas se las habían robado.
Los enemigos bromeaban, siempre bromean, también nosotros bromeamos; pero la broma, que tenía una intención política, se refería a que un día yo había dicho: Hace falta un economista. Pero entonces se habían confundido y creyeron que yo decía que hacía falta un comunista, y por eso es que había ido el Che (Aplausos). Pues el Che era un revolucionario, era un comunista y era un excelente economista (Aplausos); porque ser economista excelente depende de la idea de lo que quiera hacer quien dirige un frente de la economía del país y quien dirige el frente del Banco Nacional de Cuba, así que en su doble carácter de comunista y economista; no es porque se hubiera llevado un título, sino porque había leído mucho y observaba mucho.Che fue el promotor del trabajo voluntario en nuestro país, porque todos los domingos se iba, un día a hacer trabajo en la agricultura, otro día a probar una máquina, otro día a construir. Nos dejó la herencia de aquella práctica que, con su ejemplo, conquistó la simpatía o la adhesión, o la práctica para millones de nuestros compatriotas.
Los hombres como el CheSon muchos los recuerdos que nos dejó, y es por eso que digo que es uno de los hombres más nobles, más extraordinarios y más desinteresados que he conocido, lo cual no tendría importancia si uno no cree que hombres como él existen por millones y millones y millones en las masas (Aplausos).
Los hombres que se destaquen de manera singular no podrían hacer nada si muchos millones, iguales que él, no tuvieran el embrión o no tuvieran la capacidad de adquirir esas cualidades. Por eso nuestra Revolución se interesó tanto por luchar contra el analfabetismo, por desarrollar la educación (Aplausos).
Si antes decía que las ideas eran más poderosas que las armas, la educación es el instrumento por excelencia para que ese ser vivo que es el hombre, regido poderosamente por instintos o leyes naturales, que evolucionó, como lo demostró Darwin y hoy no lo niega nadie... Me refiero a la teoría de la evolución, y decía que nadie lo negaba, porque recuerdo el momento en que el Papa Juan Pablo II declaró que la teoría de la evolución no era inconciliable con la doctrina de la creación. Y, realmente, experimento un gran aprecio por acciones como esas, porque cesó de haber una contradicción entre una teoría científica y una creencia religiosa. Pero ese hombre puede ser como un animalito en la selva, si lo ponen allí en la selva; tiene inteligencia, se sabe los gramos que hay en una cabeza humana y se sabe, incluso, que es el único ser viviente cuyo cerebro continúa creciendo dos años y medio después de nacido, ustedes lo saben, los estudiantes universitarios, deben haberlo leído. Eso tiene una influencia tremenda en el desarrollo de la inteligencia.
Niño que no se alimente con todos los elementos adecuados hasta cumplir los dos años y medio, llega a los seis años, al prescolar o la escuela, con la inteligencia disminuida, con relación a los niños que se alimentan de una manera adecuada (Aplausos). Y debo decir que una de las cosas más necesarias, si queremos igualdad, es, al menos, el derecho a llegar a los seis años con la capacidad de inteligencia con que nazca un niño, y sabemos que aquellos –y que en el mundo se cuentan por cientos de millones– que no se alimentan adecuadamente en esas edades, llegan a la edad escolar –si hubiera escuelas, si hubiera maestros capaces de enseñarlos– con menos posibilidades de aprender; aunque también puede ocurrir que alimentándose adecuadamente en esa etapa después no tengan ni escuelas ni maestros (Aplausos).
Pero, ¿qué ocurre con los sectores más pobres de la Tierra, que están concentrados, fundamentalmente, en los países del Tercer Mundo, al que pertenecen las cuatro quintas partes de la humanidad? Es que en esas regiones se concentran los pobres, los hambrientos, los que no pueden alcanzar ese nivel de capacidad instalada, no de capacidad desarrollada, los que no tienen ni siquiera escuelas.
Si a ustedes les dicen que hay 860 millones de analfabetos adultos en el mundo, inmediatamente les explican cómo casi el 90% de esos 860 millones de analfabetos viven en el Tercer Mundo. Hay que añadir que en países muy desarrollados hay analfabetos, en ese gran vecino cercano a nuestra patria, hay millones de analfabetos (Chiflidos y abucheos), de analfabetos totales; pero hay decenas de millones de analfabetos funcionales. Y nadie tome esto... (Exclamaciones de: "Un médico"). ¿Qué dicen, un médico, qué dice del médico? (Le dicen algo.) Yo dije decenas, realmente son cientos. Bueno, no, en los países desarrollados no, estoy hablando del Tercer Mundo.
(Le dicen que están pidiendo un médico, para una persona del público.) ¿Un médico? Hay un médico aquí, ¿dónde hace falta el médico? Bueno, pasen al compañero, rápido. Mandamos un médico, ustedes verán qué rápido llega.
Educación y saludLes hablaba –y me estoy extendiendo por encima de mi voluntad– de dos problemas muy importantes, que están muy asociados, se llaman educación y salud. Bueno, hablábamos de un médico argentino que se convirtió en soldado sin dejar de ser médico un solo minuto, fue lo que nos trajo a explicar estas cosas, y después les decía que es la educación la que convierte el animalito en ser humano. No se olviden de eso (Aplausos), es la educación la que es capaz de hacerlo que sobrepase los instintos que le vienen de la naturaleza. Es más, añado, es la educación la que podría vaciar las cárceles donde están aquellos que no recibieron educación, que no se alimentaron adecuadamente; porque hasta en nuestra propia patria, tardamos en descubrir que por muchas leyes que se hagan, por muchas escuelas que se construyan, muchos maestros que se formen, siempre habrá, por una razón o por otra mucho más que hacer por la educación de los hombres. En nuestra sociedad, porque hay cientos de miles de profesionales universitarios e intelectuales, la influencia del núcleo familiar es decisiva.
Cuando usted va a una prisión e investiga a los jóvenes entre 20 ó 30 años que están en prisión, se encuentra que proceden de las capas más humildes y más pobres de la población (Aplausos), proceden de lo que podríamos llamar áreas marginales. Cuando, a la inversa, busca la composición social de escuelas que son muy anheladas y donde se llega por expediente y por notas, es al revés, la inmensa mayoría son hijos de padres intelectuales o artistas.
Fíjense que no estoy hablando de una diferencia de clases desde el punto de vista económico; el problema de la construcción de una sociedad nueva es mucho más difícil de lo que pueda parecer, porque son muchas cosas que se van descubriendo por el camino. Si usted empezó luchando contra un 30% de analfabetismo y un 90% entre analfabetismo total y funcional, concentra su atención en esas tareas, y cuando han pasado los años y cuando anda en estudios más profundos de la sociedad, es cuando puede darse cuenta de la influencia que tiene la educación.
Les puedo decir que en los sectores más pobres, en las áreas marginales, donde es más frecuente la disolución del núcleo familiar, esa disolución tiene una influencia grande. Por ejemplo, usted puede apreciar un 70% que proceden de núcleos disueltos, donde, incluso, hasta un 19% no vive con el padre o la madre, sino con algún familiar que se ocupa de él, y cuando ese mismo fenómeno ocurre en un núcleo de intelectuales, no se observa el mismo efecto en el hijo aquel, aunque se haya producido la disolución familiar. En general, quedan con el padre o con la madre; en nuestro país, por costumbre, con la madre, y las mujeres constituyen en Cuba el 65% de la fuerza técnica del país (Aplausos). Es así como les estoy diciendo, es un poquitico más del 65% y observa usted esos fenómenos. ¿Qué lo puede explicar, sino la educación? Es decir que el nivel de escolaridad de los padres, aun cuando se haya hecho una revolución, sigue influyendo tremendamente en el destino ulterior de los niños.
Bien puede ocurrir, en determinadas circunstancias, en que los hijos de los sectores más humildes, o con menos conocimientos, no estoy hablando ya de la situación económica del núcleo, sino la educación del núcleo se encuentra que tiende a perpetuarse a lo largo de decenas de años, y uno puede decir entonces –como nosotros a veces hemos planteado en algunos casos–: Estas personas que están haciendo esta tarea o que brindan talapoyo, sus hijos nunca serán directores de empresas, gerentes, u ocuparán posiciones importantes; los esperan, en primer lugar, las prisiones.
Nosotros hemos estudiado eso y unas cuantas cosas más, que no es el momento de explicar. Lo digo solo para decir que sin una revolución educacional, bien profunda, la injusticia y la desigualdad continuarán prevaleciendo aun por encima de las satisfacciones materiales de todos los ciudadanos del país (Aplausos).
En nuestro país nosotros le garantizamos un litro de leche a cada niño hasta los siete años (Aplausos). A partir de esa edad y debido a nuestros recursos, le garantizamos una leche de otro tipo, ya que, afortunadamente, existen posibilidades.
Ahora, esa leche la garantizamos a ese niño, a un costo de menos de un centavo de dólar (Aplausos). Con un dólar que le envíe alguien que vive en el Norte a un amigo, puede comprar la leche de 104 días (Aplausos).
En nuestro país, el bloqueo nos obligó al racionamiento, ese bloqueo que ha durado 44 años (Silban); pero en nuestro país no se encontrará un niño sin escuela, uno solo no se encontrará sin escuela (Aplausos).
En nuestro país, incluso, los niños que nacen con algún problema mental -y es algo que estamos estudiando en profundidad, causas que originan distintos tipos de retraso mental, si ligero, moderado, severo o profundo, cada uno con sus características; afortunadamente, son más numerosos los ligeros y moderados–, en este momento nosotros tenemos el expediente de cada uno, y no de los niños solo, sino de las ciento cuarenta y tantas mil personas de distintas edades que tienen algún problema de retraso mental. Todos los niños que tienen algún problema de incapacidad física o mental, o ciego, o sordomudo; o algo más terrible, ciego y sordomudo al mismo tiempo.
Hay tragedias humanas, que para conocerlas hay que investigarlas, y nosotros no las conocíamos desde el primer día. Fue a lo largo de la práctica y luchando por la educación, como hemos luchado, que fuimos descubriendo estas cosas.
Tienen escuelas especiales, hay 55 000 niños matriculados en escuelas especiales.
Hemos planteado que no basta que un niño vaya a una escuela especial entre sexto y noveno grado. Hemos planteado que de esa escuela, si es un niño que no puede ir a un nivel superior de nueve a doce grados, sea bachillerato, o conocimientos técnicos, una escuela tecnológica, termine su noveno grado o el tiempo que necesite, si hace falta un año o dos más, preparado para el tipo de trabajo que pueda realizar y, además, con un empleo (Aplausos).
No se puede subestimar a los muchachos que tengan ese tipo de problemas, tienen cualidades para muchas cosas, y ya no nos conformamos, no nos podemos conformar, porque seríamos inconscientes si nos limitáramos a enseñarle lo que se le puede enseñar a un niño con ese tipo de limitación, ligeras y moderadas, que son la mayoría.
A todos se les atiende, cualquiera que sea el tipo de incapacidad que se tenga. Podemos tener la satisfacción de que, a pesar del bloqueo ese que tiene 44 años, no hay un solo niño con necesidad de enseñanza especial que no tenga su escuela (Aplausos).
Mortalidad infantilQuiero añadir un dato, y nadie lo tome como una vanidad de nuestro pueblo, porque lo que digo siempre con relación a lo que hemos hecho por la educación y la salud nos produce vergüenza en la medida en que descubrimos nuevas y nuevas posibilidades, vergüenza por no haberlo descubierto antes. Nadie piense que Cuba se jacte de éxito, les puedo asegurar algo que ni siquiera nosotros mismos sabíamos.Hacíamos comparaciones por los datos de la UNESCO y las investigaciones que hizo sobre los niveles de educación y, en nuestro país, los niños de cuarto y quinto grados, en lenguaje y en matemáticas, casi duplican los conocimientos de los niños del resto de América Latina y de Estados Unidos también, no vayan a creer que solo de América Latina (Aplausos).
Sé que les estoy hablando de un país que tiene elevados niveles de educación y de cultura; sé cómo es el pueblo argentino y sus conocimientos. Nuestro país hoy tiene niveles más altos, pero Argentina está entre los demás países, cuatro o cinco, que se acercan, aunque a una relativamente alta distancia, a los niveles de nuestro país; pero nos llamó más la atención cuando descubrimos que nuestros niños de primaria, sus conocimientos de lenguaje y de matemática, están por encima de los países más desarrollados del mundo (Aplausos).
Es decir, nuestro país hoy ocupa ese lugar, del mismo modo que el índice de mortalidad infantil en nuestro país está por debajo de siete por cada 1 000 nacidos vivos en el primer año de vida –el último año fue de 6,5; el anterior había sido 6,2–, nosotros pensamos bajarlo. No sabíamos siquiera si en un país tropical podía bajarse el índice de mortalidad infantil a esos niveles, porque influyen muchos factores: el clima influye, incluso el potencial genético de cada población influye; esos factores, independientemente de los factores de asistencia, factores alimenticios, etcétera. No sabíamos si podía bajarse de 10 y nos alentó mucho cuando lo logramos.
No crean que es la capital la que tiene los mejores índices, hay provincias enteras que tienen, incluso, menos de cinco de mortalidad infantil, y ese índice es más o menos parejo. No ocurre como en el país vecino nuestro, donde en algunos lugares, donde viven los que tienen más recursos, mejor asistencia y mejor alimentación, etcétera, etcétera, pueden tener un cuatro o un cinco, y en otros, como en la propia capital de Estados Unidos, donde hay mucha gente pobre y donde hay grupos étnicos, los afronorteamericanos, que no tienen la asistencia médica adecuada, en que la mortalidad puede ser tres veces, cuatro veces o cinco veces más que la mortalidad infantil en determinados lugares que reciben todas las atenciones (Aplausos).
Sabemos lo que pasa con los hispanos y con los afronorteamericanos y los de otras regiones del mundo, sus índices de mortalidad infantil, sus índices de perspectivas de vida, sus índices de salud, del mismo modo que sabemos que hay más de 40 millones de norteamericanos que no tienen asegurada la asistencia médica.
Cuando hablo de los norteamericanos, jamás hablo con odio, porque nuestra Revolución no ha enseñado a odiar; se basa en ideas y no en fanatismos, no en chovinismos (Aplausos y exclamaciones).
Hemos tenido el privilegio de aprender que todos somos hermanos y nuestro pueblo se educa en los sentimientos de amistad y solidaridad, lo que calificamos como sentimientos internacionalistas (Aplausos y exclamaciones).
Cientos de miles de nuestros compatriotas han pasado por esa escuela, es por ello que puedo decir que no es tan fácil liquidar la Revolución, que no es tan fácil aplastar la voluntad de ese pueblo, en virtud de sus ideas, conceptos y sentimientos cultivados, porque tanto las ideas como los sentimientos tienen que ser cultivados, de esa verdad partimos; pero a un pueblo que alcanza determinados niveles de conocimiento, capacidad de comprender los problemas, capacidad de unidad y de disciplina no es tan fácil desaparecerlo de la faz de la Tierra (Aplausos y exclamaciones).
Es por ello que, a pesar de esas teorías nazifascistas, tenemos la convicción de que un ataque a nuestro país costaría, como ya les dije, un precio muy alto, porque es un pueblo que jamás se rendirá, que jamás dejará de luchar (Aplausos y exclamaciones), y mientras exista un solo hombre o mujer capaz de combatir, ese hombre o esa mujer continuará combatiendo.Conociendo durante muchas décadas a ese adversario, nuestro país ha tenido que aprender a defenderse. Nuestro país no lanza bombas contra otros pueblos, ni manda miles de aviones a bombardear ciudades; nuestro país no posee armas nucleares, ni armas químicas, ni armas biológicas (Aplausos y exclamaciones).
Las decenas de miles de científicos y médicos con que cuenta nuestro país han sido educados en la idea de salvar vidas (Aplausos).
Estaría en absoluta contradicción con su concepción poner a un científico o a un médico a producir sustancias, bacterias o virus capaces de producir la muerte a otros seres humanos.
Los médicos cubanosNo faltaron, incluso, las denuncias de que Cuba estaba haciendo investigaciones sobre armas biológicas. En nuestro país se hacen investigaciones para curar enfermedades tan duras como la meningitis meningocócica, la hepatitis, a través de vacunas que produce por técnicas de ingeniería genética, o, algo de suma importancia, la búsqueda de vacunas o de fórmulas terapéuticas a través de la inmunología molecular -perdónenme si he empleado esta palabra técnica, quiere decir a través de métodos que atacan directamente las células malignas–; y lo mismo unas pueden prever y otras pueden, incluso, curar, y avanzamos por esos caminos. Ese es el orgullo de nuestros médicos y de nuestros centros de investigación.
Decenas de miles de médicos cubanos han prestado servicios internacionalistas en los lugares más apartados e inhóspitos. Un día dije que nosotros no podíamos ni realizaríamos nunca ataques preventivos y sorpresivos contra ningún oscuro rincón del mundo; pero que, en cambio, nuestro país era capaz de enviar los médicos que se necesiten a los más oscuros rincones del mundo (Aplausos y exclamaciones).
Médicos y no bombas, médicos y no armas inteligentes, de certera puntería, porque, al fin y al cabo, un arma que mata traicioneramente no es absolutamente un arma inteligente (Aplausos y exclamaciones de: "¡Olé, olé, olé, Fidel, Fidel!").
Como ven, mis palabras a ustedes, los estudiantes, han estado girando en torno a estas cuestiones, que son las que para nosotros constituyen el mayor orgullo de la Revolución.
Hay quienes afirman que en Cuba la Revolución está muy bien y es muy acertada en educación –al menos admiten eso–, en salud pública –al menos admiten eso–, y que en deporte tiene un buen nivel de desarrollo, y yo sé que ustedes son muy amantes del deporte y los "olé, olé" esos han salido, los he escuchado de algún deporte (Risas), en el cual ustedes han sido campeones, compartiendo esos honores con los brasileños (Exclamaciones de: "¡Olé, olé, Fidel, Fidel!").
Pero tendrán que decir, y no deben tardar mucho en decir que Cuba avanza aceleradamente en el terreno de la cultura y del arte (Aplausos). Y no solo vamos en busca de una cultura artística, vamos en busca de una cultura general integral.
Puedo darles algunas noticias poco conocidas: en nuestro país, en los últimos tres años, las universidades no es que se multipliquen, de unas poquitas que había, una facultad de medicina, hoy tiene 22 facultades de medicina, y una de ellas se llama Escuela Latinoamericana de Ciencias Médicas (Aplausos), donde hay alrededor de 7 000 alumnos procedentes de países latinoamericanos y alcanzará la cifra de 10 000 alumnos (Aplausos); y se conoce que en Estados Unidos una carrera universitaria, especialmente una de medicina, cuesta, cuando menos, 200 000 dólares la carrera (Exclamaciones).
Cuando se hayan formado de esta escuela, que tiene algunos años funcionando, 10 000 alumnos, solo en ese campo, nuestro país estará dándoles una cooperación a los países del Tercer Mundo que equivaldría a 2000 millones de dólares, una prueba de que si un país se guía por ideas justas, aunque sea pobre, pobrísimo, puede hacer muchas cosas (Aplausos).
El bloqueo y la democracia norteamericanaEs el país bloqueado durante 44 años; es el país al cual, cuando se derrumbó el campo socialista, con el que teníamos nuestro comercio y asegurábamos nuestros abastecimientos –comprándolos y comerciando–, el imperialismo apretó más todavía sus medidas económicas con las leyes Torricelli y Helms-Burton (Chiflidos y abucheos).
Hay, además, una ley criminal que nosotros le llamamos la Ley asesina de Ajuste Cubano, aplicable únicamente a un país en el mundo: Cuba. A alguien que no le darían jamás visa, por tal antecedente o por lo que sea, si llega allí en un barco que se roba o un avión que se roba, o por cualquier medio, le conceden ipso facto el derecho a residir, e incluso a trabajar al día siguiente.
Fíjense ustedes: en la frontera de México con Estados Unidos mueren alrededor de 500 personas por año y sufren una muerte horrible, porque le propusieron a ese país, o le impusieron –como sea– un tratado llamado TLC que implica el libre movimiento de mercancías y de capitales, pero no el libre movimiento de seres humanos (Aplausos), y mientras a nuestro país le aplican esa Ley de Ajuste, que nosotros no la pedimos para los demás porque es una ley asesina, sí planteamos que se le conceda al ser humano, por parte de aquellos caballeros que acusan a todo el mundo de violar los derechos humanos, algo que con relación a Cuba solo pueden hacer sobre la base de infames calumnias y de bochornosas y ridículas mentiras, dan lugar a la muerte de cientos de mexicanos y latinoamericanos allí donde cada año mueren más seres humanos que todos los que murieron en los 29 años que duró el muro de Berlín (Aplausos).
Del muro de Berlín he hablado millones y millones de veces; pero no hay noticias, si no muy esporádicas, de los mexicanos que mueren todos los años tratando de cruzar la frontera.
Ahora, si usted es latinoamericano, asiático o de cualquier país que llegue allí ilegalmente y se quede o se pueda quedar, lo llaman refugiado, lo llaman emigrante. Si es cubano tiene el apellido ya certificado: son exiliados.
En Estados Unidos no hay emigrantes cubanos, a pesar de que más de 100 000 todos los años vienen a visitar a sus familiares en Cuba, pero no son emigrados, son exiliados; esa es la palabra acuñada con sus pérfidos métodos de sembrar la confusión y la mentira.
Sí les puedo asegurar que si esa ley que nos han aplicado a nosotros durante 37 años la hubiesen aplicado a los latinoamericanos y caribeños, a los que quieren imponer un ALCA (Exclamaciones), ¡un ALCA!, si les hubieran aplicado las prerrogativas esas –y, repito, no lo aconsejamos, porque es una ley asesina, es para los que llegan ilegales al país–, en realidad les puedo asegurar que hoy no tendríamos los 534 millones de habitantes entre América Latina y el Caribe, y con seguridad, más de la mitad de los norteamericanos serían de origen latinoamericano o caribeño (Aplausos). (Del público le dicen algo.) Hay que decirlo, pero sin emplear la palabra. Más bien es mejor que se deduzca a que se diga; que se razone lo que son los que dirigen aquel país, no el pueblo de aquel país, muchas veces engañado.
Nosotros tenemos la prueba de que en muchas ocasiones ha apoyado malas causas, pero para que apoye una mala causa, primero hay que engañarlo, y en eso son especialistas y lo han sido en la historia, del engaño (Aplausos); pero cuando conoce la verdad, y recordemos Viet Nam, que el pueblo norteamericano desempeñó un papel decisivo en el fin de la guerra de Viet Nam, porque los líderes, la opinión internacional, la de ustedes, la de todos los latinoamericanos, prácticamente lo que piensen no lesimporta, les importa lo que piensen los electores dentro de Estados Unidos, porque votan allí. Puede haber su fraude, su fraudecito o un fraudón enorme, como el que vimos en las últimas elecciones "superdemocráticas" de Estados Unidos (Exclamaciones), donde el candidato opositor obtuvo medio millón de votos más que el candidato –dos grandes comillas– "triunfador".
Todo el mundo sabe de forma exacta, y no lo duda ningún norteamericano, lo que ocurrió allí, que la extrema derecha, apoyada por la mafia terrorista cubano-americana, mediante fraude, le arrebató la victoria a su adversario. No me meto a decir cuál era más democrático o menos democrático, no estoy inscrito a ninguno de los dos partidos porque, en último término, se podría decir que allí impera el monopartidismo (Aplausos).
Organización política de CubaAlgunos dirán: ¿Pero no tienen en Cuba un solo partido? Digo: Sí, pero nuestro Partido ni postula ni elige. Los delegados de circunscripción, que son la base de nuestro sistema, los propone el pueblo en asamblea, por cada circunscripción (Aplausos); no pueden ser menos de dos, ni más de ocho, y casi el 50% de aquellos delegados de circunscripción, que constituyen la asamblea municipal en cada municipio del país, esos que propone y elige el pueblo, en elección donde tienen que tener más del 50% de los votos, la Asamblea Nacional de Cuba, con un poco más de 600 delegados, está constituida, casi en el 50%, por esos delegados de circunscripción, que no solo tienen el papel de constituir la Asamblea Municipal, tienen el papel de postular a los candidatos a la Asamblea Provincial y a la Asamblea Nacional.
No me extiendo, pero, realmente, me gustaría que un día se conociera un poco más cuál es el sistema electoral de Cuba; porque es asombroso que de allá del Norte a veces algunos nos preguntan cuándo va a haber elecciones en Cuba. La pregunta la podríamos hacer los cubanos y decirles: Cuándo hay que ser supermillonario para alcanzar la presidencia de Estados Unidos (Exclamaciones); o vaya, no tiene que ser necesariamente el candidato supermillonario, sino preguntar cuántos miles de millones necesita el candidato para ser electo presidente y cuánto cuesta cada cargo, hasta un modesto cargo municipal.
En nuestro país no ocurre, ni puede ocurrir eso. No se llenan las paredes de pasquines, no se usa masivamente la televisión con mensajes de estos subliminales, creo que se llaman, ustedes los abogados, se me ha olvidado que yo lo era también, pueden saber (Risas).
Los medios masivos de comunicación
¿Qué papel han desempeñado esos medios masivos, desgraciadamente en aquel país y en muchos lugares del mundo?, y no los estoy atacando.
Yo les mencioné el caso que demostraba cómo el pueblo norteamericano, cuando conoce la verdad, puede apoyar una buena causa: el caso del niño Elián González, secuestrado hace tres años y medio. Ese niño regresó cuando el pueblo conoció la verdad y más de un 80% de los norteamericanos apoyaron su regreso (Aplausos).
Es cierto que cuando la guerra de Viet Nam, no solo fueron conociendo la verdad, había un factor importante que influía: el regreso de jóvenes muertos, que habían sido llevados allí mediante el Servicio Militar. En el caso del niño no hubo nada de eso, logramos que el pueblo norteamericano conociera nuestras razones, y fue a través de las cadenas de televisión, porque un desfile de 600 000 madres como tuvo lugar en La Habana, es un espectáculo inusitado, o de cientos de miles de niños, o de un millón de personas desfilando delante de la Oficina de Intereses, o millones de personas movilizándose simultáneamente en muchos lugares, o grandesconcentraciones, y fueron actividades que las grandes cadenas trasmitieron por el mundo. Hubo actos, como aquel en que se conmemoró el XXV aniversario del sabotaje a un avión de Cubana, destruido en pleno vuelo por un acto terrorista, que 40 cadenas internacionales trasmitieron.
Hoy hay forma de trasmitir los mensajes. Hay satélites que pueden bajar una señal; hay –y ustedes los estudiantes lo saben mejor que nadie– Internet que puede permitir enviar un mensaje a cualquier rincón del mundo, aunque no sea oscuro, porque, realmente, en general, los que tienen Internet tienen también electricidad y posibilidades de comunicarse; pero no subestimar a esas capas intelectuales, que en el mundo son decenas y decenas de millones, que no son necesariamente una clase explotadora y rica.
Hay que ver, recuerden, por ejemplo, allá en Seattle; recuerden Quebec; recuerden las movilizaciones ya en cualquier parte del mundo, han sido organizadas a través de Internet, por personas que tienen cultura y tienen conocimientos, y hay muchas cosas que amenazan hoy la vida del planeta, aparte de las guerras, los cambios de clima, la destrucción de la capa de ozono, el calentamiento de la atmósfera, el envenenamiento de la atmósfera, de los ríos y de los mares, que amenazan la vida de todo el planeta y en eso todos los pueblos del mundo tienen una causa común con los latinoamericanos, con los norteamericanos, y con los europeos.
Las catástrofes avanzan de una en una. Hoy hay enfermedades que no existían hace 25 ó 30 años. El SIDA no existía hace 25 años, y los que poseen los mejores laboratorios están dedicados a la terapéutica, no a la prevención, no a las vacunas, porque un tratamiento –se conoce muy bien– que se vende a 10 000 dólares por año y cada año tiene que repetirlo, produce más. Sencillamente, produce mucho más la medicina terapéutica que la medicina preventiva (Aplausos).
Apareció ahora el virus de la neumonía atípica, cuando nadie lo esperaba; o la fiebre del Nilo, que vino del noreste de Estados Unidos, evidentemente, trasladada de algún otro lugar del mundo; o el dengue famoso, tan mencionado, que tiene cuatro formas diferentes de virus, y la combinación de unos y otros da lugar a complicadas enfermedades como el dengue hemorrágico.
Se lo digo en nombre de un país que ha visto en carne propia el empleo de virus y bacterias para atacar a nuestra agricultura, e incluso nuestra población. Se lo aseguro y no exagero, no tendría yo un átomo de vergüenza si les digo a ustedes una sola mentira. Nosotros sabemos algunas cosas y de casi todas tenemos pruebas, cuando hablamos de algunos de estos problemas (Aplausos).
Pero les decía que hoy hay medios de comunicarse con el mundo, que nos hacen menos víctimas o dependientes de los grandes medios de difusión masiva sean cuales sean, porque hoy, teniendo direcciones, y teniendo esa red de Internet en el mundo, todos los que tienen un sueño, una aspiración, una causa que les quita la tranquilidad, y pensando, fundamentalmente, no en ellos, sino en sus hijos, harán causa común, sean de países subdesarrollados o ricos; porque, en realidad, son nuevos problemas.
Hay que meditar en la enorme suma de nuevos problemas que han ido apareciendo en el mundo, aparte de amenazas de guerra y del empleo de esas armas brutales y bárbaras, en una etapa de la historia donde el hombre no ha demostrado todavía su capacidad de sobrevivir, y que puede ser destruido diez veces por una sola potencia, sobre la base de su monopolio tecnológico y de armas que serían suficientes para aplastar a todos los demás Estados del mundo.
La importancia de la universidadDe todos esos problemas un creciente número de millones está aprendiendo, y es en los centros de educación, en los centros universitarios donde se va adquiriendo la cultura necesaria para saber lo que es el mundo de hoy, y qué es el Fondo Monetario y qué es el Banco Mundial y qué significa una deuda de 800 000 millones de dólares en América Latina (Aplausos).
Cuando tuve el honor, inolvidable para mí, de visitar Buenos Aires, sobre todo hoy cuando vuelvo, aunque lo recordé siempre, la deuda de América Latina era de 5 000 millones de dólares; hoy es ciento sesenta veces mayor. Antes los presupuestos se dedicaban, más o menos, a escuelas, a hospitales; los argentinos lo conocen muy bien, porque de Argentina venimos oyendo hablar hace mucho tiempo; sabemos los niveles que tenía educación, salud y otras cosas. Pero permítanme no hablar del caso concreto; en este caso lo menciono porque, realmente, ustedes alcanzaron altos niveles, es conocido, como es conocido que hay dos cabezas de ganado de vacuno –no cuento el resto– por habitante en el país; los niveles de tipo social alcanzados son muy importantes.
Pero el mundo en que vivimos, repito, es muy diferente. Hay muchos problemas que los grandes pensadores políticos y sociales no podían, a tan larga distancia, prever, aunque sus conocimientos fueron decisivos para convertirnos a nosotros en personas con ideas revolucionarias. No olvidarse de esta realidad.
En nuestro país empezamos por las universidades, había momentos en que no se enseñaba computación en las universidades, fuimos poco a poco; después hicimos 170 Joven Club de computación, hace no mucho tiempo los duplicamos a 300, con doble número de máquinas; pero lo esencial es que hoy en nuestro país el ciento por ciento de los niños, desde prescolar hasta la universidad, cuentan con sus laboratorios de computación, y hemos descubierto las posibilidades enormes que eso brinda (Aplausos). Y entramos en la etapa masiva y trabajamos intensamente en otras cosas, de las que no hablamos mucho, pero se están formando por decenas de miles los programadores.
A aquellos que hablan de que Cuba prosperó en esto y en lo otro, las cosas que mencionaba y la mencionada cultura, a aquellos les podemos decir que hoy en nuestro país se extienden por los municipios las facultades universitarias, desde el momento en que 800 000 ciudadanos cubanos son graduados universitarios o intelectuales (Aplausos). De modo que hoy hay dos graduados universitarios por cada graduado de sexto grado que había al triunfo de la Revolución (Aplausos). Se está desarrollando una sociedad donde los conocimientos y la cultura se extienden masivamente y donde se logrará el sueño de masificar esos conocimientos y esa cultura (Aplausos). Masificarlas en un central azucarero, en un municipio, porque allí están suficientes economistas; si hace falta quién vaya a dar clases de economía en uno de los centros que se van desarrollando, o una clase de cualquier carrera humanista, o una clase de una carrera técnica, como ingeniería mecánica, y otras muchas; pudiera ser una excepción el caso de la medicina, donde las facultades están al lado de los hospitales, y desde el tercer año en constante contacto no solo con la teoría sino también con la práctica (Aplausos).
¿Por qué se han extendido a esa velocidad? Porque buscando, precisamente, las causas de determinados problemas sociales, vimos que había un número elevado de jóvenes, entre 17 y 30 años, con noveno grado, que no estudiaba ni trabajaba; entonces buscamos las causas, se habló con cada uno de ellos y, de repente, se establecieron las escuelas que llevan el nombre de escuelas juveniles para el desarrollo de una cultura general integral. El primer año se inscribieron 85 000, ya en el segundo curso, este que transcurre, hay 110 000 alumnos (Aplausos). Y qué dirían ustedes si les afirmo que ya en el próximo curso, que empieza en septiembre, 35 000 de esos jóvenes comenzarán estudios universitarios (Aplausos).¿Qué hicimos, qué utilizamos? En todos los municipios y en todos los centrales azucareros, por ejemplo, había escuelas secundarias básicas y a veces técnicas de nivel medio o de bachiller, de las externas, escuelas que terminaban sus clases a las 4:30 de la tarde, y todas tenían sus laboratorios de computación y de medios audiovisuales, y entonces de 5:00 a 8:00 comenzaban las clases en esas mismas instalaciones, para este Curso de Formación Integral para jóvenes, con nuevos profesores o con los mismos profesores que daban clases, o profesores que se habían retirado y que con la ayuda de esos medios lo que pueden hacer son milagros, se lo aseguro.
De esa forma, ya hoy se les da una remuneración por estudiar (Aplausos). Se creó así con esta experiencia el empleo de estudiar.
Es que muchas veces no se piensa que, aunque sea pobre, un hombre vive en un lugar, aunque sea en un cuarto, o utiliza un ómnibus. En nuestro caso, tiene garantizada la seguridad social; en nuestro caso, el 85% es dueño de las viviendas (Aplausos), y no paga impuesto por la propiedad de la vivienda (Aplausos). Fíjense bien, quiero aclarar que no estoy recomendando nada, yo simplemente deseo explicarles qué estamos haciendo, y por qué estamos sobreviviendo, y por qué el pueblo en masa apoya la causa revolucionaria.
El costo de vida en Cuba
Si el kilowatt cuesta medio centavo de dólar, si una cantidad de alimentos esenciales cuestan los precios que les señalé, si la cantidad de arroz que se entrega, a un precio bien reducido, también con un dólar que, cambiado por peso, a 25 centavos y con el cambio de 26 a 1, una familia, o una persona puede comprar 105 libras de arroz por un dólar (Aplausos). Hay otras tiendas en que se vende más caro y todo en relación del lujo o de la cosa necesaria.
Los medicamentos en nuestro país tienen la mitad del precio que tenían hace 44 años, porque se rebajaron entonces a la mitad, y hoy se mantienen esos precios de aquellos productos genéricos.
Vuelvo a repetir que cuento para explicar.
Sí la asistencia médica de una calidad cada vez mejor, porque estamos haciendo grandes esfuerzos en ese sentido, es gratuita para todos los ciudadanos por igual, lo mismo una cirugía del corazón, a corazón abierto, que una gripe.
La educación, cada vez con más calidad, es absolutamente gratuita, desde el prescolar hasta un doctorado en ciencias, sin que le cueste un centavo a nuestros ciudadanos (Aplausos), una de las razones por las cuales tiene mucha tranquilidad nuestra población. Pero ahora estamos pasando a una sociedad de cultura masiva, y nuestro país vivirá en el futuro fundamentalmente de las producciones intelectuales.
Si la naturaleza no nos dio gran cantidad de otros recursos, tuvimos el privilegio de una Revolución a la que nos obligó un vecino muy poderoso, aunque de esto último no podemos echar la culpa a nadie, quizás a Cristóbal Colón, no sé, que nos descubrió y nos trajo la civilización, como ustedes saben; aunque ustedes, argentinos, desde luego, no entenderían tan bien como la República de Haití lo que significó la colonización. Pero no vamos a discutir sobre eso. Es un producto histórico.
Se sabe, desde luego, que allí fueron muchos peregrinos en una emigración religiosa, que traían una ética religiosa. Yo atribuyo a eso el hecho del idealismo que suele caracterizar a los ciudadanos norteamericanos y el porqué si usted logra demostrarle la verdad es capaz de apoyar una causa justa. No hay que olvidarse de ellos, que están tan amenazados como nosotros de todas las calamidades ecológicas y otras de las cuales hablé. Hay muchas cosas en común con ellos y ellos están bien persuadidos, tienen razones para estar bien persuadidos de que a quienes los dirigen no lesimporta un bledo –no sé si ustedes usan esa palabra–, el medio ambiente o el cambio de clima. Porque me pregunto por qué demonios ese país tan poderoso, que gasta el 25% de la energía mundial y aporta la mayor cantidad de bióxido de carbono y otros gases contaminantes, ha renunciado al Acuerdo de Kyoto. Tengan la seguridad de que decenas de millones de norteamericanos tienen las mismas preocupaciones que ustedes y los demás con relación a todos esos problemas.
La sociedad de consumoYo decía: Bueno, tenemos un vecino muy poderoso, pero ha sido una suerte que hayamos podido ir desarrollando, cultivando las inteligencias de nuestros compatriotas de forma masiva.
El ciento por ciento de los niños se gradúan de sexto grado y el 99% y fracción de noveno grado ya en nuestro país, y ahora entramos en la etapa de masificación, usando los medios audiovisuales, usándolos exhaustivamente, no para sembrar veneno, no para que otro piense por uno; porque ya hablé de que si al niño le falta alimento no desarrolla la inteligencia con que vino al mundo, la inteligencia potencial, pero si se usan incorrectamente determinados medios, le suprimen la opción de pensar, porque piensan por usted y le dicen qué color es el que tiene que usar, si la falda es larga o corta, si la tela de moda es esta o la otra. Nos envían el mensaje desde allá sobre lo que debemos usar, qué refresco tenemos que tomar –digo, gaseosa, porque supe que decir refresco aquí es otra cosa, y me equivoqué en una declaración; no me equivoqué, dije refresco porque así se conoce en Cuba lo que ustedes conocen por gaseosa; eso lo dije cuando hablé de cierto tipo de champán, que no voy a repetir aquí; pero, bueno, quise decir lo que ustedes llaman gaseosa–, vienen y le dicen qué cerveza deben tomar, o qué marca de whisky o de ron. A nosotros no nos importa, si nosotros, que somos productores de tabaco históricamente, y no podemos renunciar a él, y mucho menos bloqueados, cuando le regalamos una caja de puros a un amigo le decimos: "Con ella, si fumas, puedes fumar; si algún amigo fuma, le puedes brindar, pero lo mejor que puedes hacer con esa caja es regalársela a tu enemigo" (Aplausos).
Cuba es productora y exportadora de tabaco y hace campaña contra la fuma; Cuba es productora de ron de cierta calidad –para actuar con la debida modestia; ahora han robado una marca, pero no importa, no pueden producir el ron cubano–, no lo recomiendo, pero si alguien puede probarlo... A las mujeres embarazadas lo que les recomiendo es que no lo consuman, que no consuman alcohol. Lo sabemos porque estamos estudiando todas las causas de cada uno de los casos de atraso mental y sabemos el daño que el alcohol produce en una mujer gestante, es una de las causas.
Pero, bien, el país vivirá no en una sociedad de consumo; la sociedad de consumo es uno de los más tenebrosos inventos del capitalismo desarrollado y hoy en la fase de globalización neoliberal. Es nefasto, porque trato de imaginarme a 1 300 000 chinos con el nivel de motores y de automóviles que tiene Estados Unidos.
No puedo imaginarme a la India, con 1 000 millones de habitantes, viviendo en una sociedad de consumo; no puedo imaginarme a los 520 millones de personas que viven en el Africa Subsahariana, que no tienen ni electricidad y en algunos lugares más del 80% no sabe leer ni escribir, en una sociedad de consumo. Empezaría preguntándome cuánto van a durar los yacimientos de combustible, probados y probables, al ritmo en que lo gastamos hoy, de modo que apenas durará 150 años lo que la naturaleza formó a través de 300 millones de años (Aplausos).
Hablo así, porque se nos ha introducido en la cabeza la idea sobre un falso concepto de calidad de vida.
¿Cómo puede haber calidad de vida sin educación? ¡Cuánto sufre un analfabeto!, no se lo imagina nadie; porque hay algo que se llama autoestima, que es más importante, incluso, que los alimentos, la autoestima (Aplausos).
¿Qué es un analfabeto?, en el último escalón allá abajo, que tiene que pedirle a un amigo que le redacte una carta para la novia. Yo lo vi de niño, en un lugar donde había muchos analfabetos y unos pocos que sabían leer y escribir y le pedían una carta para una mujer que pretendían; pero no es que le dictara una carta diciendo que soñó toda la noche y todavía está pensando y que no come pensando en ella, digamos, si el campesino quiere mandar ese mensaje; sino que le decía al que sabía leer y escribir: "No, no, escríbele tú lo que tú crees que debes escribirle", para conquistar a la novia. No exagero. Yo viví en los campos en que eso era así.
¡Qué humillación tener que poner las huellas digitales! Aquellos que después estudiaron segundo, tercero, cuarto o quinto, ¿qué es una persona de cuarto o quinto grado?
Luego dicen allá en Estados Unidos que hay democracia, pero me pregunto si millones de personas son analfabetas, con qué criterio votan; si millones son semianalfabetas, con qué criterio votan (Aplausos).
Entonces, todos ustedes han oído hablar del ALCA y yo me hacía, en mi fuero más íntimo, una pregunta, ¿y si les da por decir que el ALCA es la salvación de todos los dolores y de todas las calamidades? (Silban.)
La fuga de capitalesEs decir, cómo puede decidir alguien que no sepa leer y escribir, o que apenas tenga cuarto, quinto o sexto grado, lo que es el ALCA; lo que es abrir todas las fronteras de países que tienen un nivel muy por debajo de desarrollo técnico a los productos de aquellos que tienen los más elevados niveles tecnológicos y de productividad, de aquellos que fabrican aviones del último modelo, de aquellos que dominan las comunicaciones mundiales, de aquellos que quieren garantizar de nosotros tres cosas: materia prima, fuerza de trabajo barata, y, además, clientes (Aplausos).
¿Cómo va a comprender una población donde un porcentaje alto no sepa leer y escribir, no tenga nociones de economía, lo que significa renunciar a la moneda propia? Renunciar a la moneda, ya algunos lo han hecho tranquilamente.
Si nuestro país hubiera renunciado a su moneda, no habría podido vencer los obstáculos que venció, sobre todo, a partir de ese que llamamos período especial al derrumbarse el campo socialista. Jamás renunciamos.
Ahora, ¿cómo va a explicar el fenómeno de la fuga de capitales? ¿Qué le dice?, si hay algo tan claro que lo puede ver un ciego de nacimiento, y es que las monedas de nuestros países están obligadas a escapar y están obligadas a fugarse, sean bien habidas o mal habidas.
Un profesional que reunió 50 000 ó 100 000 dólares y lo tiene en la moneda de su país, y de repente aquella moneda, por ley de la gravedad, como aquella que descubrió Newton, se cae hacia Estados Unidos –esta es una especie de ley de gravedad lateral, no hacia el centro de la Tierra, sino hacia una dirección geográfica (Aplausos)–, y se tiene que ir porque nuestras monedas no pueden sostener la llamada paridad.
Es verdad que luchando contra la inflación, que es la confiscación sistemática y casi diaria, algunas fórmulas y promesas se abrieron paso. Junto con ello, el famosísimo libre cambio, que abre las puertas para que el dinero se escape.
Apenas hay un déficit presupuestario o un déficit en la balanza de pagos, de inmediato se empiezan a crear problemas; aun sin los especuladores, que ayudan porque encuentran en eso el medio de cultivo, y se llevan el dinero.
Se tienen los datos del dinero que se fuga, sea cual sea su origen, algo que no tiene que ver con la deuda ni con los intereses usurarios de unadeuda, sino algo que tiene que ver con esa ley de la fuga de las monedas débiles.
En un tiempo el oro fue moneda, tenía un valor per se y lo fue, incluso, hasta el año 1971 ó 1972, en que el señor Presidente de la potencia hegemónica –aunque todavía no era hegemonismo unilateral– decidió suprimir la conversión del papel moneda norteamericano en oro. Entonces, ya la moneda era papel, no tenía un valor per se, la imprimían los dueños de las máquinas donde se imprime el dólar.
¿Y para dónde va el dólar? No se va para el Caribe. Bueno, puede haber alguna islita con paraíso fiscal, pero esas son excepciones (Aplausos). Bien, ¿para dónde se marcha? No se va para el Africa, no se va para un país vecino latinoamericano, porque a todos les pasa exactamente lo mismo.
Usted puede tener una moneda que se llame equis, no la voy a mencionar, que está a la par del dólar–es que no quiero tocar nombres de países–, y en seis semanas puede estar a la mitad o a un tercio de su valor, y si usted tenía un valor en papeles, que era real por su capacidad de compra, cuando se produce ese fenómeno un valor de 30 se reduce a un tercio o a un 25% o más.
Cuando usted ve que algunas monedas son cientos de pesos por un dólar, no hay que olvidar que en un tiempo valían lo mismo que un dólar. Y así con algunas monedas se ha visto en estos días, llámese equis o llámese bolívar –Chávez no se va a poner bravo conmigo, porque yo mencione el bolívar, porque él sabe muy bien cómo se devalúan todas nuestras monedas–; luego están obligadas a marcharse, ir allí a los bancos del país más rico del mundo.
Educación por radio y televisiónVean, este solo concepto, ¿cómo se lo vamos a explicar a un analfabeto? ¿Cómo se lo vamos a explicar a un hombre que tiene sexto grado? ¿Cómo se lo vamos a explicar a un hombre que no tenga un mínimo de conocimientos económicos, que conozca estas cosas? Le venden un ALCA y 10 ALCA (Aplausos). De ahí la necesidad de sembrar conciencia, sembrar ideas, enseñar, porque el hombre es capaz de comprender cuando se le explica y mediante ejemplos. Hoy esa ignorancia se utiliza como caldo de cultivo, como instrumento para saquearnos cada vez más, explotarnos cada vez, engañarnos cada vez más.
Por eso ahora nosotros, en nuestro país, explicábamos el Primero de Mayo, habíamos desarrollado un programa para enseñar a leer y escribir por radio –no hablo por televisión–, por radio, lo único que necesita el oyente es un radio de onda corta y unas cuantas hojas. El método está y está probado, lo puede trasmitir por una cadena nacional de radio o por cadenas locales; ya hay algunos que lo están haciendo. Incluso, nuestro país por onda corta podría enseñar a leer y escribir, bueno, digamos, a algunos analfabetos de Estados Unidos (Aplausos).
En días recientes leíamos el número de miles de alumnos de escuelas públicas con cuarto grado y hasta con noveno grado que no sabían leer. ¿Qué clase de enseñanza les impartirán? Como 36 alumnos por aula allí mismo en Miami, allí, donde tienen globos y donde han hecho despegar aviones para imponer trasmisiones piratas de televisión a un país donde más de la mitad de las horas hoy se dedican a educación; muchas horas que eran libres, incluso, por ahorro de combustible.
Hace unos días inauguramos el tercer canal televisivo, que es para la educación, y también anunciamos que en el primer trimestre del próximo año estará el cuarto canal educativo. La televisión es una verdadera y no conocida forma de trasmitir conocimientos masivos (Aplausos). Y hay otras más, no voy a mencionarlas ahora, de increíble eficacia, no voy a explicar por qué. Pero van surgiendo posibilidades.Al señor de la UNESCO y a cualquier país le ofrecíamos públicamente, el Primero de Mayo, esa patente, pudiéramos decir, esa fórmula, gratuitamente: los programas para enseñar a leer y a escribir por radio.
Conocemos también las técnicas de enseñar a leer y escribir por televisión, lo que ocurre es que un gran número de los analfabetos no tienen electricidad, no tienen televisor.
En nuestro país, en dos mil trescientas y tantas escuelas del campo que no tenían electricidad lo hemos resuelto mediante un modesto panel solar de 1,2 metros cuadrados, y cuyo costo no supera los 1 123 dólares (Aplausos); de modo que por menos de 4 millones de dólares, fíjense bien, hemos llevado el panel solar a todas esas escuelas, tanto para el televisor que gasta solo 60 watt como para la computadora, que cuando hay un número mayor de niños no le alcanzaría el kilowatt de un panel y tiene que poner dos, y por eso digo que por menos de 4 millones de dólares, hemos llevado la electricidad a todas las escuelas rurales del país; no la electricidad para cocinar, sino para el televisor y para la computadora (Aplausos).
Hemos creado, en fecha reciente, la posibilidad de ver la televisión al medio millón de cubanos que vivía en áreas rurales que no tenían televisión, con 1 885 casas de video, 50 sillas por sala, panel solar de 1 900 dólares, con un gasto también menor de 4 millones de dólares. Acceso a información y a programas por televisión, en un televisor de 29 pulgadas, por esa cifra tan ridícula, se puede decir, al lado de los miles de millones que se mencionan constantemente; hasta un país bloqueado durante tantos años puede hacerlo, no debe haber ninguno que no pueda hacerlo (Aplausos). Vean, les estoy dando datos concretos.
Hemos creado, no inaugurado –ya va para el segundo curso–, una universidad de la ciencia informática con alumnos seleccionados entre los mejores de todo el país, donde ingresarán 2 000 alumnos por año; no serán, desde luego, los únicos, ahí se formarán analistas más que programadores.
Bien, no voy a mencionar otras cosas, no solo en aras del tiempo, sino que tengo la esperanza de que algún día las conozcan, y es lo que está transformando nuestro país y le da la posibilidad de vivir por la inteligencia. Eso no tendría ningún valor y ninguna importancia, si no tuviéramos la convicción profunda de que esos métodos se pueden masificar y, por lo tanto, acabar con esos bochornosos millones de personas analfabetas de las que se viene hablando hace 40 ó 50 años y que pudieran erradicarse, sencillamente, en cinco años, simplemente si Naciones Unidas quisiera, si la UNESCO quisiera. ¡Son tan baratos esos procedimientos! Y después podrían venir los cursos de seguimiento, primer grado, segundo, tercero, son infinitas las posibilidades.
También se puede competir con las prisiones sembrando escuelas y utilizando procedimientos sencillos como estos procedimientos (Aplausos). Estoy convencido de que si un país pobre puede garantizar las cosas modestas, pero honradas, dignas, para cada uno de sus ciudadanos, ¿por qué otros no podrían hacerlo? Es por ello que hasta con un poco de pasión les hablo de estos problemas, porque son problemas en que durante mucho tiempo hemos pensado.
"Un golpe colosal al neoliberalismo"Y les confesaba que cuando hemos llegado a tener algunos de estos conocimientos, resultado de la observación, del estudio constante de la situación de la vida de los ciudadanos, es que digo que sentimos vergüenza por no haber podido descubrir antes muchas de estas cosas que tanto bienestar podrían traer para nuestros ciudadanos.
Nosotros no recomendamos fórmulas dogmáticas, no nos ponemos a recomendar que tengan tal y más cual sistema social. Conozco países con tantos recursos, que con el uso adecuado de los recursos no tendrían ni necesidad, vean, de hacer un cambio revolucionario con relación a laeconomía, de tipo radical, como el que ha hecho nuestro país. Sabemos lo que ocurre en lugares, como el más pobre de este hemisferio, que es Haití, los problemas que tiene de recursos naturales, y algunos muy ricos, no voy a discutir sobre este tema; pero el problema está en la distribución equitativa de la riqueza (Aplausos y exclamaciones). Esto no necesita ni siquiera confiscar; no, en una concepción de lo posible..., porque hay que pensar en lo deseable y lo posible, hay que diferenciar entre lo que se puede soñar y lo que se puede realizar ahora, y lo que se puede realizar ahora y lo que podría realizarse dentro de 20 ó 30 años, a partir de las realidades del mundo actual.
Nosotros no tenemos ni un átomo de arrepentimiento de lo que hemos hecho en nuestro país y de la forma en que hemos organizado nuestra sociedad (Aplausos). Hemos tenido la posibilidad de aprender mucho sobre nuestras posibilidades y tenemos una idea de prioridades, porque es muy importante para los que deseamos un mundo mejor tener idea de las prioridades, de las posibilidades, de las realidades.
Les mencioné como dos veces o tres el famoso proyecto de ALCA. Hoy una enorme necesidad de nuestros pueblos es evitar que ese veneno se implante en nuestros países y estaríamos obteniendo una gran victoria (Aplausos y exclamaciones).
Les puedo añadir que vemos en América Latina un movimiento de avance que se produce. Si me preguntara alguien por qué sentí gran satisfacción y júbilo cuando llegaron las noticias de un resultado electoral en nuestra queridísima Argentina (Aplausos y exclamaciones), fíjense, hay una razón muy grande: Lo peor del capitalismo salvaje, como diría Chávez; lo peor de la globalización neoliberal es que el símbolo por excelencia... Y no menciono nombre, nadie puede quejarse, a no ser que alguien se sienta símbolo de lo que digo. Mi opinión es que una de las cosas extraordinarias es que el símbolo de la globalización neoliberal ha recibido un colosal golpe (Aplausos y exclamaciones).
Ustedes no saben el servicio que le han prestado a América Latina; ustedes no saben el servicio que le han prestado al mundo al hundir en la fosa del Pacífico –no sé cómo se llama ahora–, que tiene más de 8 000 metros de profundidad, el símbolo de la globalización neoliberal. Le han insuflado tremenda fuerza al número creciente de personas que han ido tomando conciencia en toda nuestra América sobre qué cosa tan horrible y fatal es eso que se llama globalización neoliberal (Aplausos).
Si se quiere, podíamos partir de lo que el Papa dijo muchas veces y cuando estuvo de visita en nuestro país, cuando habló de la globalización de la solidaridad. ¿Alguien estaría en contra de la globalización de la solidaridad en el más cabal concepto de la palabra, que abarque no solo las relaciones entre los hombres y mujeres dentro de la frontera de un país, sino dentro de las fronteras del planeta, y que la solidaridad la ejerzan también aquellos que derrochan el dinero y destruyen y malbaratan los recursos naturales y condenan a muerte a los habitantes de este planeta? (Aplausos y exclamaciones.)
No se alcanza el cielo en un día, pero créanme –no lo digo por halagar, y trato de decirlo con el mayor cuidado– que ustedes han asestado un descomunal golpe a un símbolo, y eso tiene un enorme valor, y se ha producido, precisamente, en este momento crítico, de crisis económica internacional, donde están envueltos todos; ya no es una crisis en el sudeste asiático, es una crisis en el mundo, más amenazas de guerra, más las consecuencias de una enorme deuda, más el fatalismo de que el dinero escape. Es mundial el problema, y por eso mundialmente también se está formando una conciencia y por ello será un día de gloria ese día en que el pueblo argentino, pese a dificultades, que como sabemos todos existen aquí y en otras partes, muchas veces fragmentación, muchas veces divisiones, y divisiones puede haber y hasta debe haber, pero es que hay tantas cosas deinterés común que se puede tener la convicción de que estas deben prevalecer, el mundo posible. Fíjense que ha tomado fuerza esa frase: un mundo mejor es posible. Pero cuando se haya alcanzado un mundo mejor, que es posible, tenemos que seguir repitiendo: Un mundo mejor es posible, y volver a repetir después: Un mundo mejor es posible (Aplausos y exclamaciones de: "¡Fidel, Fidel, Fidel!", y de: "¡Olé, olé, olé, olé, Fidel, Fidel!")
Les he expresado –y estoy próximo a terminar–, así en estas peculiares condiciones, y me alegro más, la experiencia modesta de nuestro país, y cómo día a día aprendíamos cosas nuevas y cosas nuevas, y cuando luchábamos contra el 30% de analfabetismo, qué lejos estábamos de pensar que un día estaríamos masificando los estudios universitarios, extendiendo las universidades por todos los municipios del país, a partir del capital humano que habíamos creado, sin lo cual habría sido imposible esa aspiración, y, por eso he dicho, y Martí ya lo había dicho hace muchos años, que a los que le llamaban soñador él decía que los sueños de hoy serán las realidades del mañana (Aplausos y exclamaciones).
Los soñadores no existen, se lo dice un soñador que ha tenido el privilegio de ver realidades que no fue capaz de soñar. No lo considero un mérito, sino también privilegio y azar afortunado de vivir, a pesar de los cientos de planes por acelerar mi viaje hacia la tumba (Exclamaciones), con lo cual me han hecho un enorme favor, obligarme a perder todo instinto de preservación y conocer que los valores sí constituyen la verdadera calidad de vida, la suprema calidad de vida, aun por encima de alimento, techo y ropa. No disminuyo, ni mucho menos, la importancia de las necesidades materiales, siempre hay que colocarlas en primer lugar, porque para poder estudiar, para adquirir esa otra calidad de vida hay que satisfacer determinadas necesidades que son físicas, que son materiales; pero la calidad de vida está en los conocimientos, en la cultura.
Cuando un hombre termina su trabajo quiere ir a un lugar a ver una buena película, o a un teatro, para ver una obra excelentemente presentada, o una danza, o un grupo musical. Ya después que desayunó y almorzó, lo que desea es esa recreación, distraerse. Nadie quiere que los hijos se entretengan o se recreen aprendiendo a consumir drogas, o viendo violencia y cosas absurdas, que envenenan la mente de ese niño (Aplausos), la calidad de vida es otra cosa, calidad de vida es patriotismo, calidad de vida es dignidad, calidad de vida es honor (Aplausos y exclamaciones); calidad de vida es la autoestima a la que tienen derecho a disfrutar todos los seres humanos (Aplausos y exclamaciones).
Argentinos todos, hermanos entrañables de América Latina, cualquiera que sea su creencia, su pensamiento o sus ideas, no he tenido intención de lastimar ni de ofender a nadie. Si alguno considera que algunos conceptos aquí expresados fuesen algo como una injerencia en los asuntos argentinos, algo que por cierto he tratado de evitar, y con más razón a partir de la extraordinaria solidaridad y calor con que he sido recibido en esta ciudad y en este país, si alguien lo cree, le pido sinceramente que nos excuse.
¡Viva la hermandad entre los pueblos! (Exclamaciones de: "¡Viva!")
¡Viva la humanidad! (Exclamaciones de: "¡Viva!")
¡Hasta la victoria siempre!
Gracias.
(Ovación.)
Publicado por: https://pensamientodiscepoleano.com.ar/index.html
Arriba
FUENTE: EL ORTIBA
DISCURSO DE HUGO CHÁVEZ EN MAR DEL PLATA
CLAUSURA DE LA III CUMBRE DE LOS PUEBLOS DE AMÉRICA
Estadio Mundialista de Mar del Plata, Argentina
Viernes, 4 de noviembre de 2005
Cadena Nacional de Radio y Televisión. Trascripción del Ministerio de Comunicación e Información.
* * * * * *
Presidente Chávez
¡Qué algarabía! ¡Qué vivan los pueblos de la América Latina y el Caribe!
Asistentes ¡Viva!
Presidente Chávez ¡Qué viva la Argentina!
Asistentes ¡Viva!
Presidente Chávez
Un abrazo bolivariano, sanmartiniano, guevarista, peronista, evista…
¡Qué viva Eva Perón!
Asistentes ¡Viva!
Presidente Chávez
Ya se va el agua, me dijo nuestra amiga Blanca Chancoso que había que soplar tres veces para que el agua se vaya, hay que soplar hacia arriba tres veces, se va el agua y nos quedamos aquí nosotros los pueblos de la América, diciendo ¡viva la vida!
Asistentes ¡Viva!
Presidente Chávez ¡Viva la Patria!
Asistentes ¡Viva!
Presidente Chávez ¡Viva la Patria grande!
Asistentes ¡Viva!
Presidente Chávez
Los saludo a todos con especial emoción, afecto y cariño, ¡pero cómo hay gente aquí! Miren ustedes: ¡arriba esas banderas! Un abrazo al pueblo argentino, esas banderas argentinas, esas banderas cubanas, esas banderas venezolanas, esas banderas uruguayas, esas banderas paraguayas, esas banderas bolivianas, esas banderas brasileñas, esa bandera de la América unida y grande.
Asistentes Aplausos.
Presidente Chávez
Quiero saludarlos a todos y a todas y agradecer a Silvio y a todos estos cantores que nos han bañado de canciones, que nos han bañado de amor, a Daniel Viglietti, Silvio Rodríguez, Amaury, a todos ellos, a todos ellos que nos han venido a cantar, a Daniel, a todos, gracias por esas canciones, gracias por esos versos, gracias por esa esperanza y gracias a ustedes por haberme invitado a este acto, a este encuentro de pueblos.
Yo me siento verdaderamente honrado al estar aquí, al estar aquí con ustedes compartiendo este día histórico, saludo a Diego Armando Maradona, el Pibe…
Asistentes Aplausos.
Presidente Chávez
Ven acá Diego, ven acá, dile algo a este pueblo, Diego.
Diego Armando Maradona Que los quiero mucho, gracias por estar aquí. Echemos a Bush.
Asistentes Aplausos.
Presidente Chávez
¡Viva Diego! ¡Viva Maradona! ¡Viva el pueblo!
Asistentes Aplausos.
Presidente Chávez
Estuve viendo la entrevista que le hizo Diego Armando hace unos días a Fidel, tremenda entrevista, tremenda entrevista que le hiciste a Fidel Castro.
Asistentes Gritos, algarabía.
Presidente Chávez
Puedo decirles una cosa, entrando al estadio, hace ya una hora aproximadamente, sí, eran como las 12 y tanto, me dan un teléfono, yo venía saludando a mucha gente ahí, sobre todo a esa juventud que anda desbordada… ¡Viva la juventud!
Asistentes ¡Viva!
Presidente Chávez
Esa juventud que vuelve a levantarse por todas partes. Allá están los Barrios de Pie. Oigan, quiero que se den cuenta de una cosa: Blanca Chancoso tiene razón, se fue el agua, ve; por si acaso vamos a soplar otra vez.
Bueno, les decía que me pasan un teléfono, una camarada cubana se me acerca y me pasa un teléfono y yo bueno… ¿con quién voy a hablar yo?
–Hable, hable a ver.
Era Fidel.
Asistentes Aplausos.
Presidente Chávez
Fidel está desde que amaneció en una silla que yo le regalé, una silla muy cómoda de madera de samán viendo, porque desde aquí estamos transmitiendo en vivo y en directo para el mundo entero, entre otros por Telesur, al mundo entero está saliendo este acto histórico aquí en Mar del Plata. ¡Vamos a hacerle una bulla al mundo! ¡Que viva el mundo nuevo! ¡Que vivan los pueblos del mundo!
Asistentes ¡Viva! Aplausos.
Presidente Chávez
Bueno, ¿quieren que les diga lo que me dijo Fidel? Él me dijo, primero que estaba muy emocionado viendo el acto, la marcha que ustedes hicieron desde esta madrugada, el Tren del Alba, Maradona se vino en el tren ¿a qué hora fue que salieron? A media noche, en el tren ¿cómo es que se llama? El tren… el plateado, se vino Maradona, venía de maquinista Diego Armando Maradona, venía directo con el Tren del Alba. Bueno, Fidel estaba viendo el tren, viendo el tren, amaneció viendo el tren, la marcha de ustedes y este día histórico aquí en Mar del Plata y bueno, unos comentarios, me encargó que les saludara y que aunque él físicamente no está aquí, está aquí con nosotros.
Asistentes Aplausos.
Presidente Chávez
Además ¿saben cuál fue la despedida? Como yo venía entrado le dije: bueno después te llamo, porque él se guinda y habla tres horas por teléfono, entonces le digo –Mira yo te llamo más tarde, vamos a despedirnos, estoy entrando al estadio, y le digo como siempre le digo: “Hasta la victoria siempre, ¡Patria o muerte, venceremos!” ¿Y ustedes saben cómo se despidió Fidel?, se los voy a decir porque le oí la voz muy emocionada y además como un trueno, se despidió, la voz se despidió como un trueno que cruzó el Caribe, cruzó el Orinoco, cruzó el Amazonas, cruzó el Río de la Plata y llegó aquí, me dijo: “Chávez, ¡viva el Che, carajo!
¡Viva el Che Guevara!
Asistentes ¡Viva!
Presidente Chávez
Bien, nosotros, camaradas, compañeros, amigas, amigos todos, hemos venido aquí hoy a muchas cosas, a caminar, a marchar, a saltar, a cantar, a gritar, a luchar, pero entre tantas cosas de las que hoy hemos venido a hacer aquí en Mar del Plata hoy y cada uno de nosotros trajo una pala, una pala de enterrador, porque aquí en Mar del Plata está la tumba del ALCA.
Asistentes Algarabía, gritos.
Presidente Chávez
La tumba del ALCA.
Asistentes Algarabía, gritos.
Presidente Chávez
Vamos a decirlo: ¡ALCA, ALCA, Al carajo!, ¡ALCA, ALCA, Al carajo!
Asistentes Algarabía.
Presidente Chávez
¿Quién enterró al ALCA?, los pueblos de América enterramos al ALCA, hoy, aquí en Mar del Plata.
Blanca Chancoso, la saludo a ella y a lo que representa, a la dignidad de los pueblos indígenas de este continente, agradezco sus palabras y además Blanca me ha entregado una copia de las conclusiones y las resoluciones de esta maravillosa III Cumbre de los pueblos, me llevo esas conclusiones, resoluciones de los pueblos, para difundirlas, y no sólo para difundirlas sino para luchar por ellas, para hacer realidad los sueños de tantos y de tanto tiempo y de tanta gente, además a lo mejor cuando me toque hablar allá en la otra cumbre, la que se va a inaugurar a las cuatro de la tarde, a las tres y media, a lo mejor seguramente me a servir de mucho, de inspiración y le informaré a mis colegas presidentes que he recibido estas conclusiones, pudiéramos sacar copias para repartirlas allá en aquella Cumbre de Presidentes y de Jefes de Gobierno para que todos estemos al tanto de las conclusiones y las resoluciones de nuestros pueblos. Quiero saludar también a un eminente compañero, luchador indígena también: Evo Morales, está con nosotros aquí hoy en la Cumbre de los Pueblos, Evo, un abrazo, ven acá hermano, dile algo a la gente.
Evo Morales
Muchas gracias comandante, mi saludo revolucionario a todo el pueblo antiimperialista, que sigan en esta gran lucha para liberar a Latinoamérica, muchas gracias.
Presidente Chávez
Gracias Evo, ese aplauso de los pueblos para este gran luchador social, revolucionario, que representa, así como Blanca Chancoso, ellos y ellas representan a la estirpe más profunda de nuestros pueblos, nuestra raza aborigen, Tupac Amaru, Tecún Umán, Guaicaipuro, Atahualpa. ¡Que vivan los indios de América!
Saludamos también a los organizadores de este maravilloso evento y permítanme humildemente felicitarlos por la demostración de unidad, unidad, unidad, –decía Bolívar– unidad, esa debe ser nuestra divisa, sólo unidos podremos derrotar al imperialismo y levantar a nuestros pueblos hacia una vida mejor, sólo unidos podremos hacerlo.
Asistentes Aplausos.
Presidente Chávez
Saludos también a Edgardo de Petri, dirigente sindical y diputado nacional; Miguel Bonasso, diputado nacional y organizador de este evento junto con Edgardo; Adolfo Pérez Esquivel, premio Nóbel de la Paz, hermano y amigo, nuestro Adolfo, un abrazo, compañero, como dice el tango, le voy a cambiar una palabrita al tango hoy, perdónenme ustedes, pido perdón, en vez de decir “adiós muchachos”, digo “hola muchachos compañeros de mi vida”. Hola muchachos compañeros de mi vida, Luis D’Elía, diputado provincial; quiero saludar a Hebe Bonafini, gracias por sus mensajes, por sus palabras, y a todas nuestras madres de la Plaza de Mayo, ¡que vivan las madres de la Plaza de Mayo!, sus hijos, sus hijos somos nosotros también, sus hijos no se perdieron, se transformaron en un pueblo y aquí están vivos en el pueblo argentino y e n los pueblos de la América que se levantan de nuevo diciendo ¡no! al imperialismo, diciendo ¡no! al fascismo, diciendo ¡no! a la intervención, diciendo ¡no! a la muerte; Rafael Follonier, compañero, amigo y viceministro del interior de la República Argentina; saludamos a Ricardo Alarcón, presidente de la Asamblea Nacional del Poder Popular de la República de Cuba y a toda la delegación cubana, ¿dónde estará Lazarito? ¿Dónde está Lazarito? ¡Epa, Lazarito!, amigo mío, ven acá Lazarito, les voy a presentar a un amigo, yo una vez tenía una novia y él me la quitó, Lazarito, por ahí viene Lazarito, quiero que Lazarito, este muchacho cubano nos dé un saludo, Lazarito, un abrazo primero.
Lazarito
A los hermanos de Latinoamérica, un mensaje rápido, como dijera el Comandante, saludo solidario desde el pueblo de Cuba, que los quiere y los acompaña y nunca los abandonará ¡viva la unidad Latinoamérica! ¡Vivan los pueblos de América Latina! ¡Patria o muerte! ¡Hasta la victoria siempre! hermanos.
Presidente Chávez
Me está preguntando que si no hay más novias para quitarme otra, no, tú me quitaste la que yo tenía, ya tiene bigotes Lazarito, un abrazo a ti y a toda Cuba. Bueno, eso es lo que viene: los niños y los jóvenes, los niños y los jóvenes que son el futuro.
Lazarito
La gorra que identifica a la delegación cubana, usted es un cubano también para nosotros.
Presidente Chávez
Gracias, Lazarito. Me pongo la gorra, estamos preparando todavía un juego, ahora será de fútbol: Maradona contra el equipo de Fidel, pero tú juegas para mí, porque en béisbol con Cuba me rindo, pero en fútbol va a ser la revancha. Abel Prieto, ministro de Cultura de la República de Cuba, le saludamos; y a todos quienes han venido, los cantores, Alí Rodríguez Araque, está el Canciller, Ministro de Relaciones Exteriores de Venezuela con nosotros; Róger Capella, el Embajador de Venezuela en Argentina; a todos, miembros de la comitiva oficial que me acompañan; María, mi hija que está con nosotros les manda también un saludo; Daniel Viglietti y Víctor Heredia y demás músicos y cantores, personalidades especialmente invitadas, invitados; movimientos sociales del continente; Federación de Tierra y Vivienda. Está con nosotros el Frente Transversal Nacional y Popular Central de los Trabajadores Argentinos, Movimiento Barrios de Pie, Partido de la Revolución Democrática, Movimiento Territorial de Liberación, Federación Nacional de Salud, Madres de Plaza de Mayo, Movimiento 26 de Julio, Movimiento Peronista Auténtico, Movimiento de Trabajadores Desocupados Eva Perón; a todos, a todos ustedes un abrazo, compañeros, camaradas, compatriotas.
Bueno, ya van a ser las dos de la tarde, allá tengo el reloj, ¡menos mal que lo tengo al frente!
Miren, por cierto que, hablando de Eva Perón, yo cada día soy más evista, yo estoy leyendo a Eva, a Eva Perón, grande mujer de esta tierra, inspiración para las luchas que estamos dando y que habrá que dar.
Esta mañana me preguntaba un periodista, llegando al hotel donde nos hemos alojado, me preguntaba qué opinaba yo acerca de una publicación que salió ayer, una de tantas publicaciones que salen, sobre todo las de Norteamérica, antier salió una publicación según la cual el Pentágono está haciendo planes, planes militares para agredir a Venezuela, lo cual es absolutamente cierto porque el imperio norteamericano, en su desesperación… no olvidemos lo que decía Mao Tse Tung, que en lo estratégico el imperialismo termina siendo tigre de papel, tigre de papel; por eso no hay que temerle al imperialismo, los pueblos del mundo libre estamos en capacidad de derrotar a mil imperios, como ha ocurrido muchas veces a lo largo de la historia. Pero el imperialismo en su desespero pretende, como ha pretendido desde hace ya varios años, detener la Revolución Bolivariana, como pretendió durante mucho tiempo, casi medio siglo detener la Revolución Cubana. Así como fracasó el imperialismo norteamericano en su intento de detener la Revolución Cubana, igual fracasará en su intento de detener la Revolución Bolivariana en Venezuela.
Asistentes Algarabía.
Presidente Chávez
Pero me preguntaba este periodista sobre el tema, y además, pues, yo sé que es absolutamente cierto, los planes militares para agredir a Venezuela están en plena preparación. Ahora, ¿qué respondía yo al periodista? Le respondía con una gran verdad: si al imperialismo norteamericano en su desespero se le ocurriera invadir a Venezuela, comenzaría en estas tierras la guerra de los cien años.
Asistentes Algarabía.
Presidente Chávez
Y estaba recordando, por cierto a Eva Perón. Eva Perón, cuando dijo ella, toda digna, toda libertaria, toda patriota, dijo, lanzó aquella frase que el pueblo argentino conoce mejor que nadie pero que habrá que repetir una y mil veces en toda esta tierra desde el Río Grande hasta la Patagonia, aquella frase: “La Patria será libre o la bandera flameará sobre sus ruinas…”, ¡más nunca seremos colonia norteamericana!
Asistentes Cánticos.
Presidente Chávez
Esta mañana también, llegando ahí al hotel me consigo a un grupo de personas, deben estar aquí, seguramente, y a una de ellas quiero saludarla porque conversé con ella unos minutos, ellos vinieron de San Salvador de Jujuy, de allá vinieron: campesinos, agricultores, una maestra de escuela, ella se llama María Eugenia Villada, quiero saludarla porque me dio un abrazo infinito y me habló de su padre, Carlos Eulogio Villada, quien era dirigente del Partido Comunista Argentino y desapareció en la madrugada del 24 de noviembre de 1976 en la ciudad de San Salvador de Jujuy, su esposa Guillermina Castro, y su hija María Eugenia lo mantienen en la memoria, y yo le decía no sólo en la memoria, está presente aquí con nosotros y con él todos los desaparecidos de las dictaduras militares imperialistas que asesinaron a estos pueblos durante tanto tiempo.
Asistentes Aplausos.
Presidente Chávez
María Eugenia además es cantante, es cantora, me cantó El Carnavalito, Quebradeño Carnavalito.
Bueno, cuántas cosas por decir aquí hoy, les traigo un saludo del pueblo venezolano, un abrazo así, el corazón de Venezuela, sólo traigo para compartirlo con el pueblo argentino y los pueblos de nuestra América.
Un saludo muy especial a la delegación venezolana, de los movimientos sociales que en Venezuela hoy impulsan desde abajo, desde nuestras raíces la Revolución Bolivariana.
Ahora, fíjense, además de enterrar aquí el ALBA como hoy lo estamos enterrando, enterradores nosotros; además de eso siempre he dicho, en primer lugar a los venezolanos, ahora me atrevo a decirlo más allá de Venezuela, nosotros, a nosotros, los hombres, las mujeres de este tiempo de comienzos del siglo XXI, nos toca, compañeros, compañeras, camaradas, una doble tarea histórica: nosotros tenemos que ser los enterradores, no sólo del ALCA porque el ALCA, porque el ALCA fue una propuesta, una de tantas propuestas, pero es vieja esa propuesta, antier se llamó de una manera “Iniciativa para las Américas” la llamaron por allá por 1990, pero ya en el siglo XVIII, naciendo aquella gran república, aquel gran estado que luego se convirtió en imperio, nació con las garras del águila imperial, lamentablemente desde el inicio, desde hace 200 años pues, Thomas Jefferson, uno de los creadores de aquel estado norteamericano lo dijo, lo dijo, lanzó el plan imperialista Thomas Jefferson, dijo que Estados Unidos tenía como destino tragarse, –así mismo lo dijo, con esa expresión– tragarse una a una las nacientes repúblicas antes colonias españolas, desde entonces viene el plan anexionista, colonialista de Estados Unidos, así que nosotros no sólo debemos ser enterradores del ALCA sino enterradores y en mucha mayor dimensión, complejidad y profundidad, del modelo capitalista neoliberal que desde Washington arremete contra nuestros pueblos desde hace tanto tiempo.
La batalla del ALCA, la batalla del ALCA, que como bien decía Hebe Bonafini sin duda que la hemos ganado, pero ¡cuidado!, eso es sólo una batalla, eso es sólo una batalla de tantas batallas pendientes que nos quedan para toda la vida, ahora, decía que tenemos una doble tarea, enterrar el ALCA y el modelo económico, imperialista, capitalista por una parte, pero por la otra a nosotros nos toca, compañeros y compañeras, ser los parteros del nuevo tiempo, los parteros de la nueva historia, los parteros de la nueva integración, los parteros del ALBA, la Alternativa Bolivariana para las Américas, para los pueblos de América, una verdadera integración liberadora, para la libertad, para la igualdad, para la justicia y para la paz, sólo nosotros unidos podemos hacerlo y además enterrar al capitalismo para parir el socialismo del siglo XXI, un nuevo proyecto histórico socialista, lloran los pueblos de la América, nos toca a nosotros, yo estoy seguro de que ya en la América está engendrado el nuevo proyecto histórico del socialismo del siglo XXI, lo ha engendrado el vientre de América, ahora pujemos nosotros para parirlo, para darle vida, para perfilarlo. Rosa Luxemburgo lanzó aquella expresión: “Socialismo o barbarie”, hoy se hace más dramática la expresión y hay que repetirla: “Socialismo o muerte”, “Socialismo o barbarie”.
Y permítanme, compañeros, compañeras, hermanos y hermanas, reflexionar sobre este punto lo siguiente, la construcción del socialismo es para nosotros razón de vida, impulso ideológico político, pero hay que decir que ni siquiera eso se queda allí, no se trata sólo, ya hoy, de un impulso político, moral, ético, ideológico; se trata mucho más que eso de salvar la vida en este planeta, porque el modelo capitalista, el modelo desarrollista, el modelo consumista que desde el Norte han impuesto al mundo está acabando con el planeta Tierra y que se sepa, no tenemos ningún planeta cercano así para que emigremos hacia allá, parece que el planeta Marte estaba más cerca en estos días, me decía mi hija pequeña de ocho años anoche despidiéndonos: “Papi asómate para que veas el planeta Marte, está un poco más cerca”, pero hasta ahora se conoce que no hay vida en Marte, parece que hubo vida en Marte, han conseguido rastros, señales, incluso vapor de agua, pero parece que en Marte se instaló en alguna época el Fondo Monetario Internacional, el Banco Mundial y el Consenso de Washington y acabaron con ese planeta, esto pudiera ser ciencia-ficción, pero bien vale la pena lanzar hipótesis, el planeta, nuestro planeta, el único que tenemos a la mano para vivir nosotros y las futuras generaciones, nuestros descendientes, está siendo destruido en nuestras propias narices por el modelo capitalista del desarrollismo destructor, esto es muy evidente, pero los principales líderes del mundo y de los países desarrollados no quieren ver la realidad, la mayor parte de ellos porque el mundo está gobernado por los intereses económicos de las grandes transnacionales y sabemos bien cómo la ambición capitalista ciega, la ambición capitalista borra no sólo la vista, los sentidos y la conciencia; yo, cristiano como soy siempre he dicho que el primer gran capitalista de nuestra era fue Judas Iscariote, que vendió a Cristo por unas monedas, y el primer gran socialista de nuestra era se llamó Jesús, el Redentor, el Nazareno crucificado que vino a anunciar el reino de la igualdad, el reino de la justicia y de la paz, pero no es mentira, no es ninguna exageración de un grupo de científicos enloquecidos, no, está a la vista: se están deshelando los polos, hace poco leíamos un informe de una revista científica muy prestigiosa que dice que si no hay algún cambio, si no hay algún cambio, si no se hacen cambios en el manejo de los factores que están influyendo al clima y al recalentamiento de la Tierra, dentro de 100 años el océano Ártico ya no tendrá acute; hielo, por ejemplo. Está elevándose el nivel de las aguas de los océanos, se están recalentando las aguas de los océanos y una de las consecuencias la están sufriendo sobre todo los pueblos del Caribe, los pueblos de Centroamérica y el mismo pueblo de Estados Unidos: esos huracanes endemoniados que arrasan pueblos enteros tienen muchas causas, pero la causa fundamental de la furia endemoniada y la fuerza inusitada que ahora adquieren estos animales es el recalentamiento de las aguas de los océanos. La capa de ozono sigue abriéndose, es decir, en verdad no es una exageración, está en riesgo la vida futura en el planeta. De eso debemos convencernos y convencer cada día a más personas en el mundo, porque sólo la conciencia y la acción de los pueblos salvarán la vida en el planeta, yo sí estoy seguro de que salvaremos la vida para las futuras generaciones y que tendremos un mundo mejor, nuevo y distinto, estoy seguro de qué lo lograremos, pero nos toca a nosotros la batalla.
Asistentes Aplausos.
Presidente Chávez
Hace poco estaba comenzando a leer uno de los tantos libros maravillosos, que están saliendo muchos libros, muchos libros, y hay que hacer esfuerzos por editar muchos libros y difundirlos gratuitamente por todas partes. En Venezuela estamos haciendo esto, este año hemos editado 25 y más millones de libros totalmente gratuitos, pues, Cuba tiene muchos años editando libros, millones y millones de libros para que el pueblo lea, para que los pueblos lean, se enteren; cómo no recordar aquí hoy a ese grande, nuestro José Martí. José Martí lo dijo muy claro: “Ser cultos para ser libres.” Un pueblo culto es un pueblo libre.
Asistentes Aplausos.
Presidente Chávez
Y años, años atrás, ese otro grande, Simón Bolívar lo había dicho, sólo que por el reverso de la moneda, por la otra cara de la moneda, Bolívar lo dijo con una claridad impresionante: “Un pueblo ignorante es instrumento ciego de su propia destrucción…” “Un pueblo culto, dijo Martí, es instrumento hermoso de su propia liberación…”
Asistentes Aplausos.
Presidente Chávez
Así que se trata de salvar la vida. Yo decía que estaba leyendo a Noam Chomsky, ese buen escritor, yo recomiendo leer todo lo que les llegue a la mano de Noam Chomsky, léanlo, léanlo, no duerman, no importa, los pocos ratos libres que uno pueda tener, leer, leer, pensar, pensar y pensar, escribir, escribir y escribir.
Noam Chomsky, uno de sus más recientes libros, no sé si incluso el más reciente, fíjense en el título: Hegemonía o supervivencia. Y está muy claramente planteado, es el mismo tema de Carlos Marx: socialismo o barbarie, es el mismo planteamiento, sólo que Chomsky precisa, claro, han pasado más de cien años. Chomsky precisa, enfoca el problema de este momento histórico del mundo: “O la hegemonía norteamericana o la supervivencia en el planeta…” Una de dos, escojamos los pueblos del mundo cuál es el destino para nuestros descendientes, porque siempre digo también que ya no se trata de nosotros, ya nosotros mal que bien hemos vivido, pero ahí están nuestros hijos, ahí están nuestros nietos y los que no han nacido y los que siguen naciendo, se trata de ellos: hegemonía o supervivencia, dice Noam Chomsky.
Y me llama la atención, viendo el índice del libro, uno de los primeros capítulos o temas que él toca allí, me llamó la atención y me fui directo allí a ver qué es lo que dice Chomsky, porque es una idea que llama la atención, de inmediato él dice que las dos superpotencias mundiales que hoy existen, uno tiene la idea de que hay una sola superpotencia ¿verdad? Así que la idea como que descoloca a cualquiera. Pero me voy directo a ver qué es lo que plantea Chomsky y lo dice: hay dos superpotencias mundiales hoy en el planeta, una amenaza con destruir al mundo, esa es la superpotencia estadounidense, la otra, la otra superpotencia está naciendo, pero no es la Unión Soviética, no es ningún territorio, dice él, ningún país, ningún grupo de países, no, esa otra superpotencia, dice Chomsky, que se está levantando y puede salvar al mundo es la opinión pública de los pueblos, valga la redundancia, la opinión de los pueblos del mundo, la opinión pública mundial, movilizada, consciente, ¡le toca la hora a los pueblos de la Tierra de salvar la vida en el planeta y salvar la vida de las futuras generaciones! Nos tocó a nosotros, pues, derrotar al imperialismo, a todos los imperios.
Asistentes Aplausos.
Presidente Chávez
Allá en mi pueblo, yo nací, ustedes saben, al sur de Venezuela, en un campo, yo soy campesino de nacimiento y de crianza y por allá hay un dicho que dice: “A cada cochino le llega su sábado…” Aquí también, somos igual de campesinos todos. Bueno, a cada imperio le llega su sábado también, a cada imperio le llega su sábado…
Asistentes Aplausos.
Presidente Chávez
Y yo no digo que estemos ya en sábado, pero pudiéramos estar de jueves para viernes, vamos rumbo al sábado. Vamos a proponernos como meta de nuestra vida que cuando nos toque irnos de aquí, antes de que nosotros nos vayamos de aquí como generaciones, aquí están juntas varias generaciones, la generación, hay algunos por ahí de los 40, de los 50, de los 60, de los 70, de los 80, y hasta ahí. Cuando nosotros como grupo humano nos convirtamos en tierra de estas sabanas tan bellas que veía esta mañana aterrizando, de Mar del Plata; o en agua del río de La Plata, o piedra de las sabanas de Venezuela o de cualquier parte, cuando nosotros nos vayamos de aquí ya el imperialismo norteamericano, si no ha desaparecido debemos dejarlo como un verdadero tigre de papel y que se levanten por todas partes los pueblos de la Tierra, como tigres de acero, defendiendo la soberanía, la vida, la dignidad, el futuro, tigres de acero, tigres de acero somos los pueblos, no hay imperialismo que haya sobrevivido cuando los pueblos nos decidimos a ser libres, y uno ve por todos lados que los pueblos resucitan, hay que seguir alentando, por eso este acto que ustedes… Miguel Bonasso me dijo que tiene una semana sin dormir, pero esa es la batalla, esa es la batalla: hombres y mujeres que han organizado este evento, les admiro, les admiro, todos los que han venido marchando, los que han venido en el Tren del Alba, los que vinieron de Jujuy en autobús, 24 horas, de toda la provincia de Buenos Aires, del Uruguay, del Paraguay, de Argentina, de Chile, de Bolivia, de Ecuador, de Venezuela, de Brasil, de Colombia, de Centroamérica, del Caribe, de Cuba, de Norteamérica, hay norteamericanos aquí también. Quiero saludar a la delegación norteamericana que ha venido a este evento y pido para ellos ! un aplauso, un aplauso de reconocimiento y de hermandad al pueblo de Estados Unidos de Norteamérica. ¡Qué viva el pueblo de Estados Unidos!
Asistentes ¡Viva!
Presidente Chávez Ese es un pueblo hermano, ya Carlos Marx lo decía, y hay que repetirlo: “Con el pueblo de Estados Unidos nosotros debemos contar para salvar el planeta”. Sin el pueblo de Estados Unidos sería imposible salvar la Tierra. La conciencia de Martin Luther King está renaciendo en las calles de los pueblos de Norteamérica.
Asistentes Aplausos.
Presidente Chávez La conciencia de Malcolm X.
Asistentes Aplausos.
Presidente Chávez
Y de grandes luchadores, y aquel pueblo mezclado con la latinidad, con los afroamericanos, los negros, los blancos, los indios.
Yo hace poco tuve la ocasión, cuando estuvimos en la otra Cumbre, aquella de Naciones Unidas; me invitaron a visitar unos barrios en Nueva York y fuimos a varios sitios, por allá por el Bronx. Mucha gente, mucha gente, y sobre todo mucha gente pobre, afroamericanos y latinos la mayoría, pero también gente blanca, y vi mucha conciencia allí, vi mucho liderazgo allí de jóvenes, de mujeres, organización popular, escuelas populares, talleres populares; me vine muy impresionado de la fuerza de los movimientos populares de Estados Unidos, los intelectuales, los pensadores, los luchadores por un comercio justo y por el respeto a la soberanía de los pueblos. Vaya nuestro reconocimiento. Hay un importante repunte de la conciencia, insisto, en el pueblo de Estados Unidos.
Última hora: me informan desde Caracas. Una marcha en Caracas, más de 80 mil personas han marchado hoy en contra del ALCA y del imperialismo y en apoyo al Congreso de los Pueblos.
Asistentes Aplausos.
Presidente Chávez ¡Viva el Congreso de los Pueblos!
Asistentes ¡Viva!
Presidente Chávez ¡Vivan los pueblos!
Asistentes ¡Vivan!
Presidente Chávez
Ahora, decía hace un rato que la pala y el parto, el entierro y el nacimiento. Allí hay que detenerse a pensar y a trabajar mucho y a actuar en consecuencia, digamos que reduciendo ya el campo de visión y dejando la visión del mundo por un momento y la expresión de Chomsky, de hegemonía o supervivencia y enfoquémonos pues en nuestra América y en los pueblos de nuestra América.
Fíjense que hoy aquí en Mar del Plata además de lo que ya he dicho y lo que se ha dicho, han venido a confrontarse dos viejos proyectos, dos viejos proyectos, hace un rato les hablaba, recordando a Jefferson, también habría que recordar aquella expresión de James Monroe en 1823: “América para los americanos.” América para los americanos. Eran los mismos días, mientras James Monroe lanzaba la expresión imperialista: “América para los americanos.” Pero para ellos, porque pretendieron quitarnos incluso el nombre de americanos, los hombres y mujeres de aquí de Mar del Plata y de allá de la Patagonia son tan americanos como los de Nueva York, los de Washington, los de Québec y los de cualquier rincón de este continente, somos todos americanos.
Asistentes Aplausos.
Presidente Chávez
Ahora, les decía de dos proyectos, dos proyectos que desde allá desde la punta más al norte de América hasta la punta más al sur del continente, desde hace unos 200 años vienen confrontándose dos proyectos, pudiéramos sintetizarlo, así como en el Norte lo lanzaron Jefferson, Madison, Monroe; igual aquí en el Sur ellos lanzaron su proyecto imperialista, anexionista. Y aquí en el Sur nuestro proyecto fue lanzado desde entonces por hombres como Miranda, San Martín, Artigas, O’Higgins Sucre, Bolívar, Manuela Sáenz; hombres y mujeres de esta tierra lanzaron un proyecto hace 200 años.
Los venezolanos estamos preparándonos ya, e invitamos a todos nuestros pueblos hermanos para que el próximo año 2006 conmemoremos en toda esta tierra los 200 años de la llegada de Miranda, el precursor de la revolución suramericana. Miranda, aquel caraqueño universal, dijo Bolívar de él, el venezolano universal de todos los tiempos. Miranda, aquel que estuvo batallando espada en mano en las tres grandes revoluciones de su tiempo, porque fue comandante de tropas y combatiente en la Revolución de la Independencia de Estados Unidos, ahí estuvo Miranda batallando en Pensacola, en Florida; en Las Bahamas, espada en mano, y fue amigo y conoció personalmente a Washington, Madison y a aquellos hombres, y vio como nació aquella unión de las antiguas trece colonias, y pensó Miranda entonces desde allá, 1784, 85, 86; pensó Miranda, y así lo escribió , que así como estaba naciendo en el norte de América la unión que hoy es el imperio, había que luchar en Suramérica por conformar también una liga de repúblicas; y fue Miranda el primero que utilizó el nombre de Colombia, él propuso la unión colombiana en honor a Colón el “descubridor”. Miranda después estuvo recorriendo el mundo y pasó por Moscú en tiempos de Catalina la Grande y llegó a ser coronel de Rusia y a los pocos años aparece en París y tomó armas a favor de la Revolución Francesa y llegó a ser Mariscal de Francia Revolucionaria, amigo de Napoleón Bonaparte. Un día Napoleón Bonaparte, hablando de Francisco de Miranda, dijo que era un quijote sin locura, y luego Miranda, ya a los 60 años, edad que entonces era muy avanzada, la esperanza de vida de entonces era de 50 años, hoy en cambio yo tengo 51 y soy un muchachito; Maradona cumplió 45 y es un pibe, y Bonasso tiene 59, y Eva es una muchacha.
Bueno. Pero Miranda a los 60 años, después de haber sido comandante de tropas en la Independencia de Estados Unidos, después de haber sido Mariscal de la Francia revolucionaria, después de haber estado en Cuba y desde allí apoyó la independencia de Estados Unidos, con muchos cubanos que se fueron de allá, hay gente en Estados Unidos que seguramente no sabe, la mayor parte de ese pueblo no sabe que sangre cubana corrió en territorio norteamericano luchando contra el imperialismo inglés para darle independencia a aquellos pueblos, después Miranda se vino, hace 200 años, era 1806, en tres barcos con una pequeña tripulación y una imprenta y tocó territorio de Estados Unidos, y tocó Haití, que era libre entonces, el primer territorio libre del Caribe y de América, la República libre y negra de Haití. Desde aquí enviamos al pueblo de Haití nuestra solidaridad de hermanos y de compañeros, pueblo haitiano, pueblo heroico, pueblo mártir…
Asistentes Aplausos.
Presidente Chávez
Bueno, y Miranda, al final fue el Generalísimo de la Primera República venezolana, y firmante de nuestra primera Constitución en 1811, y fue el que ideó esa bandera amarillo, azul y rojo que hoy flamea en tres repúblicas suramericanas: Venezuela, Colombia y Ecuador; y fue el ideólogo de la Unión del Sur, uno de los primeros, tenía un periódico en Londres llamado El Colombiano que circulaba en español, en inglés y en portugués. Por la casa de Miranda en Londres pasaron casi todos los jóvenes que comenzaron a incorporarse a las filas revolucionarias, uno de ellos Bernardo O’Higgins.
Bueno. Pero a lo que quiero referirme es que hace 200 años nació aquí un proyecto que recorrió este continente, la unión de Suramérica, la unión del Caribe, la unión de las repúblicas antes españolas; ese proyecto chocó con el proyecto del Norte, el proyecto de la Patria grande, el abrazo de Bolívar y San Martín allá en Guayaquil, ahí se unieron en una sola idea y en un solo proyecto, pero fíjense ustedes cómo terminaron todos aquellos hombres y mujeres, los que llevaron la idea más allá del horizonte, los que se fueron a la guerra de liberación, desde el Caribe hasta el Río de la Plata, los que cruzaron los Andes una y varias veces, como San Martín los cruzó, como Bolívar los cruzó; cómo terminaron aquellos hombres, San Martín: muerto en el exilio, O’Higgins: muerto en el exilio, Artigas: muerto en el exilio, Bolívar casi asesinado y muerto solitario en Santa Marta. Sucre: asesinado en Berruecos, Manuela Sáenz expulsada de la Nueva Granada y de Venezuela, y murió anciana por ahí en un pequeño pueblo del Perú; todos ellos, Abreu e Lima, el gran brasileño bolivariano, igual: murió solitario en Pernambuco. El proyecto era crear repúblicas de iguales y de libres, repúblicas en libertad y en igualdad, el proyecto era eliminar la esclavitud, eliminar la miseria, eliminar la pobreza, la explotación; todos ellos fueron verdaderos revolucionarios, el proyecto era además crear la unión o liga de repúblicas de la América meridional; en esa dirección apuntó Bolívar cuando convocó al Congreso de Panamá en 1824.
El próximo año, por cierto, invito a que todos los pueblos de este continente celebremos de manera activa, como lo estamos haciendo aquí hoy, y con congresos, deliberaciones, proyectos, debates, propuestas, construcción del camino, en fin, el próximo año, a 180 años del Congreso de Panamá, que era la propuesta de Bolívar para unir, para lograr lo que él decía, un gran cuerpo político, un gran cuerpo político en el Sur, y entiéndase que para nosotros el Sur es un concepto no sólo geográfico sino político, ideológico, porque en una ocasión yo hablaba del Sur y algunos mexicanos me decían: “Chávez ¿y nosotros?” O sea los mexicanos para nosotros son del Sur, este es un concepto político, y esa es una de las grandes tareas que tenemos hoy nosotros: recuperar la conciencia del Sur, como dice Mario Benedetti: “El Sur también existe.” Nosotros somos el Sur de la Tierra, nuestro camino es el Sur.
Asistentes Aplausos.
Presidente Chávez
Es decir, desde allá viene la confrontación del proyecto imperialista de la Norteamérica y el proyecto liberador de nosotros, desde el Sur, los del Caribe, y hoy ha recrudecido la confrontación, quién puede negarlo, en 1990, después de la caída soviética y el Muro de Berlín, el imperialismo norteamericano arremete, sale a la ofensiva, quiere cobrar, se siente victorioso, decretaron ellos el “fin de la Historia”, el fin de las ideologías. Hoy apenas 15 años después tendremos que decirles, como dice una vieja canción: “Las ideologías no estaban muertas, estaban de parranda”. Decretaron el fin del socialismo. Hoy hay que decir: el socialismo no estaba muerto, estaba de parranda, y aquí estamos los socialistas levantando de nuevo nuestras banderas.
Asistentes Aplausos.
Presidente Chávez
Luego lanzaron, en ese año 1990, la Iniciativa para las Américas, Iniciativa para las Américas, era presidente de Estados Unidos mister Father, mister Bush father era President en Estados Unidos. Él lanzó la llamada Iniciativa para las Américas que bastante daño le hizo a la América Latina y al Caribe, porque inmediatamente las élites de nuestros países, casi sin excepción… por supuesto que siempre, como un tigre de acero, hemos tenido allí a la Cuba Revolucionaria que nunca se rindió, que nunca se doblegó y que por eso la admiramos y la queremos tanto, a su pueblo, a su liderazgo, a su líder y a su Presidente. Desde aquí vamos a mandarle una bulla a Fidel Castro.
Asistentes Algarabía.
Presidente Chávez ¡Viva Fidel!
Asistentes ¡Viva!
Presidente Chávez ¡Viva el Che!
Asistentes ¡Viva!
Presidente Chávez
El Che Guevara vive en estas tierras, en todos ustedes, en todos nosotros.
Bueno, entonces venía diciéndoles cuánto daño le hizo a los pueblos de América Latina aquella Iniciativa de las Américas, el neoliberalismo, el Consenso de Washington y el así conocido paquete de medidas del Fondo Monetario Internacional, y en este continente casi todos los gobiernos se arrodillaron, hay que decirlo así, indignamente se arrodillaron las élites de estos pueblos, o mejor dicho de estos pueblos no, de estas repúblicas, se arrodillaron ante el imperio, y fue así como una oleada macabra comenzó la orgía privatizadora en estas tierras, y muchas, muchísimas empresas de los estados…
Asistentes Cánticos.
Presidente Chávez
Ustedes saben que a mí no me gusta meterme con nadie, pero el que se mete conmigo yo me meto con él. Hay una copla allá en las sabanas de mi tierra, que también es de ustedes, que dice así:
Yo soy como el espinito/
que en la sabana florea/
le doy aroma al que pasa/
y espino al que me menea.
Entonces, a mí no me gusta meterme con nadie pero el que se mete conmigo puede salir obstinado.
El señor Menem…
Asistentes ¡Asesino! ¡Asesino!
Presidente Chávez
El señor Menem hace poco ha dicho por ahí a no sé qué periódico o televisora que Chávez es un populista, un demagogo, que ha engañado al pueblo venezolano, etc. Bueno, yo a Menem le digo entonces desde aquí desde Mar del Plata: ¡Entreguista! ¡Bastardo!
Asistentes Ovación.
Presidente Chávez ¡Cipayo!
Asistentes Ovación.
Presidente Chávez
Bueno, uno de los países que precisamente sufrió más, sufrió más, hasta los huesos, y eso nos duele mucho decirlo, de aquella iniciativa para las Américas, de aquella orgía privatizadora fue precisamente la gran nación Argentina, que fue entregada la élite argentina entregó esta República, ¡pero hoy Argentina se levantó de nuevo y levanta la bandera de la libertad! ¡Qué viva Argentina! ¡Qué viva la Patria de San Martín, la Patria del Che, la Patria de Perón, la Patria de Evita, la Patria de nosotros! ¡Viva Argentina! ¡Te amo Argentina!
Asistentes Algarabía.
Presidente Chávez
Todos nuestros pueblos sufrieron de aquella Iniciativa para las Américas, aquel Consenso, el Consenso de Washington. En Venezuela comenzó temprano la resistencia contra el Consenso de Washington, porque apenas estaban preparando los papeles de la propuesta del Consenso de Washington, apenas estaban preparando los documentos entreguistas al Fondo Monetario Internacional cuando el 27 de febrero de 1989 explotó Venezuela y el pueblo venezolano se fue a rebelión contra el proyecto imperialista y el paquete neoliberal del Fondo Monetario Internacional. En Venezuela comenzó temprano la resistencia, pero luego los pueblos se han venido levantando uno tras otro. Y por cierto que yo les recomiendo a mis colegas, les recomiendo a todos que no se acerquen mucho a Mr. Bush, eso es pavoso, yo que se los digo, es pavoso, es pavoso. Por ahí le preguntaron esta mañana a mi canciller Alí que si yo tenía alguna entrevista, alguna reunión con Mr. Bush, y entonces él respondió, bueno, hasta ahora no nos ha pedido ninguna entrevista el señor Bush, ojalá la pida ¿no? Es pavoso.
Miren, los pupilos de Bush en América Latina están cayendo uno a uno, uno a uno, vean aquel Presidente de Bolivia, él dice que yo dizque lo tumbé, porque además me echa la culpa a mí y a Fidel, aquel Sánchez de Lozada, él dice que lo tumbé yo, no, lo tumbó Bush. Bush lo tumbó porque él se entregó también, y los pueblos ya no aceptan aquí presidentes entreguistas, ni presidentes arrodillados al imperialismo. Los pueblos piden verdaderos líderes…
Asistentes Aplausos.
Presidente Chávez
Me dicen que hay aquí en este acto un grupo de ex combatientes de la guerra de Malvinas, vamos a saludarlos. ¡Vivan Las Malvinas argentinas!
Asistentes ¡Viva!
Presidente Chávez ¡Viva la soberanía Argentina!
Asistentes ¡Viva!
Presidente Chávez
Bueno, si yo sigo al ritmo que voy pudiera hablar aquí hasta las seis de la tarde, pero ustedes saben que yo tengo que llegar allá…
Asistentes Cánticos.
Presidente Chávez
Ahora veo por qué aquí no hay gordos, voy a recomendarles allá en Venezuela que hagamos el mismo salto este, es bueno para mantener la forma física y moral.
Miren, entonces yo voy a ir recortando mis reflexiones para ir redondeando algunas cosas que no quiero dejar de decir aquí en el día de hoy, así como Silvio, Daniel y Amaury generosamente acortaron su concierto, nos hubiese gustado seguir oyendo esas canciones, pero igual, ¡por el tiempo! Fíjense, estos caminos vienen de lejos, compañeros y compañeras, estos proyectos, el anexionista del Norte y el proyecto de liberación del Sur hoy vuelven a estar confrontados como siempre, es una nueva hora, es un nuevo momento el que estamos viviendo. Hace 200 años los padres libertadores no pudieron, ellos no pudieron hacerlo, y Bolívar recogió en una frase profunda, en una frase dramática aquella realidad dolorosa cuando dijo: “He arado en el mar….” ¿De qué sirvió esta independencia?, decía Bolívar, muriéndose ya, ellos no pudieron, no pudieron cuajar las repúblicas que querían, eliminando las desigualdades, los privilegios, creando repúblicas de iguales y de libres; y luego, al mismo tiempo uniéndolas en la liga de repúblicas para equilibrar con el Norte, con el Este y con el Oeste; así los planteaba Bolívar cuando convocó al Congreso de Panamá en 1824. El Congreso se reunió en el año 26 en Panamá, pero murió al nacer, él decía que era necesario, era imprescindible conformar la Unión del Sur, una Liga de Repúblicas, en lo político, en lo económico, en lo social y en lo militar, para luego ir en condiciones de igualdad y de dignidad a negociar sobre la paz, la economía y la guerra, con el Norte, con el Este y con el Oeste.
Asistentes Aplausos.
Presidente Chávez
Esa estrategia, la estrategia de Bolívar, que era la misma de todos ellos, esa estrategia; sólo que quizás Bolívar logró llevarla más lejos, logró clavar una pica allá en Flandes, logró orientar la brújula mejor. Unir el Sur es imprescindible para poder negociar en condiciones de igualdad y de dignidad con el Norte, y con el resto del mundo; eso hoy tiene más vigencia que ayer. Hoy es más angustiantemente necesario que ayer, nunca antes fue tan vital esta idea estratégica; por eso es que hace cinco años hubo la Cumbre de las Américas, la tercera, en Québec, allá en Canadá, y como Cuba no participa en estas cumbres de presidentes, porque parece que “democráticamente” consultaron con alguien y “en democracia” se decidió que Cuba no participara, creo que fue así; claro que Cuba sí participa porque Cuba está en nuestra palabra, en nuestra voz y en nuestra moral. Cuba anda con nosotros.
Asistentes Aplausos.
Presidente Chávez
Hace cinco años, allá en Canadá, el gobierno de Estados Unidos logró que se aprobara, casi por unanimidad, lamentablemente, la propuesta del ALCA, un Área de Libre Comercio para las Américas, y Venezuela fue el único país que en solitario levantó esta misma mano para decir ¡no!, para decirle no a aquella propuesta, pero todos los demás gobiernos aprobaron la propuesta, y fíjense lo que ha ocurrido, allá en Canadá se aprobó un artículo, un párrafo de la declaración que siempre se saca donde dice: “Las negociaciones para un Área de Libre Comercio de las Américas deberán estar concluidas el primero de enero del 2005, y además el acuerdo o convenio deberá estar activado a más tardar el 31 de diciembre de 2005”. Amaneció el primero de enero de 2005 y el ALCA ¿Dónde está? Ya viene el 31 de diciembre de 2005 y el ALCA ¿dónde está? Al ALCA, repito, la derrotamos los pueblos de este continente, y al ALCA hoy le tocó su entierro aquí en Mar del Plata, hoy enterramos al ALCA, en Mar del Plata se queda enterrado y bien hondo.
Asistentes Algarabía.
Presidente Chávez
Ahora fíjense, en verdad que a mí me provoca quedarme aquí con ustedes, pero compromisos de Estado me obligan ¿verdad?
Fíjense en una cosa, el ALCA está muerto, pero eso no quiere decir que el capitalismo esté muerto, insisto en esa idea, al próximo que vamos a enterrar es al capitalismo, ese es el próximo.
Asistentes Algarabía.
Presidente Chávez
Para eso habrá que luchar mucho más duro, Simón Bolívar ofrecía una fórmula: “Si queremos Patria entonces constancia y más constancia, paciencia y más paciencia, trabajo y más trabajo…” ¡Unidad, unidad, unidad y más unidad!, para tener Patria, para lograr nuestros sueños, para hacer posible la utopía, para lograr la salvación de nuestros pueblos. ¡Unidad, unidad, unidad!
Asistentes Aplausos.
Presidente Chávez
Nosotros desde Venezuela hace varios años comenzamos a hacer una propuesta que primero sonaba por allí tímidamente solitaria, y luego ha venido tomando fuerza y suena como los tambores que ustedes tienen por allí, suena como las cornetas de mil caballerías, porque no se trata sólo de decirle no al ALCA, se trata de plantear y construir la propuesta alternativa, el camino alternativo y es allí donde surgió nuestra idea, nuestra propuesta: el ALBA, Alternativa Bolivariana para los pueblos de América. Es nuestro proyecto, es el proyecto de 200 años, es el proyecto de San Martín, de Artigas, de O´Higgins, de Miranda, de Bolívar, del Che, de Perón, de Evita, es nuestro proyecto.
El ALBA… debo decirles que en diciembre pasado estuve por Cuba y allá Fidel y yo firmamos, la República de Cuba y la República Bolivariana de Venezuela hemos firmado un acuerdo: el ALBA, y estamos avanzando, Venezuela y Cuba hemos avanzado con paso firme, con mucha voluntad política, con mucha participación popular; necesaria la participación popular, con mucha voluntad social, con un gran esfuerzo en lo económico, hemos dado pasos firmes en la construcción del ALBA, en lo político, repito, en lo social, en lo económico, en lo tecnológico, y créanme que Fidel Castro, que no cree en Dios, por supuesto, lo sabemos, yo sí creo en Dios, Fidel es ateo, pero Fidel Castro ¿saben qué nombre le puso a una misión cubano venezolana?: “Misión Milagro”, porque en verdad me dijo un día por teléfono: “Chávez, esto parece un milagro.” La última expresión que le oí es: “Dios ayuda a Chávez y a…”
Asistentes Algarabía.
Presidente Chávez
Creo que fue cuando hubo un huracán directo hacia La Habana, y yo estaba pendiente, llamándolo, mira, no, iba a pasar sobre La Habana, y el huracán faltando muy poco se desvió, y entonces lo llamo, mira, ¿y qué pasó?, ¿y el huracán? Y me dice: “No chico, se desvió. Tú tienes razón.” Yo le dije, bueno, estoy pidiéndole a Dios, Fidel, le estoy pidiendo a Dios, y entonces él dijo: “Tú como que tienes razón: Dios ayuda a Chávez… y a sus amigos.”
Le pasó rozando el huracán.
Asistentes Aplausos.
Presidente Chávez
Y una noche yo le dije, mira Fidel vamos a hablar de Cristo, y me dijo: “Vamos, vamos a hablar”. Y al final, después de varias horas me dijo: “Chávez, soy cristiano pero en lo social…” Bueno, somos cristianos en lo social, la igualdad, la libertad: ¡eso es socialismo! Cristo, lo repito, fue para mí el primer gran socialista de nuestra era; la libertad, la igualad, la moral socialista de la que tanto habló el Che Guevara, de la que tanto ha hablado Fidel y cuántos otros, ustedes, muchos de ustedes, algunos durante muchos años. Ahora la Alternativa Bolivariana para la América y para los pueblos de la América debe ser construida desde abajo, con la participación de los trabajadores, la clase obrera, los indígenas, los campesinos, los agricultores, los estudiantes, las mujeres, los afrodescendientes, los profesionales, los artistas, los cantores, los poetas, todos tenemos nuestra tarea; pero la Alternativa Bolivariana para los pueblos de la América no será construida desde las élites, es desde abajo, desde nuestras propias raíces, con nuestro sudor, con nuestro barro, como decía José Martí, José Martí lo decía: “Hay que ser radicales…” Porque tenemos que ir a nuestras propias raíces, radicales. Esa palabra la han satanizado: “…este es un radical”, y la han asimilado como el “loco”, no, no, radical no es loco, yo soy un radical, radical, vamos a ser radicales, radicales en nuestros principios, bien enraizados, de ahí viene la palabra, de la raíz: radical, ¡radicalmente revolucionario! ¡Radicalmente humanista! ¡Radicalmente patriotas, de la Patria grande! ¡Radicalmente comprometidos con la vida y con los pueblos!, ¡cada día más radicales!
El ALBA se construye desde las raíces. Por ejemplo, fíjense en una cosa para ir detallando algunos elementos configurativos del ALBA, les hablaba de Cuba y Venezuela, gracias al ALBA Cuba y Venezuela hemos hecho una alianza estratégica donde el dinero no tiene para nosotros sino la importancia necesaria, no es la ganancia, el ALCA lo que busca es consolidar el poder económico de las grandes transnacionales y de las élites que han dominado estos países durante mucho tiempo, ese es el ALCA; el ALBA busca la liberación de los pueblos, la redistribución del ingreso de nuestros pueblos, la igualdad, el cambio del modelo económico productivo, la inclusión social, que no haya excluidos, vean ustedes cómo la pobreza ha venido creciendo en América Latina gracias principalmente al modelo capitalista y al Consenso de Washington. Hace 20 años había en América Latina 200 millones de pobres, hoy hay 222 millones de pobres, según las últimas cifras de la Cepal (Comisión Económica para América Latina y el Caribe), hace 20 años había 50 millones de indigentes en América Latina, hoy hay 100 millones de indigentes en América Latina; hoy se mueren 27 niños por cada mil nacidos vivos por enfermedades que serían curables, en América Latina, cada día hay más hambre, más miseria, gracias al modelo capitalista neoliberal que ha azotado a estos pueblos sin clemencia, y cada día los ricos son más ricos, cada día las élites se han enriquecido más, gracias al modelo neoliberal capitalista. El ALBA, les decía, gracias al Acuerdo Estratégico Cuba-Venezuela por ejemplo, los venezolanos hemos podido derrotar un mal de siglos: el analfabetismo. En menos de dos años entre Cuba y Venezuela acabamos con el analfabetismo en Venezuela, gracias al apoyo de la Cuba Revolucionaria, gracias a la Alternativa Bolivariana, que también es martiana, para nuestros pueblos, en menos de dos años aprendieron a leer y escribir, y vaya cómo aprendieron con calidad millón y medio de venezolanos, y ahora continuamos, todos vamos rumbo al sexto grado. En Venezuela hombres de 90 años, mujeres de 85 años, han aprendido a leer y a escribir, y Venezuela ha sido declarada, hace una semana, Territorio Libre de Analfabetismo por la Unesco, con el método cubano “Yo sí puedo”; ese es el ALBA en América Latina, y esa es una de las propuestas que llevo a la Cumbre de Mar del Plata, a la Cumbre de los Presidentes: que nos dejemos de andar de cumbre en cumbre, y de estar dando discursos y más discursos, y papeles y más papeles y que nos vayamos directo a luchar contra el analfabetismo, ¡carajo!, que lo podemos derrotar en pocos años.
En América Latina tenemos hoy cerca de 40 millones de analfabetas, y si hablamos del analfabetismo funcional son casi 200 millones de analfabetas funcionales. ¿Cómo puede alguien pensar que con esa carga tan terrible, con ese peso tan grande que nuestros pueblos cargan hace siglos producto de la esclavitud, la explotación, la dominación; cómo puede alguien pensar que mientras no derrotemos el analfabetismo podremos salir adelante? No, no podremos, no podremos, esa es una tarea prioritaria. Incluso yo estaba recordando algo esta madrugada, volando de Caracas hacia acá, leyendo algunos papeles. Hace 44 años, fíjense ustedes en esto, hubo una cumbre muy cerca de aquí, en Punta del Este, ahí en el Uruguay, y ahí a esa conferencia vinieron todos los gobiernos del continente, incluyendo el de Cuba, y el representante cubano a esa conferencia fue, por cierto, un argentino, que también fue cubano y es latinoamericano, ustedes saben: el Che Guevara vino a Punta del Este representando, al frente de la delegación cubana. En esa reunión habrá que recordar que el gobierno de Estados Unidos de la época, el presidente de Estados Unidos en aquel entonces era John Fitzgerald Kennedy, y a pesar de que yo no soy kennedista ni mucho menos, entre otras cosas porque en ese gobierno ocurrió la invasión de Bahía de Cochinos, pero con todo y eso, sin embargo, dijo Cristo un día: “A Dios lo que es de Dios y al César lo que es del César…” John Kennedy parece que comprendió parte de la realidad mundial de aquella hora y lo dijo en un discurso ante el Congreso de Estados Unidos, dijo Kennedy: “Hay una revolución en el Sur, y la causa de esa revolución es el hambre, es la pobreza, no es el comunismo”. Tal cual lo dijo Kennedy, y entonces fue donde propuso! además la propuesta llevaba por supuesto la carga política de frenar el avance de la Revolución Cubana y de las revoluciones en estas tierras. Pero Kennedy propuso allí en Punta del Este la “Alianza para el Progreso”. Dijo Kennedy que a los planes militares de la contrainsurgencia había que acompañarlos con un plan de reforma agraria y le propuso Kennedy a los presidentes de América Latina que llevaran adelante un plan de reforma agraria; a Venezuela, incluso, fue con Rómulo Betancourt y entregaron títulos de tierra. Hace poco yo conseguí por allá al sur de Caracas unos hombres ya con una juventud acumulada de unos 80 años casi, que me dijeron: “Chávez, yo recuerdo, aquí mismo vino, debajo de esa mata se paró Kennedy y nos entregó unos papeles con Betancourt”. Kennedy propuso reforma agraria, entrega de tierra a los campesinos. Kennedy propuso reformas fiscales, cobrar impuestos a los más ricos, para redistribuir los ingresos. Kennedy dijo –con una claridad impresionante, desde su punto de vista, por supuesto– “Los que le cierran el camino a la revolución pacífica, le abren al mismo tiempo el camino a la revolución violenta…” Y llamó a los gobiernos a hacer una revolución pacífica, claro, desde su punto de vista, repito. Ahora lo concreto y lo cierto es que en Punta del Este, hace 44 años y dos meses y unos días vino el gobierno de Estados Unidos a proponer la Alianza para el Progreso y se aprobó en aquella reunión, con la excepción de la Cuba Revolucionaria que tenía sus razones y tenía sus principios. Y el gobierno de Kennedy propuso 20 mil millones de dólares no para prestarlos, no, para aportarlos al desarrollo, a la lucha contra el hambre y la pobreza. Yo hoy voy a adelantar esto porque lo voy a decir allá, pero aquí entre nosotros! , en secreto lo voy a decir, fíjense, Venezuela, que es un país subdesarrollado, pobre, con una carga muy pesada, con una herencia muy pesada de pobreza, de desigualdad, todavía; sin embargo, dado especialmente el incremento de los precios del petróleo, además de que ya dentro del ALBA hemos creado Petrocaribe, Venezuela le está vendiendo petróleo a catorce países del Caribe, descontándoles 40% del precio del barril, y eso nos lo pagan a 25 años con 1% de interés y con tres años de gracia.
Asistentes Aplausos.
Presidente Chávez
El que le aplique a esto un cálculo matemático podrá concluir que este mecanismo incluye, ese financiamiento lleva una carga de donación de cerca del 70%, porque es un plazo de 25 años a 1% de interés, y además ellos nos pueden pagar con bienes y servicios, no en dinero necesariamente, esto es para ayudar a los más pequeños, a los más débiles que nosotros, a los hermanos que tienen más dificultades.
Asistentes Aplausos.
Presidente Chávez
Pero no sólo en el Caribe, aquí en Argentina hemos establecido también un convenio de cooperación, ambos gobiernos, a través del cual Venezuela le proporciona cerca de ocho millones de barriles de fuel-oil a la Argentina, y ustedes nos están pagando no con dinero sino con vaquillonas preñadas, por ejemplo, o con equipos médicos para luchar contra el cáncer…
Asistentes Aplausos.
Presidente Chávez
Ahora firmamos con el gobierno uruguayo un convenio y por primera vez, debo decirles además que Venezuela tiene casi 100 años explotando petróleo, que Venezuela fue durante casi 30 años el primer exportador del mundo, pero éramos colonia norteamericana, y todo el petróleo se iba a Norteamérica; por primera vez hace un año llegó al río de La Plata un barco venezolano cargado de petróleo para el pueblo argentino, por primera vez en 100 años.
Asistentes Aplausos.
Presidente Chávez
Por primera vez en 100 años llegó, hace tres meses un barco, un tanquero venezolano cargado de petróleo para Uruguay, para refinarlo allá en la refinería que tienen nuestros hermanos uruguayos, y además nos van a pagar también con facilidades, no les estamos pidiendo que nos paguen ya, no, páguennos a largo plazo, y además estamos haciendo un convenio para que nos paguen con cemento y otros bienes y servicios una parte de la factura petrolera para aliviar la carga sobre estos gobiernos y el fisco, y para que puedan, bueno, avanzar más rápido en los programas sociales. A la Argentina le hemos comprado ya casi mil millones de dólares en bonos, eso nunca se había visto aquí, que un país latinoamericano le comprara a otros bonos para financiar planes de desarrollo, a pesar de que nosotros tenemos una carga bastante pesada también. Asistentes Aplausos.
Presidente Chávez Pero hoy vengo a plantear que así como Kennedy propuso y se aprobó, con los mismos países que estamos aquí reunidos hoy, hace 44 años se aprobó la Alianza para el Progreso, yo propongo que hagamos ahora una alianza contra el hambre, Venezuela la propone. La Alianza para el Progreso fue un plan de diez años, era desde el 61 hasta el 70. Nosotros proponemos aquí hoy, vamos a proponer allá que hagamos una alianza contra el hambre, sería como alianza “AL.”, contra “C.”, el hambre “HA.”: “AL.C.HA.”, “ALCHA”.
Asistentes Aplausos.
Presidente Chávez
Que hagamos un ALCHA, una Alianza Contra el Hambre, bueno, y que Venezuela modestamente, eso sería un plan así como aquel 2005-2015, diez años, para que en diez años derrotemos el hambre en estas tierras, 220 millones de pobres tenemos en América Latina, y 100 millones de indigentes, es una situación horrorosa que golpea como bofetada tremenda el rostro de los hombres y las mujeres de estas tierras; son nuestros hermanos muriéndose de hambre, mientras otros viven en el lujo y en el derroche. Venezuela ofrece, de sus propios recursos, el pueblo venezolano para una alianza como la que estoy figurándome para los próximos diez años 2005-2015, diez mil millones de dólares, que es lo mismo que ofrecía Estados Unidos para la Alianza para el Progreso, diez mil millones de dólares.
Asistentes Aplausos.
Presidente Chávez
Y estoy seguro, no le he preguntado a Fidel Castro, pero no me hace falta preguntárselo, que en esa Alianza Contra el Hambre, y en la lucha contra el analfabetismo y en los planes de salud, los planes de salud como Barrio Adentro, que con 20 mil médicos cubanos, junto con miles de médicos y enfermeros venezolanos están dispersos por todo el país hoy ofreciéndole atención preventiva y educativa de salud a 17 millones de seres humanos que estaban excluidos, y eso incluye medicamentos totalmente gratuitos.
Asistentes Aplausos.
Presidente Chávez
Estoy seguro de que contaremos para ese plan con Fidel Castro y el pueblo cubano, estoy absolutamente seguro, ese es el ALBA, ese es el ALBA: pongamos por delante lo social, seamos profundamente humanistas, pongamos por delante el dolor de nuestra gente para fortalecer la cohesión social, ese es el ALBA. El ALBA también es, por ejemplo, lo que hicimos en Caracas hace apenas dos semanas, el I Encuentro Internacional de Trabajadores de Empresas Recuperadas, trabajadores de aquí de Argentina, de Brasil, de Uruguay, de Paraguay, de Haití, de Colombia, de Venezuela, de más de diez países, líderes sindicales, centrales sindicales, y hemos firmado allá decenas de convenios de cooperación. Para ponerles un ejemplo, una empresa uruguaya que trabaja con cuero pero no tienen quien les dé crédito, no tienen para comprar materia prima. Bueno, Venezuela les ha ofrecido, en convenio con trabajadores venezolanos, la materia prima para trabajar entonces entre ambas, la empresa uruguaya y la empresa venezolana; una empresa brasileña que trabaja con plástico y tiene dificultades de financiamiento, no tiene materia prima suficiente para hacer tubos de plástico, artículos de plástico, Venezuela le ofrece la materia prima de nuestra petroquímica y entonces nos van a pagar a bajo costo con productos, no con dinero, y luego vamos juntos en una alianza estratégica a colocar esos productos en nuestros mercados, satisfaciendo necesidades de nuestros pueblos.
Asistentes Aplausos.
Presidente Chávez
De esa reunión surgió la idea de crear Empresur (Empresas Recuperadas del Sur) eso es el ALBA. El ALBA es Petrosur también, una alianza estratégica entre las petroleras suramericanas: Pdvsa, Petrobrás, Ancap, y Enarsa de Argentina, para explorar, para comerciar, para procesar nuestro petróleo conjuntamente. Debo decirles que Venezuela está lista para adquirir aquí en Argentina una refinería, vamos a invertir en esa refinería y en un sistema de distribución de combustibles, cerca de 100 millones de dólares para traer petróleo venezolano y refinarlo aquí, y bueno, ayudar en el suministro y bajar los costos de producción para el pueblo argentino.
Asistentes Aplausos.
Presidente Chávez
Lo mismo con Brasil hemos hecho un convenio con Petrobrás y vamos a construir una refinería grande en Pernambuco, en el Nordeste del Brasil para traer petróleo venezolano y refinarlo y suministrarle a toda esa población del norte del Brasil que tiene dificultades de energía. Debo decirles compañeros y compañeras, con mucha humildad lo digo, pero es una verdad, y he ahí la razón de las agresiones imperialistas contra Venezuela. Fundamentalmente Venezuela tiene la primera reserva de petróleo del mundo, Venezuela tiene la octava reserva probada de gas del mundo; Venezuela tiene petróleo y gas para proporcionarle a los pueblos de la América Latina por 200 años. Cuenten los pueblos de América Latina y el Caribe con el apoyo de Venezuela para el desarrollo energético, el desarrollo social, el desarrollo tecnológico.
Asistentes Aplausos.
Presidente Chávez
En fin, he allí algunas líneas que como que ayudan a dibujar la propuesta Alternativa Bolivariana para la América. Telesur está en el aire, la televisora suramericana, propuesta nuestra de hace varios años ya salió al aire y cada día tendrá mayor cobertura, ya está saliendo en vivo 24 horas al día, esa es la televisora, así lo digo yo, la televisora del ALBA, porque es necesario que nosotros nos veamos nuestros rostros y oigamos nuestras voces, no lo que quiere CNN y las grandes cadenas del Norte que nosotros veamos de nosotros mismos, para rescatar nuestras tradiciones, nuestras culturas nació Telesur, la televisora del Sur, la televisora de la integración del ALBA, digo.
Esta mañana recibí honores militares cuando bajaba del avión, y me paro a hablar con un soldado argentino y yo sé los traumas que aquí en el Cono Sur han vivido los pueblos con los soldados, pero esos soldados argentinos, esos soldados uruguayos, esos soldados brasileños, esos soldados venezolanos, bolivianos y ecuatorianos tienen que rescatar las banderas originarias de los libertadores de estas tierras, de los soldados libertadores, porque es parte también de la penetración imperialista. El imperialismo norteamericano penetró las Fuerzas Armadas de nuestros pueblos, y formaron dictadores y enseñaron a nuestros soldados a torturar, a desaparecer y a arremeter a nuestros propios pueblos, muchas veces en el siglo XX, muchas veces, las más de las veces, casi todos los ejércitos de nuestros pueblos actuaron como ejércitos de ocupación en nuestros propios territorios, y o pertenezco al Ejército venezolano que retomó las banderas de Bolívar y se unió al pueblo para hacer una revolución.
Asistentes Aplausos.
Presidente Chávez
Así que digo esto porque vi al soldado con el fusil al hombro, rindiéndome honores y me paré frente a él, y frente a otro y les di un saludo y le dije a uno, calladito, “No te olvides que ese fusil que tienes al pecho es para defender al pueblo argentino, para defender la soberanía del pueblo argentino y la dignidad del pueblo argentino”.
Asistentes Aplausos.
Presidente Chávez
Y vi en los ojos de ese soldado el brillo, el brillo de la conciencia. Yo estoy seguro de que en la medida en que los pueblos sigan avanzando, construyendo el camino de la liberación definitiva de nuestra América, serán cada día más acompañados, seremos cada día más acompañados de nuestros soldados que son y deben ser siempre parte del alma de un pueblo, del alma de un pueblo como lo fue San Martín, el General mestizo; como lo fue Bolívar, el General Libertador, como lo fueron ellos, generales libertadores, soldados libertadores, porque se trata aquí de una segunda independencia, lo que hoy estamos haciendo, ya lo decía José Martí, por allá por mil ochocientos ochenta y tantos, hablándole a los pueblos de la América Latina: “Llegó la hora de la segunda independencia…”, y necesitamos a tod os, hombres y mujeres conscientes, unidos, unidos de verdad. Cuando hablaba de los soldados es que estaba recordando que así como existe la OTAN (Organización del Tratado del Atlántico Norte), por qué, digo yo, no puede existir la OTAS (Organización del Tratado del Atlántico Sur), a ver si es verdad que algún día va a ocurrir lo que ocurrió en Las Malvinas de nuevo, que unamos también nuestras Fuerzas Armadas para asegurar nuestra soberanía, para definir nosotros mismos nuestros conceptos de seguridad y de defensa y de soberanía y no seguir dependiendo de los mandatos (como se ha dependido mucho tiempo) del Comando Sur de Estados Unidos.
Independencia, decía Martí; independencia, decimos hoy en este III Congreso de los Pueblos. Termino con el alma, con la frase de Martí: “Llegó la hora de la segunda independencia de los pueblos de la América.” Ha llegado la hora. Un abrazo bolivariano, sanmartiniano, peronista, guevarista, bolivariano y revolucionario para todos y para todas. Muchas gracias Maradona, muchas gracias Bonasso, muchas gracias Bonafini, muchas gracias a todos, muchas gracias a todas por este acto maravilloso, y yo me voy a la otra cumbre, a llevar el alma de ustedes y la palabra de ustedes, de los pueblos hasta la muerte, ¡hasta la victoria siempre! ¡Patria o muerte, venceremos! ¡Viva el Che Guevara!, ¡carajo!
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Arriba
TODOS ERAN SUBVERSIVOS -(todos y todas lo éramos)
Durante elProceso, la conducción militar definió en un sentido sumamente amplio el concepto de "subversión". Para la Junta Militar y sus principales personeros, todo aquel que no estuviera alineado con los criterios y objetivos de los golpistas, estaba "infiltrado" por el "germen" subversivo. Los principales jefes de las Fuerzas Armadas compartían esta posición y lo explicitaron en sucesivas declaraciones públicas, que potencialmente ubicaban dentro del espectro "subversivo" a gran parte de la población:
“Para obtener sus objetivos [los subversivos] han usado y tratan de usar todos los medios imaginables: la prensa, las canciones de protesta, las historietas, el cine, el folclore, la literatura, la cátedra universitaria, la religión...”
AlmiranteArmando Lambruschini
“El teatro, el cine y la música se constituyeron en un arma temible del agresor subversivo. Las canciones de protesta, por ejemplo, jugaban un papel relevante en la formación del clima de subversión que se gestaba: ellas denunciaban situaciones de injusticia social, algunas reales, otras inventadas o deformadas.”
Teniente GeneralRoberto Viola
“En nuestros días, se ha consumado lo peor que podía ocurrir y de las más funestas consecuencias: la infiltración de las ideologías marxistas en el sentido nacional y, más aún, en el nacionalismo argentino y en la Iglesia Católica Apostólica Romana.”
GeneralManuel Bayón, director de laEscuela Superior de Guerra, 1977
“Hasta el presente, en nuestra guerra contra la subversión no hemos tocado más que la parte alta del iceberg [...] Ahora es necesario destruir las fuentes que forman y adoctrinan a los delincuentes subversivos, y esta fuente se sitúa en las universidades y en las escuelas secundarias. La influencia más peligrosa es la ejercida por los universitarios formados en el extranjero, y más precisamente en la Sorbona, Dauphine y Grenoble, que de inmediato transmiten el veneno con el cual intoxican a la juventud argentina.”
GeneralAcdel Edgardo Vilas, comandante de la V Región Militar, 1976
“A partir de una simple composición sobre las estaciones del año, un maestro subversivo o un idiota útil comentará a sus alumnos la posibilidad de combatir el frío según los ingresos de cada familia (…) Para los educadores: inculcar el respeto por las normas establecidas; inculcar una fe profunda en la grandeza del destino del país; consagrarse por entero a la causa de la Patria, actuando espontáneamente en coordinación con las Fuerzas Armadas, aceptando sus sugerencias y cooperando con ellas para desenmascarar y señalar a las personas culpables de subversión, o que desarrollan su propaganda bajo el disfraz de profesor o de alumno (…) Para los alumnos: comprender que deben estudiar y obedecer, para madurar moral e intelectualmente; creer y tener absoluta confianzas en las Fuerzas Armadas, triunfadoras invencibles de todos los enemigos pasados y presentes de la Patria.”
Luciano Benjamín Menéndez, general de división, comandante de la III Región Militar
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En 1977, se distribuyó en las escuelas un material gráfico dirigido a los padres con hijos en edad escolar, titulado:
Cómo reconocer la infiltración marxista en las escuelas:
Léxicomarxistapara uso de los alumnos: [...] Lo primero que se puede detectar es la utilización de un determinado vocabulario que, aunque no parezca muy trascendente, tiene mucha importancia para realizar este «trasbordo ideológico» que nos preocupa. Así, aparecerán frecuentemente los vocablos diálogo,burguesía,proletariado,América latina, explotación, cambio de estructuras, capitalismo.
Historia, Formación Cívica, Economía, Geografía y Catequesis en los colegios religiosos, suelen ser las materias elegidas para el adoctrinamiento subversivo. Algo similar ocurre con Castellano y Literatura, disciplinas de las que han sido erradicados los autores clásicos, para poner en su lugar a «novelistas latinoamericanos» o «literatura comprometida» en general.
Otro sistema sutil de adoctrinamiento es hacer que los alumnos comenten en clase recortes políticos, sociales o religiosos aparecidos en diarios y revistas, que nada tienen que ver con la escuela. Es fácil deducir cómo pueden ser manejadas las conclusiones.
Asimismo, el trabajo grupal que ha sustituido a la responsabilidad personal puede ser fácilmente utilizado para despersonalizar al chico, acostumbrarlo a la pereza y facilitar así su adoctrinamiento por alumnos previamente seleccionados y entrenados para «pasar» ideas.
El decreto 3155 prohibió la distribución, venta y circulación de los relatos infantilesUn elefante ocupa mucho espacio(de Elsa Bornemann), yEl nacimiento, los niños y el amor(deAgnes Rosenstichl) —ambos de Ediciones Librerías Fausto—, por tratarse de «cuentos destinados al público infantil con una finalidad de adoctrinamiento, que resulta preparatoria para la tarea de captación ideológica del accionar subversivo».
El decreto 538, de mayo de 1978, estableció para profesores y maestros la lectura y comentario obligatorio del folletoConozcamos a nuestros enemigos, cuyo contenido resumió el diarioLa Prensaen ese mismo mes:
“El texto tiende a facilitar a los docentes la comprensión del proceso subversivo en el país, especialmente en el medio educativo, y brinda elementos de juicio sobre la forma de obrar del marxismo. Expone también la estrategia particular de la subversión en el ámbito educativo, sus modos de acción en todos los niveles educativos y en la actividad gremial del ámbito educativo[sic]. En las conclusiones del trabajo, cuya lectura y aceptación por parte del personal docente y administrativo es obligatoria, se expresa que 'es en la educación donde hay que actuar con claridad y energía para arrancar la raíz de la subversión, demostrando a los estudiantes las falsedades de las doctrinas y concepciones que durante tantos años les fueron inculcando en mayor o menor grado.”
En octubre de 1978, una resolución del Ministerio del Interior prohibió dos obras del pedagogo brasileñoPaulo Freire:La educación como práctica de la libertad(editorialSiglo XXI) yLas iglesias, la educación y el proceso de liberación humana en la historia(editorial La Aurora), ya que, según las autoridades, «sirven como medio para la penetración ideológica marxista en los ámbitos educativos. Por otra parte, su metodología para interpretar la realidad, el hombre y la historia es manifiestamente tendenciosa. Las fuentes de pensamiento del autor, como los modelos y ejemplos que expone, son de clara inspiración marxista y toda su doctrina pedagógica atenta contra los valores fundamentales de nuestra sociedad occidental y cristiana».
También en octubre de1978se prohibió la distribución de la novelaLa tía Julia y el escribidor, del escritor peruanoMario Vargas Llosa, argumentando que «revela distorsiones e intencionalidad, así como reiteradas ofensas a la familia, la religión, las instituciones armadas y los principios morales y éticos que sustentan la estructura espiritual e institucional de las sociedades hispanoamericanas y, dentro de éstas, a nuestra Nación, contribuyendo a mantener y expandir las causas que determinaron la implantación delestado de sitio».
Días antes de celebrarse en Buenos Aires la Semana del Cine Español (del 23 al31 de juliode1979) el interventor delInstituto Nacional de Cinematografía, capitán Bitleston, señaló la «inconveniencia» de presentar varios de los filmes seleccionados por la Dirección General de Cinematografía de España para ser exhibidos en Buenos Aires. Los directores y productores españoles, enterados de la censura previa, se negaron a enviar sus películas, lo que motivó la postergaciónsine diedel evento.
En julio de1980, por decreto 2038, se prohibió la utilización en el ámbito escolar de la obraUniversitas, Gran Enciclopedia del Saber, de editorial Salvat, editada en Barcelona, por «incurrir en falseamiento de la verdad histórica [...] analizando uno de los períodos más importantes de la historia moderna, como es el proceso de industrialización, bajo la metodología inspirada en el materialismo dialéctico». En el mismo decreto se prohibía elDiccionario Salvat: «Las dos obras revelan un proceso editorial sistemático, en el cual la enciclopedia y el diccionario cumplen la función expresa de ofrecer al estudiante [...] un léxico definitivamente marxista, mediante la utilización de palabras y acepciones que, lejos de corresponder fielmente a los significados propios de la lengua, tienden a sustituir estos por otros que responden y son típicos de esa ideología».
Enseptiembrede1980, un comunicado ministerial prohibió el uso en las escuelas de los textos deAntoine de Saint-Exupéry, autor, entre otros, deEl Principito.
Editores, periodistas, escritores, poetas, cantantes, fueron prohibidos:
- Aída Bortnik(escritora)
- Jorge Romero Brest(artista plástico)
- Roberto Cossa(dramaturgo y director de teatro)
- Crist(caricaturista)
- Julia Elena Dávalos(cantante folclórica)
- Griselda Gambaro(escritora)
- Horacio Guaraní(cantautor folclórico)
- Nacha Guevara(cantante)
- César Isella(cantautor)
- Litto Nebbia(cantautor)
- Pacho O’Donell(escritor)
- Gian Franco Pagliaro(cantante)
- Piero(cantautor)
- Ariel Ramírez(pianista y compositor folclórico)
- Sergio Renán(cineasta)
- Mercedes Sosa(cantante folclórica)
- María Elena Walsh(cantautora y escritora)
- León Gieco(cantautor)
- Los Trovadores(grupo vocal)
- Los Indianos(grupo vocal)
- Los Huanca Hua(grupo vocal)
Otros fueron asesinados.
Entre algunos casos paradigmáticos se prohibió la enseñanza de lamatemática moderna, o los temas musicales en los queCarlos Gardel era acompañado sólo por guitarras. Grupos de censores marcaban con una cruz los temas musicales que no podían ser transmitidos por las emisoras radiales.
Las universidades fueron intervenidas, y se enviaron cientos de espías con el fin de detectar opositores y detenerlos. Asimismo, los programas de enseñanza fueron «depurados» de todo contenido considerado contrario a la cultura «occidental y cristiana».
ElProcesoquema los libros
ElProcesollevó a cabo una sistemática labor de censura, en la cual se quemaron cientos de miles de libros. Así pues, de editoriales como el Centro Editor de América Latinase quemaron 1.500.000 de ejemplares, y deEudebaunos 90.000.
El29 de abrilde1976, los ocupantes del Regimiento de Infantería Aerotransportada deLa Calera(enCórdoba) hicieron arder una montaña de libros.
El comunicado oficial decía:
«Se incinera esta documentación perniciosa que afecta al intelecto y a nuestra manera de ser cristiana, a fin de que no pueda seguir engañando a la juventud sobre nuestro más tradicional acervo espiritual: “Dios, Patria y Hogar”».
Arden, entre muchas obras, las novelas deGabriel García Márquez, los poemas dePablo Neruda, las investigaciones de Osvaldo Bayer.
Desde el Ministerio de Educación y Cultura se pergeña la Operación Claridad: plan de caza de opositores en toda el área cultural.
Además de las desapariciones de artistas, intelectuales, docentes y alumnos, el plan produce despidos masivos e inhabilitaciones para enseñar.
En la ciudad deRosario (provincia de Santa Fe), los militares usurparon la Biblioteca PopularConstancio C. Vigil.
La Vigil era una institución que a principios de losaños setentatenía una biblioteca de 55.000 volúmenes en circulación y 15.000 en depósitos.
El25 de febrerode1977fue intervenida mediante el decreto nº942. Ocho miembros de su Comisión Directiva fueron detenidos ilegalmente, y el control de préstamos de libros fue utilizado para investigar a los socios.
Miles de libros de la entidad fueron quemados, por ejemplo seiscientas colecciones de la obra completa del poetaJuan L. Ortiz.
El periodista y escritorMempo Giardinellisufrió las consecuencias de la pasión ígnea de los militares: su primer novela fue quemada junto a una deEduardo Mignogna.
Enrique Medinaes, quizás, uno de los autores más sistemáticamente perseguidos por la censura, durante la dictadura e incluso antes, segúnInvernizziyGociol.Manuel Pampín, de Corregidor, editó parte de la obra del autor deLas tumbas, comoSólo ángeles, cuya sexta edición fue prohibida aunque no la séptima, una copia de la anterior.
La quema de libros más grande que concretó la dictadura fue con materiales delCentro Editor de América Latina, el sello que fundó Boris Spivacow, quien además tuvo un juicio «por publicación y venta de material subversivo». Él fue sobreseído, pero el millón y medio de libros y fascículos ardieron en un baldío deSarandí.
Marcelo Massarino, revistaSudestada, 46, 18 de marzo de 2006
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Los periodistas
Una orden de la Secretaría de Información Pública prohibió la publicación de información relacionada con desapariciones, descubrimientos de cadáveres, enfrentamientos armados y cualquier otro hecho de este tipo. Testimonió Roberto Cox que todos los funcionarios de diferentes escalas del gobierno que entrevistó en esa época, le sugirieron que no efectuara publicaciones de ese tipo, aunque nunca nadie le exhibió un decreto firmado que lo dispusiera, ya que incluso en el caso de la orden de la Secretaría de Información Pública, sólo se le entregó, a su pedido, el contenido de la disposición por escrito, pero en papel sin membrete y sin firma.
Los canales de televisión y las estaciones de radio, en su mayoría estatales, estuvieron íntegramente al servicio del régimen. En la prensa escrita, con la excepción del Buenos Aires Herald de Roberto Cox, alguna otra dirigida a la comunidad judía (Nueva Presencia) o a la irlandesa (The Southern Cross) y Humor sobre el final del período dictatorial, el apoyo a la junta y el ataque a las organizaciones de derechos humanos fue lo habitual.
Además de la labor de exaltación del régimen llevada a cabo por los principales medios gráficos de la época (las revistasSomos,Para tiy Gente, los periódicosLa Prensa,Clarín,La Nación,La TardeyLa Razón)la afinidad con el gobierno también sirvió a algunos grupos editoriales para hacerse con el control de empresas rivales, las cuales tenían sus propietarios detenidos, como fue el caso de la empresa Papel Prensa, que acabó siendo propiedad deClarín,La NaciónyLa Razón.
- El periodismo clandestino de Rodolfo Walsh.
Elperiodista,escritory militante de la agrupaciónMontonerosRodolfo Walsh, que acabó siendo secuestrado y muerto por un grupo de tareas de laESMAal cumplirse un año del golpe,acometió un proyecto de periodismo clandestino llamadoAgencia de Noticias Clandestina(ANCLA)repartiendo distintas notas informativas en forma individual, como por ejemplo suCarta de un escritor a la Junta Militarde1977.Las comunicaciones de ANCLA se iniciaron inmediatamente después del golpe.
- LarevistajudíaNueva Presencia, fundada en1977y dirigida porHerman Schiller, fue uno de los pocos ejemplos que hubo de denuncias delProcesopublicadas en medios de comunicación argentinos durante la dictadura.Nueva Presenciaera una publicación sostenida por pequeños anuncios publicitarios, en la cual firmaron artículos personalidades comoEmilio Mignone,Nora Cortiñas,Hebe de Bonafini, Julio Raffoe incluso ex detenidos-desaparecidos exiliados comoGraciela Geuna. En1981sus oficinas sufrieron dos atentados con bomba.
- LaRevista Humorfue, también, otro de los pocos ejemplos del periodismo argentino que tuvo una actitud crítica hacia elProceso. Dirigida porAndrés Cascioli, aprovechó el humor para hablar de temas que estaban proscritos por la política cultural del gobierno de facto.
- Los medios de comunicación extranjeros publicados en la Argentina. Además de los pocos medios de comunicación y periodistas que hicieron frente a la dictadura, también hubo casos de periódicos en lengua inglesa que publicaron críticas al gobierno, como es el caso delBuenos Aires Herald, el primero en hablar de desaparecidos o el periódicoirlandésThe Southern Cross.
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Las juventudes políticas
Pocas semanas después de concretado el golpe, dirigentes de las agrupaciones juveniles de algunos partidos políticos comenzaron reuniones clandestinas o semipúblicas en embajadas, clubes y hasta locales partidarios; participaron sectores de la diezmadaJuventud Peronista(JP,Nilda GarréyJuan Pablo Unamuno), laJuventud Radical(JR,Federico Storani,Marcelo Stubrin), laFederación Juvenil Comunista(FJC,Patricio Echegaray,Enrique DratmanyAlberto Nadra), socialistas ("unificados",Eduardo Lázara) y ("auténticos",Mario Mazzitelli,Adrián Camps), democristianos de izquierda (Carlos Bermúdez) y de la Juventud Intransigente (JI, Martín Andicoechea, Roberto Garín).
Era el inmediato renacer de lo que fueron las Juventudes Políticas Argentinas (JPA) hasta el 24 de marzo de 1976, y lo que luego de la Guerra de Malvinas reaparecería públicamente como Movimiento de Juventudes Políticas (MOJUPO).
Pese al clima represivo plasmaron pronunciamientos conjuntos: el repudio al plan económico de Martínez de Hoz; la adhesión a la Central Única de Trabajadores Argentinos (CUTA), por la libertad de los presos y el esclarecimiento de la situación de los desaparecidos
Esa coordinación de juventudes impulsó al renacer de los reclamos de los jóvenes productores (como se evidenció el I, II y III Encuentro de la Juventud de laFederación Agrariacon centenares de delegados), de los obreros, protagonistas de los trabajos "a tristeza" en las automotrices o en el ferrocarril, de las revistas estudiantiles de los colegios secundarios –de las que llegaron a distribuirse 4.000 sólo en la Capital Federal, y de la que fue una de las más destacadas –y golpeadas— "Aristócratas del Saber", del Nacional Buenos Aires, de la reorganización de los centros estudiantiles, enfrentando a Moyano Llerena, de la resistencia al cierre de la Universidad de Luján y de las actividades en los clubes de barrio.
En 1977 hubo un pronunciamiento conjunto contra la política económica que personificaba José Alfredo Martínez de Hoz, y en 1978 por la Paz con Chile.
En 1979, se constituyó la Confluencia Multisectorial Juvenil por la Paz en el Beagle –con León Gieco cantando “Solo le pido a Dios” en Vélez, en el acto de cierre– cuando las dictaduras pusieron al borde de la guerra.
Las juventudes también organizaron marchas conjuntas a la Iglesia de San Cayetano, con el movimiento obrero (sucesivamente la CUTA, los 25, la CGT-Ubaldini) por "Pan, Paz y Trabajo", enfrentando la represión militar con enfrentamientos en todo el barrio de Liniers.
También co-impulsaron la movilización ante la visita de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), con miles de personas desafiando los Falcon, las fotos y las amenazas, en Avenida de Mayo al 760, donde funcionó la OEA.
Familiares y amigos, formularon denuncias, con el apoyo de centenares de comités partidarios y juveniles de "recepción de denuncias y apoyo a los familiares". Las juventudes políticas tuvieron su propio encuentro, y entregaron una declaración conjunta y documentación de casos concretos.
Ya antes, en 1978, se había constituido el Seminario Juvenil de la ADPH, que acuñó la consigna-denuncia acerca de "el delito de ser joven", pues los estudios realizados en plena dictadura demostraron que más del 80% de los desaparecidos eran jóvenes; la mayoría trabajadores, seguidos por los estudiantes.
Una delegación de dirigentes juveniles acompañaron, asimismo, a las Madres de Plaza de Mayo en sus primeras movilizaciones, recibiendo los gases con los que pretendieron intimidar a las mujeres del pañuelo blanco.
Sobre el fin del régimen, las juventudes políticas participaron organizadamente en la movilización convocada por la CGT a la Plaza el 30 de marzo de 1982.
El 2 de abril de 1982, marcharon a la Plaza de Mayo junto con los que concurrieron espontáneamente, pero levantando consignas, escritas en panfletos y carteles de la época, como "Malvinas sí, dictadura no" o “Malvinas sí, democracia también”. Estos hechos no fueron “espontáneos”, sino organizados, producto de la marcha acordada en decenas de comités conformados con reclamos y banderas propias en colegios, universidades, barrios, que fueron los mismos que concurrieron a repudiar a la cúpula militar cuando su derrota y rendición.
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Día Nacional de la Memoria
El15 de marzode2006, la ley 2608599declara al24 de marzocomo Día Nacional de la Memoria por la Verdad y la Justicia, en conmemoración al terrorismo de Estado y crímenes de lesa humanidad cometidos durante elProceso, al cumplirse 30 años del golpe que derrocara a María Estela Martínez de Perón. Se establece como feriado nacional inamovible.
Concepto de genocidio vs delitos de lesa humanidad
El Tribunal Federal Nº 1 deLa Platautilizó por primera vez en el país la figura degenocidiopara describir las acciones realizadas por el Estado argentino durante los años del Proceso. Si bien citó el hecho de que durante algunos años la legislación internacional contemplaba los motivos políticos en la definición, la fundamentación para aplicar la definición se centró principalmente en el hecho de que las víctimas pertenecían a un grupo nacional: el argentino. La sentencia se refiere a la condena al ex director de Investigaciones de la Policía bonaerenseMiguel Etchecolatz por casos relacionados con detenidos-desaparecidos, leída el19 de septiembrede2006.
El9 de octubrede2007el Tribunal Federal Oral N.º1 deLa Platacondenó a reclusión perpetua por genocidio aChristian Von Wernich, sacerdote católico y ex capellán de laPolicía bonaerensedurante la dictadura militar.
Pero en 2011, en el juicio por los delitos cometidos en laEscuela Superior de Mecánica de la Armada (ESMA)del Tribunal Oral Federal Nº 5 se debatieron dos posiciones doctrinales diferentes, una que sostenía debía aplicarse el derecho internacional y sus actos aberrantes ser calificados como «crímenes contra la humanidad» y, por ende,delitos de lesa humanidad, y la otra que sostenía que se trataba del tipo penal «genocidio y terrorismo». Tanto la Sección Tercera de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional como la Sala Segunda del Tribunal Supremo se definieron por la primera opción. El tribunal declaró que los hechos objeto de ese proceso resultaban constitutivos decrímenes de lesa humanidady debían ser calificados según el artículo 118 de la Constitución Nacional y Convención sobre la imprescriptibilidad de los crímenes de guerra y de losdelitos de lesa humanidad, aprobada por ley argentina n°24.584.
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FAQs
¿Qué inicio la historia documentada? ›
Se toma como fecha de inicio de la historia la de la aparición de la escritura, cuando el hombre pudo poner por primera vez sus ideas e impresiones por escrito. Esto ocurrió en Sumer, antigua región de la baja Mesopotamia (cerca del Golfo Pérsico), a fines del cuarto milenio a.C, hace más de 5000 años.
¿Cuáles son algunos ejemplos de registros históricos? ›Entre los más comunes son las bitácoras de barcos; balleneros, militares, comerciantes, ya que los capitanes suelen llevar un registro diario de actividades, condiciones meteorológicas, presencia de icebergs, tormentas tropicales, etc.
¿Por qué se considera a la historia como una ciencia social? ›Es una ciencia social debido a su clasificación y método; pero, si no se centra en el humano, puede ser considerada como una ciencia natural, especialmente en un marco de la interdisciplinariedad; de cualquier forma, forma parte de la clasificación de la ciencia que engloba las anteriores dos, es decir, una ciencia ...
¿Cuáles son los registros escritos? ›Escritos: Son los mensajes que se transmiten por escrito. Tradicionalmente este había sido el registro más formal y más cuidado, aunque la existencia de medios electrónicos a través de internet o mensajería ha fomentado la aparición de registros escritos altamente informales.
¿Qué importancia tienen los documentos de la historia? ›Los documentos históricos escritos constituyen medios de enseñanza importantes en el proceso de enseñanza aprendizaje de Historia, por lo cual deben seleccionarse de manera adecuada considerando los criterios de selección y una aplicación correcta de la metodología para su análisis.
¿Cuántas partes se divide la historia? ›Ahora nos toca aprender algunas cosas sobre la Historia, es decir, el periodo de tiempo que va desde la aparición de la escritura hasta nuestros días. Como ya sabes, la historia se divide en cuatro periodos: Historia Antigua,Edad Media, Edad Moderna y Edad …
¿Qué tipo de documento es la historia? ›Los documentos históricos son documentos originales que contienen información histórica importante sobre una persona, un lugar o un acontecimiento, por lo que pueden servir de fuentes primarias como ingredientes importantes de la metodología histórica.
¿Qué es y para qué sirve la historia? ›La historia es una ciencia que nos permite conocer ese pasado para entender el presente que vivimos y construir nuestro futuro. Una de las principales razones por las que es importante estudiar historia en la actualidad es para entender el cambio de la sociedad actual y cómo surge la sociedad en la que vivimos.
¿Qué es la historia y cómo se clasifican? ›La historia es el estudio del pasado de la humanidad a partir de la examinación crítica de registros, documentos, fotografías, filmes, libros y cualquier otra forma de soporte que arroje luz sobre los eventos pasados que afectaron a países y a comunidades.
¿Cuál es el primer documento escrito de la historia? ›El primer texto legal de la Humanidad fue escrito sobre una gran estela de basalto negro de más de dos metros de alto. Es el Código de Hammurabi, que fue cincelado hacia el 1700 antes de nuestra era –o, como se decía antes, antes de Cristo.
¿Cuál es el texto más antiguo del mundo? ›
Las Instrucciones de Shuruppak (o Instrucciones de Šuruppak, hijo de Ubara-tutu) son el texto más antiguo que se conserva en la Historia. Son un ejemplo significativo de la literatura sapiencial sumeria.
¿Cuál es el acontecimiento más antiguo de la historia? ›Con relación a la humanidad, el hecho histórico más antiguo registrado es la creación de Adán.
¿Cuál es el nombre del padre de la historia? ›Herodoto (484-425 a.C.) El griego, llamado “padre de la historia”, fue el primero en escribir un relato del pasado a gran escala, que cubría un vasto espacio geográfico, desde Sudán hasta Europa central. Después de su muerte, su obra, Historia, se dividió en nueve libros.
¿Qué tipos de hechos estudia la historia? ›La historia es la ciencia social encargada de estudiar los eventos del pasado de la humanidad a través de distintas metodologías que analizan el contexto social, político, económico, geográfico y psicológico del hombre a través de su entorno.
¿Cómo se clasifican las fuentes de la historia? ›Las fuentes, se clasifican en primarias y secundarias: Fuentes históricas primarias. Las fuentes primarias son escritos que hablan del pasado y provienen de la época que investiga el historiador y se dividen en fuentes escritas y fuentes no escritas.
¿Por qué se llama documento histórico? ›Un documento es histórico cuando alguien le da ese valor histórico, es decir sirve de fuente de información para explicar la historia.
¿Cómo se clasifican los tipos de documentos? ›- por fondos, conjunto documental producido por una institución o entidad.
- por series, dentro de los fondos. ...
- por expedientes, dentro de las series. ...
- por documentos sueltos.
- Documentos iconográficos. Por ejemplo: fotos, planos, dibujos, mapas.
- Documentos textuales. Por ejemplo: libros, textos, monografías, investigaciones, registros, diarios, ensayos.
- Documentos virtuales. ...
- Documentos audiovisuales. ...
- Documentos sonoros.
La Historia la hemos hecho todos, desde el inicio del primer hombre hasta nosotros, la Historia no se hace, se narran los hechos históricos, acudiendo a diversas fuentes, como escritos, vestigios, ruinas, todo lo que ha elaborado el ser humano durante su estancia en la Tierra.
¿Cuál es la edad de la historia más breve? ›1. Prehistoria. Como hemos dicho, esta etapa no formaría realmente parte de la historia ya que recoge el conjunto de sucesos previos a la invención de la escritura.
¿Qué estudia la historia? ›
La historia como una disciplina del campo de las ciencias sociales reconstruye el pasado a partir de documentos y evidencias (de tipo material y oral) que son clasificadas, valoradas, interpretadas, cuestionadas y conectadas con otros hechos, mismas que se someten a un análisis crítico con la intención de comprender y ...
¿Qué es un registros históricos? ›La Historia Registrada o más propiamente dicha Historia Escrita, es una narrativa histórica basada en un registro escrito o comunicación documentada. Contrasta con otras narrativas del pasado, como las tradiciones mitológicas, orales o arqueológicas.
¿Cuáles son los primeros registros escritos? ›En primer lugar se usaron tablillas de escritura cuneiforme. La más antigua data de la época de los sumerios en el 4º milenio antes de Cristo. Surgió como un sistema de pictogramas que se fueron simplificando.
¿Qué entiendes por registro histórico? ›Cualquier material o documento que refleja la actividad humana y permite al historiador reconstruir el pasado.
¿Cuáles son las fuentes de información de la historia? ›Las fuentes históricas constituyen la materia prima de la Historia. Comprenden todos los documentos, testimonios u objetos que nos trasmiten una información significativa referente a los hechos que han tenido lugar, especialmente en el pasado.